I ~d~_c~~~~d':;:::.~~~~~~~~ EDUCACION EL EXPLORADOR.- PublicacIón autorizada por el Comité Ejecutivo Nacional.-Dilector: Luis Daniel Converso Redactor: Jorge Arenas James. Admillistrador: Guillermo Rojas Pontón.-Revista mensual.-Año 1.Bogotá, julio de 1935. Número I Q.-Editorial Nueva. Como "era ya tiempo de que los exploradores colombianos tuvieran un órgano de propaganda v al mismo tiempo de difusión de sus ideales", el consejo nacional de dicho grupo, autorizado por el comité ejecutivo, emprende ahora la publicación de la revista cuyo título encabeza esta reseña, correspondiente al primer número, el cual se abre con un mensaje del comité citado a 10$ exploradores, con ocasión de una junta celebrada por éstos, a quienes se les invita "a E'eguir adelante y a estar, por Colombia, siempre listos", que es el lema de la Institución. Después, y bajo el epígrafe de "Juegos", a cargo de M. G. Romero, se dan algunas reglas a los ~cúuts sohre los trucos que han de poner en práctica para sorprender al enemigo. ilustradaR con un ejemplo, y sirve de rótulo a la nota que sigue el lema de los exploradores, ya citado. ~' de subtítulo "Algo sobre las patrullas". Es autor de esta nota el señor Daniel Isaza Isaza, quien propugna "por la necesidad de poner en práctica efectiva en todas las tropas el sistema de patrullas". Las labores realizadas por el comité ejecutivo nacional se han cristalizado en nueve acuerdos cuya síntesis nos da don Carlo Eduardo Arenas J., :-::ecretario local, y don Efraín Rojas Pinzón colabora en esta entrega con un bre\'e artículo referente a la radiotrasmisión, mediante aparato "de onda cortas, construídos por nosotros mismos a bajísimo costo". Entre una "aventura sensacional que fue la excursión a los llanos de San Martín" y la organización del Consejo Nacional de los Explo- radores Colombianos, pasaron 4 años de una labor cuyos puntos principales están en una nota del señor Isaza, anterior ella a un comentario, suscrito por el señor Rojas Pontón, relatiyo él la celebración, en el cuarto centenario de Bogotá, de "un Yamboree internacional, que congregue a las delegaciones de todos los países del mundo". Finales de la entrega que reseñamos son las secciones deportiva, ocial y el capítulo primero de un folletín llamado "La patrulla de las nutrias", que ciec"u la publicación. HISTORIA Y LITERATURA HACARITAMA.-Organo del Centro de Historia de Ocaña.-Director: Luis E. Páez Courvel. Redructores: Manuel María de la Rosa y Marco A. Carvajali.J.lo.-Año 1. Norte de Santander.- Ocaña, I v de julio de 1935.-Número 2.-Imprenta del Comercio. Don Jorge Pacheco Quintero regaló "los diplomas que deben discernirse a los miembro'l del Centro de Historia de Ocaña", quienes aprobaron una proposición de gracias al donante, con el texto de la cual se abre la presente entrega. "Muchos .on los hijos de Ocaña que sellaron con su san;Jre su amor a la libertad", y entre !los figura el doctor Martín Cortés, quien pagó su entusiasmo por la independencia con su propia vida, habiendo sido fusilado por el pacificador Morillo en 1816, según lo cuenta en un apunte biográfico del prócer, don Justiniano J. Páez. Al "episodio conocido en la historia con el nombre de 'revolución de Caviedes' ", o sea el asalto que un individuo de este nombre hizo al cuartel de Ocaña en tiempos de la Convención, se refiere brevemente don Luis A. Sánchez Rizo, y con el rótolo de "Cosas de antaño", don Emilio A. García C. hace un recuerdo de Daniel Cardona, el de "alma atormentada por la inexplicable locura que nos lleva a la adora- 84 ©Biblioteca Nacional de Colombia Sendero,", ción de lo intangible". Tres sonetos de don Marco A. Carvajalino, redactor de la reyista, sobre temas de historia local, preceden a la relación, tomada