CONSTRUCTORES DE LA FAMILIA “Construyendo la Familia Según el Corazón de Dios” LAS TRADICIONES NUPCIALES JUDÍAS Y EL MATRIMONIO SEGÚN DIOS ¿Qué nos enseñan sobre el matrimonio las tradiciones de las bodas judías de la antiguedad? Nos ayuda a entender más sobre las características del matrimonio según fue ideado por Dios. Las Escrituras comparan el matrimonio humano y el matrimonio celestial: Cristo y la Iglesia. Esto nos enseña claramente dos principios acerca del matrimonio terrenal: La importancia y la santidad de la institución del matrimonio. Veamos primero algunas cosas generales sobre las tradiciones antiguas del matrimonio judío. Las costumbres antiguas de las bodas judías son bastante difíciles de determinar, según los expertos, dice Jose Antonio Hernández. No disponemos más que de referencias dispersas y fragmentarias que nos impiden configurar una visión completa. Además, las costumbres variaban de un distrito judío a otro. Dice el Diccionario Ilustrado de la Biblia, de Nelson: El matrimonio debía ser en Israel una práctica general. Existían las viudas, pero no solteros o solteras mayores de la edad de casarse. El celibato se daba sólo entre “los eunucos”, quienes, por causa de un defecto congénito, un accidente o la castración, habían perdido su función sexual. El caso de Jeremías fue una gran exepción, Jeremías 16:2 y aún la continencia de “los nazareos” era temporal. El ideal de la fertilidad conducía naturalmente a la poligamia, costumbre aceptada dentro de las normas sociales de los tiempos del Antiguo Testamento, Deuteronomio 21:15; 1Samuel 1:2 pero que fue muy criticado dentro de algunos autores biblicos Génesis 4:19-24. Los reyes contraían gran número de matrimonios, ya sea por amor o por interés político. Según el Diccionario Expositivo Vine: Mateo22:1-14 indica que había una generosa hospitalidad y si la invitación era rechazada habría gran resentimiento. La boda de Caná muestra la forma en que se llevaba a cabo una boda en los hogares humildes. Se daba un honor especial a los amigos del novio, “los hijos de la cámara nupcial”. Ellos estaban encargados de proveer lo necesario para las nupcias. Mateo 9:15; Marcos 2:19; Lucas 5:34. El jóven pretendiente solía acudir a casa del padre de la novia portando una gran suma de dinero, un contrato de esponsales, llamado shitre erusin (redactado por las autoridades y costeado por el futuro novio), y un pellejo de vino. En cuanto entraba en una casa un jóven portando estas cosas ya se sabía a qué venía. Entonces el pretendiente discutía con el padre de la chica y con los hermanos mayores el precio acordado para poder desposar a su hija. El costo solía ser de al menos doscientos denarios para una doncella y cien denarios para una viuda, www.ConstructoresdelaFamilia.org Citas Bíblicas: Reina Valera Revisión 1960 1 CONSTRUCTORES DE LA FAMILIA “Construyendo la Familia Según el Corazón de Dios” mientras que el consejo sacerdotal de Jerusalén fijó cuatrocientos denarios para casar con la hija de un sacerdote. Por supuesto, estas cifras indican sólo el mínimo legal, y podían ser aumentadas a voluntad. Si finalmente el padre accedía, bebía con el pretendiente un trago de vino, y se invitaba a la hija a pasar. Si la hija accedía (rara vez se opondría a un acuerdo previo del padre), entonces había acuerdo, y la hija y el pretendiente sellaban su acuerdo de esponsales bebiendo de misma copa de vino, mientras se pronunciaba una bendición. A partir de aquí ellos estaban “comprometidos” en matrimonio. Desde ese momento y hasta doce meses después tenían lugar los esponsales o desposorio. El momento del inicio de los esponsales se marcaba con un regalo de boda (o mohar,) Genesis 34: 12 Ex 22 17, 1 Samuel 18:25. Desde el momento de los