Economía feudal Extraído de Escuelapedia La economía feudal, introducida en el contexto del feudalismo, era una economía agraria y de subsistencia basada en la tenencia de tierras (feudos). Cabe mencionar que el feudalismo fue una organización económica, política, social y cultural que se prolongó en Europa occidental entre los siglos V al XV, durante el período llamado de Edad Media. ¿Qué eran los feudos? Feudos, considerados la base económica de la economía feudal, representaron grandes extensiones de tierra en la zona rural, que estaban al mando de los señores feudales. En ellos se podía encontrar el castillo, los pueblos, las tierras de cultivo, los pastos y bosques, etc. El feudo se divide básicamente en tres partes: Manso señorial: las mejores y mayores tierras del feudo que pertenecían al señor feudal, suficientes para sustentar a su familia. Sin embargo, los señores no trabajaban, siendo esa tierra cultivada y explotada por los siervos, campesinos o esclavos. Manso servil: tierra de los siervos, donde se cultivan sus productos, produciendo lo necesario para la supervivencia. A cambio, ellos realizaban diversas obligaciones y pagaban impuestos a los señores feudales. Manso común: área común a todos los grupos que incluían pastos y bosques. Aquí, los productos cultivados eran uso común de todos, siendo un lugar destinado al cultivo, la caza y el pastoreo de animales. Características de la economía feudal: Resumen El feudalismo se asentó sobre la base de una economía agraria y autosuficiente, es decir, produciendo todo lo que necesitaban; la economía feudal se dedica al consumo local y no al comercio. En este caso, el intercambio de mercancías (o trueque) se realizaba con productos cultivados en feudos, ya que no existía un sistema monetario (moneda). La agricultura era la principal actividad desarrollada en el feudalismo, aunque la artesanía fuese destacada, sirviendo específicamente para la producción de herramientas y materiales de uso doméstico. Recordemos que el sistema social de este período se caracterizó por una sociedad estamental (dividida en estamentos) que no tenía movilidad social, es decir, nacido siervo, muerto siervo. Así, formaban parte de la estructura feudal cuatro grupos: reyes, clero, nobles y siervos. El último grupo (siervos) vivía trabajando en las tierras señoriales (agricultura, ganadería, castillos, etc.) a cambio de alojamiento, comida y protección. Los siervos cultivaban los productos, se hacían cargo de los animales, servían a los señores en sus castillos, lavaban y preparaban la comida. Además de hacer la mayor parte del trabajo que movía la economía feudal, los siervos eran obligados a pagar diversos tributos (o impuestos), de los cuales los más importantes fueron: ■ Corvea Real: representaba el cultivo de la tierra señorial que se llevaría a cabo por los siervos al menos dos veces por semana. Consistía en trabajar gratuitamente en las tierras del noble. ■ Talla: Impuesto donde los siervos fueron obligados a entregar la mitad de su producción al señor feudal. ■ Capitación: también designado como impuesto principal o impuesto per cápita representaba el impuesto pagado por los siervos a los señores feudales en función del número de personas, es decir, por cabeza. ■ Banalidades: impuestos pagados por el uso de equipos e instalaciones, es decir, el siervo pagaba una cuota para el señor feudal para poder hacer uso del molino, el horno, etc.