Autor confeso de crimen de Haeger: “Opuso muy poca resistencia

24
LATERCERA Viernes 11 de diciembre de 2015
Nacional
IMPUTADO
Autor confeso de crimen de
Haeger: “Opuso muy poca
resistencia (...) no pude dormir,
se me venía a la mente su cara”
R José Pérez Mancilla relató cómo
Aseguró que cometió el
asesinato por dinero
José Pérez Mancilla indicó a
los investigadores que decidió
cometer el homicidio a cambio
de un pago. Esto para costear
una operación a uno de los riñones de su entonces esposa.
escondió el cuerpo y los contactos
que tuvo con el viudo de la
contadora, Jaime Anguita.
R “Me amenazó diciéndome que me
quedara callado, y que mi vida a él
le costaba sólo el precio de una
bala”, declaró a la policía.
Víctor Rivera
Puerto Varas
Cinco son las carillas que contiene la declaración que José
Pérez Mancilla prestó el lunes
en las dependencias de la Brigada de Homicidios de Osorno de la PDI. El testimonio
del carpintero, en el que confesó ser el autor material del
asesinato de Viviana Haeger
en junio de 2010, será clave en
la audiencia donde hoy se le
formalizarán cargos por el
delito de homicidio calificado.
La Tercera accedió a parte
de su relato en el que entregó detalles sobre cómo se habría llevado a cabo el crimen, las instrucciones que
supuestamente el entonces
esposo de la contadora, Jaime Anguita, le habría dado.
El viudo de la mujer también formalizado hoy.
Luego de señalar a los investigadores que la asfixió
con una bolsa, Pérez detalló
que Haeger “opuso muy poca
resistencia, no tuve que pegarle, sólo la sujeté y la controlé con mi peso, porque era
muy flaquita. Tomé el cuerpo y con la ayuda de un choapino lo trasladé hasta la puerta del entretecho que está en
el mismo dormitorio, la que
tenía solo un pequeño pestillo que la cerraba. Una vez ahí
me metí yo primero y luego
la tomé por debajo de las axilas, con la cabeza adelante
cerca de mi pecho, empezando a avanzar, caminando yo
hacia atrás, pisando las vigas, arrastrándola”.
Agregó en su testimonio que
la llevó “casi al final del entretecho” y sacudió el “choapino” para luego dejarlo al lado
de la cama. “En seguida, tomé
una filmadora que estaba sobre un mueble, una cámara
fotográfica y una caja metálica de color rojo, que estaba
al lado de la cámara, la cual
también tomé y me la llevé,
echándolas en una mochila
negra”.
Lo siguiente sería la escapatoria del lugar del asesinato:
“Posteriormente salí de la
casa por la puerta que da al
estacionamiento, dejándola
cerrada y me fui caminando
por su entrada (...) me bajé
en una galería cerca del casino y ahí tomé otro bus ha-
RR La contadora asesinada en Puerto Varas, Viviane Haeger. FOTO: ARCHIVO.
EL TESTIMONIO DEL
CARPINTERO
“Opuso muy poca
resistencia, no tuve
que pegarle, sólo la
sujeté y la controlé con
mi peso, porque era
muy flaquita”.
“Siguiendo las
instrucciones de Jaime
Anguita, me trasladé
hacia un centro de
llamados ubicado en
calle Varas. ”
“El joven me pasó la
llamada a una cabina
donde le dije a Jaime lo
que él me había pedido,
es decir que su señora
estaba en peligro”.
“Le reclamé que me
había pagado menos
dinero. Me amenazó
diciéndome (...) que mi
vida a él le costaba sólo
el precio de una bala”.
cia Pto. Montt”.
De acuerdo a su versión, el
crimen supuestamente fue
ordenado por Anguita, quien
le habría dado instrucciones
de los pasos a seguir. “Siguiendo las instrucciones de
Jaime Anguita, me trasladé
hacia un centro de llamados
ubicado en calle Varas. Al ingresar me dí cuenta que estaba atendiendo un joven a
quien le pedí una llamada,
diciéndole el teléfono de don
Jaime Anguita”. Agregó que
“el joven enseguida me pasó
la llamada a una cabina donde le dije a don Jaime lo que
él me había pedido, es decir
que su señora estaba en peligro, luego de lo cual él me
cortó el llamado, que era precisamente lo que él me dijo
que iba hacer. Posteriormente tomé un colectivo y me
trasladé a mi casa (...) revisé
la mochila, procediendo a
abrir la caja metálica, la cual
tenía en su interior un anillo
de oro, unas perlas de fantasía y varios papeles. Ese día
boté la caja con las perlas y los
papeles, dejándome sólo el
anillo, junto con la cámara
de video, y la cámara fotográfica, las que mantuve en mi
poder por casi una semana”.
El carpintero parece haber
no conciliado el sueño ese 29
de agosto. “Recuerdo que esa
noche casi no pude dormir
porque se me venia a la mente la cara de doña Viviana”.
Pérez era trabajador en la
constructora donde Anguita
era su superior. Este nexo lo
habrían extendido, pues el
carpintero también realizó
labores de este tipo en su casa
particular, ubicada en el Parque Stocker, en Puerto Varas.
Pero el día del crimen no fue
la última vez que ambos conversaron, según declaró Pérez. “A los dos días fui a la
constructora esperando el
pago ($ 5 millones, pero le
adelantó sólo $2 millones, de
acuerdo a su versión). Don
Jaime cuando me ve baja la
ventanilla y yo le reclamé que
me había pagado menos dinero, y él me amenazó diciéndome que me quedara
callado y que mi vida a él le
costaba sólo el precio de una
bala”, dijo el carpintero.
Finalmente, Pérez concluyó
que “nunca más volví hablar
con él”, hasta este año “cerca
del mall nuevo, pero sólo cruzamos unas palabras, preguntándome cómo estaba y le dije
que trabajando”. Hoy ambos
volverán a encontrarse, pero
esta vez, en un tribunal.b
FAMILIA
Hija de Haeger viaja
desde Alemania
A las 11.30 comenzará la formalización de cargos por homicidio a
Anguita y Pérez. Asistirá la familia de Anguita, entre ellos su hija
mayor, Vivian, quien llegará desde Alemania a apoyar a su padre.
Así lo confirmó el abogado del
ingeniero, Jorge Vásquez, quien
agregó que “sigo confiando en
su inocencia. Jaime cree que
esto fue un suicidio”. La familia
Haeger también asistirá a la audiencia. Ambos imputados declararán ante el fiscal Nain Lamas antes de la audiencia.