UNIVERSIDAD DE ZARAGOZA PRUEBA DE ACCESO A ESTUDIOS UNIVERSITARIOS - SEPTIEMBRE DE 2009 EJERCICIO DE: LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA TIEMPO DISPONIBLE: 1 hora 30 minutos Se valorará el buen uso del vocabulario y la adecuada notación científica, que los correctores podrán bonificar con un máximo de un punto. Por los errores ortográficos, la falta de limpieza en la presentación y la redacción defectuosa podrá bajarse la calificación hasta un punto; en casos extremadamente graves, podrá penalizarse la puntuación hasta con dos puntos. PUNTUACIÓN QUE SE OTORGARÁ A ESTE EJERCICIO: (véanse las distintas partes del examen) Para realizar la prueba, deberá usted leer con atención el texto que se le propone y responder a uno de los repertorios de cuestiones que aparecen a continuación del mismo. El mundo de mi infancia es un mundo con mucho cine. Con cine muy inocente. Con cine de películas diversas: cómicas, históricas, de vaqueros... 5 10 15 20 Pertenezco a la última generación que se inició en la pasión cinéfila antes de que el vídeo se convirtiera en el electrodoméstico más fatigado del hogar. Las primeras proyecciones a las que asistí fueron en la biblioteca pública de mi ciudad mesetaria, donde cada sábado se organizaban sesiones matinales para la chiquillería, ruidosas y turbulentas como una asamblea sindical, casi siempre con películas de recuelo que mostraban en sus fotogramas los arañazos y escoceduras de mil pases anteriores. En la biblioteca de mi ciudad se proyectaban cortometrajes de cine cómico -Charlot, El Gordo y el Flaco, etc.- que convertían la platea en un zafarrancho de combate; y, a continuación, películas de romanos y de vaqueros –mis predilectas-, pero también comedias de Louis de Funès, que me dejaban más frío que un congrio con anemia. También frecuenté en mi infancia, desvelada por los deslumbramientos de la sala oscura, un cine de las afueras, llamado Pompeya, desvencijado, que alternaba en su programación películas S –cuyos carteles nos traían a los chicos de mi pandilla en un sinvivir, y a las cuales no nos estaba permitido entrar- y sesiones dobles, los fines de semana, amuebladas con spaghetti-westerns y otros retales del cine que había triunfado entre las clases populares quince o veinte años atrás. Mi película favorita era El bueno, el feo y el malo. De vuelta a la calle, trataba de imitar los andares de Clint Eastwood y su mirada, entre desdeñosa y escrutadora. De esta guisa, me pavoneaba ante las muchachas de mi ciudad, que, por supuesto, no me hacían ni puñetero caso. Y es que a las chicas de provincias –y mucho menos si son rubias- nunca les han gustado los spaghetti-westerns. Lengua castellana y Literatura 1 CUESTIONES: REPERTORIO 1 Se compone de tres cuestiones referidas al texto propuesto para su análisis y comentario, y de dos cuestiones de tema literario correspondientes a las lecturas programadas en la asignatura. Dichas cuestiones son: 1. Resuma brevemente el texto (alrededor de 5 líneas de extensión). [2 puntos] 2. Caracterice el tipo de texto atendiendo a sus rasgos más relevantes. [3 puntos] 3. Realice el análisis y el comentario sintácticos del siguiente fragmento del texto: [2 puntos] “Pertenezco a la última generación que se inició en la pasión cinéfila antes de que el vídeo se convirtiera en el electrodoméstico más fatigado del hogar”. 4. El cuarto de atrás, de Carmen Martín Gaite. Destaque y concrete con detalle la opresiva presencia de la dictadura de Franco en la vida colectiva de la España de posguerra, basándose de modo especial en las vivencias y en la memoria de la narradora (mitología franquista y sus repercusiones sociológicas, temores y miedos, etc). [1,5 puntos] 5. La novela realista de Carmen Martín Gaite y de otros novelistas contemporáneos que representaron un testimonio de la sociedad de la posguerra. [1,5 puntos] REPERTORIO 2 Se compone de tres cuestiones referidas al texto propuesto para su análisis y comentario, y de dos cuestiones de tema literario correspondientes a las lecturas programadas en la asignatura. Dichas cuestiones son: 1. Resuma brevemente el texto (alrededor de 5 líneas de extensión). [2 puntos] 2. Caracterice el tipo de texto atendiendo a sus rasgos más relevantes. [3 puntos] 3. Realice el análisis y el comentario sintácticos del siguiente fragmento del texto: [2 puntos] “Las primeras proyecciones a las que asistí fueron en la biblioteca pública de mi ciudad mesetaria, donde cada sábado se organizaban sesiones matinales”. 