OCTUBRE 2014 BRINDAR CONFORT EN PRESENCIA DE SONIDOS FUERTES JULIE TANTAU, AuD FABIAN MORANT, MS MICROINGENIERIA Desde que han existido los instrumentos auditivos, los usuarios han reclamado que algunos sonidos son demasiado fuertes y esto continúa hasta hoy. El reclamo tiene cierto contraste con los avances tecnológicos de los instrumentos auditivos. Sin embargo, la tecnología es solo una parte, y su uso adecuado es la otra. Con respecto a los sonidos fuertes y confortables, la tecnología logra predecir una potencia de salida máxima (MPO) razonable, pero la satisfacción del usuario no solo depende de la verificación y de los ajustes individuales, sino que también, en caso de ser necesario, de mediciones precisas para determinar el nivel de sonoridad no confortable (UCL). Para fortalecer estas tareas, nos proponemos presentar bagaje previo y pautas prácticas para la verificación de la MPO y las mediciones UCL. También incluimos información sobre el software de adaptación Oasis y cómo éste le guía desde un UCL promedio o medido hacia la MPO. 2 | BRINDAR CONFORT EN PRESENCIA DE SONIDOS FUERTES EL CONFORT EN PRESENCIA DE SONIDOS FUERTES – UN PROBLEMA QUE CONTINÚA A pesar de los avances de la tecnología digital, los usuarios de audífonos aún luchan con los sonidos fuertes. En la encuesta dirigida a clientes titulada “Consumer satisfaction with hearing aids is slowly increasing” (La satisfacción de los clientes con sus audífonos mejora lentamente) Kochkin (2010) describió las áreas con las calificaciones más negativas en cuanto al procesamiento de la señal de los audífonos y la calidad del sonido. Los cinco primeros puestos incluyeron su uso durante situaciones ruidosas y el confort durante la presencia de sonidos fuertes. ¿Cómo se puede mejorar la satisfacción en estas dos categorías? La mejora del desempeño en presencia de ruido es el objetivo de diversas prestaciones de audífonos actuales, tales como los micrófonos direccionales y los sistemas de reducción de ruido. Si bien ambos brindan confort adicional, pueden desviar la atención de uno de los aspectos más básicos de la adaptación: la potencia de salida máxima (MPO). La MPO limita el nivel de presión sonora al cual se somete un cliente. De esta manera, tiene un efecto importante en la satisfacción general del cliente. Cuando un cliente reclama que los sonidos suenan demasiado fuertes, puede que la MPO sea demasiado alta. Al contrario de estos reclamos, cabe el riesgo de contar con una MPO muy baja, en cuyo caso el habla suena apagado y resulta difícil de entender (Bentler y Cooley, 2001). El software de adaptación, mediante procedimientos establecidos, brinda estimaciones sensatas de la MPO para cuatro de cada cinco clientes (Dillon, 2012). Así, los valores medidos de UCL ya no son un prerrequisito para las sesiones de adaptación. Cuando la MPO resulta muy alta o muy baja, se debe ajustar. Para la persona que así lo requiere, configurar la MPO a un valor adecuado generalmente comienza con la medición del nivel de sonoridad no confortable (UCL) o su equivalente: el nivel molesto de sonoridad (LDL). DEBATE SOBRE EL USO DE NIVELES NO CONFORTABLES EN EL FLUJO DE ADAPTACIÓN En el pasado, los expertos estipulaban las mediciones de UCL previo a la adaptación, pero ahora favorecen su uso para la verificación y validación luego de la adaptación. A medida que los métodos de adaptación fueron cambiando, sucedió lo mismo con la opinión sobre el flujo de adaptación. En el pasado, los expertos estipulaban las mediciones de UCL previo a la adaptación, pero ahora favorecen su uso para la verificación y validación luego de la adaptación. De hecho, cuando Hawkins et al., (1987) analizaron el procedimiento de la medida del LDL, aseveraron que se debía medir el LDL para determinar la salida máxima del audífono. Esta aseveración refleja el proceso antes de la disponibilidad de instrumentos digitales y software de adaptación. Ya por el año 2005, esta opinión comenzó a cambiar. Mueller y Bentler evaluaron la efectividad de mediciones UCL al revisar casi 200 artículos. Concluyeron que la evidencia “tiende a apoyar el uso de LDLs específicos a las frecuencias mediante mediciones clínicas” (pág. 470), pero se abstuvieron de emitir una recomendación