BAKUNIN Y MALATESTA, SU VIGENCIA Y PROYECCIÓN EN EL ESPECIFISMO INTRODUCCION De toda la lectura que hacemos y seguiremos haciendo de referentes ideológicos tan fecundos como Bakunin y Malatesta, hoy nuestra realidad nos obliga a reanalizar sus escritos con el objetivo de buscar después de toda una historia de desarrollo de la idea anarquista elementos que aun estén vivos y vigentes para nuestra praxis actual y sean orientación permanente en nuestro propio camino, y a la vez nos permita dejar de lado algunos aspectos (son pocos) que por la evolución histórica de los últimos cien años resultan anacrónicos para su utilización actual. Aclarar este punto para algunos estará demás, pero para las nuevas generaciones de militantes será importante destacar que nuestra ideología no es estática, y muy por el contrario, se dinamiza y evoluciona en constante cambio por su permanente fricción con la realidad en pos de sus objetivos generales, la revolución social y la construcción de una sociedad autogestionada a todo nivel en torno a los principios del comunismo anárquico. 1) INTRODUCCIÓN ORGANIZATIVA HISTÓRICA, BAKUNIN Y MALATESTA: PROPUESTA Para hablar de estos dos grandes referentes del anarquismo, primero es crucial explicar el por que ellos y no otros, y así despejar cualquier duda de análisis ideológico mas general. El anarquismo por su carácter liberador cobijó desde sus inicios múltiples visiones de la realidad social, tanto en su análisis filosófico e histórico, como en diferentes vías de superación de la esclavitud humana y su consiguiente emancipación definitiva. Todas estas propuestas, si bien coincidían en los objetivos finales en la teoría y su férrea crítica al Estado y al Capitalismo, se diferenciaban en sus métodos. Por esto destacamos a Bakunin y Malatesta, tanto por su pensamiento como por su acción, o sea su praxis. Estos compañeros al igual que nosotros asumieron un anarquismo de clase, con intención clara de influir directamente en los movimientos sociales y políticos, arraigado plenamente (porque somos parte y no entes externos) en la clase explotada. Por todo lo nombrado con anterioridad nos apropiamos del derecho a organizarnos entre anarquistas y desde nuestro espacio político 1 1 Con esto no queremos decir que somos un grupo de intelectuales que organice el programa del pueblo, sino que, será el roce con la realidad el que dotará a la organización especifica de nuevas herramientas y nuevos bríos. Al igual que esperamos que nuestra organización específica sirva como herramienta para las luchas populares. 1 permear en lo social todo tipo de expresión social y política que no valide el modelo capitalista y la maquinaria Estatal, siempre claro está con una propuesta e intentando radicalizar lo más posible el espacio social2 Acotando, nuestra tendencia es el anarquismo organizado u organizacionista, donde la organización política se enmarca dentro de la gran trayectoria especifista que se ha construido a lo largo de la necesidad histórica que han visto los anarco-comunistas. No nos sentimos identificados con el plataformismo, por encontrar en ella cierta tendencia diregencialista, sin embargo, reconocemos su valor teórico e ideológico. El rol que vemos en la organización política es su focalización en ser herramienta para la radicalización de las luchas sociales y populares. Bakunin y Malatesta en este contexto, luego de las enseñanzas que obtuvieron en sus propias luchas fueron los que plantearon esta forma de organización para el anarquismo. Si bien no desmerecemos en lo más mínimo otros luchadores que estuvieron en las luchas obreras desde sus inicios en la Primera Internacional y que fueron grandes aportes para darle cuerpo a la ideología, reconocemos en Bakunin y Malatesta ser los mas prolíferos en aportes teóricos y prácticos de esta tendencia, por eso su valor como referentes tan profundos. Otra característica importante del legado de Bakunin y malatesta es que demarcaron y se separaron de corrientes en extremo filosóficas (pequeño burguesas) o deterministas. En ese contexto surge, por ejemplo, la figura de kropotkin, el teórico que denominó como comunismo anárquico3 el modelo de sociedad a la que aspira el anarquismo, cuya propuesta aporta con ideas esenciales un tipo de organización de sociedad sin gobierno ni estado, ni otro tutelaje, apropiación de los medios de producción por los obreros como pie de partida y vital en la construcción de una sociedad autogestionada económicamente. A pesar de lo fecundo de su pensamiento, Kropotkin peco de determinismo, o sea, que la emancipación de los individuos llegaría finalmente con o sin una revolución