4. En Beatus ille, Muñoz Molina se acogió a algunas estrategias narrativas inspiradas en el género policíaco. Señale y comente las más importantes a la luz de algunos lances argumentales concretos de la novela. [1,5 puntos] 5. La novela en la España democrática. Señale algunos autores representativos. [1,5 puntos] Lengua castellana y Literatura 2 ARAGÓN CONVOCATORIA SEPTIEMBRE 2009 SOLUCIÓN DE LA PRUEBA DE ACCESO AUTOR: Alberto Mangado Macua Repertorio 1 El autor del texto expone que su infancia está ligada al mundo del cine. De pequeño, acudía con otros niños a la biblioteca de su ciudad para asistir a sesiones bulliciosas en las que se proyectaban películas de diferentes géneros, siendo las de vaqueros sus favoritas. Asimismo, también se acercaba a un cine de las afueras para ver películas S, no autorizadas para niños de su edad, y spaghetti-westerns. A la salida, intentaba emular los andares y la mirada de Clint Eastwood para presumir antes las chicas, las cuales no eran aficionadas a ese tipo de cintas. Nos hallamos ante un texto de carácter expositivoargumentativo. Por un lado, el autor nos presenta al principio un hecho como verdadero: su infancia está estrechamente ligada al mundo del cine. Y, por otro, en el resto de las líneas nos aporta razones que tratan de demostrar la certeza de esa opinión o idea, razones basadas en sus experiencias personales. Teniendo en cuenta este aspecto, podemos comprobar que en el texto se distinguen diferentes funciones del lenguaje: referencial (se nos proporciona información de algunos hechos), expresiva (el autor muestra su punto de vista acerca de lo que expone) y apelativa (se intenta persuadir al lector de las opiniones expuestas y de lo bien argumentadas que están). El texto pertenece al género del ensayo, pues el autor expone sus pensamientos y opiniones sobre un tema determinado sin el rigor ni el planteamiento sistemático de un estudio más profundo. Este texto posee un carácter reflexivo, pues está creado desde la perspectiva del autor, quien organiza los contenidos con libertad y sin estar sujeto a un esquema rígido que marque su línea de pensamiento. Asimismo, se emplea un registro lingüístico basado en la claridad y corrección, ya que está dirigido a un público culto pero no especializado. La estructura del texto es la siguiente: 1. Introducción y exposición de la idea principal (líneas 1-2): la infancia del autor guarda una estrecha relación con el mundo del cine. 2. Demostración de dicha idea (líneas 3-18): 2.1. El autor pertenece a una generación que comenzó a sentir pasión por el cine antes de la aparición del vídeo. 2.2. Proyecciones en la biblioteca pública de la ciudad: 2.2.1. Sesiones bulliciosas para niños con películas deterioradas por su uso excesivo. 2.2.2. Tipo de películas: cómicas, de romanos, de vaqueros y comedias. 2.3. Proyecciones en el cine Pompeya, a las afueras de la ciudad: © Oxford University Press España, S. A. 2.3.1. Tipos de películas: películas S (no autorizadas para niños de su edad), spaghetti-westerns y otros retazos de un cine triunfante años atrás. 3. Conclusión (líneas 18-23): 3.1. Película favorita del autor: El bueno, el feo y el malo. 3.2. A la salida del cine, el autor trataba de emular los andares y la mirada de Clint Eastwood para alardear delante de las chicas de su ciudad. 3.3. Las chicas de provincias, y en especial las rubias, no son aficionadas a los spaghetti-westerns. Como se puede apreciar, la estructura de este ensayo es analítica, ya que emplea un orden deductivo. En el primer párrafo, el autor introduce el tema sobre el que va a girar el texto y la idea principal que tratará de argumentar en las siguientes líneas. Esta idea no es otra que la estrecha relación que guarda su infancia con el cine. Además, señala que se trata de un cine muy inocente, y anticipa los tipos de películas a cuyas proyecciones asistía de niño. Una vez expuesto el tema, inicia el segundo párrafo incluyéndose en la última generación que comenzó a entusiasmarse por el cine antes de que las nuevas tecnologías hicieran aparecer el vídeo, al que no duda en considerar el electrodoméstico más fatigado del hogar. Llegados a este punto, el autor dirige el contenido del texto hacia su propia persona y se basa en vivencias personales para demostrar lo expuesto en las primeras líneas. En este segundo párrafo, nos habla de las proyecciones a las que asistía en la biblioteca pública de su ciudad. Por un lado, explica que se trataba de sesiones destinadas a los más pequeños y caracterizadas por el desorden y el bullicio, idea que quiere clarificar al lector por medio de un símil o comparación: ruidosas y turbulentas como una asamblea sindical. Asimismo, especifica que los fotogramas de las películas que se proyectaban aparecían bastante deteriorados. Por otro lado, el autor hace referencia a los diferentes tipos de películas proyectadas, añadiendo un comentario valorativo a cada uno de ellos. En primer lugar, nos habla de las películas cómicas, ejemplificando cuáles eran algunos de sus actores principales (Charlot o El Gordo y el Flaco) y resaltando el revuelo que provocaban en la sala, para lo cual se vale de una metáfora: convertían la platea en un zafarrancho de combate. En segundo lugar, habla de las