ÀLBUM DÉ L \ FLOiU. fumando en pipa y bebiendo cerveza se la curan. Se le ha empleado asimismo como vermífugo en lavativas, en poción ó en fomentos al vientre, pero es preciso tener presente que Fouquet le ha visto ocasionar de esta manera, no solo vómitos, sino hasta u n a especie de cólera morbo. Lieutaud empleaba como p u r gante el tabaeo, en cataplasmas sobre el vientre, pudiendo producir también de esta manera efectos eméticos, y Barton para hacer vomitar en el envenenamiento por el opio. Parece que el tabaco, fumado como el estramonio, ha sido algunas veces útil contra el asma en los sugetos no acostumbrados á fumarle; así lo aseguran P . Hanin, Gesnero, Hufeland y Stoll qtíe lo emplearon con éxito contra la coqueluche, en cuya dolencia Pitshaft hacia tomar u n a infusión (un gramo 20 cent., por 180 de agua hirviendo), á la dosis de u n a cucharada de las de café á cada hora, para los niños de uno á dos años, y u n a de las ordinarias á los ma. yores. Esta dosis parece m u y elevada. En tal caso, así como en el croup espasmódico que se dice haber curado con su humo, la eficacia de la belladona perfectamente comprobada , dispensa su uso. Boberto Page refiere casos de pulmonías curadascon él, y en las que la medicación antiflogística habia sido insuficiente. Empleábale en lavativas. Otros prácticos h a n visto igual efecto de su uso, entre ellos Szerlecki; parece obrar á la manera que el tartrato antimónico potásico. Este y Bauer observaron buenos resultados, particularmente de su tintura, en la hemoptisis activa; siendo cierto que en los catarros pulmonares crónicos y determinadas afecciones asténicas de las vias respiratorias, el tabaco alivia á los enfermos, favoreciendo la espectoracion. Su jarabe (el de Quercetan) en otras épocas gozó de g r a n reputación, habiéndose propinado en dichas afecciones para calmar la tos y eliminar de los bronquios las mucosidades que los obstruyen. E n diversas dolencias del aparato u r i nario fué aconsejada también esta planta, tales como la, parálisis de la vejiga, iscuria, disuria y'retencion de orina; empleá- base aplicándole al bajovientre. Fowler elogia la tintura interiormente contra la disuria calculosa. HenriLarley Shaw, han curado con lavativas del humo ó del cocimiento la retención de orina y el espasmo de la uretra. Pavesi ha recurrido á las inyecciones .de nicotina en la parálisis de la vejiga. La epilepsia, enfermedad que por su pertinacia, goza del triste privilegio de que se ensayen contra ella la mayor parte de los medicamentos cuyas virtudes están mal comprobadas ó sean d u dosas, ha sido también combatida con el tabaco por Zacutus Lusitnnus, Riviere y Hannesner, que dicen le emplearon con éxito. «Debemos asegurarnos por nuevas esperiencias, dice Cazin, de su efecto. Por su acción á la vez perturbatriz y estupefaciente, puede oponerse á la concentración nerviosa, súbita, convulsiva que caracteriza los accesos de esta terrible dolencia.» Los resultados obtenidos con la belladona y estramonio conducen á creer por analogía, en la eficacia del tabaco. Ha sido también recomendado, interiormente en el -histerismo y mania, y en las Antillas se em- plean los baños de su infusion contra el tétanos, en el que Thomas y Anderson le han usado con éxito. Boerhaave aconsejaba la aplicación de las hojas frescas para calmar los dolores neurálgicos; efectuándolo su cocimiento ó estracto, según Trousseau y Pidóux, en la gota y reumatismo, y Wetch quedó satisfecho de su infusión-, aplicándola sobre diferentes flegmasías gotosas ó reumáticas, dolencias que se ha conseguido curar ó aliviar por este m e dio, así 16 aseguran Roques, Reveillé-Paris, el abate Girard y otros. En manos de Dubois, de Tournai, ha sido eficaz para combatir el lumbago y la pleurodynia, habiendo Cazin comprobado el buen efecto de. su tintura alcanforada contra el primero. Berthelot vio mejorar ó curar ciáticas por medio de sus emanaciones ó aplicación tópica. Es de observar que los operarios que se ocupan en manufacturarle, curan del reumatismo, según lo vio Heurtaux, médico de las fábricas de París. Como poderoso diurético, Fowler preconizó su uso en la hidropesía, citando Tomás Bartolin u n caso curioso de At-