Año 175 - agosto de 2002 Desarrollo de la Bioinformática en Chile Por Mauricio Canales, investigador asociado del Centro de Biotecnología "Dr. Daniel Alkalay Lowitt" de la Universidad Técnica Federico Santa María*. La Bioinformática es una disciplina emergente y se ocupa de crear y aplicar algoritmos para la solución de los fenómenos biológicos. Corrientemente, los proyectos en ejecución requieren de una descripción a nivel molecular aunque no necesariamente. Como producto final, la Bioinformática produce software científico, servicios a la forma de motores de análisis masivo de datos e información masiva sobre la función y relación entre genes o proteínas. Por sus características, también puede colaborar en el eventual desarrollo de robots para investigación. Hoy en día, la Bioinformática es una de las disciplinas de más rápido desarrollo, situación que coexiste con el hecho de encontrar muy pocos lugares para la formación o educación de estudiantes. El Doctorado en Biotecnología desarrollado en forma conjunta entre las universidades Santa María y Católica de Valparaíso, imparte un curso de Bioinformática; además, ésta es parte de las líneas de desarrollo del Centro de Biotecnología de la USM, donde se puede continuar esta formación (visitar, para más información, www.biotec.utfsm.cl). La genómica, es decir, la utilización de las tecnologías biológicas para el estudio masivo de genes y genomas, ha requerido y potenciado el desarrollo de esta disciplina enormemente. Es corriente hoy encontrar, tras los más recientes proyectos de estudios masivos de genes -sean éstos la solución de genomas o bien la solución de un número de fragmentos de genes-, un gran desarrollo de la bioinformática. En la reciente secuenciación del genoma de arroz, un 80.8% del genoma se ha identificado y la función del resto del genoma está siendo estudiada, entre otras formas, mediante la Bioinformática. Para otros ejemplos, recomiendo revisar artículos en la siguiente página web: www.biotec.utfsm.cl/bioinformatica/Material_para_MercurioValparaiso/555.pdf En los proyectos mencionados, los problemas por abordar son diversos y requieren de soluciones computacionales de alguna exigencia, almacenamiento masivo de datos y herramientas de análisis para múltiples variables, entre otras. Por ejemplo, un proyecto de secuenciación de fragmentos de genes que utiliza sólo un instrumento de secuenciación del tipo ABI 3700 en operación permanente, puede llegar a proveer 672 cromatogramas por día en un lapso de operación de 21 horas. En una semana, considerando seis días de operación, el volumen de datos sube a 4.052 cromatogramas. Si un proyecto pretende abordar la secuenciación sobre 80 mil fragmentos, los números se disparan y ello requiere soluciones a la medida de los recursos disponibles. En una primera fase, estos datos requieren de su desencapsulación, lectura y selección de calidad, la separación de segmentos de baja calidad y el ensamblado de los fragmentos para producir una lista de ensambles corrientemente denominados contigs y de fragmentos individuales sin ensamblar. Tanto en los fragmentos individuales como en los contigs, pueden estar contenidos la secuencia de nucleótidos de un gen en forma total o parcial. Para saber qué tipo de genes están contenidos en los fragmentos, se toma la lista anterior y se compara con grandes bases de datos de genes que contienen la función biológica de ellos descubiertas en distintos organismos. Aun cuando en los algoritmos asociados a esta tarea, no está contenida una matemática refinada, ella demanda cálculo intensivo y un equipamiento de un costo apreciable. Una vez acabada esta tarea, se cuenta con una lista de genes con posibles asignaciones funcionales, que requieren comprobación para la etapa de anotación definitiva o registro en la base de datos internacional. De vez en cuando, el valor agregado a las simples secuencias constituye un gen único o bien genes asociados a procesos con importancia tecnológica y, en menor número de casos, genes involucrados tanto en patologías como también de importancia tecnológica. Por tanto, s on objeto de patentamiento cuando se demuestra o se anticipa la utilidad de ellos. Otras áreas conectadas a la Bioinformática son la reconstrucción metabólica y redes genéticas, la interrelación y representación de información génica y proteica, la representación y análisis de redes dinámicas y el análisis de microarreglos, todas ellas muy importantes ya que amplifican nuestra capacidad para otorgar valor a las secuencias de genes y proteínas. Así como existe esta variedad de temas dentro de la Bioinformática, también es amplia la demanda de interrelación con la estadística, la informática, la biología y la física, pero dada la disponibilidad de financiamiento se hace difícil su colaboración con valor recíproco. Desde hace décadas, las naciones desarrolladas han sabido vincular la creación de conocimiento a las nuevas tecnologías y a la economía de las próximas décadas. Este desarrollo no es aislado sino recíproco, sinérgico y orgánico. Anticiparse al descubrimiento de nuevas funciones biológicas de genes y proteínas, la presencia de genes inesperados en un organismo y el mejoramiento de las características de otros, se traduce más tarde en nuevas tecnologías y productos con que la biotecnología incrementa la economía de las próximas décadas. La Bioinformática como parte de la biotecnología registra en un corto plazo expectativas económicas interesantes (ver enlaces a documentos en www.biotec.utfsm.cl/Bioinformatica/potencial_economico.html) Estas expectativas no se basan sólo en la generación de productos finales sino en la creación de valor, la protección de la propiedad intelectual y la conexión con las empresas interesadas en su desarrollo y explotación. Sin embargo, nuestra capacidad conjunta para orientar la investigación a esta finalidad es aún baja. Hay preguntas frecuentes como ¿quiénes y donde encontrar buenos socios para el desarrollo de prototipos, servicios o software?, ¿cuáles y cuántas patentes han sido inscritas para un invento dado?, o ¿cuándo y cómo proteger un invento en función de un desarrollo previo? El análisis de patentes y sus alcances legales constituyen un terreno de muy pocos expertos y, en el ámbito biotecnológico, los especialistas son muy escasos y ello hace flaquear a las mejores unidades dedicadas a la investigación del país. Esto impacta directamente al investigador, ya que las respuestas claras y oportunas sobre cómo orientar un desarrollo son incompletas. Por otro lado, la carencia de capital de riesgo o la confianza del sector empresarial no parece acompañar las disciplinas emergentes y ello requiere también de una solución, ya que se transforma en un cuello de botella cuando se cuenta con prototipos y desarrollos parciales que requieren recursos para su avance. En un momento en que se discute e impulsa la creación de tecnologías en nuestro país y particularmente en la Quinta Región, es necesario considerar las señales que se deducen de la actividad realizada, ya que pueden tener un impacto positivo y también porque muestran en su desarrollo, tal como sucedió para otras áreas en algún momento, la necesidad de otros expertos y las falencias que debemos completar. Disciplinas emergentes como la Bioinformática siguen el camino de cualquier nuevo proyecto y sus problemas son comunes a otras experiencias. Éstos, surgidos como consecuencia de un desarrollo inicial, provocan y necesitan de un conjunto de voluntades de aquellos sectores perceptivos de la sociedad y que puedan hoy contribuir al desarrollo de una región, como aquellas voluntades que estimularon el crecimiento de áreas que en el pasado fueron las emergentes. ________ *Mauricio Canales, licenciado en Bioquímica y doctor en Ciencias Naturales de la Universidad Técnica de Braunschweig, Alemania, se desempeña desde julio de 2001 en el Centro de Biotecnología "Dr. Daniel Alkalay Lowitt" de la Universidad Técnica Federico Santa María. Sus estudios de Doctorado se llevaron a cabo en la Sociedad de Investigación para Biotecnología (GBF mbH), de Stockheim, Alemania. Universidad Técnica Federico Santa María .