películas de romanos y de vaqueros, las cuales, como también quedará reflejado al final del ensayo, eran sus favoritas. Y, en tercer lugar, de las comedias de Louis de Funès, que le provocaban una sensación que trata de explicar con la ayuda de una nueva comparación, en este caso de carácter humorístico: me dejaban más frío que un congrio con anemia. Lengua castellana y Literatura 3 ARAGÓN En el tercer párrafo, hace referencia al segundo local de su ciudad donde se proyectaban películas. Se trataba de un cine situado en las afueras y que, según el autor, estaba desvencijado. Al igual que hizo al hablar de la biblioteca, también aquí señala los tipos de filmes proyectados. En primer lugar, hallamos las películas S, no autorizadas para chicos de su edad y cuyos carteles llamaban poderosamente su atención. Y, en segundo lugar, se refiere a los spaghetti-westerns y otros retazos de un cine que había tenido gran éxito años atrás. En las últimas líneas de este tercer párrafo comienza la conclusión a la que llega el autor al final del ensayo. Siguiendo con la subjetividad característica de este texto, el autor declara que su película favorita era El bueno, el feo y el malo, lo que le hacía emular, a la salida del cine, los andares y la mirada de uno de sus protagonistas, Clint Eastwood. De este modo, como se pone de manifiesto ya en el último párrafo, alardeaba ante las chicas de su ciudad, las cuales no le hacían ni puñetero caso. El desprecio femenino es de esperar porque, como el propio autor concluye al final del ensayo, las chicas de provincias (y mucho menos si son rubias) no son aficionadas a esta clase de películas. Este texto posee un claro componente evocador, lo que hace que la subjetividad sea uno de los aspectos más prominentes. El carácter subjetivo se pone de manifiesto, por ejemplo, en el uso que el autor hace de la primera persona gramatical, tanto en número singular (mi: línea 1; pertenezco: línea 3; me: línea 22) como en número plural (nos: línea 15). Del mismo modo, queda reflejado en la aparición de numerosos adjetivos valorativos, que le sirven al autor para calificar la realidad a la que hace referencia: inocente (línea 1), fatigado (línea 4), turbulentas (línea 6), predilectas (línea 11), desvencijado (línea 14) o desdeñosa (línea 20). En este sentido, también es relevante la presencia, a lo largo del texto, de oraciones subordinadas adjetivas, que tratan de cumplir un papel parecido. Por otro lado, el hecho de que nos encontremos ante un texto de carácter expositivo-argumentativo lleva consigo que haya un predominio de oraciones enunciativas, mediante las cuales el autor intenta transmitir sus ideas. Además, las ideas guardan una estrecha relación entre sí, como se pone de manifiesto con la aparición de diferentes marcadores discursivos: ordenadores (a continuación: línea 10), de adición (también: línea 13), de afirmación (por supuesto: línea 21) o de oposición (pero: línea 11). Por último, debemos señalar que el autor utiliza un registro en el que se combinan rasgos de diferentes niveles. De esta forma, junto a términos propios de un nivel culto (como los adjetivos cinéfila, desdeñosa o escrutadora), aparecen expresiones propias del registro coloquial: nos traían en un sinvivir (línea 15) o ni puñetero caso (línea 22). El análisis sintáctico de la oración propuesta se encuentra en el Cuadro 1, en la página final. Nos hallamos ante una oración compleja que incluye una oración subordinada adjetiva y otra adverbial. La oración compleja es predicativa, intransitiva y activa. Mientras que © Oxford University Press España, S. A. CONVOCATORIA SEPTIEMBRE 2009 la oración subordinada adjetiva es predicativa, transitiva y activa. Por último, la oración subordinada adverbial es predicativa, intransitiva, activa y pronominal. En El cuarto de atrás, de Carmen Martín Gaite, aparecen tres períodos bien diferenciados: el republicano, el de la Guerra Civil y el de la posguerra. Estas etapas son recuperadas por la autora a través de procedimientos distintos: el recuerdo de una vida más liberal; los bombardeos y los refugios de la guerra, y las escenas familiares en las que se economizaban los alimentos. En la novela Carmen rememora prácticamente toda su vida, desde su despreocupada infancia en el cuarto de atrás de su casa hasta el entierro del general Franco. A lo largo de sus páginas aparecen largas digresiones sobre la cultura de posguerra, asociada a la obsesiva imagen del dictador. El triunfo del bando nacional marca toda la novela, como se pone de manifiesto, por ejemplo, en la insistencia de los padres de Carmen para que oculte que a su tío Joaquín lo mataron por comunista. El «cuarto de atrás» al que hace referencia el título de la obra es el cuarto de jugar que tenía la autora en Salamanca. Es el espacio de su infancia, su paraíso perdido. Este espacio idealizado y mítico del juego