esponsales o compromiso la novia era tratada como si realmente estuviera casada. La unión no podía disolverse excepto por un divorcio legal; el incumplimiento de la fidelidad era tratado como adulterio; y la propiedad de la mujer pasaba virtualmente a ser del esposo, a menos que expresamente renunciara a ello. Pero incluso en este caso él era el heredero natural. Después del contrato de esponsales los novios continuaban separados cada uno en la casa de sus padres. Durante este período la novia se preparaba para su futuro papel de esposa y el novio se encargaba de conseguir el futuro alojamiento para su mujer, que podía ser incluso una habitación dentro de la casa de los padres. Finalmente llegaba el día de la boda ( nissuin). Las procesiones previas a la ceremonia constituían una parte importante del ritual, como describe Joachim Jeremias: A última hora de la tarde los invitados se entretenían en la casa de la novia. Después de horas de esperar al novio, cuya llegada era repetidamente anunciada por mensajeros, llegaba finalmente, media hora antes de la media noche, para encontrarse con la novia; iba acompañado de sus amigos; iluminado por las llamas de las candelas, era recibido por los invitados que habían venido a encontrarse con él. La comitivia de la boda se desplazaba entonces, de nuevo en medio de muchas luminarias, en una procesión festiva hasta la casa del padre del novio, donde tenía lugar la ceremonia del matrimonio y el agasajo. La costumbre del velo nupcial, era para la novia sólo o extendido sobre la pareja, data de tiempos antiguos. Fue suprimida por un tiempo por los rabbís después de la destrucción de Jerusalén. Todavía más antiguo era portar coronas que también estuvo prohibido después de la última guerra judía. Palmas y ramas de mirto eran llevadas delante de la pareja, grano o monedas eran arrojadas sobre ellos, y la música precedía la procesión, a la cual era obligación religiosa sumarse si alguien se encontraba con ella. La parábola de las diez www.ConstructoresdelaFamilia.org Citas Bíblicas: Reina Valera Revisión 1960 2 CONSTRUCTORES DE LA FAMILIA “Construyendo la Familia Según el Corazón de Dios” vírgenes, que con sus lámparas, estaban a la espera de la llegada del novio (Mateo 25:1), está basada en una costumbre judía. Pues, de acuerdo con las autoridades rabínicas, tales lámparas sostenidas por bastones eran de uso frecuente, siendo diez el número siempre mencionado en conexión con las solemnidades públicas. Alfred Edersheim, en sus "Bocetos de la vida social judía" (Sketches of Jewish Social Life), nos relata más detalles: La ceremonia de boda en sí consistía en conducir a la novia a la casa del novio, con ciertas formalidades. El matrimonio con una doncella se celebraba comúnmente por la tarde de un miércoles, lo cual dejaba los primeros días de la semana para los preparativos, y permitía al marido, si tenía alguna acusación en contra de la supuesta castidad de su prometida, realizarla de inmediato ante el sanedrín local, que se reunía cada jueves. Por otra parte, el matrimonio con una viuda se celebraba en jueves por la tarde, lo que dejaba tres días de la semana "para gozarse con ella". En Judea había en toda boda dos amigos del novio. Antes del matrimonio, actúan como intermediarios entre la pareja; en la boda ellos ofrecen regalos, asisten a los novios y les atienden en la habitación nupcial, siendo también los garantes de la virginidad de la novia. Con una bendición, precedida por una breve fórmula, con la que la novia era entregada a su marido (Tobías VII 13), las festividades de la boda comenzaban. Después de la ceremonia, la pareja era conducida a la habitación nupcial (cheder) y al lecho nupcial que previamente habría preparado el novio. La