existe una costra de yeso. Junto á la hornablenda casi intacta, la masa principal menos rica se presenta compuesta de hierro magnético y fel­ despato. La solfatara del monte Dinaan, ofrece condiciones análogas. Un manantial silíceo, depósitos de azufre y formaciones de alunita, existen en la blanqueada y descompuesta andesita-anfibólica. E n la costa del mar, al S. de T a n a u a n , se encuentran pizarras cloríticas cuarzosas, a t r a ­ vesadas por vetas de epidota. 7.—Desviándonos algo hacia el O. de la línea volcánica que venimos estudiando, encontramos las islas de Cebú y Bohol rodeadas de arrecifes madrepóricos vivientes, los cuales se enlazan con otros que, levantados sobre el nivel de las aguas, forman las costas. Hacia el interior de la primera de dichas islas, aparece una caliza azulada bastante dura, sobre la cual reposan en estratificación concordante capas más ó menos p o ­ tentes de pizarras arcillosas y areniscas, alternando con otras de carbón. Esta formación parece pertenecer al grupo carbonífero de los terrenos paleozoicos, aunque no han podido encontrarse todavía fósiles bastantes que lo comprueben de un modo indudable. El descubrimiento de aflora­ mientos carboníferos en la costa oriental de la isla de Negros, con capas que presentan la misma dirección y una inclinación enteramente contraria á las de la parte occidental de la isla de Cebú, hace .sospechar la existencia de una cuenca carbonífera que pasa por debajo del estrecho que separa ambas islas. Desviada también de la zona volcánica, pero por el lado opuesto, ó sea al E. de la isla de Leyte, se encuentra la de Samar, cuya extensión superficial es muy considerable. En el rio Catarmán, que desagua en la costa N. de la isla, se descubren bancos de arcilla ferruginosa bastante compacta y de un color pardo claro, desprovista de caliza, con restos de plantas carbonizadas y muchos agujeros de foraminíferos. Por el lavado deja esa arcilla un depósito de cuarzo, que se presenta, en parte, en g r a ­ nos redondos y astillas angulosas, con hierro, algo de hierro magnético, mica blanca, parda y verde y feldespato. Los depósitos de arenas casi puras, ferruginosas, pardas, de grano bastante grosero, presentan la misma composición. Depósitos análogos de arena, pero de color verdoso, se encuentran en toda la mitad superior del rio Catarmán. Más al S., en el monte denominado Salta Sangley, existen arcillas de un color gris