desaparecerá durante la guerra, cuando la necesidad hace que se convierta en despensa, por lo que se produce un paso de lo lúdico a lo útil y, en cierta forma, de la infancia a la madurez. Al tener que abandonar el cuarto de atrás, Carmen tuvo que buscarse otros tipos de refugio. Así, «Ven pronto a Cúnigan», «El escondite inglés», «La isla de Bergai» o «La cajita dorada» se convierten en expresiones de un mundo evasivo de la realidad, ya sea en forma de canciones, juegos infantiles o somníferos. Tras la Guerra Civil, la ideología franquista se extiende a través de la propaganda política y social. La imagen de Franco se convierte en un ingrediente más de la infiltración ideológica de la dictadura, tal y como se pone de manifiesto en la novela: yo tenía nueve años cuando empecé a verlo impreso en los periódicos y por las paredes, sonriendo con aquel gorrito militar de borla, y luego en las aulas del Instituto y en el NO-DO y en los sellos; y fueron pasando los años y siempre su efigie y solo su efigie […]. La ubicuidad de Franco supone la congelación universal vital de la protagonista: el tiempo, los sueños, la libertad. Todo el universo personal de Carmen estuvo durante décadas reprimido por la fuerza de la sociedad y la propaganda, que instauró unos modelos de conducta donde el individuo, siguiendo los cánones de la propaganda fascista, no existía. En consonancia con este aspecto, en la novela aparece el papel que la mujer estaba destinada a desempeñar en aquella sociedad: formar a sus hijos en el amor de Dios y en la manera de ser de la Falange. La novela realista de Carmen Martín Gaite y de otros autores contemporáneos, testimonio de la sociedad de la posguerra Desde 1939 hasta la transición democrática, la vida española está marcada por el control y la ideología del régimen franquista. En esta etapa se produce un retroceso económico Lengua castellana y Literatura 4 ARAGÓN y un aumento del coste de la vida. En los primeros años de posguerra gran parte de la población padece frío y desnutrición, lo que favorece el desarrollo de las enfermedades. En la década de los cincuenta se atisba una cierta recuperación económica, con la progresiva incorporación de España al contexto internacional, pero la mayoría de la población sigue sufriendo penurias. La novela española de posguerra se inicia con la pérdida de numerosas referencias literarias, motivada por la muerte de algunos escritores y el exilio de otros, así como por la censura y la imposibilidad de importar textos de autores extranjeros simpatizantes de la República. Después de la Guerra Civil, los narradores crean una nueva tradición novelística que, en parte, retoma los modelos de la narrativa realista. Se rompe, así, la continuidad con la línea de vanguardismo y experimentación iniciada en las décadas de preguerra. Los años cuarenta Aparece una actitud de compromiso con la realidad y con los principios considerados válidos tanto para los vencedores de la Guerra Civil como para aquellos que plasman una actitud de protesta. En otros casos, las obras no manifiestan un compromiso ideológico, pero las historias narradas están cargadas de un clima de opresión individual. En esta década coexisten varias tendencias: 쐌 La novela nacionalista. Se refleja la visión ideológica de los falangistas, y la exaltación inicial del belicismo es sustituida por una sensación de desencanto. El mundo se divide en vencedores (que representan la virtud) y vencidos (ejemplo de todo lo negativo). Obras de esta tendencia son Camisa azul (1939), de Felipe Ximénez de Sandoval; La fiel infantería (1943), de Rafael García Serrano, y Javier Mariño (1943), de Gonzalo Torrente Ballester. 쐌 La novela fantástica y humorística. La fantasía, el humor y la creación de mundos imaginarios constituyen recursos para rechazar una realidad que resulta demasiado terrible. El mayor representante de esta tendencia es Wenceslao Fernández Flórez, autor de El bosque animado (1944). 쐌 El realismo tradicional. La vida de la burguesía, sus valores y sus comportamientos constituyen el tema fundamental de este movimiento. Juan Antonio de Zunzunegui (cuyas obras ofrecen una visión pesimista de la realidad centrada en la decadencia de la burguesía) e Ignacio Agustí (con una perspectiva más optimista que refleja el valor del hombre hecho a sí mismo) son dos de los autores más representativos. 쐌 El tremendismo. La familia de Pascual Duarte (1942), de Camilo José Cela, inaugura esta corriente en la que se reflejan con crudeza los aspectos más desagradables, violentos y repulsivos de la España de aquella época. La obra causó un gran impacto porque distaba de ser un relato de © Oxford University Press España, S. A. CONVOCATORIA SEPTIEMBRE 2009 carácter moralista: el protagonista, un condenado a muerte, relata su vida, llena de episodios terribles. 