Falacias de la Derecha Extrema Alfonso López-Chau Universidad Nacional de Ingeniería A fuerza de repetirse, algunas afirmaciones económicas aparecen como ciertas e inamovibles. Parecen obedecer mas a la ideología y a la intención política que al análisis y al propósito sano de promover el debate. Entre las afirmaciones a las que nos referimos se encuentran los siguientes: 1. Los Sectores Estratégicos y el Estado Una y otra vez, en los últimos años, diferentes analistas no solo han argumentado sobre la inexistencia de sectores estratégicos, sino que han sostenido también, la inconveniencia de auspiciarlos y promoverlos. Sin embargo, cuando se mira el tema desde una perspectiva mundial, nos encontramos con que los sectores estratégicos existen, y no sólo son estudiados académicamente, sino que son propuestos y defendidos geopolíticamente. Así lo demuestra la investigación de Mónica Bruckmann con el título de “Recursos Naturales y la Geopolítica de la Integración Sudamericana”. Para probar que existen sectores especialmente importantes para el destino de los Estados, Mónica Bruckmann, demuestra que la visión estratégica del desarrollo científico de los Estados Unidos, se expresa en el Informe Facing Tomorrows Challenges: U.S. Geological Survey Science in the decade 2007 – 2017 (USGS). Para la investigadora, la Agencia está ligada al Departamento del Interior de los Estados Unidos. En el prólogo del Informe mencionado se lee esta sorprendente sustentación: “Durante la próxima década El Gobierno Federal, la industria y otros sectores necesitarán una mejor comprensión de la distribución nacional y global, origen, uso y consecuencias del uso de estos recursos para dirigir asuntos relacionados a la seguridad nacional, la gestión de los suministros internos de la nación, la predicción de las necesidades futuras así como anticipar y guiar cambios en los patrones en uso, facilitar la creación de nuevas industrias y asegurar el acceso a suministros apropiados” (la traducción es de la autora). El documento citado fue preparado por más de cincuenta científicos quienes plantean que la dirección central de la estrategia de ciencia “está basada en la visión de que la complejidad de medición, mapeamiento, comprensión y predicción de la situación y tendencias de los recursos naturales gestionados en los Estados Unidos trascienden la estructura tradicional del USGS y requieren desarrollar ampliamente un pensamiento y una acción interdisciplinaria, definiendo áreas prioritarias y oportunidades para servir a las necesidades más urgentes de la Nación de cara a los desafíos del siglo XXI”. 1 ¿Existen o no recursos estratégicos? ¿Son adivinos los científicos e intelectuales norteamericanos, o simplemente son conscientes de sus intereses estratégicos en el mundo? ¿Podrá tener algún día el Perú, un centro intelectual preocupado por los intereses estratégicos de la nación peruana en el mundo? ¿Seremos capaces de sostener que los científicos e intelectuales norteamericanos que prepararon el Informe, son torpes y mercantilistas, y que nosotros somos inteligentes y liberales? 2. La Política Económica y los Términos de Intercambio Cada vez que nuestro país tiene tropiezos, encontronazos, baches o crisis de balanza de pagos, uno de los libretos que siempre llama la atención es el recurrente reparto de las culpas y los méritos. El libreto repetido es más o menos el siguiente: todo lo malo es tu culpa y todo lo bueno es sólo mérito mío. Así, cuando el país crece, los méritos se atribuyen exclusivamente a la calificación técnica y a la habilidad de los sectores dominantes dentro y fuera del gobierno. Por el contrario, cuando las inversiones se contraen, cuando la economía se desacelera o deja de crecer, la responsabilidad es exclusivamente del gobierno y de las influencias (inexistentes por supuesto), de populistas e izquierdistas agazapados en los distintos niveles del Estado. Lo cierto, sin embargo, es que ni los méritos son exclusivos de la derecha neoliberal, ni los deméritos económicos son de exclusiva responsabilidad del gobierno. Tampoco son exclusivas las cifras macroeconómicas que desde hace una década exhibe el Perú, deslizando la idea de que la implementación de las políticas económicas neoliberales, en el Perú es la única responsable de las cifras macroeconómicas en azul. Lamentablemente para esta forma de analizar los problemas económicos, existen investigaciones provenientes de instituciones con interpretaciones mas serias, como la del entonces Director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, N. Eyzaguirre, quien en la revista Finanzas y Desarrollo de marzo del 2011, señalara: “El crecimiento económico de