que acortara tales tiempos, porque la especie humana de todas formas llegaría a vivir su ideal de comunismo por acción del desgaste del capitalismo y la propia historia. En contrapunto Bakunin y Malatesta descartan este y cualquier determinismo que no caracterice que las únicas posibilidades de librarnos del yugo de la explotación económica del capitalismo es que la propia sociedad, al menos una mayoría explotada, reconozca y haga conciencia de su condición y decida rebelarse contra tal dominio. Este perfil va también contra cualquier corriente filosófica que pretenda que la libertad del ser humano existe previa o al margen de la sociedad. ambos concuerdan y sintetizan que podemos aspirar a ser 2 Levantar democracia directa, estructuras horizontales, voceros o representantes revocables y rotativos por dar algunos ejemplos. 3 Comunistas en la economía y Anarquistas en la gestión de la sociedad 2 libres solo si los demás son libres, que una sociedad puede aspirar a la libertad plena solo si ha roto las cadenas de todo tipo de explotación, económica, social, cultural, etc. Creer que la libertad existe por si sola, como un concepto abstracto y absoluto es idealismo filosófico. El ser humano sabe que la libertad existe por su condición de explotado y la superación de aquella. Sintetizando, entender cualquier proceso de emancipación y revolucionario sin el motor fundamental de un pueblo organizado y conciente de su destino es requisito vital para una real posibilidad de derrotar al capitalismo y su aparato generador de clases, el Estado. El carácter libertario en el contenido de tal proceso es nuestro objetivo y tarea a realizar, Bakunin y Malatesta entregaron diversas herramientas para lograrlo, ahí radica su vigencia e importancia histórica. 2) BAKUNIN Y MALATESTA: ACLARACIONES Y CONTEXTUALIZACIÓN SOBRE SU PROPUESTA ORGANIZATIVA Antes de desmenuzar la propuesta orgánica de estos pensadores y activos militantes anarquistas es necesario aclarar dos puntos que son clave para un mayor entendimiento de la misma, estos se refieren a lo siguiente: La palabra partido tanto para Bakunin como Malatesta 4, aparecen seguido en sus libros y documentos, lo que podría confundir a cualquier lector sobre todo a los militantes en formación. Ellos entendían el concepto sólo en los casos de ser “un grupo de personas poniéndose de acuerdo en determinados objetivos e intereses los cuales se organizaban para concretarlas”. Este es un primer término que hoy en día nos parece anacrónico. Ya en sus tiempos ellos mismos se encargaban de criticar duramente a los partidos tradicionales, en especial a los de izquierda, ya que nunca (y la historia les dio la razón) superaron sus etapas reformistas y quedaron anclados como bloques de poder, con una construcción de corte dirigencial, por tanto autoritaria y pequeño burguesa en sus propuestas. Ellos apelaban a que los anarquistas, en su construcción orgánica debían ser todo lo contrario, o sea, si bien tenían la obligación de hacerse parte de las demandas sociales, la tarea de los militantes anarquistas era radicalizar tales movimientos haciendo conciencia en los trabajadores que todos los males sociales venían del capitalismo, por tanto, las pequeñas luchas debían necesariamente 4 Hay que tomar muy en cuenta el momento histórico, puesto que, las sociedades secretas, que eran símiles de partidos políticos –y de hecho la primera organización política anarquista fue una sociedad secreta- estaban a la orden del día, y además se encontraban triunfantes luego de las revoluciones burguesa Europeas. 3 convertirse en luchas mayores, ya que, una verdadera actitud de emancipación se lograría luchando no sólo en la forma sino en aspectos de fondo. Hoy la comodidad de nuestra posición histórica nos dice que no hubiera sido necesario utilizar el concepto “partido”, pero no hay que olvidar que a ellos los movía un interés honesto y una urgente necesidad de que los anarquistas se organizaran en los concreto, única forma de no quedarse en posturas pequeño burguesas, individualista o idealistas de construcción de una nueva sociedad, además el marxismo ya mostraba abiertamente su interés de hegemonizar5 la lucha del proletariado de aquel entonces por eso la importancia, aunque hoy parezca un contrasentido, un partido anarquista junto con luchar contra el capitalismo debía ser la alternativa a la forma de construcción autoritaria propuesta por el ala marxista de la primera internacional y de estos tiempos también. El segundo aspecto a destacar es que la organización política de los anarquistas (término que hoy ocupamos) se basa y fundamenta partiendo por una