Batalha - Europamundo

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Batalha
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Panorám
Llegar a Batalha es llegar al impresionante Monasterio de Santa María de la Victoria. No hay Batalha sin Monasterio, fue su origen, su continuidad y
su razón de ser durante siglos. La historia y la visita
de Batalha son la historia y la visita del Monasterio.
Se edificó, para conmemorar una victoriosa batalla y
cumplir una promesa a la Virgen, en un lugar donde
no había nada y donde surgió una nueva población.
No estamos únicamente ante una pieza maestra de
la arquitectura portuguesa, sino también ante un
símbolo nacional de la independencia frente a España. La victoria en la gran batalla de Aljubarrota
marcó el carácter y el orgullo portugués y supuso la
supervivencia de Portugal como país.
Historia
 Información general
POBLACIÓN: 7.500 Habitantes (Batalhenses)
Altitud: 120 m
Región: Centro, distrito de Leiria
Fiesta local: 14 y 15 de Agosto. Conmemoración
de la Batalla de Aljubarrota y Asunción de la Virgen.
El origen del Monasterio de Nuestra Señora de la
Victoria está en la victoria de los portugueses sobre
los castellanos en la batalla de Aljubarrota el 14
de agosto de 1385. Sin embargo para entender la
importancia de ese momento en la historia portuguesa hay que ir un poco más atrás. En 1383 muere
Fernando I de Portugal sin un heredero varón lo que
inicia un periodo de crisis con luchas e intrigas para
obtener el trono por parte de múltiples pretendientes. Uno de ellos es Juan I de Castilla, casado con
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la hija del difunto rey. Esta unión dinástica significaba la perdida de la independencia para Portugal.
Otros aspirantes son portugueses pero procedentes de líneas ilegítimas como João, Maestre
de la Orden de Avis y hermanastro de Fernando I
que al contar con más apoyos en Portugal fue aclamado rey por las cortes reunidas en Coímbra. En
respuesta el rey de Castilla invade Portugal con
un gran ejército, además de castellanos, hay caballería francesa y ballesteros genoveses. Joao I
y su condestable Nuno Alvares Pereira les salen al paso para evitar que lleguen hasta Lisboa. El
enorme ejército castellano avanzaba con lentitud y
da tiempo suficiente a los portugueses para prepararse y escoger el terreno. La elección del campo
de batalla en una pequeña colina conocida hoy
como San Jorge y rodeada de riachuelos cerca de
Batalha
Aljubarrota fue decisiva para la victoria. Los castellanos llegaron cansados tras un caluroso día de
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marcha, era agosto. La diferencia numérica entre
los ejércitos es muy grande, son únicamente 6500
portugueses (entre los que se encontraban también
arqueros ingleses) frente a 30.000 castellanos. El
enfrentamiento tuvo lugar al final de la tarde del
14 de agosto y contra todo pronóstico vencieron
los portugueses. Los castellanos sufrieron una gran
derrota, algunas fuentes hablan de 9000 muertos.
La victoria portuguesa puso fin a la crisis y consolida al Joao I como rey de Portugal, primero de la
dinastía de Avis que reinó durante 200 años.
Para conmemorar el hecho Joao I manda construir el Monasterio de Santa María de la Victoria. Cumple así también la promesa que hizo a
la Virgen antes de entrar en batalla y agradece el
auxilio divino pues se consideró un milagro vencer
en un enfrentamiento tan desigual. Sobre la elección del terreno para la construcción hay una
leyenda que dice que el rey arrojó su lanza y se edificó donde esta se clavó. Otras versiones dicen que
fue su lugarteniente Nuno Alvares Pereira quien
lanzó su espada. En cualquier caso fue un gran lanzamiento si se tiene en cuenta que Batalha está a
más de cinco kilómetros del campo de batalla.
La construcción se inicia en 1388 y se prolonga
durante casi 200 años bajo el reinado de siete
reyes y numerosos maestros de obra. Supuso una
extraordinaria movilización de recursos tanto materiales como humanos y la introducción de técnicas
y estilos nuevos y desconocidos en Portugal hasta
entonces. Primero se construyó un pequeño templo
llamado Santa María La Velha que sirvió de iglesia
y cementerio a los primeros pobladores que eran
los maestros y obreros. Luego se continuó con la
construcción de la Iglesia que vemos actualmente.
