Ministerio de Educación, Cultura y Deporte BEM-TE-LI I CONCURSO DE MICRORRELATOS EN ESPAÑOL 1/2016 © Consejería de Educación de la Embajada de España en Brasil - 2016 I CONCURSO DE MICRORRELATOS EN ESPAÑOL “BEM-TE-LI” RELATOS PREMIADOS Y FINALISTAS 2016 Catálogo de publicaciones del Ministerio: www.mecd.gob.es Catálogo general de publicaciones oficiales: www.publicacionesoficiales.boe.es I Concurso de Microrrelatos “Bem-te-li” I. Embajada de España en Brasil – Consejería de Educación, ed. II. Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de España MINISTERIO DE EDUCACIÓN, CULTURA Y DEPORTE Subsecretaría Subdirección General de Cooperación Internacional Edita: © SECRETARÍA GENERAL TÉCNICA Subdirección General de Documentación y Publicaciones Edición: Abril de 2016 NIPO: 030-16-432-9 (en línea) Diseño: María Luisa Castilla Saiz Fotografías: Portada y página 3: Alteración de “Pitangus sulphuratus 01” (2011), fotografía de Rodrigo Fernández bajo licencia Creative Commons Genérica de Atribución/Compartir-Igual 3.0. Borde de página: Alteración de “Filhotão bem-te-vi” (2006), fotografía de José Reynaldo da Fonseca bajo licencia Creative Commons Genérica de Atribución/Compartir-Igual 3.0. Página 5: Gyula Basch, “Sad Woman” (fecha desconocida). Dominio público. Página 6: Pierre-Yves Beaudouin, “2015 European Artistic Gymnastics Championships - Pommel horse - Matvei Petrov 04” (2015). Bajo licencia Creative Commons Genérica de Atribución/Compartir-Igual 4.0. Página 7: Stef48, “Blue eye Stephen” (2008). Bajo licencia Creative Commons Genérica de Atribución/Compartir-Igual 2.0. Página 8: Alteraciòn de “Tree and Grave” (2009), fotografía de Craig Tuck bajo licencia Creative Commons Genérica de Atribución/Compartir-Igual 2.0. Página 9: The Photographer, “Old woman selling” (2013). Bajo licencia Creative Commons Dominio Público. Página 10: Autor desconocido, “Vendanges en Bourgogne - côtes de Beaune” (2006). Bajo licencia Creative Commons Genérica de Atribución/Compartir-Igual 3.0. Página 11: Keisai Eisen, “Pareja junto a cuadro de ciruelo” (c. 1825). Dominio público. Página 12: Autor desconocido, “Relojes de pared” (2014), en pixabay.com. Bajo licencia Creative Commons Dominio Público. Página 13: Ivon19, “Feto 30 semanas” (2010). Bajo licencia Creative Commons Genérica de Atribución/Compartir-Igual 4.0. Página 14: Luis Miguel Bugallo Sánchez, “Formiga - Quintana Roo - México-3” (2010). Bajo licencia Creative Commons Genérica de Atribución/Compartir-Igual 3.0. Contraportada: Alteración de “Bem-te-vi” (2007), fotografía de Dario Sanches bajo licencia Creative Commons Genérica de Atribución/Compartir-Igual 2.0. I CONCURSO DE MICRORRELATOS EN ESPAÑOL “BEM-TE-LI” CONSEJO DE REDACCIÓN Ana Beatriz Pérez Cabrera Mafra Barreto Instituto Federal Rio Grande do Norte Antoni Lluch Andrés Consejería de Educación. Embajada de España Carmen Sáinz Madrazo Consejería de Educación. Embajada de España Janaína Soares Alves Universidad de Brasilia (UNB) José María Durán Gómez Consejería de Educación. Embajada de España Juan Fernández García Consejería de Educación. Embajada de España María Luisa Castilla Saiz Consejería de Educación. Embajada de España DIRECTOR Álvaro Martínez-Cachero Laseca Consejero de Educación de la Embajada de España Normas para la presentación de originales CONCURSO DE MICRORRELATOS EN ESPAÑOL "BEM-TE-LI” El concurso de microrrelatos en español “Bem-te-li” surge con la idea de fomentar y divulgar la lengua española a través de relatos breves y con un tema que irá cambiando a lo largo de las diferentes ediciones. Está destinado a cualquier persona de nacionalidad brasileña que tenga conocimientos en lengua española y será gestionado por los Centros de Recursos Didácticos de Español de la Consejería de Educación de España en Brasil, en adelante, CRDE en Belém (PA), Cuiabá (MT), Brasilia (DF), Natal (RN) y Salvador (BA), y abarcará todos los estados brasileños. La convocatoria se regirá por las siguientes bases: BASES 1. Pueden concurrir a este certamen todos los autores que tengan un conocimiento alto de español, siempre que esta no sea su lengua materna, y que posean nacionalidad brasileña. 