COMPARACIÓN ENTRE COMPORTAMIENTO PASIVO, ASERTIVO Y AGRESIVO PASIVO: Características: Permite a otros elegir por él. Poco sincero, inhibido, auto negativo, indirecto. En situaciones de ganapierde, siempre pierde. Si logra lo que desea es indirectamente Sentimientos en la relación: Angustiado, desvalido sin ninguna importancia. Más tarde: enfadado con uno mismo y con los demás. Otros sentimientos en la relación: Culpable o superior. Frustrado con uno mismo. Otras visiones de uno mismo en la relación: Poco respetado. Desconfianza. No saber la posición que ocupa. No se le tiene en cuenta. Resultado: Otros consiguen sus objetivos a costa de él. Se violan sus derechos. Ideas básicas de esa forma de pensar: No debo molestar, ni desagradar a nadie excepto a mi mismo. ASERTIVO: Características: Decide por sí mismo. Sincero, pero cortés. Se respeta a sí mismo, expresa lo que siente de forma directa, clara. Convierte situaciones de gana-pierde en gana-gana. Sentimientos en la relación: Confiado, respetuoso consigo mismo, orientado al objetivo, estimado. Luego: autorrealizado. Otros sentimientos en la relación: Estimado, respetado. Otras visiones de uno mismo en la relación: Respetado, lleno de confianza. Sabe donde está su puesto. Resultado: Se consigue todo gracias a negociación adecuada. Se respetan sus derechos y los de todos. Ideas básicas de esa forma de pensar: Tengo la responsabilidad de defender mis derechos. Respeto los derechos de los demás, pero no siempre su conducta. © Confidencial Psicom@il 2011 AGRESIVO: Características: Decide por los demás. Sincero, sin tacto. Directo, expresa lo que siente, se alaba a sí mismo. Mandón. En situaciones ganapierde, gana. Sentimientos en la relación: Superior, riguroso, controlado dispuesto al perdón. Más tarde, posiblemente culpable. Otros sentimientos en la relación: Humillado, resentido, a la defensiva, ofendido. Otras visiones de uno mismo en la relación: Vengativo, colérico, desconfiado, temeroso. Resultado: Consigue sus objetivos a costa de los demás. Pisoteados los derechos de los demás. Los propios guardados celosamente. Ideas básicas de esa forma de pensar: Debo hundir a los demás para protegerme a mí mismo.