El proyecto original trazado por Afonso Domingues, consistía en un conjunto monástico similar
al de Alcobaça pero fue modificándose a medida
que se sucedieron los reyes y los maestros de obra.
Con el maestro Huguet evoluciona hacia el gótico
flamígero y perpendicular de influencia inglesa. A
petición de Joao I se añade la Capilla del Fundador, donde está enterrado con su esposa Philippa
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GuBatalha
de Lancaster e hijos. Su sucesor Eduardo o Duarte I
mandó construir otra rotonda funeraria las Capelas
Imperfeitas.
Los trabajos no son continuos, se toman y se dejan dependiendo de los intereses de los sucesivos
reyes y de la riqueza del momento. Todos son conscientes de la importancia del monumento pero no
siempre hay recursos para continuar las obras. Durante el reinado de Afonso V se vivieron momentos
tan apurados que incluso se llegó a fundir el oro y
plata de muchas iglesias. Entre 1480 y 1515 se activan de nuevo las obras a cargo de Mateus Fernandes, maestro del manuelino. Esto supone un nuevo
y definitivo giro en el estilo de la construcción
como reflejo de lo que se ha convertido el reino en
estos años, en un imperio repartido por los cuatro
puntos cardinales. Se trabaja principalmente en
las Capillas Imperfeitas y en el Claustro Real. En
1517 se interrumpe la construcción, sin terminarla.
El rey Manuel I decide dedicar todos los esfuerzos
y recursos a la construcción del Monasterio de
los Jerónimos y cumplir así su propia promesa a la
Virgen de Belem. Las obras se abandonan definitivamente en 1533.
Mientras, la población de Batalha ha ido creciendo en paralelo al avance de la edificación y
a la importancia del Monasterio que está a cargo
de la Orden de los Dominicos. El 18 de marzo de
1500 es elevada a la categoría de villa por el Rey
D. Manuel I.
El terremoto de 1755 causó algunos daños en el
Monasterio, por ejemplo se derrumbó el techo de
la Capilla del Fundador. Las tropas Napoleónicas
causaron una destrucción mayor cuando lo saquearon y quemaron en 1810. Buscando oro y joyas profanaron todas las tumbas y esparcieron los restos
que había en ellas.
En 1834 con la extinción de las órdenes religiosas de Portugal, los dominicos fueron expulsados
del complejo quedando este completamente abandonado. Afortunadamente la restauración se inició
poco después, en 1840, impulsada por Fernando II
Monasterio
de Portugal haciendo que pudiera salvarse la mayor parte de esta joya arquitectónica. Se restaura a
lo largo de todo el siglo XIX teniendo como referencia los grabados de un viajero inglés Thomas Pitt
que estuvo en Portugal a finales del siglo XVIII y
que dio a conocer el monasterio en toda Europa. El
edificio sufrió algunas transformaciones importantes como la eliminación de dos claustros al lado de
las Capelas Imperfeitas y sobre todo se suprimieron muchos símbolos religiosos. Se buscaba con
ello dejar de lado el pasado religioso del edificio
y destacar su significado como símbolo glorioso
de la dinastía de Avis. También de este momento
procede la vulgarización del termino de Monasterio
de Batalha en detrimento de Santa María da Vitória, en una tentativa de erradicar definitivamente
las denominaciones religiosas frente a las nacionales. La restauración dura hasta los primeros años
del siglo XX y en 1907 es declarado monumento
nacional. En 1980 se convierte en museo y en 1983
fue incorporado por la Unesco a la lista de lugares
Patrimonio de la Humanidad.