2. Los trabajos, que no podrán haber sido premiados con anterioridad, se presentarán en español, y han de ser originales e inéditos. No se aceptarán traducciones. El tema será libre, pero todos comenzarán con la siguiente frase: “En aquella ciudad del sur, nadie imaginaba…”. 3. La extensión de los originales será de un máximo de 15 líneas con tipo de letra Arial de 12 puntos. Solo se podrá presentar un trabajo por autor. 4. Los trabajos deberán incluir: Título. Nombre del autor. Ciudad de origen. Profesión. 5. La fecha límite de recepción de originales será el 15 de marzo de 2016. 6. El jurado, compuesto por Ana Beatriz Pérez Cabrera Mafra Barreto, Carmen Sáinz Madrazo, Janaína Soares Alves, José María Durán Gómez, Juan Fernández García y Marisa Castilla Saiz, tendrá además de las facultades normales de otorgar o declarar desierto el premio y emitir el fallo, las de interpretar las presentes bases. Asimismo, el jurado será soberano a la hora de interpretar o cubrir los diferentes supuestos que no estén recogidos en estas bases. 7. La Consejería de Educación se reserva la facultad de adoptar las medidas que estime oportunas para garantizar la autenticidad de los trabajos presentados. 8. Los premios del I Concurso de Microrrelatos “Bem-te-li” en español serán los siguientes: 1º Premio. Un único primer premio consistente en un billete de avión (i/v) e inscripción en el XXV Seminario de Dificultades en São Paulo, convocatoria de 2017, un lote de libros en español y la publicación de la obra, en formato pdf, en la página web de la Consejería de Educación. 2º Premio. Un lote de libros en español y la publicación de la obra, en formato pdf, en la página web de la Consejería de Educación. 3º Premio. Un lote de libros en español y la publicación de la obra, en formato pdf, en la página web de la Consejería de Educación. 9. El fallo del jurado se dará a conocer el día 18 de abril en la web de la Consejería, http://www.mecd.gob.es/brasil/. La fecha y lugar para la entrega de los premios será determinada por cada CRDE y se hará pública en el momento del fallo de los trabajos premiados. 10. Todos los trabajos que no se ajusten a estas bases quedarán excluidos del concurso. Se procederá de igual forma con los trabajos que presenten un número considerable de errores gramaticales, léxicos y/o sintácticos. 11. La Consejería dispondrá de las obras premiadas para su posible publicación en la forma y manera que crea oportuno. Por otro lado, aquellas obras (premiadas o no) que por su calidad o interés puedan ser recomendadas por el jurado, se publicarían previo permiso de sus autores. Los autores cederán sus derechos a la Consejería de Educación para tal fin. 12. La presentación de obras a este concurso supone por parte de los autores la aceptación de estas bases. Los trabajos serán enviados, en documento adjunto, a la siguiente dirección de correo electrónico. En el asunto se escribirá la siguiente frase: Concurso de Microrrelatos en Español “Bem-te-li” y además se adjuntará igualmente copia del documento de identidad (RG) o comprobante de nacionalidad brasileña: [email protected] Embajada de España en Brasil Consejería de Educación SES, Avenida das Nações, Quadra 811, Lote 44, Brasília – DF CEP: 70429-900, Brasil La Consejería de Educación es la propietaria de todos los derechos de edición. A este efecto los autores de los microrrelatos cederán sus derechos al MECD español. Ninguna parte del I Concurso de Microrrelatos en español “Bem-te-li” podrá ser reproducida o almacenada sin el permiso expreso de la Consejería de Educación. La publicación de artículos en este certamen no será remunerada. El Consejo de Redacción Índice PRIMER PREMIO A la orilla del río Dulce Andrigueto 12 SEGUNDO PREMIO Microrrelato en forma João Paulo Moraes 13 TERCER PREMIO Ojos inocentes: manos culpables Andréia de Fátima Pinsan 14 FINALISTAS La ciudad y las semillas Fernando Cabral 15 Una visita inusitada Ieda Amorim 16 Ciudad de la salvación Jaime Lusquinhos 17 Akai ito Luana Aparecida Silva Borges 18 Los relojes sin tiempo Maíra Brás Costa 19 Después del sufrimiento, el amor verdadero Maria Laura Alves Freitas 20 La hormiguita Silvana Aparecida Teixeira 21 PRIMER PREMIO A la orilla del río Dulce