fuerte. Siete años después, Dillon (2012) reportó que si “se usa una prescripción en base al umbral, las mediciones individuales de LDL no arrojan mejoras sustanciales en cuanto a la precisión de la adaptación” (pág. 328). De esta manera, concluyó que la mejor manera para aprovechar el tiempo clínico que se ahorra, es durante las evaluaciones posteriores. A pesar de estas opiniones opuestas sobre cuándo realizar la medición UCL, aún resulta una parte importante del proceso de adaptación. Es debido a este hecho que analizaremos las mediciones UCL, su uso en Oasis, la validación y la verificación de MPO. 3 | BRINDAR CONFORT EN PRESENCIA DE SONIDOS FUERTES MEDICIÓN DE SONORIDAD NO CONFORTABLE – UCL La medición del UCL tiende a brindar resultados no consistentes debido a varias razones: comportamiento individual del cliente, diversidad de procedimientos e interpretaciones de las instrucciones. El UCL indica el nivel auditivo en que el cliente encuentra que la sonoridad de los sonidos no resulta confortable, pero tampoco dolorosa. Contrastando con esta definición tan directa, la medición del UCL tiende a brindar resultados no consistentes debido a varias razones: comportamiento individual del cliente, diversidad de procedimientos e interpretaciones de las instrucciones. A modo de minimizar estas dificultades, recomendamos el uso del Cox Contour Test (Cox et al., 1997), un “procedimiento científicamente defendible que, a su vez, es clínicamente practicable” (pág. 389). El comportamiento individual del cliente hace referencia a los ánimos y sentimientos de la persona en relación con ciertos sonidos, ya que ambos tienen un impacto sobre el nivel de sonoridad que el cliente está dispuesto a tolerar. Un buen ejemplo es el nivel de música que se disfruta durante una fiesta, pero que a la mañana siguiente no se desea oír. De la misma manera, las personas disfrutan de gritos alentadores en un estadio, pero les desagrada un sonido igualmente fuerte de uñas en una pizarra (Mueller, 2009). El mismo argumento es aplicable ante los tonos puros utilizados en las mediciones de UCL para frecuencias específicas. La mayoría de los clientes los encuentran menos agradables que los sonidos del mundo real, lo que introduce un sesgo potencial. En comparación con otros procedimientos de medición, el Cox Contour Test (Cox et al., 1997) ayuda a los clientes a juzgar la sonoridad de los sonidos en base un gráfico con siete categorías de sonoridad, como se puede ver en la Tabla 1. Categorías de sonoridad 7. Fuerte y no confortable 6. Fuerte, pero confortable 5. Confortable, pero levemente fuerte 4. Confortable 3. Confortable, pero levemente suave 2. Suave 1. Muy suave Tabla 1. Descripción de sonoridad en el Contour Test (Cox et al., 1997) para usar al medir LDL Según la Tabla 1, la categoría 1 se refiere a sonidos muy suaves mientras que la categoría 7, a sonidos incómodamente fuertes. Los autores recomiendan repasar el gráfico con sus clientes y mantenerlo a la vista durante la prueba. Para evitar el sesgo durante las interpretaciones, los autores recomiendan leerle las siguientes instrucciones al cliente: El objetivo de esta prueba es conocer su opinión sobre la sonoridad de distintos sonidos. Oirá sonidos cuyo volumen aumenta y se reduce. Debe formar una opinión sobre cuán fuertes son estos sonidos. Imagínese estar escuchando la radio a ese mismo volumen. ¿Qué tan fuerte sería? Luego de cada sonido, me debe comentar cuál de estas categorías describe la sonoridad. Se debe tomar en cuenta que un sonido fuerte y no confortable es más fuerte de lo optaría por oír en su propia radio, sin importar su estado de ánimo. (Cox et al., 1997) Este tipo de protocolo establecido brinda las mejores condiciones para lograr resultados relevantes y reproducibles. 