Líneas guía para la presentación de microproyectos a Caritas Italiana Marzo 2007 1. Definición de Micro y papel pedagógico 2. Criterios de base 3. Líneas generales 4. Ambitos de intervención 5. Solicitantes y responsables ejecutivos de los Microproyectos 6. Responsable legal 7. Trámites 8. Importe 9. Financiación 10. Datos esenciales requeridos para la presentación de un microprogetto de desarrollo 11. Dirección y referencias 1/8 0. Preámbulo Después de 30 años de experimentación, la Presidencia de Caritas Italiana ha decidido añadir algunas notas a los ámbitos de intervención de las Líneas guía para la presentación de Microrrealizaciones a Caritas Italiana. 1. Definición de Micro y papel pedagógico El desarrollo no es sólo un hecho de grandes obras y grandes infraestructuras. En el ámbito de la ayuda a los Países en vías de desarrollo, Caritas Italiana se propone contribuir a la promoción humana y social de los pueblos, sosteniendo incluso pequeñas comunidades -las más pobres y menos ayudadas– en la realización de obras de un discreta embergadura, para favorecer su gradual auto-desarrollo. 9 Los microproyectos, de carácter sectorial y de aldeas, presentan objetivos concretos pero de efecto inmediato, que contribuyen a transformar poco a poco el nivel de vida de las personas y las comunidades beneficiarias y a extender progresivamente el proceso de desarrollo en las zonas circunstantes. 9 Cada acción de este tipo es la respuesta de las comunidades italianas (los donantes son personas individuales, parroquias y diócesis) a una necesidad concreta de las comunidades de base extranjeras en los Países en vías de desarrollo, indicada por Cáritas, por los responsables diocesanos y por la comunidad de un determinado territorio. 9 Más allá de la operación financiera, es relevante el papel pedagógico propio de los microproyectos. La fase de su financiación sirve sobre todo para sensibilizar las comunidades italianas en lo que respecta a los problemas de otras poblaciones. 9 La relación de comunión y caridad que se establece entre las dos comunidades es uno de los elementos que da a los microproyectos una buena eficacia pedagógica: es un legamen que difícilmente se interrumpe al final de la financiación sino que, más bien, crea una serie de contactos que perduran en el tiempo. Además, a través estas intervenciones, es posible conocer las necesidades particulares de un territorio y unir los esfuerzos para encontrar respuestas adecuadas y duraderas. 2. Criterios de base Para que las microrealizaciones de desarrollo puedan contribuir de veras a la promoción humana y social de los más pobres es necesario tener en cuenta algunos criterios base como: a. Dimensión comunitaria: el microproyecto debe ser elaborado con la colaboración de la población local en lo que concierne a su gestión para garantizar una buena armonía con la cultural local. Es importante que esto esté en relación a la preparación técnica de la parte local para que ésta pueda comprenderlo y realizarlo lo más autónomamente posible asegurando su continuidad y, si es posible, convertirse en multiplicador de otros microproyectos. 2/8 b. Dimensión eclesial: el microproyecto tiene que ser parte del plan pastoral de la Iglesia local; esto exige un acuerdo con el Obispo y, posiblemente, con la Caritas diocesana o nacional. c. Dimensión civil: el microproyecto se incluye en un contexto más amplio de desarrollo de la región donde se realiza. Es conveniente, por tanto, que tenga su lugar en la programación civil. Eso comporta –en principio– un diálogo con las autoridades locales, de la región, del distrito o de la aldea, para asegurar así su interés en la programación, realización y gestión del proyecto y una eventual aportación. 3. Líneas generales Países destinatarios En general todos los Países considerados todavía en vías de desarrollo, por parte de los Organismos internacionales y de nuestro Ministerio de los Asuntos Exteriores, sobre todo los Países más pobres y menos ayudados. Entre las finalidades está la de equilibriar las diversas regiones del mundo, también en relación a la población y a la presencia de la Iglesia local. Podrían no realizarse intervenciones –de modo más temporal– en Países y zonas en situación de crisis o en aquellos que la Oficina de Microproyectos de Desarrollo no sea capaz de controlar (directamente o indirectamente) si la aportación económica llega con seguridad y en tiempos breves al responsable directo o de averiguar la realización del proyecto. 