República Federativa de Yugoslavia (provincia de Kosovo) Las

Anuncio
Servicio de Noticias 190/98
ÍNDICE AI: EUR 70/74/98/s
30 DE SEPTIEMBRE DE 1998
República Federativa de Yugoslavia (provincia de Kosovo)
Las últimas denuncias de matanza ponen otra vez de manifiesto la
necesidad desesperada de observadores internacionales de derechos
humanos
Las nuevas denuncias de matanza de civiles de etnia albanesa en Kosovo ponen otra vez de
manifiesto la necesidad de una investigación exhaustiva sobre las presuntas matanzas y de la presencia de
observadores internacionales de la situación de los derechos humanos, ha manifestado hoy Amnistía
Internacional.
Según informes, el sábado pasado mataron al menos a 16 personas, 10 de ellas mujeres y niños,
en la localidad de Gornje Obrinje. Una de las mujeres estaba embarazada. De acuerdo con la información
recibida, a la mayoría de la víctimas las dispararon desde muy cerca, y algunas tenían señales de
mutilación. Al parecer se habían refugiado de los combates en una arboleda próxima a sus casas. Algunas
personas del lugar dijeron a los informadores que los autores de la matanza eran miembros de la policía
serbia o del Ejército Yugoslavo.
Aunque las autoridades aseguran no tener nada que ver con la matanza y han anunciado una
«investigación urgente» sobre ella, se han negado reiteradamente a realizar investigaciones independientes
e imparciales sobre este tipo de denuncias y a poner a los responsables a disposición judicial.
«La pauta de abusos contra los derechos humanos y de impunidad para los responsables existente
en Kosovo es indiscutible —ha declarado Amnistía Internacional—. Los abusos del tipo de los que
presuntamente se han cometido en Gornje Obrinje ponen de relieve la necesidad de proteger a los
desplazados y los refugiados de Kosovo y de prestar a sus derechos humanos tanta atención como a sus
necesidades humanitarias».
«Pedirles que regresen a sus hogares será precipitado mientras se sigan cometiendo con
impunidad abusos graves contra los derechos humanos y no se investiguen con prontitud e
imparcialmente para ofrecer una reparación a las víctimas», ha añadido la organización.
Sin embargo, la comunidad internacional no ha llevado completamente a efecto las medidas
concebidas para vigilar los derechos humanos y la impunidad. En su resolución de la semana pasada
(1199/98), el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU) hizo hincapié en el trabajo de los
observadores de la Unión Europea y de los observadores diplomáticos internacionales y no se refirió a la
necesidad de acceso de observadores especializados de derechos humanos como los del Alto
Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, al que se le ha negado una oficina en
Pristina y la ampliación de su misión.
El 8 de septiembre, el presidente del Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia, de la
ONU, escribió a la Presidencia del Consejo de Seguridad destacando de qué modo el hecho de que
Yugoslavia, desafiando el derecho internacional y al propio Consejo de Seguridad, continúe sin entregar a
los sospechosos contra los que se ha dictado acta de acusación en el contexto de las investigaciones del
Tribunal sobre Croacia amenazaba con privar de todo sentido a la investigación del Tribunal sobre
Kosovo. Hasta ahora, el Consejo de Seguridad no ha respondido directamente a las peticiones del
Tribunal, que fue creado por él mismo.
En la resolución de la semana pasada, el Consejo de Seguridad pidió a las autoridades yugoslavas
que colaboraran con el Tribunal y pusieran a su disposición a los responsables de abusos, pero no abordó
las principales preocupaciones del Tribunal sobre la no detención de sospechosos.
La próxima semana, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados
(ACNUR) celebra la reunión anual de su Comité Ejecutivo, en la que, entre otras cosas, los Estados
Miembros de la ONU expondrán la política del ACNUR con respecto a los refugiados de Kosovo. Dado
que a los desplazados y los refugiados de la provincia yugoslava se les están cerrando fronteras, Amnistía
Internacional se dirigirá a las delegaciones de los Estados para entregarles un informe en el que se pide a
sus gobiernos que compartan la responsabilidad de atender a los desplazados y los refugiados de Kosovo e
impidan su regreso precipitado e involuntario hasta que puedan emprenderlo con seguridad y dignidad.
Amnistía Internacional hará hincapié en que los esfuerzos por enviar asistencia humanitaria no
son suficientes, porque es necesario también hacer respetar el derecho de los refugiados y los
desplazados a la protección que les garantiza el derecho internacional, en particular la Convención sobre
el Estatuto de los Refugiados, de la ONU
************************************************
Para más información o para concertar una entrevista, llamen a la Oficina de Prensa de Amnistía
Internacional ( +44 171 413 5566/5808/5810).
Descargar