4 | BRINDAR CONFORT EN PRESENCIA DE SONIDOS FUERTES OASIS: DESDE SONORIDAD NO CONFORTABLE A POTENCIA DE SALIDA MÁXIMA Oasis no impone un método en particular, sino que le brinda soporte a todas las opciones al ­proporcionar las herramientas ­adecuadas. Ahora que ha completado la medición UCL ¿qué va a hacer con ella? Como se ha mencionado anteriormente, el papel de UCL al determinar la MPO ha cambiado con la tecnología. Las diversas opiniones de los expertos realmente complican la decisión sobre si se debe incorporar UCL en el cálculo de MPO. Por último, no existe una técnica específica para seleccionar una configuración MPO, sino que coexisten distintos métodos y prácticas. A modo de respuesta, Oasis no impone un método en particular, sino que le brinda soporte a todas las opciones al proporcionar las herramientas adecuadas. Para mostrarle cómo es que Oasis logra su tarea, abarcaremos las siguientes preguntas: ·· ¿Cómo hace Oasis para transformar los valores UCL en configuraciones MPO? ·· ¿Cómo hace Oasis para proceder cuando usted no proporciona los valores medidos de UCL? ·· ¿Por qué pueden parecer demasiado bajas las configuraciones MPO? ·· ¿Qué opciones le brinda Oasis para ajustar la MPO? Trasformación de valores UCL en configuraciones MPO La trasformación de valores UCL en configuraciones MPO requiere de tres pasos: Nivel de presión sonora equivalente al umbral de referencia (RETSPL), Diferencia entre el oído real y el acoplador (RECD), y la Conversión banda estrecha a banda ancha (NBBB). La Figura 1 muestra estos pasos. UCL RETSPL RECD NBBB MPO Figura 1. Diagrama de bloques de la transformación desde UCL hacia MPO Al medir UCL, generalmente se usan tonos puros mediante auriculares supraaurales o de inserción con resultados expresados en dB HL. Primero, Oasis convierte estos valores dB HL en valores de acopladores de 2 cc. Esto se logra al adicionar el RETSPL a la HL. El RETSPL es el umbral de audición promedio en un acoplador para un transductor particular. El ISO 389-1 (1998) estándar brinda los valores RETSPL específicos del transductor. El próximo paso es convertir los valores del acoplador de 2 cc en SPL para el conducto auditivo al adicionar el RECD. Para este objetivo, Oasis usa valores RECD específicos según la edad o los valores individuales medidos, en caso de estar disponibles. Siempre se recomienda medir RECD en jóvenes o quienes tengan una fisiología anormal del oído. El último paso requiere una leve reducción del nivel de presión sonora para equilibrar el cambio de una banda estrecha a una banda ancha o señal compleja. Los tonos puros son señales de banda estrecha y el habla, por ejemplo, es una señal compleja. Las señales complejas producen una salida general mayor que cualquiera de sus componentes simples o tonos puros. Las señales de banda ancha resultan en una percepción mayor de la sonoridad por parte del oyente. Cuando Oasis haya realizado estos tres pasos, el valor resultante es la MPO. Así, la fórmula se vería de la siguiente manera: UCL (dB HL) + RETSPL + RECD – NBBB = MPO. 5 | BRINDAR CONFORT EN PRESENCIA DE SONIDOS FUERTES Procedimiento sin valores medidos de UCL Como ya habíamos mencionado, usted puede proporcionar los valores medidos de UCL al inicio. ¿Pero, qué sucede si no lo hace? En este caso, Oasis aplica procedimientos establecidos (Storey et al., 1998) que aprovechan las mediciones de los umbrales auditivos para predecir las configuraciones de MPO. Dillon (2012) encontró que al usar este método, aproximadamente el 80% de los sujetos estaba dentro del rango +/- 5 dB de niveles MPO aceptables para los sujetos. Solamente los sujetos con conductos auditivos muy pequeños o personas con escaso rango dinámico necesitaron de mediciones adicionales. Configuración con una MPO aparentemente baja Cuando las transformaciones están completas, Oasis le permite ver la curva de MPO resultante. Con frecuencia, la pantalla exhibe valores de MPO cercanos a 110 o 115 dB SPL. Puede parecer que estos valores supongan un riesgo al limitar la curva de ganancia de entrada de 80 dB y posiblemente cortar el habla. Sin embargo, la situación es menos problemática de lo que parece. La razón yace en la diferencia entre las señales exhibidas en el software de adaptación y aquellas procesadas por el instrumento auditivo en la vida real. La Figura 2 muestra la diferencia. Tonos puros El habla Nivel de presión sonora en dBSPL 120 100 120 100 MPO Salida Ganancia 80 80 Salida Entrada 60 60 40 40 100 MPO 1000 Frequency in Hz 10000 100 Ganancia Entrada 1000 10000 Frequency in Hz Figura 2. Relevancia de la curva fija de MPO para tonos puros en banda estrecha vs. el habla en banda ancha La entrada del habla de 75 dB