crítica de fondo de todo sistema de gobierno ejercido por una clase en detrimento de otra. Entendemos que los gobiernos son temporales y coyunturales, por eso es el Estado la estructura donde se depositan todos los mecanismos de dominación y administración de la explotación económica, social ,cultural ,etc. en la esencia desde donde nace el anarquismo y desde la cual plantea como alternativa de autogestión en lo económico y libre asociación en los social. Cabe mencionar que en el presente documento nos concentramos estrictamente en la propuesta orgánica de Bakunin y Malatesta (al menos en los aspectos que hoy siguen vivos y vigentes) ya que tanto el concepto Gobierno-Estado ya han sido analizados en un documento aparte. 5 Hace referencia al tener el control de la discusión, manejo de las acciones de masas, por medio de puesto dirigenciales. 4 3) LA ORGANIZACIÓN POLÍTICA ANARQUISTA Descartando el “partido” como estructura de construcción orgánica por las razones entregadas en los párrafos anteriores, nos concentraremos en la organización política como eje de construcción anarquista. A continuación enunciamos algunos criterios tanto de Bakunin y Malatesta como nuestros, que caracterizan este concepto –organización política. 3.1) CARACTERÍSTICAS GENERALES Es un espacio donde los anarquistas asumen su derecho a organizarse políticamente contra el capitalismo, con un perfil de fondo que es la organización de todo individuo politizado, conciente en reconocer la causa de donde provienen todos los males e injusticias sociales. Bajo el perfil anterior, la organización política a mínima escala y una mayoría social organizada a gran escala son una posibilidad real de convertirse en un verdadero proceso de emancipación, en contraposición a la tendencia individualista (antiorganizativa). La acción social no es más que el resultado del conjunto de las iniciativas individuales. El individuo existe gracias a la sociedad, el entorno y su historia, es imposible que un individuo se desarrolle fuera de la sociedad. Al individualismo respondemos con solidaridad y fraternidad, otro principio importante que los militantes anarquistas organizados deben transmitir y poner en práctica constante. Otro pilar, es la formación política de los militantes, la cual abarca aspectos históricos, científicos y teóricos que ayudan a la persona a tenerlos elementos suficientes para reconocer en el anarquismo y a si mismo como alternativa propositiva para un proceso real de emancipación humana. Si entendemos que el anarquismo es una actitud y voluntad moral de rebelión contra la injusticia, entonces, otro perfil de la organización política es propagar en la base social esos valores, como reacción y protección a individuos asociados en contra del individualismo y la apatía social. De lo anterior se desprende también que la organización política anarquista es un medio y no un fin. Se pretende influir y permear el movimiento social, pero somos una herramienta para nuestra clase, nada más. Un movimiento social amplio con perfil libertario sólo se conseguirá cuando los individuos, ahí asociados, fruto de la fricción con la realidad concluyan que el método libertario realmente es eficaz contra todo tipo de autoritarismo y tal grado de conciencia se logra en la praxis permanente y no como una idea implantada mecánicamente o en forma de panfleto. 5 Este espacio al ser sólo un medio, una herramienta, se contrapone en forma natural a cualquier forma de construcción dirigencial o de un tipo similar. Por consiguiente “el programa” de la organización política, es sólo coyuntural al período en que esta opera, y evoluciona y se adapta según tal coyuntura específica, y jamás pretenderá representar el programa de una mayoría organizada, puesto que, los caminos a tomar por esos individuos, les pertenecen a si mismos. El programa de la específica desarrolla la labor de organización interna de los militantes asociados y pone a disposición las herramientas suficientes para que estos estén en condiciones de realizar cada vez mejor su trabajo político. En síntesis el programa de la específica no es más que el organigrama de los objetivos (generales y específicos) y tareas (métodos y praxis) internos de los militantes. Organizarse entre anarquistas, requiere afinidad, acuerdos de objetivos (corto, mediano y largo plazo) y tareas concretas a realizar. Estrategias y tácticas (ver documento tácticas y estrategias). En síntesis son parte de una misma organización política los que mantienen el acuerdo en esos puntos esenciales, es decir la aceptación de un programa común. El anarquismo organizado como tendencia, puede albergar a varias o muchas organizaciones políticas, entendiendo que las separan sólo sus métodos no sus objetivos finales, por eso, es otra tarea la de federar el movimiento libertario, bajo condiciones de necesidad objetiva, y así ampliar la posibilidad de ser una herramienta mucho más sólida a los movimientos sociales y sus luchas. 