쐌 El existencialismo. Nada (1945), de Carmen Laforet, y La sombra del ciprés es alargada (1948), de Miguel Delibes, abren una época de reflexión sobre la incertidumbre de la existencia y reflejan la realidad como fuente de los desasosiegos individuales. Los años cincuenta La novela continúa la tradición del realismo de la década anterior. Los autores de estos años se plantean un compromiso ético ante la realidad, por lo que sus obras intentan reflejar la situación que viven los españoles de la época. Esta narrativa nace bajo la influencia de La colmena, de Camilo José Cela, una novela cargada de pesimismo, producto de la observación madrileña y que presenta al hombre corriente en su ambiente cotidiano. No obstante, la forma de asumir el compromiso ético de los escritores de los cincuenta permite diferenciar dos corrientes: 쐌 Tendencia social. Se entiende la literatura como una forma de concienciar al público y de influir en su postura ideológica. Los escritores presentan la situación social de las clases más humildes y explotadas de la sociedad, como se puede apreciar en Central eléctrica (1958), de Jesús López Pacheco, y La mina (1960), de Armando López Salinas. 쐌 Tendencia neorrealista. Para estos escritores, el compromiso ético significa una actitud personal y consideran que la realidad implica también las vivencias personales del individuo, lo que les permite mostrar otro aspecto del mundo a través de temas como la soledad, la frustración o la decepción. Las obras más representativas de esta corriente son El fulgor y la sangre (1954), de Ignacio Aldecoa; Pequeño teatro (1954), de Ana María Matute; Los bravos (1954), de Jesús Fernández Santos, y El Jarama (1956), de Rafael Sánchez Ferlosio. Asimismo, podemos destacar dentro de esta tendencia neorrealista la obra Entre visillos, con la que Carmen Martín Gaite gana el premio Nadal en 1957. Su argumento posee una cierta carga autobiográfica en cuanto que las hermanas protagonistas pudieron haberse repartido vivencias de la autora. Si continuamos con la trayectoria narrativa de esta escritora, nos encontramos con Retahílas (1974), que señala el comienzo de su madurez. Se trata de una novela que atañe a una realidad íntegra y honda, con una expresión muy cuidada. Posteriormente, hallamos Fragmentos de interior (1976), cuyos personajes son presentados por la autora en franca declinación, y El cuarto de atrás (1978), con la que mereció el premio Nacional de ese año. Esta última novela está basada en los recuerdos de la autora acerca de la sociedad española de la posguerra. Por último, en 1992 aparece Nubosidad variable, cuyas protagonistas tratan de huir de las catástrofes de la realidad. Lengua castellana y Literatura 5 ARAGÓN CONVOCATORIA SEPTIEMBRE 2009 Repertorio 2 El autor del texto expone que su infancia está ligada al mundo del cine. De pequeño, acudía con otros niños a la biblioteca de su ciudad para asistir a sesiones bulliciosas en las que se proyectaban películas de diferentes géneros, siendo las de vaqueros sus favoritas. Asimismo, también se acercaba a un cine de las afueras para ver películas S, no autorizadas para niños de su edad, y spaghetti-westerns. A la salida, intentaba emular los andares y la mirada de Clint Eastwood para presumir antes las chicas, las cuales no eran aficionadas a ese tipo de cintas. Nos hallamos ante un texto de carácter expositivoargumentativo. Por un lado, el autor nos presenta al principio un hecho como verdadero: su infancia está estrechamente ligada al mundo del cine. Y, por otro, en el resto de las líneas nos aporta razones que tratan de demostrar la certeza de esa opinión o idea, razones basadas en sus experiencias personales. Teniendo en cuenta este aspecto, podemos comprobar que en el texto se distinguen diferentes funciones del lenguaje: referencial (se nos proporciona información de algunos hechos), expresiva (el autor muestra su punto de vista acerca de lo que expone) y apelativa (se intenta persuadir al lector de las opiniones expuestas y de lo bien argumentadas que están). El texto pertenece al género del ensayo, pues el autor expone sus pensamientos y opiniones sobre un tema determinado sin el rigor ni el planteamiento sistemático de un estudio más profundo. Este texto posee un carácter reflexivo, pues está creado desde la perspectiva del autor, quien organiza los contenidos con libertad y sin estar sujeto a un esquema rígido que marque su línea de pensamiento. Asimismo, se emplea un registro lingüístico basado en la claridad y corrección, ya que está dirigido a un público culto pero no especializado. La estructura del texto es la siguiente: 1. Introducción y exposición de la idea principal (líneas 1-2): la infancia del autor guarda una estrecha relación con el mundo del cine. 2. Demostración de dicha idea (líneas 3-18): 2.1. El autor pertenece a una generación que comenzó a sentir pasión por el cine antes de la aparición del vídeo. 