mantiene una amortiguación de 20 dB entre la salida y la MPO. El panel izquierdo de la Figura 2 ilustra la situación de los tonos puros. Con una ganancia de 35 dB a 3000 Hz, una entrada de tonos puros de 75 dB alcanza una MPO de 110 dB SPL. El panel derecho de la Figura 2 muestra un resultado diferente aunque la ganancia y el nivel de entrada es el mismo. La entrada del habla de 75 dB mantiene una amortiguación de 20 dB entre la salida y la MPO. La diferencia surge de dos razones. La primera razón es que la potencia de un tono puro se concentra en frecuencias específicas mientras que en los tonos complejos la potencia se extiende sobre una gama de frecuencias. Esto tiene como resultado menores niveles espectrales para el habla. Así, como se puede ver en el gráfico derecho, la entrada para el habla (curva verde) siempre es menor que la entrada para los tonos puros. Esto permanece cierto mientras ambas señales tengan la misma potencia total. 6 | BRINDAR CONFORT EN PRESENCIA DE SONIDOS FUERTES La segunda razón es la pendiente espectral del habla. El espectro promedio del habla decae en las frecuencias altas lo que reduce aún más los niveles de salida en comparación con los tonos puros. Estos dos efectos quedan demostrados con la señal del habla de 75 dB en el panel derecho de la Figura 2. Ambos gráficos usan la misma ganancia y niveles de entrada. Sin embargo, debido a la entrada inherentemente menor del habla y los menores niveles en las frecuencias altas para el habla, el resultado es menor salida comparado con los tonos puros. Opciones para ajustes de MPO Aunque haya ingresado las mediciones de UCL o se fie de valores UCL promedio en Oasis, ocasionalmente necesitará ajustar el nivel MPO resultante. Con este propósito es que Oasis le ofrece tres opciones. La primera opción se relaciona con los botones de MPO en la pantalla de amplificación del software Oasis. En este caso, se debe aumentar o reducir manualmente la MPO de la misma manera que lo haría con la ganancia durante los ajustes finos. La segunda opción es aplicable al fiarse de los valores UCL en Oasis, pero aún tendrá uno de los cada cinco clientes para quien los valores promedio no son aplicables. Por ejemplo, puede tener un paciente con un rango dinámico estrecho. En este caso, mida e ingrese los valores UCL en el audiograma y luego inicie nuevamente la adaptación. Un enfoque alternativo y más fácil es usar la opción de Audiometría In Situ en Oasis y medir los UCL mediante los instrumentos auditivos. Oasis calculará nuevamente la MPO en base a los UCL medidos In Situ. La tercera opción se aplica cuando usted haya ingresado el UCL medido, pero no esté de acuerdo con la MPO resultante. En este caso, puede esperar un resultado mejor al retirar los valores UCL del audiograma y comenzar nuevamente, pero esta vez usando los valores UCL promedio en Oasis. VALIDACIÓN Y VERIFICACIÓN DE LA POTENCIA DE SALIDA MÁXIMA Ahora es el momento de verificar la MPO obtenida. Los estudios muestran que la verificación de las configuraciones de los instrumentos auditivos es de suma importancia para lograr la satisfacción del cliente (Kochkin et al, 2010). Junto con la ganancia, la verificación también debe incluir la MPO (Valente et al., 2007). Un método para verificar la MPO es su incorporación en una medición en oído real, usando un barrido de tonos puros donde también se debe revisar que la salida máxima no supere los valores UCL medidos. Una prueba de sonoridad en la condición amplificada revelará configuraciones potencialmente bajas de MPO. Un método alternativo es realizar una prueba de sonoridad en la condición amplificada (Mueller, 2009) particularmente el Cox Contour Test (Cox et al., 1997). Una ventaja de este procedimiento es que también revelará las configuraciones potencialmente bajas de MPO. Las mediciones clínicas adicionales, tales como cuestionarios de autoevaluación, ayudarán a detectar los problemas causados por una MPO alta. La incorporación de estos cuestionarios en las sesiones de seguimiento indicará problemas con la sonoridad de los clientes durante situaciones diarias. MANTENER LOS SONIDOS FUERTES, PERO CONFORTABLES Las adaptaciones de audífonos suelen ser como actos de equilibrio. Los usuarios de audífonos necesitan suficiente ganancia y MPO para oír el habla con claridad, sin embargo al exceder los niveles UCL se pueden encontrar con falta de confort y de satisfacción. Tal como muestra la experiencia, la MPO es un aspecto de la adaptación que frecuentemente se ignora, pero que puede tener efectos importantes en la satisfacción. Le recomendamos que le dé mayor consideración para, así, aumentar el número de clientes satisfechos. 