Cuando usted y su bebé realmente lo necesitan, La cesárea es la mejor forma de nacimiento. Aunque la cesárea debe realizarse sólo si existen riesgos para la madre y el/la bebé; desde hace algunos años es cada vez más frecuente, varias razones explican esto: Piense cuáles son sus temores, inquietudes y creencias sobre el parto normal y la cesárea, convérselas con su médico/a desde las primeras consultas prenatales. Evalúe si la información que recibe es completa, imparcial, científica y oportuna, porque usted tiene DERECHO a la más alta calidad de atención. Desde los/as médicos/as: Puede ser más cómodo porque les permite programar el momento del parto, fuera de su horario de consultas y dura 45 minutos a 1 hora, mientras un parto normal requiere más tiempo. Y su bebé tiene DERECHO a nacer de la forma más saludable y gratificante. Desde la embarazada, su pareja y familiares: Presiones hacia los/as médicos/as para que se realice una cesárea. Hay personas que planifican una cesárea para que su bebé nazca el día de su gusto. También la solicitan para evitar los dolores de parto o, erróneamente, piensan que es más segura y sencilla que el parto normal. Desde las instituciones de salud: Cuando por falta de protocolos de atención, permiten aquellas prácticas hospitalarias que llevan innecesariamente a terminar un parto en cesárea. APROFE CLÍNICA DE PARTOS Y CIRUGÍAS Noguchi 1516 y Letamendi PBX 2402984 Guayaquil - Ecuador SERVICIOS DE CALIDAD CON CALIDEZ Todas las mujeres tienen capacidad para dar a luz, ya que el parto es un proceso involuntario, natural y fisiológico que sucede espontáneamente, sin intervención externa y en el momento preciso. Permanecen vigentes prácticas que siempre han favorecido el parto, como: Para la relación madre-hijo/a: Hacia el final del embarazo: - Caminar y cambiar de posición buscando lo más cómodo y evitando permanecer acostada o inmovilizada. La pronta recuperación de la madre favorece un contacto inmediato con su bebé y lograr un vínculo más cómodo y placentero para amb@s. - El acompañamiento a la mujer, porque disminuye su ansiedad y temores, los cuales pueden inhibir las contracciones y detener o enlentecer el parto. Para la familia: - Y ya durante el parto, las posiciones que lo facilitan son aquellas en las que la espalda se mantiene erguida. “Deben existir razones muy válidas para interferir en el proceso natural del parto” (Organización Mundial de la Salud, 1996) La mujer, su pareja y familiares deberán estar muy atent@s a señales de peligro como dolor, sangrado o cualquier pérdida de líquido amniótico por vía vaginal; ya que, aun con todo previsto para un parto normal, pueden presentarse complicaciones impredecibles que obliguen a una ce-sárea en ese mismo momento, como: 1 - Placenta previa. 2 - Desprendimiento de placenta, lo cual corta el flujo de oxígeno al bebé. 3 - Ruptura prematura de membranas: Hay pérdida de líquido amniótico o agua fuente por la vagina antes de las 37 semanas de embarazo. La cesárea es necesaria si la cabeza fetal no está encajada o si hay riesgo de infección Por eso, sólo cuando realmente amerite se emplearán métodos y procedimientos obstétricos que ayudan al proceso natural del parto, a la madre y el/la bebé. Por ejemplo, usar sustancias para apurar el parto y para la analgesia sólo beneficia cuando se lo hace correctamente; caso contrario, inhiben las contracciones y pueden llevar a una cesárea que pudo evitarse. Otros procedimientos y prácticas, hasta hace poco considerados beneficiosos; según últimos estudios, NO deben realizarse DE FORMA RUTINARIA: 1 - Rasurado del vello púbico 2 - Enemas (“lavados”) 3 - Sueros endovenosos (goteo de oxitocina o pitocín) Para su bebé: Las contracciones del parto comprimen la caja torácica del bebé, hacen que su tórax trabaje y se activen sustancias que preparan sus pulmones para la primera bocanada de aire. Por eso, l@s bebés nacidos/as por parto normal presentan menos dificultades respiratorias. Los procesos hormonales asociados al parto normal, continúan naturalmente, estableciendo más rápidamente la lactancia natural, fundamental para la salud del bebé y la recuperación de la madre. 6 - Ruptura artificial de las membranas 7 - Episiotomía o corte en el periné La cesárea se realizará sólo si existen condiciones que pondrían en riesgo la vida y salud de la madre y el/la bebé, si se tuviera un parto normal. Durante los controles prenatales: Pueden identificarse ciertas condiciones de riesgo que llevarían a programar una cesárea con anticipación. En el caso de la mujer con: - Su primer embarazo a los 40 años ó más. - Enfermedad cardíaca - Preclampsia, eclampsia. - Herpes genital activo, verrugas genitales o condilomas al final del embarazo - Infección por el virus del VIH/SIDA - Cesáreas anteriores. Para la mujer: O del/la bebé, cuando: 4 - Monitoreo fetal electrónico o Cardiotocograma 5 - Mantenerse sin ingerir alimentos (ayuno) Los costos económicos de un parto normal siempre serán menores. El tiempo de recuperación es my breve; el funcionamiento de sus intestinos y vejiga urinaria no se alteran, no habrá exposición a anestésicos ni dolores posteriores o necesidad de cuidados extras por una herida quirúrgica; todo lo cual hace menor su estancia hospitalaria y más rápido su retorno a casa. - Presenta anomalías como hidrocefalia. - Está en una posición anómala dentro del útero: transverso, de nalgas o de pies - Tiene un ritmo cardíaco anormal - Hay múltiples bebés dentro del útero (trilliz@s y algunos embarazos de gemelos/as). Al inicio o durante el trabajo de parto: Podrían presentarse complicaciones de último momento que ni el/la más experto/a de los/as profesionales podría predecir; sin embargo, sí debe estar preparado/a para identificar a tiempo el problema y tomar la decisión oportuna de una cesárea, en casos de: Desproporción céfalo-pélvica: Cuando al momento del parto, la cabeza del bebé resulta muy grande o la pelvis materna, demasiado pequeña. Problemas con el cordón umbilical: Prolapso del cordón umbilical, que es cuando el cordón sale a través del cuello uterino. Trabajo de parto prolongado o detenido: Pasan entre 8 y 12 horas y las contracciones uterinas no dilatan suficientemente el cuello uterino para que el bebé pase. Sufrimiento Fetal: Cuando la disminución de oxígeno pone a el/la bebé en riesgo de muerte, daño cerebral o de otros órganos.