novia iba ya con su cabello descubierto. Aquí el novio entregaba unos regalos a la novia. Durante una semana (aunque seguramente en ciertos distritos esta costumbre se acortara a unas pocas horas para no alargar en exceso la espera de los invitados) los novios permanecían todo el tiempo en la cámara nupcial, vigilada por los "dos amigos del novio", fuera de la puerta. Cuando el novio finalmente da una voz, entran los amigos y salen con la buena noticia de la consumación del matrimonio. En ese momento salen los novios del cheder, momento en que se ve por primera vez a la novia con el velo (badecken) descubierto. Este hecho es recibido con gran regocijo por parte de los invitados, lo cual iniciaba la fiesta de la boda, donde se servía comida, se bailaba y se cantaba al son de la música, Salmos 45 1-17. Las comidas exigían el uso de una gran cantidad de agua para realizar las frecuentes abluciones y lavatorios rituales. La fiesta duraba toda una semana, al término de la cual todos los invitados regresaban a sus casas. Referencias: "Las parábolas de Jesús", Joachim Jeremías. "Bocetos de la vida social judía", Alfred Edersheim. www.ConstructoresdelaFamilia.org Citas Bíblicas: Reina Valera Revisión 1960 3 CONSTRUCTORES DE LA FAMILIA “Construyendo la Familia Según el Corazón de Dios” Disponible on-line en http://www.ccel.org/ccel/edersheim/sketches.html Ahora que tenemos un panorama general, lo que sigue es tomado del estudio “Restaura mi Corazón” de Dennise Glenn, en donde se resume algunos aspectos de la boda, lo principal y se lo compara con nuestra relación con Cristo. Nosotros estamos sacando de ello enseñanzas para nuestra relación matrimonial. Lo veremos punto por punto. Tradición Nupcial Judía/Cristo y nosotros: En las bodas judías de la antiguedad, el padre solía escoger la esposa para su hijo. Nuestro Padre Celestial nos ha escogido para ser la Novia de su Hijo, Jesucristo. Efesios 1:4 El novio pagaba el precio que fijaba el padre de la novia. Génesis 29:15s; 34:12 y llegaba a ser “señor” de ella, aunque nunca se la consideraba como mera mercancía. Cristo pagó el precio de su Novia, con su propia sangre. 1 Corintios 6:19-20 Saber que hemos sido escogidos por amor nos llena de seguridad y paz. El Padre nos escogió para ser la Novia de Su Hijo Jesucristo, Su Iglesia amada y preciosa. Somos lo más importante para Él. Al mismo tiempo que hemos sido hechos “sus hijos adoptivos” por medio de Jesucristo. Cristo, nuestro novio, pagó el precio que el Padre fijó y ese precio fue su misma sangre, la entrega de su vida, para que de ese modo nuestra deuda fuera pagada. Cuando pensamos en lo que esto significa, lo que “nuestro esposo” Jesucristo hizo por nosotros, su sacrificio por amor, ¿cómo podemos rechazarlo? o, ¿Cómo podemos vivir una vida que no sea agradable a Él? Recordemos que en muchos momentos Dios está comparando el matrimonio con nuestra relación espiritual con Cristo. En nuestra cultura y tiempos que vivimos, ya no es el padre el que escoge a la esposa o esposo, aunque sabemos que hay culturas en que aún se hacen acuerdos entre los padres. Pero más allá de eso, nos ayuda a ver al menos, tres cosas: 1) La importancia de los padres en la elección para la pareja. No que nuestros padres deban elegirnos la pareja, pero qué importante es que nos den su cobertura, su aprobación, la palabra final. Muchas veces se desecha completamente aún la opinión de ellos y muchas veces se va en contra de su voluntad y consejo. Siempre los padres querrán lo mejor para sus hijos y ellos pueden ver mas allá de lo que un jóven enamorado puede ver. El enamorado suele ver “solo lo que ve”, pero los padres, como adultos y como padres, verán lo que el enamorado no suele ver… lo práctico, el futuro, lo que conviene o no, www.ConstructoresdelaFamilia.org Citas Bíblicas: Reina Valera Revisión 1960 4 CONSTRUCTORES DE LA FAMILIA “Construyendo la Familia Según el Corazón de Dios” lo interior y no las apariencias. Les orientarán con sabiduría. Si son cristianos maduros, más aún, porque estarán orando por ellos y por sus futuros matrimonios desde que los hijos nacen, si es que han tenido la bendición de conocer al Señor, orando para que sus hijos no se equivoquen en esta decisión transcendental. 