6 4) LA ORGÁNICA EN LA ORGANIZACIÓN POLÍTICA Una organización política requiere unidad orgánica, esto es acuerdo total acerca de los objetivos y tareas que su grupo de militantes ha acordado realizar. Si el programa es un organigrama, síntesis de los propósitos y fines medidos en tiempo de un grupo organizado, la orgánica es la forma, el método, la metodología que se ocupará para realizar tales objetivos y tareas. Para unificar criterios en los individuos que se asocian libremente a la orgánica requiere acuerdos de fondo en los objetivos estratégicos y tácticos a concretar. La orgánica es un espacio de creación política, ideas objetivos, tareas, actividades, discusión, debate, etc. Es el espacio de contenido que crean los individuos asociados, no es un ente abstracto independiente, como sucedería bajo una óptica marxista. Cualquier idea que se despersonaliza de esa forma crea dependencia y ésta autoritarismo. La organización no es otra cosa que el espacio donde se materializan ideas y propósitos de manera organizadas, somos nosotros mismo proyectados en un espacio material. La orgánica es una línea de acción múltiple. Teórica, práctica, política, formativa, etc. Por lo tanto no es estática, ni unidireccional, responde a necesidades concretas, de lo contrario perdería el carácter libertario. En orden de prioridades, la orgánica se potencia y empieza a dibujarse definiendo el carácter estratégico de la organización, y luego la táctica que concretará tales objetivos. Aclarado estos dos aspectos esenciales, la orgánica organiza en términos integrales el desarrollo del trabajo de la organización. 7 CONCLUSIONES Sacando en limpio, nos interesa dejar en claro la necesidad que vemos como anarquistas de ocupar la herramienta que nos entrega la organización política. Básicamente la organización específica de anarquista nos sirve para salir del aislamiento y unir fuerzas al tener un consenso en la mayoría de los puntos de un programa que contiene medios y fines, también nos sirve al momento de analizar la realidad, puesto que, el pensamiento y la acción colectiva enriquece tanto nuestro proceso como militantes como el proyecto social que llevamos a delante con el conjunto con la base social. La praxis, unión de teoría y acción, de los dos compañeros en cuestión son muy rescatables para la experiencia que estamos viviendo en estos momentos, puesto que, fueron propulsores de organizaciones políticas de anarquistas, fueron la primera camada de compañeros que visionó esta necesidad, con el cual buscaban ser un aporte más de la clase para realizar la revolución social. El compañero italiano, al igual que muchos otros anarquistas que fueron proclives y partícipes de federaciones anarquistas u otros tipos de específicas encontraron dos motivos o roles que debía tener este tipo de organización, por un lado se encontraba la ardua inserción en las masas proletarias y la otra era la propaganda colectiva que debe generar la agrupación a la cual pertenecen los militantes. Complementariamente a esto el compañero ruso decía “Nosotros, por el contrario, debemos fomentar, despertar y desencadenar todas las pasiones; debemos producir la anarquía y, como pilotos invisibles en medio de la tempestad popular, debemos dirigirla, no por un poder ostensible, sino por la dictadura colectiva de todos los aliados (miembros de la Alianza Revolucionaria). Dictadura sin cetro, sin título, sin derecho oficial, y tanto más poderosa cuanto que no tendrá ninguna de las apariencias del poder. Esa es la única dictadura que yo admito. Pero para que pueda actuar es necesario que exista, y para ello es necesario prepararla y organizarla por anticipado, pues no se hará sola, ni por discusiones, ni por exposiciones y debates de principios, ni por asambleas populares.” Entre líneas Bakunin nos muestra la necesidad de la organización específica, debemos ser esa minoría activa que entre la misma masa va empoderandose de espacios y libertarizarlos lo más que podamos. Siempre con activismo militante, no disperso o sin alguna dirección, sino con tácticas, estrategias, planes de trabajo, propaganda, etc. Al pasar del tiempo el anarquismo siempre ha tenido que luchar es contra un supuesto anarquismo utópico, de corte idealista y pequeño burgués6. Falsas acusaciones normalmente suscitadas de la boca de marxistas. Estas blasfemias se derrumban al leer un poco del pensamiento de Malatesta, por medio de diarios, por ejemplo cuando se pronunciaban 6 Mucho más allá de las citas y la recuperación histórica que estamos realizando en este documento, sólo nuestra praxis hará renacer la verdadera raíz de la militancia anarquista. 