VISITA
El motivo principal de cualquier parada en Batalha suele ser la visita del Monasterio de Santa
María de la Victoria. Se trata de una magnífica
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Estatua eecuD. Nuno Alvares
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construcción del periodo final del gótico y del
nacimiento del estilo Manuelino que desde aquí se
extendió por el país. La mezcla de estilos se debe
a la duración de las obras y al gran número de maestros que tomaron parte en ellas. Lo que empezó
siendo sencillo y austero deriva en el exceso decorativo y singular del manuelino, las paredes de Batalha se llenaron de arrecifes de coral, arabescos y
elementos marinos como anclas y nudos. También
es panteón real ya que aquí reposan los restos de
algunos de los reyes portugueses de la Dinastía de
Avis repartidos entre la Capilla del Fundador y las
Capillas inacabadas (Imperfeitas)
Sólo la vista exterior ya merece la pena por
lo impresionante. Es una mezcla entre grandiosa y
delicada de multitud de pináculos, arbotantes, contrafuertes, balaustradas y ventanas construido todo
con piedra caliza que ha adquirido un cálido tono
entre rosado y dorado con el paso del tiempo. Alrededor del monasterio se ha dejado una amplia explanada que permite observarlo y fotografiarlo sin
obstáculos. En la plaza está la estatua ecuestre
de D. Batalha
Nuno Alvares Pereira, Condestable del reino. Es un personaje importantísimo en la historia
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Batalha
portuguesa, su genio militar fue fundamental para
la victoria de Aljubarrota y además fundó la casa
de Braganza que reinó en Portugal tras la de Avis.
A la muerte de su esposa ingresó en los carmelitas,
fue beatificado y está en proceso de canonización.
La estatua se inauguró en 1968 y el escultor fue
Leopoldo de Almeida.
En la portada oeste está la entrada a la iglesia.
Antes de entrar hay que observar las estatuas que
la adornan, Cristo, apóstoles, ángeles y Santos y
entre todos ellos Joao I vestido de guerrero.
La entrada a la iglesia es gratuita. Para visitar
el resto del complejo hay que pagar una entrada
moderada (aprox. 5 euros).
La Iglesia empezó a construirse siguiendo la
tradición del gótico mendicante portugués igual
que el cercano monasterio de Alcobaça. Tiene
planta de cruz latina con tres naves, un transepto
muy pronunciado y cinco capillas en la cabecera.
Destaca el elevado techo de la nave central de
algo más de 32 metros que hace que parezca más
estrecha de lo que es en realidad y que obligó a
la utilización de los arbotantes que hemos visto
desde el exterior. La iluminación se realiza a través
de ventanales apuntados. El resultado final es bastante fiel al proyecto original y la única diferencia
con otros templos portugueses más antiguos es
que es mucho mayor y completamente abovedado.
La mayor parte de la obra fue dirigida por el maestro Afonso Domingues.
En el lado derecho de la Iglesia, junto a la entrada, está la Capilla del Fundador. Este es uno
de los edificios adyacentes más importantes y el
que marca el carácter real del Monasterio. Es de
planta cuadrada, con ocho pilares en su interior
que forman un octógono. Fue trazada por el maestro Huguet y terminada en 1434 poco después
del fallecimiento de Joao I cuyo cuerpo se trasladó
hasta aquí junto al de su esposa la reina Philipa
de Lancaster. La luz que entra desde las vidrieras
de la fachada y de las ventanas superiores ilumina el mausoleo real en el centro del monumento.
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GuBatalha
En las paredes se abren arcos con las tumbas de
los príncipes de Avis : Don Pedro y su esposa,
Don Fernando, muerto en Ceuta, el famoso Don
Enrique el Navegante y Don Joao, Maestre de la
Orden de Santiago. Las tumbas están decoradas
con los escudos de los príncipes lo que compone
un importante conjunto de heráldica familiar con
influencias inglesas debidas a la procedencia de la
Reina Philipa. Al decidir el Rey Duarte I construir
un nuevo panteón, las Capillas Imperfeitas, el resto
de las tumbas quedaron sin ocupar.
En el lado izquierdo, al final de la nave de la
Iglesia está la salida al Claustro Real. Tiene un
solo piso con arcos ojivales embellecidos por una
abundante decoración manuelina. Trabajó en ellos Diogo de Boitac arquitecto del Monasterio de
los Jerónimos. Entre los motivos decorativos que
se esculpieron en la roca, además de todo tipo de
vegetación exótica, destaca la presencia de la cruz
y de la esfera armilar los símbolos de un poder y
una fe que en ese momento los portugueses estaban extendiendo por el mundo. En una esquina
de singular belleza hay una fuente que usaban los
monjes para asearse antes de entrar al cercano refectorio donde se ha instalado un pequeño museo.