2) La elección de nuestro Padre Celestial. El sabe exactamente quien será el elegido/a para nosotros, o para nuestros hijos, y quién es el mejor, el que nos va a complementar. Los solteros deben buscar en oración a su Padre Celestial para que sea Él quien les escoja el esposo, la esposa. El Espíritu Santo hace la tarea de guiar y producir “ese encuentro divino”. Y en esto, el seguir la dirección de nuestros padres terrenales es una confirmación de la voluntad divina. Si los padres se oponen a una relación y no dan la cobertura necesaria para que la boda se realice, no es conveniente seguir adelante. Tal vez los padres puedan equivocarse o estar cegados por alguna circunstancia, pero en ese caso los hijos debieran esperar en oración, buscar el consejo de su pastor, y esperar el momento justo y que el Señor obre en todas las partes para que si es Su voluntad realmente, haya un consenso total de la familia, sobre todo los padres de ambos. Esto es iniciar el matrimonio bien, con la cobertura necesaria, el acuerdo y la bendición de nuestros mayores. El noviazgo con un buen comienzo es una piedra fundamental para un buen matrimonio. 3) La seguridad y valor del amor de los esposos. El saber que fui elegido y comprado por gran precio, me da seguridad de mi mismo y de mi relación con Dios. Me da seguridad de su perdón y aceptación. El ha borrado mis pecados pasados y me ha cubierto con la sangre preciosa de Su Hijo. Estoy segura del amor de Cristo y valoro su gran sacrificio por mi salvación. En la relación matrimonial, la seguridad del amor de uno al otro debiera echar fuera todo sentimiento de celos amargos o cualquier otro sentimiento de inseguridad con respecto al amor. Aunque hoy los novios no adquieren a sus esposas por un precio en dinero, la idea bíblica es que los esposos “amen” a sus esposas así como “Cristo amó a la iglesia y se entregó a sí mismo por ella…”, pagando así el precio. El precio que Cristo pagó para adquirirnos fue su propia entrega. Con esa clase de entrega deben los esposos amarse. Y el mandamiento es sobre todo para “el esposo”: AMAR a su esposa con todo lo que esto significa. La idea de la adquisición de la esposa por un precio, nos enseña también acerca del valor que debe tener en nuestro corazón y mente, la esposa y el cónyuge en sí. La gran bendición que es y la importancia que debemos darle, al contrario de tomarlo tan livianamente, como muchas veces se hace. Proverbios 18:22 “El que halla esposa halla el bien…”. Si el varón ama y valora a su esposa con este gran amor así como Cristo, tendrá el amor y devoción de ella para siempre y el matrimonio será enriquecido. www.ConstructoresdelaFamilia.org Citas Bíblicas: Reina Valera Revisión 1960 5 CONSTRUCTORES DE LA FAMILIA “Construyendo la Familia Según el Corazón de Dios” Tradición Nupcial Judía/ Cristo y nosotros: El novio viajaba desde la casa del padre hasta la casa de la pretendida. Cristo dejó la casa del Padre para venir a la tierra a reclamar a su Esposa. Lucas 2:4-14 La novia tenía la elección de dar su consentimiento o rechazar la propuesta de matrimonio. Cristo llama a la puerta de nuestro corazón para invitarnos a unirnos a Él en una relación de pacto. Apocalipsis 3:20 Una vez que la novia le abría la puerta al novio, de