ISRAEL EN TIEMPOS DE JESÚS 1. Economía: a) La agricultura y ganadería: Los cultivos principales eran: el trigo, la cebada, los higos, el olivo y la viña. Israel en el siglo I era un país bastante rico en el aspecto agrícola para satisfacer sus necesidades, a pesar de su población relativamente densa para aquella época: 600.000 habitantes para 20.000 Km2. b) La industria: En este ámbito sobresalía la pesca, la construcción, la fabricación textil, la industria de cuero y la alfarería. En Jerusalén se concentra toda una artesanía de lujo (perfumes para el templo, "souvenirs" para los peregrinos). c) El comercio: Se centraba especialmente en el templo, en las autoridades romanas y en los ricos de Israel. 2. Las Instituciones Religiosas Toda la existencia judía, en el ámbito económico, social y político, estaba marcada por la religión. Algunas instituciones relacionadas con la religión tenían particular interés en la época de Jesús. a) El templo: El templo era en todos los aspectos el centro de Israel. En el templo se realiza el culto oficial que consiste esencialmente en quemar animales enteros (holocaustos) o al menos sus vísceras y su grasa (sacrificios por el pecado). b) La sinagoga: Era la institución central de la vida de las aldeas y pequeños pueblos; allí se forjaba la mentalidad y la piedad de los judíos. En la época de Jesús cada comunidad judía tenía su sinagoga. El desarrollo del culto se centraba en la oración y en la meditación de las escrituras. Las fiestas Había en Israel tres fiestas que tenían un papel muy importante; eran las tres fiestas de peregrinación a Jerusalén que duraban una semana cada una: pascua, pentecostés y de las tiendas. Pascua: celebraba el "aniversario" de los grandes acontecimientos judíos: la creación del mundo, la realización de la promesa de descendencia a Abrahán, la liberación de Egipto y la (futura) liberación mesiánica. Pentecostés: Esta fiesta empezaba 50 días después de Pascua. Con su celebración se relaciona la alianza del Sinaí, era la fiesta de la renovación de la alianza. Las tiendas: Recordaba que Dios hizo habitar a los hijos de Israel bajo tiendas a su salida de Egipto. Para celebrarla, cada familia tenía que construir en los alrededores de Jerusalén una choza de ramaje en donde vivir durante una semana. El Sábado Es el día de fiesta semanal dedicado a Dios. Se cree que su origen parte de dos instituciones, distintas en su origen, pero muy antiguas las dos: un día de fiesta semanal con valor religioso: la creación (Dios el séptimo día descansó), y un día de paro obligado con valor humanitario y social (el hombre, especialmente el esclavo, necesita descansar). La práctica del sábado se fue codificando con el tiempo, tendiendo a veces a convertirse en una especie de colección de normas que esclavizaba al hombre. 3. La sociedad judía En la sociedad judía del primer siglo se pueden apreciar las siguientes categorías sociales: a) El clero: El clero estaba jerarquizado. 1) Sumo Sacerdote: era el responsable de la ley y del templo, presidía el Sanedrín, gozaba de una gran dignidad y tenía una situación económica confortable. Se mostraba sumiso ante el poder romano. Junto al sumo sacerdote estaban los jefes de los sacerdotes. Todos estos cargos los ocupaban miembros de su familia o amigos del sumo sacerdote. 2) Sacerdotes: eran unos 7.000 y se encargaban de ofrecer los sacrificios en el templo. Estaban divididos en 24 clases, que iban sirviendo por turno cada semana. Esta categoría del clero era pobre. Como el templo no les brindaba lo suficiente para sobrevivir, ellos se buscaban un oficio: carpinteros, talladores de piedra, comerciantes, carniceros... Algunos seguían estudios y se hacían escribas. El sacerdocio era hereditario; se transmitía a los hijos. 3) Los Levitas, verdaderos trabajadores del templo: eran unos 10.000, divididos también en 24 clases. Para sobrevivir tenían que ejercer los oficios más variados. Había dos grupos: los músicos (para la animación de la liturgia), y los porteros (para la limpieza y control del templo). b) Grupos religiosos y políticos: 1) Los saduceos: Era un grupo dirigido por los sumos sacerdotes, compuesto por la aristocracia laica y sacerdotal: latifundistas, comerciantes y mercaderes. Colaboraban con Roma para no perder la posición. Su ética consistía en pasarlo bien. Interpretaban rígidamente la ley. Eran fanáticos del sábado. Conservadores en lo religioso y en lo político. 2) Los escribas y fariseos: Eran un grupo de laicos que se consideraban "separados" de la masa del pueblo. También llamados doctores de la Ley. Eran fanáticos de la ley; de la observancia del sábado, del ayuno, de la pureza legal y ritual. Creían en el mérito ante Dios y para conseguirlo realizaban: ayunos, limosnas y oraciones. 