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Claustro
Desde la galería este se accede a la Sala Capitular. Es de planta cuadrada y lo más destacado
es la bóveda que la cubre. Es una bóveda de estrella de un solo vuelo con una gran clave central con
decoración vegetal. Se trata de una obra de notable
técnica constructiva para la época. Se cuenta que
el maestro Afonso Domingues tuvo que discutir con
los obreros que se negaban a quitar los andamios y
soportes por miedo a que se desplomara y que tras
quitarlos se quedó toda una noche allí solo para
demostrar la seguridad de la construcción. En una
de las ménsulas se ve lo que posiblemente sea el
retrato de dicho maestro. Aparece vestido con un
traje de principios del siglo XV, una túnica ajustada
con faja, turbante trenzado e inclinado, sujeta en
la mano izquierda una regla y tiene la otra posada
en la rodilla derecha. Aquí también hay que fijarse
en las vidrieras que son magníficas. Algunos historiadores defienden que este fue el primer lugar
de Portugal donde se utilizó la técnica del vitral
que procedía del centro de Europa.Continuando
con el significado simbólico del lugar, en esta sala
se encuentra, con guardia permanente, la Tumba
del soldado desconocido. Contiene los cuerpos
de dos soldados portugueses muertos en combate
durante la Gran Guerra, uno en Europa y otro en
África.
Desde la galería norte del Claustro Real se entra
al Claustro de Afonso V. Cualquiera parecería
austero tras el anterior , pero es que además la
decoración de este es bastante sencilla limitándose a las armas y lemas del monarca en las crucerías de las bóvedas. El arquitecto fue Fernando
de Évora.
Desde aquí se sale al exterior para acceder a
las Capelas Imperfeitas, es decir las capillas
inacabadas. Quedan como testimonio de que realmente el monasterio nunca fue terminado y por
ello son quizá lo más singular y especial de todo
el complejo. Se trata de una estructura anexa al
coro de la iglesia, de forma octogonal compuesta
por siete capillas radiantes y la entrada. Las obras
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 Información Práctica
GASTRONOMIA
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Detal
fueron iniciadas por el maestro Huguet y quedaron
paralizadas poco después al fallecer Don Duarte
el monarca que las ordenó. Durante los reinados
posteriores se continuaron lentamente con el fin de
acabar el edificio pero aunque se trabajó mucho en
la decoración se dejó de hacer lo principal: el lanzamiento de la gran bóveda central. La dificultad
para hacerlo no era técnica puesto que el vano a
cubrir es poco mayor que el de la Sala Capitular,
simplemente faltaron los recursos o cambiaron los
intereses. Lo más espectacular es la profusa decoración que aparece por todas partes pero sobre
todo en la portada. Se hizo en 1509 y parece una
labor de encaje más apropiada para hacer con hilo
que con piedra. Los motivos vegetales están por
todas partes, hiedra, cardos, flores, también motivos marinos como caracolas, vieiras, cuerdas. En
el interior hay varios túmulos entre los que destacan el del rey Don Joao II y su esposa Doña Leonor.
Fuera del Monasterio no hay mucho que visitar.
La población de Batalha mantuvo una estructura
típica del siglo XVIII hasta los años 60 en los que
se emprendieron numerosas reformas. Lo más
destacado es la Iglesia Matriz que se construyó
entre 1514-1532 en respuesta a la petición de los
habitantes de la villa que querían una Iglesia parroquial al margen del monasterio. El portal es de
estilo manuelino pero también cuenta con elementos barrocos y revivalistas procedentes de una reconstrucción
Batalhahecha a principios del siglo XX.
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Se puede tomar café o refrescos en los bares
que hay en el lado sur de la plaza del Monasterio
TRANSPORTE PÚBLICO
TAXIS: Praça Mouzinho de Albuquerque.
Tel.: 244 765 410
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Oficina de Turismo
Posto de Informação de Turismo, Praça Mouzinho
de Albuquerque.Tel.: 244 765 180. Enfrente de la entrada al Monasterio. Cierra a médio dia de 13 a 15 hrs.
COMPRAS
El Concejo de Batalha tiene una rica tradición
artesanal. Se hace cerámica y porcelana utilizando
métodos tradicionales, se utiliza la piedra caliza
de la región para hacer bellos trabajos de tallado
y se trabaja el latón tanto para piezas útiles como
adornos. También hay telares artesanales que hacen colchas y tapetes. Junto al Monasterio en el
edificio del puesto de Turismo está la Loja do Mundo Rural donde están representados los productos
artesanales producidos por artesanos de la región.
TELÉFONOS
Centro de Salúd.Freiria.Tel.: 244 765 246 /765 346
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