Andrigueto En aquella ciudad del sur, nadie imaginaba la razón por la cual la joven, recién llegada al pueblo, nunca sonreía. Su mirada triste no disminuía la belleza angelical de su rostro. Casi no hablaba, casi no se relacionaba con la vecindad. Solía acercarse al río donde permanecía por largo rato, escuchando el ruido del agua, el canto de los pájaros, el movimiento de las hojas en la cima de los árboles. Vivía en una casa cuyas ventanas estaban siempre cerradas. Su única compañía era un perro que la acompañaba en sus raros paseos a la orilla del río. A lo largo de aquel año la gente se acostumbró a la presencia silenciosa de ambos hasta que un día dejaron de ser vistos. Los buscaron por el camino que solían recorrer, pero no había señal de ellos. Se acercaron a la casa, pero esta permanecía cerrada. Cuando consiguieron entrar, los encontraron tumbados en el suelo, muertos. La joven sostenía en sus manos el retrato de un bebé, sonriente, jugando a la orilla de un río, y al lado, un artículo de periódico ya amarillecido donde se leía acerca de la muerte de un bebé que, estando en compañía de su mamá, fue llevado por la fuerza de las aguas. 12 SEGUNDO PREMIO Microrrelato en forma João Paulo Moraes En aquella ciudad del sur, nadie imaginaba que yo escribiría un microrrelato. En mi casa, con una simple hoja y un bolígrafo bajo una pequeña claridad de la lámpara de mi escritorio, empecé a pensar qué podría escribir. Parecía que tenía un desafío frente a mí. Primero, hice flexiones con las manos. No necesité subirme a nada, porque tenía que estar sentado. Entonces, me senté en una silla, doblé las rodillas, estiré los brazos y cogí el lápiz con la mano izquierda. Porque soy zurdo. Pero no conseguí pensar en nada. Dejé el lápiz en la mesa. En seguida, doblé los codos y puse mis dos manos juntas detrás de la cabeza. La espalda apoyada en la silla. Me levanté, con las manos aún en la cabeza. Caminé por la sala. Me senté otra vez. Estiré las manos. Puse una mano en la cabeza y doblé los dedos de esa mano. Con la otra mano cogí el lápiz de nuevo. Ahora sí me parecía que empezaba a pensar. Pero no salía nada. Estiré las piernas. Miré la hoja. Con este microrrelato. Que yo estaba escribiendo. Sin pensar. 13 TERCER PREMIO Ojos inocentes: manos culpables Andréia de Fátima Pinsan En aquella ciudad del sur, nadie imaginaba que el dueño de los más dulces ojos azules guardaba un pasado de tanto dolor y llevaba en las manos la sangre derramada de tantos inocentes. No se sospechaba nada de él. Hacía tantos años que vivía allí que para los vecinos era parte de la comunidad. Estaban tan acostumbrados a su presencia que se mezclaba con el paisaje de aquella estrecha calle de piedras, flanqueada por árboles que, en tiempos de primavera, le traían los más bellos colores a la vecindad. Fue en una mañana común, con el aire oliendo a café mientras algunas casas se despertaban, cuando aquellos ojos de cielo no se abrieron. La luz los había abandonado y el pobre viejito no se despertó. Los vecinos, acostumbrados a verlo temprano todos los días recibiendo los primeros rayos del sol, lo extrañaron. Pero lo más extraño fue lo que ellos encontraron al entrar en la casa de ese que, durante tantos años, les pareció ser tan inocente. 14 FINALISTAS La ciudad y las semillas Fernando Cabral En aquella ciudad del sur, nadie imaginaba que pudiera morir. De alguna manera rara lo veían como si fuera inmortal. No por ser más importante o merecedor de la dádiva de la inmortalidad. Al contrario, fue siempre un tipo normalísimo que en nada se distinguía de los demás. Hacía mucho se encontraba viejo y enfermo, de modo que no había nadie en el mundo que se acordara de los tiempos de su juventud. Aun así, todos quedaron sorprendidos. Murió rodeado de la más completa normalidad, porque la muerte llega para todos, sin ningún tipo de deferencia. Aunque todos lo habían conocido, no tenía a nadie. Ni padres ni hermanos. Ni hijos ni amantes. Se puede decir, incluso, que nadie lamentó su pérdida. Es lo que les pasa a los que vivieron mucho más de ciento cincuenta años, como se decía. Pero, en estos casos, suelen pasar milagros. Y de la vulgaridad de su sepulcro comenzaron a brotar ramas. Y de las ramas, frutos. De las semillas de los frutos, nació una gran variedad de animales. Hasta un hombre y una mujer nacieron. Ellos construyeron una capilla sobre el sepulcro, y esta se convirtió en lugar de peregrinación. Al fin, aquella ciudad del sur tenía su norte. 