3) Los esenios: Eran monjes que se retiraban fuera de la sociedad y del sistema vigente. Se consideraban santos y puros, elegidos de Dios. Muchos de ellos vivían en soledad o en el desierto. Se preparaban para la guerra santa. Eran nacionalistas y fanáticos de la ley. 4) Los zelotes: Eran el ala más radical de los fariseos. Aspiraban a la instauración del Reino de Dios, concebido como poder terreno (liberación del dominio extranjero y dominio del pueblo judío sobre los demás). El Mesías lo concebían como un rey que instauraría su reino definitivo. c) El pueblo: Estaba formado por grupos socialmente muy variados: - Los Senadores o Ancianos: forman la aristocracia laica de Israel; eran pocos pero con grande poder económico. Estaban relacionados evidentemente con el templo y sus dirigentes, los sumos sacerdotes. También estaban ligados al poder romano. - La clase media: formada por comerciantes y artesanos. Los trabajos de los artesanos, panaderos, sastres, perfumistas... parece ser que estaban muy bien pagados. Algunos se especializan en recuerdos para los peregrinos o en objetos de lujo, que solían venderse abundantemente durante las fiestas. Estaban además los encargados de acoger y albergar a los peregrinos: posadas, casas de comida, transporte y venta de las cosas necesarias. - El pueblo pobre: se puede distinguir algunas categorías. * * * * Los pequeños propietarios de tierras que desarrollan una economía de subsistencia. Los artesanos menores: ordinariamente despreciados: curtidores, tejedores, pastores. Los obreros y jornaleros: trabajadores con pocos ingresos. Los necesitados: mendigos, enfermos, esclavos. 6. La familia judía: a) matrimonio: Hasta los doce años, el niño es menor de edad y no puede tomar ninguna decisión que le comprometa de verdad. A partir de entonces, hay que distinguir entre el chico y la chica. Al cumplir los doce años, el chico se convierte en adulto, está obligado a cumplir la ley. Tiene que empezar a trabajar. Se considera que debe casarse entre los 16 y los 22 años. La hija, en los 12 años, es una adolescente que el padre tiene que casar. Durante su adolescencia, es el padre quien decide. En el matrimonio el acto esencial es el contrato matrimonial denominado desposorios. Este contrato es un acto oficial que estipula: preparativos, dotes, prendas, patrimonio, eventuales herencias y otros detalles que resulten importantes. Los esponsales no cambian en nada la vida de los futuros esposos, que siguen viviendo con su familia como antes; El tiempo de los desposorios dura cerca de un año. El contrato matrimonial se sella definitivamente en la boda. El matrimonio se rompe con la muerte de uno de los cónyuges o con el repudio (divorcio). El marido puede repudiar a su mujer y no viceversa. b) la situación de la mujer: En los ambientes judíos se afirma la condición de inferioridad de las mujeres con relación a los hombres. Se dice que el sitio de la mujer es la casa, ocupándose de los hijos y del hogar. No tiene nada que hacer fuera de la casa y, si se ve obligada a salir, tiene que guardar el anonimato más completo y cubrirse por tanto con un velo. c) Los niños y la educación: El hijo era absolutamente esencial para el judío: era la garantía de que el pueblo elegido seguiría existiendo, el signo de la alianza y por tanto la prueba de la bendición divina. No tener hijos era una verdadera maldición (de la que sólo era responsable la mujer). Se trataba, por tanto, de tener el mayor número posible de hijos y se exaltaba mucho a las familias numerosas. - El nacimiento y sus ritos: El niño solía nacer en casa con la ayuda de una partera. A los ocho días de nacer, el niño varón era circuncidado. Lo hacía el padre o un especialista en la propia casa. La educación no se refiere solo al aprendizaje de un oficio sino que consiste sobre todo en enseñar la Torah, la Ley, a los niños (muy poco a las niñas). Pero como muchos padres no pueden educarles por sí mismos, se inventa la escuela adonde van sólo los niños. La escuela suele ser la propia sinagoga. 4. El gran Sanedrín Era el órgano central del poder teocrático (divino). Estaba compuesto por 71 miembros: el sumo sacerdote, los jefes de los sacerdotes del templo. Participaban en él además los ancianos o senadores y los escribas. En conjunto, en el Sanedrín estaban representados los intereses de la aristocracia y de la pequeña burguesía. Se dedicaba a recaudar impuestos religiosos y civiles, a administrar el templo, a interpretar la ley a juzgar causas extraordinarias, y a organizar todo lo relacionado con el templo y el culto de la religión. Los miembros del Sanedrín reconocían la sumisión a Roma. La autoridad romana podía convocar el Sanedrín, controlar sus leyes, decretos y declaraciones, nombrar y deponer a su antojo al sumo sacerdote.