del periódico "La Pluma", de 1894, sobre el fusilamiento de "Los tres mártires" Cal'abaño, García y Chacón, y a esta noticia sigue una referente a algunos prócel'e, ocañeros, cuya nómina ha comenzado a publicar el señor Matos Hurtado. Don Rubén Sánchez N. recuerda el nombre de un ilustre sacerdote hijo de Ocaña, don Manuel Lobo y Rivera, quien "sirvió de acólito en la administración del viático al Libertador", y más tarde, nombrado cura de AbejorraJ, construyó la iglesia de este pueblo cuyos hijos dispu ieron que el corazón del sacerdote fuera guardado en el templo, habiendo sido tan popular entre ellos el señor Lobo. qu e su retrato aparece en todas las casas de Abejorra!. Con el capítulo segundo de los Estatutos del Centro de Historia de Ocaña se cierra la entrega de la revista, AMERICA ESPANOLA.-Dírector: G. Porras Troconis.Cartagena de Indias.-Tomo l.-Junio de 1935.-NÚInero 2.-Edítorial "América Española". El publicista e historiador cartagenero don Gabriel Porras Troconis ha comenzado a editar esta revista de vinculación hispanoamericana cuya egunda entrega, correspondiente al mes de junio próximo paRado, trae el siguiente material: Un escrito de don Miguel Luis Amunátegu i Robre "el deber primordial de la América hispana", que es el "de la educación de las masas". a cuyo empeño han de rectificarse algunos errores, como "el de querer arrancar del alma hifloánica de nuestras repúblicas la fe reli~iosa, la creencia en Cristo", o el que emana del empleo de ciertm-1 sistemas educativos que, ensayados con suceso en Europa, no resultan fácilmente .asimilables por nosotros, o el error de aquellos conductores que "pusieron el oropel de las liber tades donde deberían haber estampado la página de oro fino de la instrucción". Desde Buenos Aires don Fernando Jáuregui escribe una nota sobre la poetisa María Alicia DomÍnguez. ,Va elogiada pOlo Benavente, y cuya última novela "Redención" basta a colocarla "entre los e _ píritus femeninos más extraordinarios de nue - tro tiempo". Vuelye a tratal'Re, por don Pastor Restrepo, y con p1'e encia de nuevos documentos, la debatida filiación de Leleux, pl'eSUI1 L1 . hijo de Miranda y secretario del Estado de Cal' tagena en 18] 4, Y también se reprod uce en estp número la conferencia del padre Salvador Re,.: trepo, S. J., sobre fray Alonso de Zamora, con ocasión del tercer centenario natalicio del famoso cronista. E ' éste un estudio bibliográfico del dominicano y de su historia, mirada ésta pOI' la doble faz de su fondo y estilo, o sea por lo que ella ,'ale como trabajo histórico y como obra literaria, atendidas "sus buenas cualidades y algo también de su' defectos". Con el epígrafi' de "La!:! tres etapas", el historiador venezolano dún Vicente Dávila diserta sobre la condición del campesino en la colonia, la independencia 'Y la república, y los medios que han de poners(' en práctica, principalmente por la escuela rural, para "abonar en parte la deuda que tiene contraída la clase directiva desde la conquista de la independencia, con las clases humildes de los labradores y obreros colombianos". También en esta entrega de "América Española" vuelve a estar sobre el tapete la cuestión de los marquesados de Valde-Hoyos y Torre-Hoyos, surgida entre el general José D. Monsalve y don Ricardo García, y recordada ahora por el presbítero don Pedro M. Revollo, con aporte de nu(;vos datos sobre el tema que se discute. El señor director de la revista comienza a publicar en este número un trabajo extenso sobre la psicología y orígenes de la tragedia, palabra que "proviene del griego tragos, macho cabrío; porque con ocasión de los sacrificios ofrendados a Baco, tuvo su origen el drama antiguo helénico; y así de tragos e formó el sustantivo tra gedia, que significa