Killer road: el disco de Patti Smith que revive el mito

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LATERCERA Domingo 4 de septiembre de 2016
Sociedad
Espectáculos
RR Los integrantes de Soundwalk Collective posan junto a Patti y Jesse Paris Smith. FOTO: MICHAEL STIPE
Killer road: el disco de
Patti Smith que revive
el mito de Nico
R La solista y su hija rinden
tributo a la artista alemana
en un nuevo álbum.
Andrés del Real
La historia oficial dice que
Christa Päffgen sufrió un ataque cardíaco mientras andaba en bicicleta por Ibiza, durante la calurosa mañana del
18 de julio de 1988. Un taxista encontró inconsciente en la
calle a la musa de Andy
Warhol y cantante de The
Velvet Underground -más
conocida como Nico- y tras
varias dificultades para poder
ingresarla a un hospital y luego de un errado diagnóstico
de insolación, ésta falleció a
las 8 de la tarde de ese día a
causa de una hemorragia cerebral, según exámenes posteriores. Su hijo, Ari, tiene
una visión más poética de lo
ocurrido. “Fue el sol el que la
mató”, asegura en el documental Nico icon, de 1995.
Las imágenes de aquella fatídica jornada en el Mediterráneo, la última en la vida de
una de las figuras más enigmá-
R Jesse Paris Smith habla con
La Tercera del proyecto,
que lanzaron el viernes.
LEGADO
49
años tenía Nico al momento
de su muerte. Dejó seis discos
solistas, entre éstos el celebrado Chelsea girl (1967).
ticas de la música de los años
60 y 70, son las que inspiraron
Killer road: un álbum tributo
a la artista alemana a cargo de
Patti Smith, su hija Jesse y el
grupo Soundwalk Collective.
Un proyecto que se materializó primero en vivo, hace dos
años y con sólo cuatro presentaciones, y que el viernes pasado se lanzó como disco.
“Sentíamos que había que
hacer algo después de esas performances, que tuvieron una
energía muy especial, compartir este material para que la
gente que no estuvo ahí pueda ser parte de esto”, explica
Jesse Paris Smith sobre el álbum, que realza el universo
creativo de una artista reconocida tardíamente, cuyo singular trabajo autoral se vio opacado por las anécdotas de su
propia vida, tan fascinante
como trágica.
Con una primera mitad en
estudio y la segunda en vivo, el
disco combina diversos medios con el fin de reconstruir
las últimas horas de vida de
Päffgen. Por un lado, Patti
Smith se encarga de recitar y
reinterpretar algunos de sus
textos, varios de éstos inéditos
y otros extraídos de los seis
discos que publicó en solitario
entre 1967 y 1985. En tanto, el
colectivo neoyorquino y Jesse
Smith crearon la base sonora,
donde se mezclan música y
sonidos reales que evocan a
esa tarde en la isla española.
RR Nico en Chelsea girls, de Andy Warhol. FOTO: ARCHIVO
“Los miembros del colectivo
tenían una casa en Ibiza y pasaron mucho tiempo recorriendo los lugares por los que
Nico paseó y juntando sonidos
que ella debió haber escuchado. Yo me encargué de instrumentos como el metalófono, la
marimba y el waterphone, que
suena como olas chocando en
la playa”, detalla Smith, hija de
la autora de Horses y del fallecido Fred “Sonic” Smith, guitarrista de MC5.
Camino asesino
Killer road se gestó hace algunos años y de casualidad, durante un vuelo entre París y
Nueva York. En éste quedaron
sentados uno al lado del otro
Patti Smith y Stephan Crasneansck, de Soundwalk Collective, quien le comentó a la
artista sobre el proyecto. A su
vez, Smith le habló de su admiración hacia Nico y cómo a
fines de los años 70, en pleno
apogeo de su carrera, rescató
de una tienda de empeño el armonio de la alemana, el instrumento con el que ésta grabó
varios de sus temas.
“Mi mamá lo salvó para devolvérselo algún día. Ahora
usamos en el disco algunas
grabaciones que ella hizo en
ese instrumento”, cuenta Jesse, quien reconoce que hasta
antes de este proyecto lo que
sabía de Päffgen se limitaba a
aquellos hitos que cimentaron su leyenda: su época de supermodelo quinceañera; su
participación en filmes como
La dolce vita, de Fellini; un
fugaz romance con el actor
francés Alain Delon que terminó con un hijo no reconocido,
además de sus días en Nueva
York como musa de Bob Dylan
y Andy Warhol, quien la ubicó como vocalista en el célebre
primer disco de The Velvet
Underground, pese a la resistencia de Lou Reed.
A partir de entonces, la alemana inició una singular carrera solista de pop barroco y
letras introspectivas, que influyó a una serie de artistas
posteriores -como Morrissey,
Björk y la propia Patti Smithy que terminó de modo fulminante esa tarde de julio de
1988, justo cuando empezaba
un proceso de rehabilitación
de las drogas.
“La de Nico es una historia
llena de misterio, enigmática.
Cuando piensas en esa última
etapa de su vida y lees sus poemas, hay una tristeza subyacente, un sentimiento melancólico”, dice Smith, quien no
descarta a futuro sumar más
partes al proyecto. “Ya tenemos muchas ideas”, cuenta. b
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