5° domingo de cuaresma - Parroquia Nuestra Señora de la

Pquia. Ntra. Sra. de la Candelaria-Iglesia La Viña
2011
GUÍA LECTIO DIVINA para C.B.P.
5º Domingo de CUARESMA
10 de abril de 2011
1) INVOCAMOS al ESPÍRITU SANTO:
Ven, Espíritu Santo y envía desde el cielo
un rayo de tu luz.
Ven, Padre de los pobres,
ven a darnos tus dones,
ven a darnos tu luz.
suaviza nuestra dureza,
enciende nuestra frialdad,
corrige nuestros desvíos.
Concede a tus fieles
que en Ti confían,
tus siete sagrados dones.
Premia nuestra virtud,
salva nuestras almas,
danos la eterna alegría. Amén.
Consolador lleno de bondad,
dulce huésped del alma,
suave alivio para el hombre,
descanso en el trabajo,
templanza de las pasiones
alegría en nuestro llanto.
ORACION COLECTA:
Penetra con tu santa luz
en lo íntimo del corazón de tus fieles.
Sin tu ayuda divina no hay nada en el hombre,
nada que sea inocente.
Lava nuestras manchas,
riega nuestra aridez,
cura nuestras heridas,
2)
“Señor y Dios nuestro, te rogamos que tu gracia nos
conceda participar generosamente de aquel amor que
llevó a tu Hijo a entregarse a la muerte por la salvación
del mundo” Por JCNS
PARTIR DEL TEXTO DE LA VIDA
MIREMOS JUNTOS NUESTRA REALIDAD
En lo que va de la cuaresma y de nuestra vida cristiana hemos valorado, seguramente, la vida en gracia; la acción de Dios, casi
como si nos hubiera resucitado................ ¿Cómo hemos expresado la alegría de la salvación obra en nosotros? ¿la vuelta a la
vida?..............¿Podríamos hablar en éstos términos también en la vida comunitaria?
3) LECTURA: hacemos silencio
Ezequiel
37, 12-14
¡Habla, Señor, que tu pueblo escucha!
4) REALIZAMOS EL ECO :
5) REFLEXIONAMOS
Miramos el texto en profundidad:
¿QUÉ DICE EL TEXTO?
Esta visión –la más impresionante del libro e Ezequiel- es un mensaje de esperanza dirigido a los exiliados. Ellos son como
huesos resecos (v. 11), pero el Señor los hará renacer con la fuerza de su espíritu y los reunirá de nuevo en su país (v. 14) Al
relatar la visón, el profeta no se refiere a la resurrección de los muertos, sino que describe simbólicamente la restauración de
Israel después de los sufrimientos del destierro.
No basta sólo con hacer caer en la cuenta a sus paisanos que estaban como muertos; ya habían comenzado a experimentar la
muerte desde el momento en que fueron desplazados de su tierra y se había completado con la noticia de la destrucción de
Jerusalén y de su templo. Pero no era el final: de ese cadáver que es ahora Israel, Dios hará florecer de nuevo la vida; será una
obra exclusiva de Dios, de su Espíritu que es vida y que sólo puede transmitir vida. El mismo espíritu que aleteaba sobre las
aguas antes de la creación sea quien pueda devolver la vida a Israel.
6) MEDITACIÓN:
7) ORACIÓN COMUNITARIA:
8) ACTUAMOS: PROPÓSITO DE ESTE ENCUENTRO: personal y comunitario
APÉNDICE: Juan 11,1-45
v.4: expresión de doble sentido: Jesús será glorificado por el milagro mismo; pero este milagro traerá, su propia muerte, que será
también su glorificación.
v. 15: la muerte de Lázaro es la ocasión del milagro, que fortalecerá la fe de ellos.
v. 22: Marta confía en Jesús; pero se detiene, como en el umbral de una oración imposible.
v. 25: Marta entiende el verbo en el sentido de la escatología judía heredada de Daniel 12,2; a su muerte, el hombre baja al sheol;
Nm 16,33, como una sombra privada de vida, pero resucitará en el último día. Jesús rectifica esta idea en el sentido de una
escatología ya realizada: él mismo es la resurrección.
El que cree en él no morirá jamás, ha pasado ya de la muerte a la vida, ha resucitado ya en Cristo gracias a la vida nueva que hay
en él (Rom 6,1-11; Col 2,12-13; 3,1) La muerte tal como la concebía Daniel ha sido abolida.
Una nueva utilización de la fórmula YO SOY para introducir una definición de Cristo.
v.35: el evangelista emplea dos verbos diferentes: klaíein, lamentarse; referido a María y a los judíos y dakryein, “derramar lágrimas”
(el único empleo en el N:T.) referido aquí a Jesús. Algunos ven en esto una alusión a la agonía de Jesús, ver Hb 5,7
v. 44: Juan quiere indicar que Lázaro ha sido librado de los lazos de la muerte: desátenlo, Sal 116,3; ver Sal 18,6; Hech 2,24.
El relato es uno de los más dramáticos y significativos del evangelio. Es el signo más grande realizado por Jesús y que preludia su
muerte y resurrección. El beneficiario de este milagro es Lázaro, el hermano de Marta y de María, la familia vive en Betania, una
aldea distante tres km, de Jerusalén.
El relato encaja en la progresión de la manifestación de la divinidad de Jesús. Por eso interesa concentrarnos en la forma con que el
evangelista lo ha narrado y sobre todo en las palabras de Jesús y en el milagro realizado por él. Aquí se recoge uno de los d ichos
“Yo soy” más conocidos de Jesús.