8 entorno a los medios y fines, mayorías y minorías, la organización, crítica al reformismo, etc. Temas importantísimos que contenían un análisis de clase, arraigado fuertemente en las condiciones objetivas de aquellos tiempos y con propuestas que servían para radicalizar las luchas o entregar herramientas y conocimientos para que las condiciones subjetivas fueran las más libertarias y revolucionarias posibles. A la vez Bakunin resaltaba mucho el carácter materialista de la construcción social desde el punto de vista anarquista, ataca encarnizadamente tanto al socialismo autoritario como al idealista, el primero por tener como fin la libertad sólo de palabra y no de hecho, y el segundo por estar en las trincheras de la iglesia y los socialistas burgueses que no les interesaba la igualdad económica, sólo derechos republicanos (burgueses). Algo notable a recalcar dentro de la historia del anarquismo y sus militantes, es la capacidad de crítica y su materialismo social o dinámico, es decir, tanto la ideología como la militancia anarquista ha comprendido el dinamismo de la historia y la fuerza de los hechos, por lo cual esto nos ayuda a no caer en un dogma en formas de organización, planes de trabajo ni muchos menos en la lectura de la realidad para poder actuar de mejor forma. Claros ejemplos de estos es la postura de Malatesta frente al determinismo “materialista” de su época, o la salida económica que planteó Isaac Puente ante los acaparamientos de producción que suscitaron ciertas comunidades de la España revolucionaria. Esto no quiere decir que no ocupemos y descartemos la ciencia de plano, muy por el contrario fuera de los ribetes deterministas y mecanicistas que fueron ocupados por algunos socialistas el siglo pasado, la ciencia sigue siendo una herramienta válida, siempre y cuando no se le arroje una exactitud casi profética. Es por todo lo mencionado en este documento, en parte la historia misma del anarquismo organizado, y nuestras propias conclusiones que reafirmamos nuestro carácter de clase y materialista. Un último punto a mencionar acerca de la organización política, es que se toma muy enserio lo que significa ser un militante y un hermano dentro de la organización, su seguridad y exposición (de acuerdo a los periodos), las capacidades de cada cual y su progresiva nivelación y además un punto que parece caer en contradicción con nuestros principios libertarios, la disciplina o autodisciplina. Bakunin muy bien lo describió en palabras sencillas: “de la seguridad [y todo lo que contenga la organización] de cada uno de sus miembros, debe estar sometida a una fuerte disciplina, que no es, por lo demás, otra cosa que el resumen y el mero resultado del compromiso recíproco que todos los miembros han contraído entre sí.” Este ha sido el espíritu que ha movido nuestras ideas, y no un libertinaje burgués como muchos anarquistas individualistas, marxistas y enemigos han querido darle al anarquismo organizado que profesamos. 9 Para finalizar sostenemos que, la vigencia del especifismo, más allá de cual sea la vertiente, sigue estando a la orden del día. En toda Latinoamérica hace aproximadamente un par de décadas, se han estado creando organizaciones anarquistas. Particularmente en Chile estos últimos años han tenido un repunte cuantitativo y cualitativo, esto debido a las nuevas generaciones que tiene experiencias en luchas populares y además la crítica y propuesta al Estado y el Capital, como también por la experiencia militante que se ha recogido desde los inicios del CUAC hace ya más de 10 años7,. Si bien las condiciones han cambiado en 2 siglos, es simplemente algo de forma, puesto que, aún seguimos siendo explotados por el capitalismo y oprimidos por la jerarquía y el Estado. Por lo cual la necesidad y vigencia de la organización específica es tan válida hoy como lo fue en el seno de la primera internacional, con la Alianza Democracia Socialista8. 7 Algo no menor, es la apertura y crecimiento que ha tenido la lectura libertaria, hace 10 años era casi imposible encontrar documentos internos, libros, pasquines e historia. Hoy la Internet, compañeros que mantienen editoriales, bibliotecas y otro sin fin de otros medios se han abierto a la socialización del conocimiento en este aspecto. 8 Primera organización política anarquista. 10