4. Ambitos de intervención 4.1 Se consideran prioritarios (y en caso de reducida disponibilidad financiera, esclusivos): Programas de preparación al trabajo, que generen a corto plazo, una cierta productividad y rendimiento en el ámbito rural, en la ganadería, de la artesanía, como la creación de pequeñasa cooperativas/grupos relacionados con el mundo de la mujer o de la juventud de los niveles más débiles y menos ayudados. Programas de atracción de agua para uso doméstico, regadío, piscifactoria, cría de ganado. Programas sanitarios por lo que respecta a pequeños ambulatorios rurales y de la perifería, con preferencia a los de nueva construcción. La petición del microproyectos deberá ser relativa exclusivamente a pequeñas instalaciones, instrumentos y material sanitario. Por lo que respecta a los medicamentos y material de consumo, se puede conceder una pequeña suma inicial para poder asistir con rápideza los grupos más débiles de la población local, a condición de que sucesivamente se pueda garantizar –con aportaciones locales o de otros organismos- la sostenibilidad del miniprograma propuesto. 4.2 Dentro de estas tres prioridades, tendrán más prioridad todavía los Microproyectos dirigidos a las categorías más débiles y desventajadas, como por ejemplo, minusválidos, huérfanos y viudas, enfermos (HIV/AIDS positivos, etc.) víctimas de situaciones políticas particulares, emigrantes forzados, familias de encarcelados y de ex-carcelados, graves marginaciones sociales incluso en relación a contextos culturales políticos y religiosos particulares (fuera casta, aborigenes, indígenas,...) 4.3 Para algunos países muy pobres o para zonas abandonadas por las autoridades políticas y cíviles se considera que se pueden realizar pequeños programas de 3/8 promoción social (pequeños puentes, caminos, carreteras, resanamiento de servicios sanitarios y alcantarillado) donde sea clara la absoluta imposibilidad o indisponibilidad de acción por parte de las autoridades competentes. 4.4 Se confirma, en fin, como ya se ha indicado en otros capítulos de las Líneas guía, que los Microproyectos deben ser expresión directa de la Iglesia local y ser realizados directamente en las comunidades de los pueblos o zonas semi-urbanas y periféricas. No se consideran prioritarios los programas a favor de comunidades religiosas, ONGs, asociaciones, realizados en sus propiedades, o a cargo de la manutención de institutos o actividades de su propiedades. 4.5 Caritas Italiana –en el ámbito de los Microproyectos- no puede financiar realizaciones puramente pastorales (liturgia, catequesis, centros parroquiales, etc.) medios de trasporte y en particular automóviles y vehículos en general, proyectos que preveen la construcción de edificios, proyectos de emergencia, proyectos asistenciales y cualquier tipo de proyectos que no preveen una sostenibilidad a largo plazo. 4.6 No se consideran prioritarios los “micros” que provienen de áreas o de ámbitos en los que otras oficinas regionales de Cáritas u otras realidades (por ejemplo la Conferencia Episcopal Italiana) intervienen activamente. 5. Solicitantes y responsables ejecutivos de los Microproyectos Sobre todo la Iglesia local en sus organizaciones, incluidas generalmente la presencia de misioneros y la sociedad civil organizada, bajo la responsabilidad de la Iglesia local. No es posible intervenir en lo que respecta a los sujetos individuales. Se consideran prioritarios los microproyectos dirigidos directamente a las comunidades locales y no los que afectan a las propiedades o estructuras de las comunidades religiosas o la Iglesia local. Además son considerados prioritarios los microproyectos que tienen que ver explícitamente con el plan pastoral de la diócesis (esto implica una carta personal del Obispo que confirma esta distinción). No se reconocen las cuotas por gastos de gestión. Anualmente Caritas Italiana no puede financiar –por principio– más que uno/dos proyectos por cada responsable. 6. Responsable legal Los microproyectos tienen que tener un responsable legal. En general esta figura, salvo excepciones, no coincide con el solicitante. El responsable legal se hace garante del microproyecto (generalmente es el Obispo o la Caritas nacional o diocesana o el Superior/la Superiora provincial o regional de la Congregación o la Casa Generalizia) y supervisa el curso del microproyecto, incluso cubriendo eventuales anomalías. En caso de graves incumplimientos y en caso de imposibilidad a realizar el microproyecto, el responsable legal se compromete desde el principio de la colaboración con Caritas Italiana a devolver las sumas erogadas. 