15 Una visita inusitada Ieda Amorim En aquella ciudad del sur, nadie imaginaba que algo así pudiera ocurrir. En ese sitio donde las personas parecían no tener tiempo, una anciana cambió la vida de todos. Cuando la vi por primera vez estaba en la plaza próxima a mi oficina. Me miró con sus ojos tranquilos y sonrió como si me conociera. Yo llevaba retraso, así que entré en el edificio deprisa. Había mucho que hacer y no tenía tiempo que perder. Dejé la oficina a las diez de la noche. Y la vi por segunda vez. En el mismo sitio. Me pareció que la conocía. Su rostro me era familiar. Me acerqué y le pregunté su nombre. Algunas personas que pasaban también se acercaron. – Me llamo Ellen, como tú – respondió con una mirada misteriosa. ¿Cómo podría saber mi nombre? El edificio la fascinaba, sonrió triste. – Gasté mi juventud en una oficina. Siempre trabajando. Siempre sola. Un consejo: La soledad no es el camino de la felicidad. – Se despidió y partió, desapareciendo delante de nuestros ojos. Más tarde percibí de dónde la conocía. Del espejo de mi tocador. 16 Ciudad de la salvación1 Jaime Lusquinhos En aquella ciudad del Sur, nadie imaginaba que aquel muchacho bajo, delgado, de ojos verdes, pelo negro y apariencia de pueblo, estaba allí, de hecho, huyendo de su pasado, o mejor, de su familia. Su padre era un hombre muy violento y les pegaba a todos en casa. Bebía demasiado y tenía muy mal carácter. Todos en su pueblo de origen temían a don José. Hasta el cura de la parroquia, que no entraba en la taberna cuando oía su voz, siempre estridente, y sus palabras, poco convencionales, por decirlo de alguna manera. El muchacho estaba haciéndose hombre y cada día aumentaban sus ganas de contestarle a su padre o, siendo más sincero, de pegarle también. Su trabajo era muy duro, pero le proporcionaba muchos músculos, a pesar de su apariencia delgada. Aquellas eran jornadas intensas de carga de los carros con las uvas cosechadas en las haciendas y cambio frecuente de las ruedas rotas por los baches distribuidos a lo largo del camino hasta las bodegas para la producción del vino. Había recibido una invitación por parte de su primo para emigrar para América para trabajar en la fábrica de jabón de su tío, pero aquel viaje nunca se produciría. Antes, un navío había atracado en una ciudad cerca de su pueblo y sus ganas de irse se convirtieron en una oportunidad de realizar un sueño, librarse de un desenlace inexorable que su conciencia no le dejaría jamás olvidar... 1 Nota de la edición: Debido al nuevo formato para su publicación, algunos textos podrían superar el número de líneas exigidas en las bases del concurso. 17 Akai ito Luana Aparecida Silva Borges En aquella ciudad del sur, nadie imaginaba que sus destinos ya estaban marcados, tejidos y atados por un hilo rojo invisible. La primera vez que los jóvenes se encontraron fue en el momento del gran imperio. Él, de familia noble; ella, una pobre sirviente. Un amor imposible, digno de Romeo y Julieta, con un final igual de trágico. La segunda vez que se conocieron ella era una dama predestinada a un noble; él, un vago. Subyugados por la sociedad, una vez más, no pudieron amarse. La tercera vez que se encontraron en el tiempo fue en la escuela secundaria. Se enamoraron y cultivaron ese amor hasta la vejez y compartieron juntos sus últimos suspiros. En sus vidas futuras todo se repitió: los jóvenes se conocieron y se enamoraron. En algunas, tenían un final feliz; en otras, no tanto. Y después de tantos encuentros, llegaron a la conclusión de que aquellos que están destinados a conocerse están conectados por un hilo invisible, sin importar la hora, el lugar o la circunstancia: el cable puede estirarse o enredarse, pero nunca romperse. 