2.2. Proyecciones en la biblioteca pública de la ciudad: 2.2.1. Sesiones bulliciosas para niños con películas deterioradas por su uso excesivo. 2.2.2. Tipo de películas: cómicas, de romanos, de vaqueros y comedias. 2.3. Proyecciones en el cine Pompeya, a las afueras de la ciudad: 2.3.1. Tipos de películas: películas S (no autorizadas para niños de su edad), spaghetti-westerns y otros retazos de un cine triunfante años atrás. 3. Conclusión (líneas 18-23): 3.1. Película favorita del autor: El bueno, el feo y el malo. © Oxford University Press España, S. A. 3.2. A la salida del cine, el autor trataba de emular los andares y la mirada de Clint Eastwood para alardear delante de las chicas de su ciudad. 3.3. Las chicas de provincias, y en especial las rubias, no son aficionadas a los spaghetti-westerns. Como se puede apreciar, la estructura de este ensayo es analítica, ya que emplea un orden deductivo. En el primer párrafo, el autor introduce el tema sobre el que va a girar el texto y la idea principal que tratará de argumentar en las siguientes líneas. Esta idea no es otra que la estrecha relación que guarda su infancia con el cine. Además, señala que se trata de un cine muy inocente, y anticipa los tipos de películas a cuyas proyecciones asistía de niño. Una vez expuesto el tema, inicia el segundo párrafo incluyéndose en la última generación que comenzó a entusiasmarse por el cine antes de que las nuevas tecnologías hicieran aparecer el vídeo, al que no duda en considerar el electrodoméstico más fatigado del hogar. Llegados a este punto, el autor dirige el contenido del texto hacia su propia persona y se basa en vivencias personales para demostrar lo expuesto en las primeras líneas. En este segundo párrafo, nos habla de las proyecciones a las que asistía en la biblioteca pública de su ciudad. Por un lado, explica que se trataba de sesiones destinadas a los más pequeños y caracterizadas por el desorden y el bullicio, idea que quiere clarificar al lector por medio de un símil o comparación: ruidosas y turbulentas como una asamblea sindical. Asimismo, especifica que los fotogramas de las películas que se proyectaban aparecían bastante deteriorados. Por otro lado, el autor hace referencia a los tipos de películas proyectadas, añadiendo un comentario valorativo a cada uno de ellos. En primer lugar, nos habla de las películas cómicas, ejemplificando cuáles eran algunos de sus actores principales (Charlot o El Gordo y el Flaco) y resaltando el revuelo que provocaban en la sala, para lo cual se vale de una metáfora: convertían la platea en un zafarrancho de combate. En segundo lugar, habla de las películas de romanos y de vaqueros, las cuales, como también quedará reflejado al final del ensayo, eran sus favoritas. Y, en tercer lugar, de las comedias de Louis de Funès, que le provocaban una sensación que trata de explicar con la ayuda de una nueva comparación, en este caso de carácter humorístico: me dejaban más frío que un congrio con anemia. En el tercer párrafo, hace referencia al segundo local de su ciudad donde se proyectaban películas. Se trataba de un cine situado en las afueras y que, según el autor, estaba desvencijado. Al igual que hizo al hablar de la biblioteca, también aquí señala los tipos de filmes proyectados. En primer lugar, hallamos las películas S, no autorizadas para chicos de su edad y cuyos carteles llamaban poderosamente su atención. Y, en segundo lugar, los spaghetti-westerns y otros retazos de un cine que había tenido gran éxito años atrás. En las últimas líneas de este tercer párrafo comienza la conclusión a la que llega el autor al final del ensayo. Lengua castellana y Literatura 6 ARAGÓN CONVOCATORIA SEPTIEMBRE 2009 Nos hallamos ante una oración compleja que incluye dos oraciones subordinadas adjetivas. Tanto la oración compleja como la primera subordinada adjetiva son predicativas, intransitivas y activas. Por su parte, la segunda subordinada adjetiva es predicativa, intransitiva y pasiva refleja. Aparecen nombres, fechas y acontecimientos con los que el lector, confuso en primera instancia, no sabe qué hacer. Cada dato importante que proporciona el narrador es anticipado con anterioridad, aunque solo como un puro indicio, como una sugestión, lo que va despertando la inquietud del lector, enganchado por el misterio que encierra la historia. Así ocurre, por ejemplo, con la muerte de Manuel, el asesinato de Mariana o la vida secreta de Jacinto. El momento en el que definitivamente el narrador nos descubre una información relevante supone un impacto para el lector, fruto de la tensión acumulada durante su aplazamiento. La estrategia narrativa está construida a base de imágenes que se repiten cada cierto tiempo, pero ampliadas por algún detalle significativo o dato esencial. Cada sucesiva revelación de esas imágenes hace avanzar la investigación de Minaya y acercarle lentamente hacia la verdad oculta. El