VICTORIA EN JERICÓ JOSUÉ 5-6 Josué 5 es un capítulo de preparación. Los pasos que tomaron aquí garantizaron la victoria de Josué 6. Este era un tiempo significante para Israel. Ya están Canaán y acampado en Gilgal. La tierra estaba delante de ellos; era suya; era el regalo que Dios les dio. Pero antes de la adquisición, hubo la necesidad de preparación y guerra. Hay un enfoque en cuatro ingredientes específicos: JOSUÉ 5 – PREPARACIÓN I. Nuevamente Reinstalaron La Circuncisión (5:1-10). Datos Vitales: 1. Dios estableció la circuncisión como una marca o señal del pacto que hizo con Abraham (Gn. 12:1-3; 17:10). Por 400 años en Egipto el rito fue abandonado. Antes de poder guardar la primera Pascua y dejar a Egipto Israel tuvo que cumplirla (Ex. 12:44, 48-49). La abandonó nuevamente durante los 40 años en el desierto (5:4-5). Antes de poder adquirir la tierra era necesario reinstalarla. La renovación de la circuncisión quitó “el reproche de Egipto” (5:9). 2. La circuncisión física siempre es un cuadro de la verdad espiritual del despojo de la “carne”, o de la muerte a la vida del “ego”. El acto de la circuncisión habla de la separación e identificación. Pablo escribe de la circuncisión del corazón que separa al creyente a Dios y lo identifica como un miembro de la familia de Dios (Ro. 2:29; Col. 2:11). Pablo escribe que la circuncisión espiritual del corazón sucede en el tiempo de nuestra salvación cuando el Espíritu Santo nos une a Cristo en una relación inquebrantable. II. Observaron La Pascua (5:10). Datos Vitales: 1. Esta era únicamente la tercera vez que Israel observaba la Pascua: primero en Egipto (Ex. 12:1-20)… secundo en el monte Sinaí donde recibieron la ley (Nm. 9:5)… tercera en Gilgal antes de enfrentar a los cananeos (5:10). 2. El significado de la Pascua: El evento señaló hacia atrás a su redención de Egipto, y debían observarla anualmente. Por ser negligente la gente de Dios descuidaba su observancia. Nota: La Pascua no únicamente mira atrás a la redención de la esclavitud egipcia, sino hacia delante a la cruz para redimirnos de la esclavitud del pecado (I Co. 5:7; I P. 1:18-19). Lo que hizo el cordero pascual para Israel, Cristo hace por nosotros. El salve de la muerte y del juicio… El nos libra de la esclavitud… El nos hace seguros… El infunde confianza y esperanza al garantizar nuestro futuro. III. Se Gozaron de Una Comida Nueva (5:11-12). Datos Vitales: 1. Israel comió tres tipos de comida: o El primero estuvo en el tiempo de la pascua: “comerán la carne asada al fuego” (Ex. 12:8). Este evento previó la muerte de Cristo en la cruz por no- sotros. Mientras meditamos en los detalles del sacrificio del Señor, espiritualmente comemos esta “carne asada al fuego”. o El segundo estuvo en el desierto: “maná” (Ex. 16:35). Este evento habla de Cristo como el “pan de vida”. Como Cristo, el “maná” era sobrenatural, sustentador, nutritivo, satisfaciente, suficiente, disponible, etc. o El tercero estuvo al otro lado del Jordán: “comieron del fruto de la tierra” (5:11). Este evento significa las verdades preciosas y profundas de la Palabra de Dios, la “carne” de las Escrituras, que es esencial para la fuerza que la guerra espiritual requiere. El “fruto” habla de la resurrección porque hay que enterrar la semilla para tener fruto (Jn. 12:24). 