la región fue de alrededor de 6% en 2010, y según las proyecciones actuales rondará 4% - 5% en los próximos años; es decir, aún muy por encima del promedio de menos de 3% registrado en tres décadas”. ¿A que se debió este éxito de América Latina y el Perú? A una verdad del tamaño del Estadio Nacional. A: “circunstancias internacionales han favorecido un periodo de bonanza en América Latina caracterizado por el acceso fácil al financiamiento externo y términos de intercambio elevados, principalmente para los países exportadores de materias primas. Sin embargo, estas condiciones favorables no son permanentes por lo que resulta esencial manejar esta abundancia para evitar un ciclo de auge y caída en los países de la región” (tomado del Documento de Análisis del Personal Técnico del FMI. SDN 11/07). 2 De manera, que mucho tuvo que ver este doble viento a favor en la explicación del crecimiento de América Latina y el Perú. Y mucho tiene que ver ahora con el giro en sentido contrario de los términos de intercambio. No es la tramitología, que existe; no es el ruido político, que existe también. Es el doble viento, que ahora se torna en contra. Argumentar que la tramitología y el ruido político es la explicación central de la caída de la inversión privada, es creer que las columnas endebles, que las estructuras de una casa, son menos importantes. Que mas importante es pintar la sala y el comedor para ahuyentar a las moscas y los zancudos. En el 2000, en el 2006, en el 2007, en medio de la fiesta, en medio del resplandor de las cifras, debimos aprovechar el viento a favor para sentar las bases, de lo que hoy se discute, y el pensamiento único no quiso ver: la necesidad urgente de “diversificar la exportación para reducir con el tiempo la dependencia de las economías avanzadas y de las exportaciones de las materias primas”. Nada de lo anterior exime de responsabilidad a Ollanta Humala en la conducción del Estado. Pero igualmente nada de lo anterior exime de responsabilidad a los neoliberales que se cegaron con los destellos de los elevados precios internacionales del oro y el cobre. 3. El Desempleo Neoliberal El canon de la economía clásica y neoclásica o neoliberal, postula que cuando los mercados funcionan plenamente, competitivamente y sin interferencias teóricamente no tiene por qué existir el desempleo involuntario. ¿Cómo? ¿Quiere decir que los desempleos del mundo, de América Latina y del Perú, son desempleados voluntariamente? Esta discusión fue el centro de la crítica de Keynes a la economía clásica, quien, con un lenguaje distinto, (que se comprenderá que no podemos usar aquí), recusó en su fundamento los “postulados de la economía clásica”. ¿Y qué dicen los postulados básicos de la economía clásica? Señalan, que el mercado de trabajo, funciona como todos los mercados, esto es, que se subordinan a la ley de la oferta y la demanda. Si un producto sube de precio, su demanda caerá y si baja de precio su demanda subirá. O al revés, si sube el precio, ofrezco más, y si baja ofrezco menos ¿Y cómo funciona esta ley para el mercado de trabajo? Los neoclásicos y neoliberales sostienen que funciona de la misma manera. El salario es el precio. Los seres humanos ofrecen su trabajo. Las empresas demandan trabajo. Ambas, oferta y demanda, se equilibran por el precio, es decir por el salario al que acuerdan los empresarios contratar y los seres humanos aceptar. Por lo tanto de acuerdo con este libre juego de la oferta y la demanda, no tiene por que existir desempleo involuntario. Así, un empresario no contratará a nadie que pida un salario muy alto. Bajé usted sus pretensiones y procederé a contratarlo. Puestas así las cosas la explicación neoliberal emana de manera contundente, pero escalofriante y absurda. Los 3 millones de desempleados del mundo son desempleados voluntarios, porque el salario que piden está por encima, del que estipula la ley de la oferta y la demanda. Bajen sus pretensiones salariales desempleados del mundo y tendrán empleo. Ustedes están desempleados porque quieren, son desempleados por su voluntad, porque se niegan a bajar el precio, el monto solicitado como salario, increíble pero así está sustentado. En palabras de Keynes “los postulados clásicos no admiten la posibilidad de una tercera, que definiré como involuntaria” Keynes era seguidor y discípulo militante de la escuela clásica. Dijo en su momento, “Yo mismo defendí durante muchos años con convicción las teorías que ahora ataco”. Keynes rompe con su pasado diciendo: el caso de ustedes es un caso particular, no es un caso general. Para explicarse académicamente, Keynes escribió la “Teoría General de la Ocupación el Interés y el Dinero”. 4