Algunas conceptualizaciones y referencias en la que se basó la

Algunas conceptualizaciones y referencias en la que se basó la charla
La impresión en tres dimensiones (3D printing) es el proceso de volver un diseño 3D un objeto
físico por la agregación de capas muy finas de material. Se usa principalmente para actividades de
prototipado rápido, pero ya tiene aplicaciones en muchos rubros como la arquitectura, la
medicina, la educación, el diseño y la moda.
La tecnología de la impresión 3D existe hace 30 años, pero se ha difundido ampliamente en los
últimos cinco años por diferentes causas:
• El vencimiento de las patentes que protegían algunas tecnologías de fabricación aditiva.
• La publicación en internet de planos e instrucciones de montaje de modelos asequibles y open
source que generó el nacimiento del movimiento RepRap.
• La disponibilidad de nuevos materiales con mayores funcionalidades y prestaciones.
• Las aplicaciones insospechadas que han permitido estas tecnologías de fabricación y la difusión
que ha permitido Internet.
• La tarea de Marketing que están realizando las empresas líderes a nivel global.
Los materiales que pueden trabajar las impresoras 3D son muy diversos (más de 200) y van desde
productos orgánicos (ceras, células, tejidos, alimentos) hasta metales (aluminio, titanio, acero
inoxidable...), pasando por materiales cerámicos (grafito, zirconio...) y polímeros (ABS, poliamida,
policarbonato...). Algunas máquinas pueden combinar materiales, haciendo un objeto rígido en
una parte y blando en otra. Asimismo, pueden producir componentes plenamente funcionales,
incluyendo mecanismos complejos.
Las implicaciones para la economía son evidentes: reducción de costes, simplificación de procesos,
ahorro de tiempo en la fabricación de productos, construcción de elementos que antes no eran
posibles y mejora de la productividad, gracias también, a la eliminación de los residuos. Esta nueva
tecnología desembocará en cambios profundos en el diseño y producción de muchos elementos.
Cinco puntos a considerar:
1. Reducción del tiempo de fabricación
Los clientes ya están recibiendo prototipos más rápido. Los mayores avances en la impresión 3D
permiten a las empresas más pruebas a gusto del cliente y reducir el riesgo de lanzar productos al
mercado de forma precipitada.
2. Nuevas estrategias de fabricación
El segmento de la fabricación aditiva es el que registra mayor crecimiento en la actualidad. Con los
costes a la baja y las funcionalidades de las impresoras 3D en aumento, los productos fabricados
con esta tecnología crecerán exponencialmente.
No obstante, no todos los productos son susceptibles de ser fabricados mediante estos procesos y
las empresas deberán analizar correctamente este aspecto. Otra de las implicaciones de la
fabricación 3D es su menor generación de residuos frente a la fabricación convencional: permite
ahorrar en materiales, facilitar la producción en países lejanos con menores costes y acertar más
fácilmente el producto a lo que desea el cliente final.
3. Nuevas fuentes de ingresos
La tecnología 3D cambiará la forma de crear valor de las empresas. Los costes más reducidos y la
forma más simple de trabajar podrán permitir a la fabricación aditiva realizar productos más
diferenciados y crear diseños personalizados.
Esto abre nuevas posibilidades, por ejemplo, en el servicio post venta, con las fabricación de piezas
de repuesto a medida. Nuevos retos que podrían sustanciarse en la creación de nuevas industrias
o negocios especializados en estas labores.
4. Nuevas capacidades
Estos cambios suponen también un reto para el diseño: arquitectos, ingenieros y diseñadores
deberán tener en cuenta para sus proyectos estos innovadores procesos de fabricación con sus
propios materiales. Surgen, por tanto, nuevos desafíos técnicos.
5. Competencia disruptiva
El abaratamiento de los costes permitirá la entrada de nuevos competidores en el mercado. Estas
nuevas empresas podrían entrar en principio en mercados-nicho, pero a largo plazo serán agentes
transformadores de la industria. Esto supone un nuevo reto para las empresas tradicionales, que
tendrán que adaptarse con rapidez al nuevo paradigma productivo.
La impresión 3D ya esta generando nuevas maneras de pensar y fabricar las cosas que nos rodean
y mientras crece su difusión y la concientización de la gente sobre las posibilidades que ofrece, se
van a ir generando cada vez nuevas aplicaciones para esta tecnología versátil.
Para fomentar su difusión y adopción, los chicos de Trideo lanzaron hace poco dos iniciativas muy
interesantes:
1. El 3D Design Contest: invitan a todos los diseñadores 3D del continente en mandar sus
diseños más creativos. Los ganadores reciben sus creaciones impresas en gran tamaño
(max 30x30x35cm).
2. Trideo Project: Apoyan a proyectos necesitando asesoramiento o acceso a la tecnología
para ponerse en marcha. Buscan proyectos con alto impacto social y/o comercial pero más
que nada buenas ideas donde la impresión 3D puede facilitar un proceso innovador. Ya
hicieron de todo, desde la realización de personaje para una película de animación hasta
imprimir un prototipo de camilla de rescate en altas montañas por ejemplo.
Más información en el sitio web y redes sociales de Trideo o por mail a [email protected]