2. La Palabra de Dios es nuestra “comida” y hace para el alma lo que la comida física hace para el cuerpo (Mt. 4:4; Job 23:12; Jer. 15:16). IV. Reconocieron al Príncipe Divino (5:13-15). Datos Vitales: 1. El soldado “misterioso” que Josué vio era nadie más que Dios mismo visitándolo. Josué tomó una posición de subordinación al “Príncipe del ejército” (v. 1314). Jesucristo había bajado para personalmente dirigir la batalla contra los cananeos. Esta aparición de Cristo Jesús antes de su encarnación en forma humana es llamada una “teofanía”. La “espada desvainada en su mano” indica su disponibilidad para la batalla. El “lugar… santo” señala la presencia de Dios. 2. Es interesante notar que lo que trajo salvación a unos (los israelitas), trajo juicio a otro (los cananeos). La diferencia era entre conocer a Dios y no conocerlo. JOSUÉ 6 – VICTORIA La ciudad de Jericó estaba “cerrada, bien cerrada” (v. 1), sin dar a los israelitas la posibilidad de entrar. La llave para la victoria no era la fuera militar sin la fe (He. 11:31). Nota: No puede haber victoria en público (capítulo 6) sin haber un encuentro con Dios en privado primero (5:13-15). En Josué 6 Dios dio tres cosas: I. Dio Una Estrategia para La Victoria (6:1-7) Datos Vitales: 1. El plan de Dios para la conquista estaba basado en una respuesta de fe a su promesa (6:2-5). El método que usó Dios era contrario al razonamiento y lógica del hombre (Is. 55:8-9; I Co. 2:14). 2. Josué habría de dirigir la batalla. La gente habría de seguir en obediencia. Dios daría la victoria. Jericó, una fortaleza estratégica cananea, presenta un cuadro vívido de la fuerza del poder del pecado sobre el mundo. El rey de Jericó tipifica a Satanás. Las estratagemas humanas y militares no funcionarían. Únicamente la acción divina podría derribar a Jericó. ¡Qué lección para el creyente cuando enfrenta a su “Jericó” (II CO. 10:3-5; Ef. 6:10-17). II. Dio La Victoria por La Obediencia (6:8-21). Datos Vitales: 1. Josué obedeció al dar las instrucciones del Señor (6:6-7). Israel obedeció al cumplir las ordenes de Josué (6:8-21) que incluía: Siete sacerdotes con siete bocinas y el arca del pacto iban delante. Esto era un cuadro la presencia de Dios entre ellos (6:8-9). El método era único: La marcha… instrumentos musicales… gritos. Marcharon calladamente alrededor de los muros de la ciudad, fielmente obedeciendo porque sabían que Dios cumpliría todo lo que había dicho (6:10). A veces el Señor puede probar nuestra fe al darnos tareas que parecen irrazonable según nuestro criterio. 2. A la vista de todos los israelitas marcharon alrededor de la ciudad. Los muros fueron destruidos por fe (6:16, 20). La riqueza de Jericó fue dedicada a Dios (6:18-29). Los habitantes de Jericó murieron por la espada (6:22). II. Dios Dio Salvación a Una Familia por Su Fe (6:22-27). Datos Vitales: 1. Se perdieron muchos (6:21). Se salvaron pocos (6:25). La diferencia era la Fe. Mientras juicio y muerto vinieron a los ciudadanos de Jericó, la vida y bendición vinieron a Rahab y a su familia. Rahab demostró su fe al poner el “cordón de grana” en la ventana. El “rojo” o “escarlata” (2:18-21) habla del sacrificio y del derramamiento de sangre. Es otro vistazo veterotestamentario de Jesús. El plan para Rehaz y su casa era sencilla y fácil para obedecer. Así es el plan de Dios para la salvación de todo aquel que creerá en Jesús. Los soldados salvaron a Rahab y su familia cuando vieron al cordón (6:17). Cuando Dios ve la sangre de Cristo cubriendo nuestros pecado, somos salvos y seguros. PENSAMIENTO FINAL Hacia donde Dios dirige seguiré. Hacia donde Dios dirige hay vida, bendición, y victoria.