7 | BRINDAR CONFORT EN PRESENCIA DE SONIDOS FUERTES Referencias American National Standards Institute. (2009). American National Standard Specification of Hearing Aid Characteristics, ANSI S3.22. New York: ANSI. Bentler, R.A. and Cooley, L.J. (2001). An examination of several characteristics that 25_ES - 28.08.2013 affect the prediction of OSPL90 in hearing aids. Ear & Hearing, 22, 58–64. Bentler, R.A. and Nelson, J.A. (2001). Effect of spectral shaping and content on loudness discomfort. J AM Acad Audiol., 12, 462–470. Bentler, R.A. and Pavlovic, C.V. (1989). Comparison of discomfort levels obtained with pure tones and multitone complexes. J. Acoust. Soc. Am., 86 (1), 126–132. Cox, R.M.; Alexander, G.C.; Taylor, I.M.; and Gray, G.A. (1997). The contour test of loudness perception. Ear & Hearing, 18 (5), 388–400. Desde 1946, nos apasiona el desarrollo de sistemas auditivos de calidad que permiten a las personas Dillon, H. (2012). Hearing Aids. Chapter 10. Prescribing hearing aid amplification. In con dificultades de audición disfrutar de experiencias auditivas auténticas. Mediante la ingeniería suiza, Hearing Aids. New York: Thieme. la tecnología de alta precisión y nuestro compromiso con el servicio personalizado, nos esforzamos para Hawkins, D.B; Walden, B.E.; Montgomery, A.; and Prosek, R.A. (1987). Description exceder las expectativas de nuestros clientes. Nuestro objetivo es proveer día a día nuestros servicios and validation of an LDL procedure designed to select SSPL90. y productos de valor agregado aEar nuestros socios. representantes y empleados de Bernafon en más & Hearing, 8 (3),Los 162–169. de 70 países hacen realidad nuestra visión de ayudar a las personas con pérdidas auditivas a comunicarse International Organization for Standardization. (1998). Acoustics – Reference zero nuevamente sin limitaciones. for the calibration of audiometric equipment. Part 1 – Reference equivalent threshold sound pressure levels for pure tones and supra-aural earphones. ISO 389-1 (1998), International Organization for Standardization, Geneva, Switzerland. Kochkin, S. (2010). Marke Trak VIII: Consumer satisfaction with hearing aids is slowly increasing. The Hearing Journal, 61 (1), 19–20, 22, 24, 26, 28, 30–32. Kochkin, S.; Beck, D.; Christensen, L.; Compton-Conley, C.; Fligor, B.; Kricos, P.; McSpaden, J.; Mueller, G.; Nilsson, M.; Northern, J.; Powers, T.; Sweetow, R.; Taylor, B.; Turner, R. (2010). Marke Trak VIII: The impact of the hearing healthcare professional on hearing aid user success. The Hearing Review, 17 (4): 12, 14, 16, 18, 23, 26, 27, 28, 30, 32, 34. Mueller, H.G. (2009) How loud is too loud? Using loudness discomfort level measures for hearing aid fitting and verification, part 2. Audiology Online. Retrieved from http://www.audiologyonline.com/articles/loud-too-usingloudness-discomfort-824 Mueller, H.G. and Bentler, R.A. (2005). Fitting hearing aids using clinical measures of loudness discomfort levels: an evidence-based review of effectiveness. J Am Acad Audiol., 16, 461–472. Storey, L.; Dillon, H.; Yeend, I.; and Wigney, D. (1998). The national acoustic laboratories’ procedure for selecting the saturation pressure level of hearing aids: experimental validation. Ear & Hearing, 29 (4), 267–279. Valente,M.; Abrams, H.; Benson, D.; Chisolm, T.; Citron, D.; Hampton, D.; Loavenbruck, A.; Ricketts, T.; Solodar, H.; and Sweetow, R. (2007). Guidelines for the audiologic management of adult hearing impairment. Retrieved from http://audiology.com/haguidelines 2007.pdf lines 2007.pdf Sede principal Suiza Bernafon AG Morgenstrasse 131 3018 Bern Teléfono +41 31 998 15 15 Telefax +41 31 998 15 90 España Bernafon Ibérica, S.L.U. Avenida de Fuencarral, 24 Edificio Europa I, Portal 3, 3º 4 28108 – Alcobendas (Madrid) Teléfono +34 91 657 35 86 Fax +34 91 661 82 39