narrador extrae las experiencias del orden en que sucedieron para ubicarlas en un nuevo orden que consiga formar una maraña en la que el lector se va poco a poco enredando. Esta técnica heredada de la novela policíaca le permite engañar al lector y hacerle creer, por ejemplo, que Jacinto Solana está muerto cuando en realidad no lo está. El lector persistente que sigue el relato se da cuenta, con el tiempo, de que la trama adquiere características policíacas: por un lado, se narra la historia de un crimen, y, por otro, la historia de la pesquisa. Asimismo, el protagonista se convierte en detective, y otro de los personajes pasará a cumplir la función de narrador omnisciente. Esta estructura, propia del género policial, ayudará al lector a entender qué es lo que sucede en la novela. La estructura de Beatus ille es circular, ya que el principio y el final se enlazan. Los bloques narrativos no se suceden de manera lineal, pues se producen frecuentes cambios temporales que provocan que el pasado y el presente se mezclen continuamente. Muchos de los interrogantes que se abren en el primer capítulo no son resueltos hasta el final, donde se ofrece, por ejemplo, la solución a dos enigmas que inquietan al lector a lo largo de la novela: quién cometió el crimen y quién cuenta la historia. En definitiva, podemos afirmar que Antonio Muñoz Molina rompe con el esquema clásico de la narración, puesto que la información se nos presenta en un desorden temporal y los datos que se nos proporcionan aluden a futuros acontecimientos. Esta estrategia, tan desconcertante en un principio, representa los cimientos sobre los cuales se desarrolla la novela, cuya estructura, finalmente, se muestra sólida e interesante. En Beatus ille, Antonio Muñoz Molina utiliza técnicas heredadas de diferentes géneros literarios, entre los que sobresale la novela policíaca. La obra destaca por su elaborada estrategia, dirigida por un autor que mueve cada una de las piezas a su antojo. En las primeras páginas de la novela llegan a nosotros diferentes informaciones de una historia que ni siquiera imaginamos como posible. Dichas informaciones están basadas en datos que se nos presentan, en un primer momento, sin ninguna coherencia. La novela en la España democrática. Autores A partir de los años setenta, la novela española se caracteriza por la coexistencia de distintas tendencias y estilos anteriores. Continúa la renovación de nuestra novela y el escritor ya no concibe la literatura como un medio capaz de transformar el mundo, por lo que orienta su esfuerzo hacia la transformación de la literatura en sí. Las principales tendencias cultivadas en la España democrática son las siguientes: Siguiendo con la subjetividad característica de este texto, el autor declara que su película favorita era El bueno, el feo y el malo, lo que le hacía emular, a la salida del cine, los andares y la mirada de uno de sus protagonistas, Clint Eastwood. De este modo, como se pone de manifiesto ya en el último párrafo, alardeaba ante las chicas de su ciudad, las cuales no le hacían ni puñetero caso. El desprecio femenino es de esperar porque, como el propio autor concluye al final del ensayo, las chicas de provincias (y mucho menos si son rubias) no son aficionadas a esta clase de películas. Este texto posee un claro componente evocador, lo que hace que la subjetividad sea uno de los aspectos más prominentes. El carácter subjetivo se pone de manifiesto, por ejemplo, en el uso que el autor hace de la primera persona gramatical, tanto en número singular (mi: línea 1; pertenezco: línea 3; me: línea 22) como en número plural (nos: línea 15). Del mismo modo, queda reflejado en la aparición de numerosos adjetivos valorativos, que le sirven al autor para calificar la realidad a la que hace referencia: inocente (línea 1), fatigado (línea 4), turbulentas (línea 6), predilectas (línea 11), desvencijado (línea 14) o desdeñosa (línea 20). En este sentido, también es relevante la presencia, a lo largo del texto, de oraciones subordinadas adjetivas, que tratan de cumplir un papel parecido. Por otro lado, el hecho de que nos encontremos ante un texto de carácter expositivo-argumentativo lleva consigo que haya un predominio de oraciones enunciativas, mediante las cuales el autor intenta transmitir sus ideas. Además, las ideas guardan una estrecha relación entre sí, como se pone de manifiesto con la aparición de diferentes marcadores discursivos: ordenadores (a continuación: línea 10), de adición (también: línea 13), de afirmación (por supuesto: línea 21) o de oposición (pero: línea 11). Por último, debemos señalar que el autor utiliza un registro en el que se combinan rasgos pertenecientes a diferentes niveles. De esta forma, junto a términos característicos de un nivel culto (como los adjetivos cinéfila, desdeñosa o escrutadora), aparecen expresiones propias del registro coloquial: nos traían en un sinvivir (línea 15) o ni puñetero caso (línea 22). El análisis sintáctico de la oración propuesta se encuentra en el Cuadro 2, en la página final. © Oxford University Press España, S. A. Lengua castellana y Literatura 7 ARAGÓN 쐌 El experimentalismo. Se trata de una corriente a la que pertenece una generación de escritores que manifestaban un rechazo total por la anécdota, como José María Guelbenzu o Félix de Azúa, si bien su máximo exponente es Juan Benet. Este escritor inicia el camino de un tipo de novela basada en la elaboración del lenguaje y en la reflexión, como se puede apreciar en obras como Una meditación (1970) o Saúl ante Samuel (1980). 