hecho estaba aceptando casarse con él. Lo invitaba a pasar a una fiesta de compromiso (desposorio) en la que bebían de una misma copa y compartian una comida. Cuando aceptamos a Cristo como Salvador le estamos abriendo la puerta de nuestra vida para siempre para decirle que tome nuestra vida. Cristo constituyó la Cena del Señor o Comunión como la comida del Pacto por la Iglesia. La Esposa de Cristo. Mateo 26:26-28 Para el judío, el compromiso o desposorio era tan serio que tenía casi la misma importancia en lo legal que el matrimonio, Deuteronomio 22:23s. En ese momento hacían UN PACTO formal de matrimonio frente a testigos, que eran su familia y al tomar juntos de la misma copa de vino, sellaban ese pacto de amor eterno. En algunos paises o culturas se estila aun el compromiso matrimonial, generalmente unos meses antes de la boda, pero muchos ya no y si se hace, no tiene la misma seriedad. El varón sorprende a la mujer con la invitación formal para casarse con ella. Le obsequia el anillo de compromiso y por supuesto a estas alturas, luego de un noviazgo, ella esta lista para decir que sí. A partir de este momento, la pareja está formalmente comprometida para una futura boda, y comienzan los preparativos. La cosa va en serio. En paises latinoamericanos, se estilaba el compromiso varios años atrás, y tal vez aún, pero no como antes. Hay algo hermoso en la invitación formal del varón a la mujer para casarse con ella. Para nosotros como cristianos, desde el comienzo del noviazgo existe un compromiso interior, en el sentido de la seriedad que se le da o debiera darsele. No es bueno tomar el noviazgo con ligereza. Y qué bueno sería que también comenzaramos a imitar esa costumbre del compromiso formal antes de la boda.¿Recuerdan el día que decidieron ponerse de novios o casarse? Aunque fue algo diferente para cada uno, hubo algo en común: el amor y el deseo de estar juntos para siempre y formar una familia. El día de la boda “tomaron ambos de una misma copa”, porque hicieron un pacto con Dios y entre ambos de comenzar a partir de ahí una nueva vida juntos y estar juntos para siempre cualquiera sea la circunstancia. “Y ya no son mas dos sino uno…” www.ConstructoresdelaFamilia.org Citas Bíblicas: Reina Valera Revisión 1960 6 CONSTRUCTORES DE LA FAMILIA “Construyendo la Familia Según el Corazón de Dios” Una vez comprometidos, la novia era considerada como “kiddushin” o apartada exclusivamente para su novio. Era su propiedad. Cristo nos desposó. Hemos sido apartados exclusivamente para El. 2 Corintios 11:2 A partir del momento de la boda, ya no somos más “dos” sino “uno”, y estamos apartados exclusivamente el uno para el otro. Dile a tu esposo/a: ¡“Soy tu Kiddushin”! Somos propiedad uno del otro, 1 Corintios 7:4. El día de la boda, nos prometemos uno al otro un amor incondicional y para siempre. El novio promete cuidar, amar y proteger a su novia y dar sus afectos conyugales solo a ella. Ella de igual manera. Pero pasado el tiempo solemos olvidarlo y hablamos no solo del divorcio sino que aún permaneciendo casados, hay un divorcio emocional y de la voluntad. No es el propósito de Dios. El desea que estemos apartados exclusivamente uno para el otro, en todo sentido: de relaciones físicas, emocionales y en cada aspecto y área de la vida. Vivir el uno para agradar al otro, en el sentido humano. Sabemos que mucho más allá de esta relación, está nuestra relación con Cristo. El novio le daba un anillo a la novia, como símbolo de su adquisición por el precio de la novia. El anillo es una prenda por su futuro matrimonio. Cristo nos ha dado el Espiritu Santo como garantía de nuestro futuro Pacto con Él en el cielo. Efesios 1:13-14 El anillo era solo para la novia. Lo compraba él y era señal