Domina tus miedos Tengo que hablar delante de un auditorio lleno de gente. Me da mucho miedo hablar en público. No me extraña. A mí también. Y a miles de actores, cantantes de rock y hombres de negocios. Es un momento difícil, de estrés y de nervios. No estamos acostumbrados a estar en un escenario. El miedo es inevitable pero no podemos dejarnos dominar por él. La solución son tres sencillas palabras: preparar, preparar, preparar. Primero, infórmate bien sobre cuál va a ser tu público. Para afinar el contenido y tu llamada a la acción. Segundo, ensaya la presentación varias veces en presencia de tu familia o tus amigos. “Nuestro proyecto se llama Antes de actuar, piensa…” Mira a tu audiencia a la cara. Elige personas entre el público y mírales a los ojos. Háblales como si fueran tus amigos. Recuerda ensayar varios momentos inolvidables para averiguar cuál te funciona mejor. “Por ejemplo, para hacer la hamburguesa que te comes se ha utilizado un litro y medio de petróleo.” “Lo que me parece interesante es empezar a educar medioambientalmente…” Escucha los comentarios de tu familia y amigos. Pero al final, haz lo que tú crees que debes hacer. Tú eres quien saldrá al escenario. La presentación es tuya. Si te hace sentir más seguro, puedes escribir tu discurso en fichas como estas. Anota una idea en cada una de ellas y, si es necesario, sácalas para repasar. Un presentador humano y vulnerable siempre capta el afecto del público. No hace falta que memorices la presentación. Es tu proyecto y ya sabes de qué va. Si ensayamos es para tener más seguridad, pero no te aprendas la presentación palabra por palabra. Te quita pasión y verdad. Y si quieres grábate en vídeo. No solemos gustarnos y a veces perdemos confianza, pero si sabes mirarte con valentía vas a aprender muchas cosas. “¿Crees que debo controlar las manos?” Y recuerda, no sois tú y tu miedo lo importante, sino tu proyecto. Eso es lo que el público quiere oír. Al público le encanta ver una persona frágil que se atreve a subir a un escenario. Preparar, preparar, preparar. Confía en ti y en tu preparación. Tu proyecto te necesita. Solo tú lo puedes transformar en una gran historia.