쐌 La metanovela. La creación literaria se convierte en tema con un personaje escritor que muestra o habla de su novela. Algunos ejemplos son Novela de Andrés Choz (1976), de José María Merino; El hijo adoptivo (1984), de Álvaro Pombo, o Beatus ille (1986), de Antonio Muñoz Molina. 쐌 La novela lírica. El escritor presta una atención especial a la calidad poética de la obra. Mortal y rosa (1975), de Francisco Umbral, y La lluvia amarilla (1988), de Julio Llamazares, son dos claros ejemplos de esta tendencia. 쐌 La novela de aprendizaje. En este tipo de relato se nos muestra el desarrollo de un personaje, generalmente desde la infancia hasta la madurez. Javier Marías es un escritor representativo de este género, con obras como Todas las almas (1989) o Corazón tan blanco (1992). 쐌 La novela policíaca. El escritor combina la tendencia a narrar una historia que resulte interesante y atraiga al lector con aspectos sociales y de denuncia. En ocasiones, reconstruye momentos históricos en los cuales se han producido serios conflictos y narra los hechos siguiendo el hilo de una intriga. En España, este modelo nace con La verdad sobre el caso Savolta (1975), de Eduardo Mendoza, que recrea la Barcelona de principios de siglo y los conflictos obreros de la Semana Trágica. Otro autor relevante es © Oxford University Press España, S. A. CONVOCATORIA SEPTIEMBRE 2009 Manuel Vázquez Montalbán, creador de la saga del detective Carvalho. En varias de sus novelas el contexto corresponde a la realidad española contemporánea: Asesinato en el Comité Central (1981) o El hombre de mi vida (2000). 쐌 La novela histórica. Se trata de una tendencia basada en la recreación de hechos históricos. En esta orientación tienen lugar obras como Urraca (1991), de Lourdes Ortiz; El hereje (1998), de Miguel Delibes, y El capitán Alatriste (1998), de Arturo Pérez Reverte. 쐌 La novela generacional. El escritor ofrece una revisión de la historia reciente de España y muestra su desengaño con respecto a la transición política de la época franquista a la democracia. Los dioses de sí mismos (1989), de Juan José Armas Marcelo, o Muchos años después (1991), de José Antonio Gabriel y Galán, son dos ejemplos de este tipo de novela. 쐌 El realismo. En estas décadas hallamos diferentes tipos de realismo que abogan por una concepción más abierta de la realidad, en la que tienen cabida lo imaginario y lo absurdo. El expediente del náufrago (1992), de Luis Mateo Díez; Juegos de la edad tardía (1989), de Luis Landero, y El jinete polaco (1991), de Antonio Muñoz Molina, son tres claras muestras de esta tendencia, que trata de recuperar el arte de contar entre la libertad reinante de formas y de contenidos. 쐌 La novela psicológica. El escritor enfatiza la caracterización interior de los personajes y profundiza en su mente. Algunas obras representativas de este género son El mecanógrafo (1989), de Javier García Sánchez; El metro de platino iridiado (1990), de Álvaro Pombo, y Ciegas esperanzas (1992), de Alejandro Gándara. Lengua castellana y Literatura 8 Nx © Oxford University Press España, S. A. E N Nx N E T (SN) Ady (Adj) CC (Const Prep) N T (SN) S (SN) N C Reg* (Const Prep) P (SV) Nx D Ady (OS Adj) P (SV) N Nx CCT (OS Adv Temp) N P (SV) C Rég (Const Prep) T (SN) Cuant N Ady (S Adj) Ady (Const Prep) T (SN) N D S (SN) N Ady (OS Adj Esp) P (SV) N **se: marca de pasiva refleja. *fueron: no tiene aquí valor copulativo y equivale a «sucedieron». D T (SN) N CCL (Const Prep) E D N E D N Ady (Adj) E D T (SN) Ady (Adj) Ady (Const Prep) N P (SV) CCL (Const Prep) T (SN) CCL (S Adv) D CCT (SN) P (SV) N Ady (OS Adj Exp) N N S (SN) Ady (Adj) ↓ (SO: 1.ª pers. sing.) Las primeras proyecciones a las que asistí fueron* en la biblioteca pública de mi ciudad mesetaria, donde cada sábado se** organizaban sesiones matinales. Cuadro 2 (Repertorio 2) *Esta construcción prepositiva también podría considerarse CI. N D Ady (Adj) S CD D E D E D ↓ (SO: 1.ª pers. sing.) Pertenezco a la última generación que se inició en la pasión cinéfila antes de que el vídeo se convirtiera en el electrodoméstico más fatigado de + el hogar. Cuadro 1 (Repertorio 1) ARAGÓN CONVOCATORIA SEPTIEMBRE 2009 Lengua castellana y Literatura 9