de la promesa que le hacía que se casaría con ella y para siempe. El anillo es hasta hoy, un símbolo del amor y el compromiso de uno al otro. Que cada vez que miremos en nuestro dedo el anillo, (aunque es solo simbólico) nos ayude a recordar ese amor matrimonial que no debe agotarse jamás y que ese compromiso es hasta que la muerte nos separe. El divorcio no es una opción para una pareja cristiana. El matrimonio es un pacto que hacemos ante Dios y un compromiso que no podemos romper. El novio le entregaba a la novia un contrato de matrimonio donde se estipulaba que el proveería por las necesidades de la novia. En su Palabra escrita, Cristo le asegura a la Novia que sus necesidades serán satisfechas. Mateo 6:25-34 El novio dejaba a la novia para preparar la cámara nupcial y su nueva casa. Cristo ha ido al cielo para preparar un lugar para nosotros. Juan 14:1-3 Otra vez y así como con el anillo, la firma del contrato matrimonial era algo que le daba seguridad a la novia. En el contrato se estipulaba concretamente que era www.ConstructoresdelaFamilia.org Citas Bíblicas: Reina Valera Revisión 1960 7 CONSTRUCTORES DE LA FAMILIA “Construyendo la Familia Según el Corazón de Dios” deber del esposo sostener a su esposa. En nuestras bodas se suele dar unas moneditas simbólicas (Arras) en donde el novio promete a su novia que no le dejará pasar necesidad sino que él proveerá y cuidará de ella. Hemos visto muchas parejas que tienen problemas por este motivo, en donde el no cumple con sus responsabilidades como debe hacerlo o en donde los papeles están cambiados. Él queda en casa con los niños y ella sale a trabajar. No son los roles así como Dios los ideó. Claro que puede haber momentos especiales en que esto suceda, etapas, pero no como algo normal. También ella puede salir a trabajar pero siempre la responsabilidad de proveer es del esposo. Pero más allá de la provision material, así como Cristo provee y satisface integralmente las necesidades de la Iglesia, el esposo debe hacerlo con su esposa. Que ella pueda estar tranquila, segura, feliz, sentirse cuidada y protegida. ¡Qué triste es que en tantos casos es totalmente lo contrario! El esposo debiera estar continuamente “preparando un lugarcito confortable y seguro” para su amada que no es necesariamente una hermosa y lujosa casa, sino que ese lugar sean sus propios brazos amorosos. Tradición Nupcial Judía/ Cristo y nosotros: Antes de la boda, la novia se sumerge en un baño ritual. El “mikvah” le recuerda a la novia que, cuando se case, dejará atrás su vieja vida y será “renovada” en su nueva vida de casada. Para la Novia de Cristo, el hermoso acto del bautismo simboliza no solo el lavamiento de la vieja vida pecaminosa, sino también el sumergirse en una nueva vida, apartada para su Novio. Efesios 5:25-26 Esta es una costumbre muy extraña para nosotros, pero tiene mucho significado. Le recuerda a la novia que cuando se case, ya no seguirá con su libre vida de soltera, haciendo y decidiendo a su parecer, sino siendo uno con su esposo y comprometida a dedicarse a complacerlo a él. Cuando las mujeres jovenes se casan y no comprenden esto, y descuidan sus responsabilidades como esposas y aun luego como madres, tienen grandes dificultades con sus maridos. Mujeres, no tengan temor de esto: complacer a los esposos resulta en algo agradable para las esposas mismas, y para Dios. No es algo que se hace a regañadientes y como una desgracia o como si fueran esclavas, sino por amor. ¡Es un placer servir a alguien que le ama y les cuida tanto! Si no es así con él, que la cosa no es reciproca, claro que será dificil, pero esas acciones de amor y compromiso de todas maneras serán recompensadas. Tradición Nupcial Judía/ Cristo y nosotros: El novio llegaba a la casa de la novia para robarse a la novia para el casamiento, por lo general, en medio de la noche. www.ConstructoresdelaFamilia.org Citas Bíblicas: Reina Valera Revisión 1960 8 CONSTRUCTORES DE LA FAMILIA “Construyendo la Familia Según el Corazón de Dios” En nuestra relación con Cristo como su Novia Jesús vendrá a arrebatar a la Iglesia como “un ladrón en la noche”. 