literalmente 'canto del macho cabrío' ", El elemento humano que informa la tragedia, mirada por su lado psicológico, es la inclinación o deseo del hombre por la "representación animada de sus propias pasiones", patente lo mismo en épocas históricas que prehistórica , y tan con tante como el miedo a la.:; fuerzas sobrehumanas y los sentimientos relip-iosos. La danza primitiva es para el autor de este artículo, como para Obermaier y la mayoría de los arqueólogos, una especie de embrión del drama y la tragedia, lo mismo en el culto de 85 ©Biblioteca Nacional de Colombia Sende r os Osiris que en el de Bochica, Por esta parte del escrito ha de verse que el señor Porras traza un cuadro comparativo de los ritos y de las pantomimas que los acompañaban, visto a la luz de la arqueología y de la historia, e ilustrado con ejemplos pertinentes. "Los libros" y "La vida intelectual" son los rótulos de las ::;ecciones finales de esta entrega. Diecisiete de las publicaciones más recientes llenan la parte bibliográfica, acotadas todas ellas con un estudiú crítico, mientras la crónica de la vida inteler.tu al contiene una serie de notas ocasionadas por el XXVI congreso de americanistas, el homenaje de España a Mitre, el cincuentenario de la vuelta de los jesuítas, los congresos de medicina y de bibliografía de Madrid, el de filosofía de Roma y otros sucesos de carácter científico y literario. EL GRAFICO.-Dil'ector, Abdías Cortés M.-Año XXV.Núme;'o 1,239.-Bogotá. julio 27 de 19~5.-Edítorial El Gráfico. "El 24 de julio de 1910 apareció El Gráfico. Se celebraba el centenario de nuestra independencia, y Abraham Cortés, que disponía de talleres tipográficos de merecida y vasta reputación fin la ciudad, quiso aportar su óbolo al acervo de ofrendas con que los patriotas regalaban a la patria, una e indivisible, en el día grato". Con estas palabras de Lenc se abre la entrega extraordinaria de El Gráfico, hecha con ocasión de las bodas de plata de la simpática re~ vista bogotana, ininterrumpida desde los días del centenario, gracias a los desvelos de su infatigable director. En dos grandes grupos podría sintetizarse el material artístico y literario di' este número especial, diciendo del primero de' ellos q®- es como el homenaje de los intelectuales a la revista, y el segundo el de ésta a sus lectores. En la primera parte o grupo van sendas notas de don Antonio Gómez Restrepo j' don Luis María Mora sobre los veinticinco años de El Gráfico, seguidas del cuento "Doña Cruz", de don Eduardo Zuleta, y de escritos de Cornelio Hispano, Angel Montoya y Serrano Blanco. La página poética corre a cargo de Mario Carvajal, Donaldo Bossa Herazo y Ricardo Nieto: habla don Miguel Aguilera sobre "el aporte de El Gráfico a la narración histórica", aporte que en este número corresponde al escrito de don Eduardo Posada sobre el viaje del doctor Saffray, realizado por tierras colombianas hacia 1860, y se cierra esta primera parte de la entrega con una nota sobre las pantallas en forma de farolillos, industria nacida y creada en Colombia. "Nuestro homenaje a los departamentos" es el epígrafe de lo que llamamos segundo grupo del material reseñado, que en lo literario se llena con sonetos de algunos de nuestro,; poptas a las principales ciudades del PQÍ3, V en Jo artístico con repI:oducciones de cuarll'os de 11intores nacionales y fotografías de los lugares e"ocados por sus cantores. Una galería de retratos de muchachas colombianas exorna asimismo estas páginas. En suma: la edición extraordinaria ele El Gráfico es un esfuerzo laudable, y not otros adherimos al homenaje que conmemora las todas de plata de la revista, a la que deseamos, para bien de la cultura patria, un éxito imp~recedern . 86 ©Biblioteca Nacional de Colombia