Josue 2 - Ibenil

LA FE DE RAHAB
JOSUÉ 2
Se puede comparar este capítulo a una historia, novela o película. Observen los componentes:
1. Los caracteres: Josué, los dos espías, Rahab, el rey de Jericó, y los mensajeros del
rey.
2. El guión: Josué envió a dos agentes secretos (espías) para recoger información vital
concerniente a la ciudad fortificada de Jericó – sus portones, torres, fuerzas militares, moral de los habitantes, etc.
3. La actriz principal, la heroína: Rahab era una prostituta de Jericó que por creer a
Dios protegía a los dos espías. Por hacerse israelita adoptiva llegó a ser parte del linaje real que eventualmente produjo a Jesús, el Mesías (cap. 4:20-22; Mt. 1:5-6).
I. Josué (v. 1, 23-24)
Datos Vitales:
1. Los críticos critican a Josué por haber enviado a dos espías, diciendo que no
era un acto de fe, sino de duda y carnalidad al no confiar que Dios daría la tierra
a Israel según su promesa (v. 1). Hebreos 11:30-31 indica que ese juicio crítico
carece de fundamento. La fe nunca elimina el sentido común. La fe y la acción
van mano a mano.
2. Los dos espías penetraron una fortaleza cananeo y llevaron información vital y
valiosa a Josué, su jefe supremo (v. 23-24). La acción de Josué no era cobardía, sino más bien la marca de un buen líder que no dejaría nada al azar. Josué
era un líder que estaría preparado con un plan para cada curso de acción. Si él
nunca se apartaba del libre de la ley (1:8), habría sencillamente seguido el
ejemplo y las acciones de su predecesor, Moisés (Nm. 13:1-2; Dt. 1:23-24).
II. Jericó
Datos Vitales:
1. Ubicación y descripción: Jericó estaba justo al otro lado del río Jordán. La ciudad estaba ubicada directamente en el camino por donde Josué tenía que pasar
con su ejército. Era una ciudad de pecado con su propio rey y ejercito. Según
los arqueólogos tenía dos muros (4.6 mts entre ambos) de unos 9 mts de altura.
El muro interior era de unos 3.7 mts de altura.
2. Jericó era una parte de la tierra que Dios había dado a Israel (1:3). Mientras legalmente la tierra ya era suya según la promesa de Dios (Gn. 15:18-21; Ex. 6:78), de hecho tenían que poseerla. Era necesario que la reclamaran como suya,
como nosotros, por fe, reclamamos las bendiciones espirituales que Cristo ha
proveído para nosotros.
3. El plan de Dios para la posesión de Canaán estaba basado en “poco a poco”
(Dt. 7:22). Jericó era la primera ciudad en su conquista. El rey de Jericó es un
tipo de Satanás. El cristiano hoy día enfrenta a su propio “Jericó”, el sistema del
mundo.
III. Los Dos Espías
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Datos Vitales:
1. El propósito para los dos espías (v. 1-2): Josué sabía que atacaría una ciudad
fuerte, fortificada por una gran destreza en las tácticas de guerra. El necesitaba
información estratégica para la batalla que venía. La palabra “secretamente” (v.
1) eliminaba la crítica innecesaria de los demás líderes. Indudablemente Josué
recordaba las consecuencias desastrosas cuando los doce espías regresaron
con su informe (Nm. 13:26-14:4). La maniobra secreta podría haber sido una
medida preventiva. Envió a dos espías para explorar la mejor manera para conquistar a Canaán. Evidentemente, los dos espías andaban por fe porque una
ciudadanía de Jericó los recibió favorablemente. Proverbios 16:7 lo expresa así,
“Cuando los caminos del hombre son agradables a Jehová, Aun a sus enemigos
hace estar en paz con él”.
2. El informe de los dos espías (v. 22-24): Dijeron, “Jehová ha entregado toda la
tierra en nuestras manos”. Su optimismo de una victoria produjo confianza en la
gente, motivándolos a adelantar con fuerza.
Una Deducción: El pesimismo mata mientras el optimismo inspira. El negativismo destruye mientras el positivismo edifica.
IV. Rahab (v. 1-21)
Datos Vitales:
1. ¿Qué tipo de Mujer era Rahab? Hubo tres ventanas para entrar a su vida:
Primera Ventana: Era una ramera (v. 1; He. 11:31; Stg. 2:25). Era una mujer
inmoral que vivía en una ciudad moralmente corrupta. La naturaleza inmoral de
su vida solamente magnifica la gracia de Dios. Dios puede usar a las prostitutas,
cobradores de impuestos, fanáticos religiosos, y aún nosotros. Rehaz se hizo un
vaso de Dios (Ro. 9:23).
Segunda Ventana: Era una idolatra. Los cananeos adoraron a las imágenes
de Asera (Dt. 7:4-5, 25; 12:1-3). Ella dio vuelta de los ídolos a Dios (I TS. 1:9).
Tercera Ventana: Era una mentirosa. Mientras no podemos justificar ni excusar sus mentiras, tenemos que recordar que ella nació y crecía como pagana.
Tampoco tenía la ley de Dios para guiarla, ni contacto con gente piadosa para
influenciar su vida para el bien.
3. ¿Qué hizo Rahab? Ella era un eco de la historia espiritual de cada hijo de Dios
porque:
a. Ella era una pecadora bajo condenación que creyó a Dios y experimentó un
cambio de vida (v. 9-13). Su fe en Dios estaba basada en lo que había oído
(v. 8-11; Ro. 10:17). Dios apartó a Jericó para destrucción, pero su gracia
salvó a Rahab y a su familia. Ella creyó y fue salva. Creemos y somos salvos
(Hch. 16:31; Ro. 10:8-10).
b. Ella demostró su fe por sus obras (v. 4, 21; Stg. 2:25). Esconder a los espías
era una obra de fe. Poner un cordón de grana en la venta (v. 18; 6:22-25)
era una obra de fe. La fe tomó una forma visible.
c. Ella buscó ganar a otras personas a Dios (v. 12-13). Rahab tomó un riesgo
calculado cuando compartió la palabra de Dios con su familia. La primera
cosa que un convertido nuevo quiere es ganar a otros a Cristo, especialmente a su propia familia (Jn. 1:35-42; Mc. 5:18-20).
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d. Ella fue librada del juicio que venía (v. 18-21; 6:22-25). Igualmente como
Rahab escapó el juicio de Dios contra Jericó, los creyentes seremos librados
del juicio que Dios derramará sobre este mundo (I Ts. 1:10; 5:9).
e.
Ella participó en una boda (Mt. 1:5). Ella se casó con judío y llegó a ser
una antepasada de Jesús por el linaje de David. Su esposo se llamaba Salomón (Rut 4:18-22). Mientras el juicio cayó sobre la ciudad condenada de Jericó,
Rahab y su familia se gozaba de una boda y de una fiesta de boda. La gracia
igualmente ha proveído una boda y una fiesta de boda para los redimidos del
Señor (Ap. 19:7-9).
PENSAMIENTO FINAL
Una fe que justifica es una fe que produce buenas obras.
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