4/8 7. Trámites Se agradece la presencia de personas físicas u organizaciones que respalden el trabajo de contacto entre Caritas Italiana y los responsables locales. Para este tipo de colaboración no está prevista ninguna remuneración o porcentaje sobre el importe de las micros. 8. Importe Tratándose de pequeños programas, el importe medio de un microproyecto es de 5.000 euros. Para los Países con coste de la vida muy baja, el importe se puede reducir proporcionalmente. Análogamente, en casos excepcionales puede ser retocado en positivo. En todo caso, incluso para importes solicitados muy bajos, serán excluidos de nuestra aportación los apartados de financiación no previstas por Caritas Italiana. Caritas Italiana no puede financiar una micro si en realidad constituye la mínima parte de un "macro proyecto" ni tampoco puede participar en co-financiación con otros Organismos, que sostengan una iniciativa de amplio alcance que no corresponda a la lógica de la micro. 9. Financiación Periódicamente una Comisión Microproyectos de Caritas Italiana, expresamente formada, examina los distintos proyectos que nos llegan. En caso de aprobación se comunica a los responsables del microproyecto y la suma se envía de acuerdo a las modalidades indicadas por el solicitante. Normalmente los tiempos de este procedimiento no superan los dos/tres meses. Si el proyecto no es aprobado, se comunica por escrito indicando los motivos. En caso de aportaciones parciales ya aprobadas o financiaciones totales de acuerdo a lo solicitado por el beneficiario, Caritas Italiana no puede comprometerse al envío de ulteriores aportaciones para la realización del proyecto. El mismo responsable o “intermediario” no pueden realizar nuevos proyectos si todavía están en fase de realización programas anteriormente concordados o aprobados en el arco del año y a mayor razón en los años anteriores. Caritas Italiana no dispone de fondos propios para la realización de las micros que son financiadas en realidad por Caritas diocesanas y parroquiales, comunidades e institutos religiosos, grupos, familias, personas a título individual. De ahí la exigencia de recibir, al final de la realización, y en tiempos breves (cuatro meses desde que se recibe la aportación) amplia documentación que incluye la relación descriptiva, financiera y fotográfica de ejecución. Salvo casos de imposibilidad real, la relación financiera tiene que contener las facturas (o copias de ellas) de todos los gastos realizados y de los recibos de pago. Caritas Italiana se reserva el derecho a verificar y evaluar la consecución de los objetivos generales y específicos, en base en la relación recibida y con visitas efectuadas directamente o indirectamente, mediante sus encargados. 10. Datos esenciales requeridos para la presentación de un microproyecto de desarrollo 1. Título y responsable del Microproyecto Título del microproyecto. 5/8 Todas las solicitudes tienen que presentar un título específico y ser acompañadas de una carta del responsable ejecutor del proyecto dirigida a Caritas Italiana (Oficina Microproyectos de Desarrollo) y debidamente firmada y fechada. Análogamente el microproyecto también tendrá que ser controfirmado. Se agradece el envío de fotografías. Responsable directo y organización que propone. - datos del responsable del microproyecto y la organización que propone (dirección completa y precisa, eventuales números telefónicos, de fax, correo electrónico); - nombre y apellidos del responsable y descripción de la experiencia adquirida en el campo del intervento propuesto; - datos bancarios del responsable jurídico del proyecto a quién se deberá mandar la aportación de Caritas Italiana en caso de aprobación del microproyecto (nombre y apellidos del propietario y número de cuenta, nombre del Banco e dirección de la sede, eventuales códigos identificativos). Aprobaciones. El microproyecto debe ir acompañado de una carta de agradecimiento del Obispo -dirigida a Caritas Italiana–con la que asegura que el programa forma parte de la pastoral social de su diócesis. Caritas Italiana se reserva el derecho a pedir que el programa sea enviado a las Caritas nacionales o diocesanas, donde existan –a tal propósito– precisos acuerdos con las Caritas de los Países interesados. 