¿Valió la pena salvar a los bancos de la bancarrota en el 2008?

¿Valió la pena salvar a los bancos de la bancarrota en el 2008?
Escrito por Lcdo. Carlos Alberto Ruiz
Miércoles 23 de Enero de 2013 09:21
En octubre del 2008 el gobierno federal de los EEUU aprobó legislación para rescatar a varios
bancos de la inminencia de la insolvencia. La medida le costó al contribuyente norteamericano
cientos de millones de dólares y en esencia, se justificó para evitar un desplome del sistema
financiero.
También se justificó la inversión invocando salvar la capacidad de estos bancos para prestarle
dinero a las industrias y comercios. Luego de más de cuatro años del rescate, y luego de
evaluar el comportamiento de la gran mayoría de los bancos rescatados, podemos
responsablemente preguntarnos: ¿valió la pena? Luego de escuchar la ponencia de uno de los
diez economistas más influyentes del mundo, Xavier Sala-i-Martin, estoy convencido de que
dicho rescate fue un mal negocio para los contribuyentes.
Antes de explicarte las razones en las que descansa el profesor Sala-i-Martin, permíteme
compartirte parte de sus credenciales. Sala-i-Martin es un economista catalán con licenciatura
en economía de la Universidad Autónoma de Barcelona.
Tiene una maestría y un doctorado de la Universidad de Harvard, en donde fue profesor
invitado. También enseñó en la Universidad de Yale y al presente es profesor en la Universidad
de Columbia.
Es consultor del World Economic Forum (Davos, Suiza), el cual se encarga de medir, entre
otras cosas, la productividad de los países y es el tesorero del Club de Fútbol de Barcelona. A
mi entender, su mayor atributo, aparte de ser un economista brillante, es su capacidad para
transmitir los conceptos económicos complejos de forma sencilla para el beneficio del
ciudadano promedio
Sala-i-Martin entiende que tanto el gobierno de los EEUU como el de España debieron dejar
que los bancos con dificultades económicas quebraran. Su razonamiento es sencillo: aquellos
bancos quienes se tomaron riesgos excesivos y hasta irresponsables en la burbuja inmobiliaria
(“fiebre de ladrillo”), no aprenderán nunca la lección para el futuro, pues sus ejecutivos
pensarán que, cuando algo vuelva a salir mal, los gobiernos volveran a rescatarlos.
Parafraseando uno de sus ejemplos: si tú como ciudadano tomas dinero prestado para jugar
en los casinos y luego de perderlo todo vas donde el gobierno para que te preste el dinero que
perdiste, ¿qué te dirá el Secretario de Hacienda?
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¿Valió la pena salvar a los bancos de la bancarrota en el 2008?
Escrito por Lcdo. Carlos Alberto Ruiz
Miércoles 23 de Enero de 2013 09:21
¿Te prestará el dinero? ¡Claro que no! Si el gobierno te rescatara financieramente,
¿aprenderías tu lección? Lo dudo. ¿La aprendieron los bancos? Nada que ver. Espérate a
que aparezca la próxima burbuja para ganar dinero rápido y verás como tarde o temprano
explotará y nos caerá a todos encima su contenido tóxico.
La quiebra de Islandia y su rápida recuperación parece darle la razón a Sala-i-Martin. A
diferencia de lo que hicieron los gobiernos de EEUU y España, en Islandia acusaron y
enjuiciaron a aquellos banqueros que llevaron al colapso al sistema financiero de su país por
sus actos ilegales e irresponsables.
No se rescató a ningún banco; prefirieron aprender la lección de sus errores financieros y
asumieron su responsabilidad. El gobierno le condonó la deuda a los consumidores por
aquellos préstamos cuyo repago según pactados era imposible y hoy día Islandia
probablemente experimenta la recuperación económica más importante de la historia moderna.
Conclusión: La recuperación económica de toda nación, empresa o individuo es posible si se
toman las siguientes medidas: 1. aceptar la realidad, 2. tomar medidas contundentes (aunque
duelan), y 3. tomar dichas medidas a tiempo. La eliminación de deudas impagables es una
medida sumamente util para salir de una crisis económica y, por ende, no puede descartarse
sin antes considerarse. No obstante, si preferimos ignorar la realidad y seguir poniéndole
parchos temporales al problema en vez de buscar soluciones permanentes, seguiremos
padeciendo de una crisis eterna por falta de soluciones valientes.
El autor es abogado y notario, agente de alivio de deudas, con oficinas en Caguas. Sus
reacciones son bienvenidas a través del 787-286-9775 o escribir a
[email protected].
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