El placer de dormir en la copa de un árbol

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El placer de dormir en
la copa de un árbol
Por Nuria Mañá
Tras descubrir el glamping y las claves para disfrutar de una estancia glamourosa en el
ámbito rural, llegan a España las cabañas en los árboles, hoteles de madera, construidos en
el interior de bosques y reservas naturales. Este tipo de alojamiento rural alternativo ofrece a
los amantes de la naturaleza la satisfacción de entrar en contacto directo con el ecosistema
del bosque y la posibilidad de pernoctar en un nido situado en el entramado de las ramas de
un árbol.
Las cabañas están construidas entorno al tronco de un árbol y se accede a ellas mediante
pasarelas sostenidas en el aire. En su interior, estos hoteles rurales poseen todo tipo de
comodidades hasta el último detalle, para hacer perfecta la estancia de sus huéspedes.
Muebles modernos, mosquiteras, sofás, cómodas y una increíble terraza que permite experimentar la libertad en estado puro, ya sea durante una estancia romántica o en una jornada
de descanso con amigos.
Les cabanes de Sant Hilari
Conocidas como Cabanes als arbres el recinto
de cabañas del parque La Selva de l’Aventura
del Coll de Ravell, en Sant Hilari Sacalm
(Cataluña), fue pionero en traer a España esta
forma alternativa de alojamiento rural.
Además, en su terraza, el huésped puede disfrutar
del canto nocturno del bosque, de las mejores
vistas del Montseny y los Pirineos, o de un apacible
desayuno, que le es entregado en una cesta izada
por poleas.
Los dueños del complejo, el francés Manu
Grymonpré y la holandesa Karin van Veen, se
inspiraron en instalaciones similares a las que ya
funcionaban en la Bretaña francesa, aunque
mejoraron el sistema constructivo de las cabañas y su anclaje, situándolos en los enormes
abetos Douglas.
En total el complejo está formado por diez cabañas
que cuentan con una decoración distinta en su
interior y están equipadas para acoger a dos o
cuatro personas.
Alojarse en estos cobertizos en mitad del
bosque ofrece a los visitantes dos valores fundamentales: silencio y tranquilidad. De esta
manera, las cabañas se presentan como el lugar
ideal para relajarse y desconectar del estresante
día a día. Además, las habitaciones de este
singular hotel han sido pensadas para que los
visitantes pasen unos días en plena naturaleza,
aislados de la civilización, por lo que no disponen de electricidad ni agua corriente, aspectos
que incrementan esa placentera sensación de
aislamiento.
Uno de los detalles con más encanto es su
decoración y su estructura. Las cabañas están
atravesadas por el tronco del árbol que las
sostiene, que se integra en la construcción como
un pilar natural. Éste constituye el eje de unos
complejos circulares de 30 m2.
Además, el complejo de Cabanes als arbres se
complementa con una casa rural próxima, la Masia
Vileta, que cuenta con todos los servicios (duchas,
comedor, salones y habitaciones), además de una
gran piscina.
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