2. Localización del microprogetto y factibilidad Lugar de intervención. (Nación, Región, ayuntamiento, diócesis y parroquia, distrito administrativo y eclesiástico). Descripción de la realidad cultural e histórica. Situación social. Descripción de las condiciones de la población, deteniéndose con más detalle en el sector para el que se solicita la intervención. Este análisis del territorio, acompañado también de datos demográficos, tendrá que poner en relación necesidades y urgencias con los recursos necesarios para dar una respuesta válida a la promoción de la persona y la comunidad local. Factibilidad del proyecto. Antes de mandar un microproyecto para que sea financiado por Caritas Italiana los responsables tienen que cerciorarse –además– de que el contexto local sea idóneo a la actividad prevista, que exista, por ejemplo, en los programas de formación profesional y artesanal la seguridad o buenas posibilidades de encontrar trabajo en el ámbito de la promoción profesional– artesanal solicitada. En el caso de programas rurales, éstos tienen que ser sostenidos –por ejemplo– por un posible seguro de riesgo para no perder la cosecha. Son considerados prioritarios únicamente aquellos programas que no tengan solamente la finalidad de formación sino aquellos que tienden, a corto plazo, a dar trabajo a los jóvenes de la zona, asegurándoles los instrumentos y los medios necesarios para organizarse y realizar espacios y caminos de auto-sustentabilidad. 6/8 3. Aspectos descriptivos del microproyecto Origen y justificación del microproyecto. Especificar los criterios de valoración adoptados que han llevado a considerar prioritario el microproyecto propuesto. Descripción del Microproyecto, finalidad y modalidad de realización; - precisar el objetivo general y los objetivos específicos cuantificables; - describir las distintas actividades previstas para alcanzar los objetivos propuestos indicando también las metodologías de realización; - indicar y cuantificar los beneficiarios de la acción (directos e indirectos) con la indicación de los criterios de admisibilidad al microproyecto, su contribución en la realización del microproyecto y las ventajas que derivarán a la comunidad local después de que el microproyecto sea realizado; - clarificar cómo son garantizadas la continuidad y autosuficiencia del microproyecto, al final de las financiaciones externas; - precisar los tiempos de realización del microproyecto, indicando la fecha prevista de inicio y el final y el compromiso escrito de realizar el programa – salvo imprevistos–en el plazo de cuatro meses desde la recepción de la aportación por parte de Caritas. Igualmente el responsable directo tendrá que comprometerse a mandar adecuada documentación de la realización: relación descriptiva, financiera y fotográfica y, después de un cierto período, una breve relación sobre el impacto del microproyecto. 4. Plan financiero Presupuesto Alegar al microproyecto un presupuesto detallado que especifique cada una de las partidas de coste que componen el conjunto de las actividades propuestas y, posiblemente, las facturas pro-forma y las previsiones de los gastos. Especificar si son previstas adquisiciones en el extranjero (con los relativos costes de envío), explicando las razones. Normalmente los costes de envío se consideran como aportación local a la realización del programa. Contribución local Las aportaciones de otros Organismos financiadores, de la organización que propone, o de la población beneficiaria o en todo caso implicada en la realización del programa tienen que ser indicados en el presupuesto. La aportación local, propiamente dicha, (de la población implicada en el microproyecto) constituye un elemento prioritario y tiene que ser siempre indicado de modo preciso, sea por cuánto concierne el importe, sea en cuanto a las partidas previstas. Tienen que ser indicados, por separado, los diversos co-financiadores (diócesis, parroquias, congregaciones, institutos religiosos, diversos entes) respecto a los locales (en dinero, en material y en prestación de mano de obra). En la ejecución del proyecto tienen que ser respetadas tales aportaciones y se debe rendir cuentas en la explicación final del realizado. Aportación solicitada La aportación solicitada a Caritas Italiana tiene que ser indicada en divisa local y en euros. Si en el País relativo al programa presentado no existe la cotización 7/8 del euro, puede ser indicado alternativamente en dólares. En todo caso Caritas Italiana, si el microproyecto es aprobado, comprometerá la suma en euros. 11. Dirección y referencias Los microproyectos deben enviarse a Caritas Italiana - Area Internación, Ufficio Microprogetti - Via Aurelia, 796 - 00165 Roma - fax: 06 66177602 - e-mail: [email protected]. Los documentos originales tienen que llegar por correo ordinario. En situaciones especiales el programa o una síntesis se puede enviar también por adelantado vía fax o correo electrónico. 8/8