1 Tesalonicenses 5:1-5 Cuando llegaba a la casa para reclamar a su novia, el novio gritaba para avisar que había llegado. Luego los novios se dirigian a la cámara nupcial en una festiva procesión de bodas por las calles, en donde los invitados se sumaban a la procesión. El Señor bajará del cielo con un grito y nos llevará en una gloriosa procesión al cielo. 1 Tesalonicenses 4:16-18 Tradición Nupcial Judía/ Cristo y nosotros: Las invitaciones. Cuando se enviaban las invitaciones para la fiesta de bodas, no se les ponía fecha. Cuando todo estaba listo y dispuesto, se enviaba los sirvientes a decir a los invitados que fueran a la fiesta. Cuando los novios llegan al lugar de la boda, el novio conduce orgullosamente a la novia a su hermosa cámara nupcial. Los invitados esperan afuera hasta que el novio le diga al padrino que el matrimonio se ha consumado. Entonces, los invitados celebran durante siete dias. La fiesta de bodas duraba generalmente siete dias, Génesis 29:22; Jueces 14:10; Mateo 22:1-10. Estamos invitados a la presencia de Dios a ser uno con Él en una relación de pacto, en la que Él expresa su amor incommensurable y su deleite por nosotros. Santiago 4:8; Isaías 62:4 Esta es la santidad de la unión matrimonial. La unión física que marca lo que nos hace ser una sola carne. Pero esta unión es mucho más que por unión sexual, es unión espiritual, emocional y de todo el ser. Dios quiere que sea un vínculo muy profundo y fuerte. Aquí está también el tema de la virginidad. Cuando el novio judío llevaba a la novia a la cámara nupcial, uno de los amigos de él (el padrino), que lo acompañaba en la procesión, esperaba a la puerta de la cémara mientras se consumaba el matrimonio. Luego el novio anunciaba que “todo estaba bien”, es decir, que su novia era virgen, y se había consumado el matrimonio. Ellos quedaban en su luna de miel en su casa, mientras los invitados festejaban. La importancia de la virginidad es muy grande para Dios, y es también su plan para cada pareja. Hoy día parece ser, como dice Dante Gebel, una enfermedad que las muchachas quieren curarse antes de los 15 años! Pero no lo es, sino que es un privilegio y orgullo poder decir “llegué virgen al matrimonio”, y esto tanto el hombre como la mujer. Es el ideal de Dios. Enseñemosle a nuestros hijos. Tradición Nupcial Judía/ Cristo y nosotros: La novia está adornada de hermosas joyas en su boda. Luego de la luna de miel de siete dias, los esposos salen a disfrutar de la fiesta de bodas antes de ir a su nuevo hogar. www.ConstructoresdelaFamilia.org Citas Bíblicas: Reina Valera Revisión 1960 9 CONSTRUCTORES DE LA FAMILIA “Construyendo la Familia Según el Corazón de Dios” La Esposa de Cristo está adornada con cualidades espirituales, 1 Pedro 3:3-4, y es recompensada con honor por su fidelidad, 2 Timoteo 4:6-8. La esposa de Cristo disfrutará de la fiesta de bodas con el Señor Jesús Apocalipsis 19:5. El matrimonio debe estar adornado continuamente con cualidades que son comparables a las joyas preciosas. La joya de la fidelidad, la joya del amor incondicional, del servicio desinteresado, de la paciencia, de la honestidad y sinceridad, de la comprensión y tantas otras cualidades que embellecen la relacion matrimonial y mas que esto lo afirman, lo hacen permancer a través de los años. www.ConstructoresdelaFamilia.org Citas Bíblicas: Reina Valera Revisión 1960 10