Como actuar correctamente en caso de crisis asmática Es esencial adoptar una buena actitud para tratar la crisis asmática en las mejores condiciones. Algunos signos le alertarán a usted o a las personas de su entorno. ¿Qué ocurre durante la crisis asmática? Al respirar, el aire circula por los pulmones a través de las vías aéreas: bronquios y bronquiolos. Durante una crisis asmática, los músculos de los bronquios se contraen, lo cual disminuye su diámetro, y se segrega mucosidad en una mayor cantidad. Estos fenómenos causan obstrucción bronquial y una respiración silbante, muy característica, además de una sensación de ahogo o dificultad para respirar. ¿Cómo se reconoce una crisis asmática? La respiración es corta y silbante, la persona afectada se siente ahogada y sin aliento. En casos intensos puede tener dificultad para hablar y puede tener sensación de angustia e inquietud. En muchas ocasiones, sobre todo en fases iniciales, puede manifestarse por una tos seca, especialmente, de noche, al levantarse o al realizar un esfuerzo. Estos signos precoces le alertarán de la aparición de una crisis asmática. ¿Cómo debo reaccionar? A partir de los primeros síntomas y signos, hay que inhalar el broncodilatador habitual según las indicaciones que le dé su médico de familia o pediatra. Los adultos y niños de mayor edad podrán hacer las inhalaciones directamente, mientras que los niños más pequeños en los que seremos incapaces de coordinar el proceso de pulsación / inhalación, deberán recibir los broncodilatadores inhalados a través de cámaras espaciadoras. Intente tranquilizar al niño, ponerlo en posición semi-incorporada o sentarlo e intentar que respire lenta y profundamente. ¿Cómo puedo evaluar la gravedad de la crisis? Si nota alguno de los siguientes signos de alarma, llame inmediatamente a urgencias, o al 112 desde cualquier teléfono para recabar asistencia médica. Ausencia de mejoría a la media hora de haber inhalado el broncodilatador (cuya aplicación habrá repetido cada 5-10 minutos según las indicaciones que le haya dado su médico). Dificultad para hablar o imposibilidad de formular una frase completa sin retomar la respiración. Evidencia de tiraje intercostal o subcostal (se marcan las costillas durante la respiración). Presencia de bamboleo abdominal durante la respiración. Piel azulada en labios y uñas. Transpiración abundante. Síntomas de agotamiento. Hay que tomar precauciones a largo plazo. El tratamiento de fondo no debe descuidarse una vez pasada la crisis. Evite tanto como sea posible los factores de riesgo que provoquen la crisis asmática: el tabaco y la presencia de animales en casa, por ejemplo.