Descripción de las circunstancias y de los personajes y anticipación del sentido del relato (3-20)
* Personajes y presentación del argumento (3-7): subraya la amistad con esta familia, la enfermedad y la confianza y amor de
parte de las hermanas. Enseguida la reacción de Jesús y el sentido del relato “para gloria de Dios” (v. 4. Destaca también el amor de
Jesús a esta familia.
* Marcha de Jesús a Juda y manifestación del sentido de su actuación (7-16) tras su decisión de ir se le recuerda que quería
apedrearle allí. Pero Jesús indica que el debe actuar mientras es el tiempo de su manifestación al mundo. “para que crean” expresa
bien el alcance del signo que Jesús va a realizar. Tomás invita a morir con Jesús, muestra el gesto típico del carácter de este
apóstol cuya firmeza y dureza veremos después en los relatos de la Resurrección.
* Situación en Betania (17-19): situación de dolor de Marta y María, con la visita de quienes vienen a consolarlas.
Encuentro de Jesús con Marta y revelación de Jesús como resurrección y vida (20-27)
* Comienzo del diálogo de Jesús y Marta (20-24) palabras mezcla de confianza en el poder Jesús y de delicado reproche a la vez
por no haber estado. Marta interpreta la respuesta en el sentido de la resurrección en el último día
*Cristo, Resurrección y Vida: quinta declaración “Yo soy” (25-26) todo esta preparado para la gran revelación. El diálogo con
Marta prosigue. Jesús se autopresenta como la resurrección y la vida. Después la invitación con promesa. La condición es creer en
Cristo y la promesa es la resurrección, la vida, incluso a pesar de a la muerte corporal. La segunda parte de la promesa habla de
una vida eterna, que comienza ya aquí con la fe en Cristo: Todo el que vive y cree en mí no morirá jamás. Esta declaración de Jesús
es la gran victoria sobre la muerte y la gran proclamación de la vida que nos llega con el hijo de Dios. El episodio de Lázaro es una
ilustración y una prueba de esta palabra central de Jesús.
* Acto de fe de Marta (26-27) ¿Crees esto? la respuesta de Marta es una profesión de fe cristológica
Encuentro de Jesús con María: conmoción y llanto de Jesús (28-37)
El maestro está ahí y te llama, María se postra como discípula. También Jesús se conmovió interiormente y se echó a llorar. Los
judíos decían, miran cómo le quería.
El milagro (38-44)
Para contemplar la gloria de la hora del poder de Jesús es necesaria la fe.
Jesús ora al Padre, le da gracias como si ya lo hubiera escuchado. Comienza diciendo “Abba”· La acción de gracias es considerada
como la forma más excelsa de oración.
La finalidad de su oración y de su actuación es que los asistentes reconozcan que Jesús es el Mesías, el enviado del Padre.
Lázaro , sal afuera. Y salió con las vendas y envuelto el rostro en un sudario. Desátenlo y déjenlo andar.
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Leída simbólicamente, la enfermedad y la consiguiente muerte de Lázaro ejemplifica lo que nos hace el pecado. Sino se busca la
curación a tiempo, la enfermedad puede llevar a la muerte espiritual. Como las hermanas de Lázaro necesitamos amarnos a
nosotros mismos, a nuestros hermanos y hermanas, amigos y parientes, lo bastante para buscar la ayuda de Jesús antes que sea
demasiado tarde. Jesús es el remedio para el pecado, el único salvador del mundo.
La resurrección de Lázaro es una catequesis sobre la fe en la resurrección. Muestra que Jesús es más fuerte que la muerte, y
que su vida termina dando vida. El mismo resucita, porque es la resurrección y la vida. El personaje central del relato es, Jesús base
de la vida cristiana. San Juan relaciona siempre la fe con al vida. La fe en Cristo es una participación en la vida, que se hace plena
en el bautismo.
Dicho de otro modo, la fe y el bautismo nos hacen participar en la vida del resucitado. Los otros personajes del relato son:
Lázaro que representa a los cristianos; los discípulos, llenos de miedo y de lógica humana; Marta (más que María, que es
secundaria), afligida y llena de esperanza, finalmente, los judíos que, que deciden en el Sanedrín, con ocasión de la resurrección de
Lázaro, condenar a muerte a Jesús.
El primer diálogo de Jesús con los discípulos se desarrolla en un clima de miedo a la muerte. Marta representa a la comunidad
en instancias de crecer en la fe, y María a la comunidad en estado de dolor, esencial es en el relato la afirmación de Jesús a Marta:
Yo soy la resurrección y la vida. Jesús produce la vida en otro y en sí mismo; Jesús es la resurrección, del mismo modo que e s el
pan de vida, el agua viva, la luz del mundo, el camino, la verdad y la vida.
La fe es respuesta al llamada de Dios; María responde, pero no los judíos Jesús vence a la muerte y confiere la vida. A sus
discípulos los libera del miedo al a muerte (el que cree no morirá) y les invita a fiarse de su palabra y a tener confianza en Dios.
El creyente, en virtud de la fe y de su celebración sacramental, entra en contacto con la persona de Jesús, que es la vida.
El creyente comulga con fuente de la vida. Esto obliga al cristiano a cambiar de vida. Precisamente se llama a la conversión paso de
la muerte a la vida. Esta vida poseída por la fe debe ser mantenida y cultivada. El cuerpo de Cristo resucitado es verdadero alimento
y su sangre es verdadera bebida. La unión vital con Cristo-Vida debe traducirse en la unión con los hermanos y con los hombres a
través del amor.
Señor, tú que eres la resurrección y la vida, lléname de la vida nueva de tu gracia, renueva mi ser, mata al hambre viejo que llevo
dentro e inúndame con la vida del hombre nuevo que eres tú, Jesús resucitado.
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