18 Los relojes sin tiempo Maíra Brás Costa En aquella ciudad del sur, nadie imaginaba que todos los relojes, desde el más pequeño hasta el gigantesco reloj de la plaza central, quedarían inservibles luego de que un meteorito del tamaño de un balón de futbol cayera en la avenida principal, ocasionando no solo problemas de tránsito, sino también un retraso general a todos sus habitantes. El llamado “día de la caída” fue una jornada atípica para todos los urbanitas. Los ciudadanos, presos del terror por la desorganización de sus reuniones y las horas de apertura y cierre de los comercios, no daban abasto para realizar las tareas más sencillas, “simplemente no puedo saber a qué hora termina”, decían unos, “imposible discernir si está amaneciendo o está anocheciendo, no puedo ver la hora en mi reloj”, se quejaban los otros. Lo curioso de esta ciudad es que no había relojeros, por ende, no tenían personal capacitado para reparar los preciados objetos. Fue así como gradualmente la ciudad se quedó sin tiempo y sus habitantes desaparecieron en el transcurrir de las horas. 19 Después del sufrimiento, el amor verdadero Maria Laura Alves Freitas En aquella ciudad del sur, nadie imaginaba lo que aquella dulce, pequeña y sonriente niña había pasado en los últimos días. Se quedaba sola en aquel húmedo, oscuro, ruidoso y pequeño lugar. Vivir allí no le gustaba y todos los días se preguntaba por qué tenía que quedarse tanto tiempo allí. Sabía que estaba sola, pero no se sentía así: tenía siempre la sensación de que alguien la protegía y la quería mucho. Un día fue descubierta y libertada de aquella oscuridad por una luz y por unas personas que estaban fuera. Cuando vio aquella mujer acostada en la cama, supo lo que era el amor: era su madre que la amaba y la quería desde que se entendió como persona. Y ese fue el día de su nacimiento. 20 La hormiguita Silvana Aparecida Teixeira En aquella ciudad del sur, nadie imaginaba que la hormiguita, por entre obstáculos, parándose una y otra vez, seguía decidida, marchando como si supiera su camino, su reto y su destino. Camino heredado con el reto de proveer el nido y procrear, cumpliendo con su destino de servir. Pero, sin muchos azúcares, en mi cabeza he decidido que ella se había extraviado de su hormiguero, de su tierra natal, del orden siempre establecido y obedecido. A veces me parecía que buscaba con desesperación acordarse de la antigua huella de siempre el mismo nido. Quise que se liberara, y con cuidado me acerqué a ella, sin tocarla, y vi sus patitas como si fueran dueñas del suelo, del mundo, de la vida. Me reí de la coincidencia. ¿Una reina sin castillo ni corona? Vi que pisaba con brutal fuerza y determinación, sin miedo a desviarse del rumbo desconocido. Vi que andaba más y más de un lado a otro, a veces en círculos, incierta, con sus sensores segregando sus búsquedas. La seguí con mi mirada hasta que se perdió en la noche desértica y sin luna. ¿Qué camino se la ha llevado? Incógnita que se me erige como un hormiguero de fantasías. 21 En 2016 hemos arrancado con el primer certamen de relato corto denominado “I Concurso de Microrrelatos en Español Bem-te-li”, en homenaje a una pequeña ave, el bem-te-vi, tan característica por su canto llamativo y delator, y tan presente en cualquier parque o jardín de Brasil. La iniciativa de crear un concurso que llegue a todos los rincones de Brasil, como esta ave, pretende convertirse en una publicación periódica de referencia en la que cualquier persona de nacionalidad brasileña con amplios conocimientos en español pueda explayar su talento literario en breves y sutiles líneas. Un gran equipo de Asesores Técnicos de la Consejería de Educación de la Embajada de España en Brasil se encarga de dar forma al proyecto, asume el papel de divulgador de la iniciativa y forma parte, junto a colaboradores brasileños, del jurado que emitirá su fallo tras un exhaustivo estudio de las obras recibidas. Con este proyecto, tenemos la seguridad de que la lengua española sigue su ritmo pausado y constante para formar parte del bagaje lingüístico de miles de personas en este inmenso país que abraza lo hispano por todas sus entrañas. Ya lo hacen ríos y florestas desde el principio de los tiempos y la lengua española también sigue su curso. Por tanto, auguramos a esta reciente publicación un caudal de éxito, largo y extenso como las aguas amazónicas.