El Clarí-n de Chile Matar por la espalda autor Eduardo Contreras* 2009-08-21 15:19:27 Es de asesinos y de cobardes. Y asÃ- fue como allá en el sur, a pocos kilómetros de Collipulli, los carabineros mataron por la espalda al joven comunero mapuche de 24 años Jaime Facundo Mendoza Collio, tal y como antes a sus hermanos mapuches MatÃ-as Catrileo, Johnny Cariqueo... El subsecretario del Interior Patricio Rosende, cara visible de la mano dura, sin esperar la más mÃ-nima investigación se apresuró a respaldar a la policÃ-a uniformada. Lo mismo hizo el general de Carabineros Cristian Llévenes, jefe de la 9ª zona de La AraucanÃ-a, que agregó su propia mentira al asegurar que al asesino “le dispararon a la cabeza y si hubiera estado sin casco lo matan―. Unos y otros hablaron de “legÃ-tima defensa―, vieja letanÃ-a con la que los represo tratan de justificar los crÃ-menes de Estado, y acusaron a la vÃ-ctima de haber disparado contra la policÃ-a uniformada. CavernÃ-colas como Miguel Otero y Fernando Cordero y otros polÃ-ticos de derecha, se sumaron al coro que clamaba por la inocencia de carabineros. En cambio el obispo Manuel Camilo Vial alzó su voz para advertir que la solución al conflicto mapuche no consiste en llevar más carabineros o más armas. La solución no es la violencia, lo que se requiere para avanzar en una salida correcta, dijo, es autoridad moral.  Sin embargo, la verdad no tardó en ser conocida. Los peritajes concluyeron categóricamente: un balazo por la espalda que destrozó el corazón de Mendoza y que salió por el tórax. El joven mapuche no pudo disparar por la simple razón que no portaba armas; además se estableció que el asesino persiguió a su vÃ-ctima para matarlo ya que le disparó a considerable distancia del lugar en que se encontraron. Está claro: un crimen más de carabineros y una nueva farsa de las autoridades responsables. No hubo defensa propia sino un brutal asesinato a sangre frÃ-a. Un montaje más, como tantos otros en la historia del paÃ-s.  Lo grave es que este hecho, ya preocupante por sÃ- mismo, se relaciona con diversos otros sÃ-ntomas, simultáneos, que dan cuenta de un cuadro en que la represión va de la mano con la impunidad de los culpables de crÃ-menes de ayer y de hoy. Por ejemplo, en la misma semana la Corte Suprema dejó en libertad a 11 agentes de la CNI que torturaron salvajemente y dieron muerte en septiembre de 1986 a los inolvidables compañeros José Carrasco, Felipe Rivera, Gastón Vidaurrázaga y Abraham Muskablit.  El fallo indecente rebaja sustantivamente las penas a la cúpula de la DINA – CNI por los mismos delitos. El mismo tufillo de impunidad que se percibe cuando se insiste desde las alturas en santificar a los actuales jerarcas de la fatÃ-dica Colonia Dignidad, cuando mucho de ellos, de haber justicia, debieran estar procesados.  Desmoronando otro montaje, casi al mismo tiempo, seis carabineros de la Tenencia Carretera de Laraquete fueron procesados por su responsabilidad en un hurto de madera registrado el pasado 11 de julio en un predio de la empresa Forestal Arauco. Se trata del mismo delito que se habÃ-a imputado, provocadoramente, a los mapuches.  Entre tanto, por 42 votos a favor y 29 en contra, la Cámara de Diputados aprobó el nefasto e inconstitucional proyecto de ley del Ejecutivo (boletÃ-n 4832) que, entre otras materias, presume responsables de las manifestaciones "a quienes hagan hayan llamado, a través de los medios de comunicación o por cualquier otro medio, a reunirse o manifestarse".  Le siguen disparando por la espalda a la transición a la democracia.  *Abogado; artÃ-culo publicado en El Siglo (21/08/2009), se publica en E ClarÃ-n de Chile con autorización del autor. http://www.elclarin.cl _PDF_POWERED _PDF_GENERATED 20 November, 2016, 00:19