Stefan Zweig (1881-1942) Nace en Viena en una familia judía acomodada. Su padre era fabricante textil y su madre pertenecía a una familia de banqueros. Estudió en la Universidad de Viena y obtuvo el título de Doctor en Filosofía. También realizó cursos sobre historia de la Literatura, que le permitieron relacionarse con la vanguardia cultural vienesa de la época. Además de sus creaciones en teatro, periodismo y ensayo, trabajó en traducciones de Paul Verlaine, Charles Baudelaire y Émile Verhaeren. En 1910 visitó La India y en 1912 Norteamérica. En 1913 se establece en Salzburgo. Durante la Primera Guerra Mundial sirvió al ejército austriaco como empleado de la oficina de guerra, después se exilió a Zurich debido a sus convicciones antibelicistas. De este periodo es su obra Jeremías, 1916. Trabaja como corresponsal de prensa y publica en periódicos húngaros. Después del armisticio regresa a Salzburgo, se casa e instala allí su residencia. Escribe novelas y relatos históricos como Momentos estelares de la humanidad. Destaca como biógrafo, ensayista y novelista. Entre sus biografías podemos señalar las de Fouché, 1929, María Antonieta, 1933 y María Estuardo, 1934 y entre sus novelas El candelabro enterrado, El amor de Erika Ewal, 1904, Amok, 1922, Carta de una desconocida, 1927, Veinticuatro horas en la vida de una mujer, 1929, La impaciencia del corazón, 1939. En 1936 sus libros fueron prohibidos en Alemania, se casa de nuevo en 1937 y obtiene la ciudadanía inglesa. Posteriormente viaja a Sudamérica y Estados Unidos. Después de la publicación de una de sus novelas más valoradas Novela del ajedrez se trasladó con su mujer a Brasil donde escribió La tierra del futuro. En Petrópolis desesperados ante el futuro de Europa y su cultura se suicidaron en 1942. Su autobiografía El mundo de ayer fue publicada en 1944.