,ICTA ,~IH) PORT. S,,pI! 1. 9. 1981 ALTERACIONES BIOQUIMICAS DE LAS COLESTASIS. REPERCUSIONES A NIVEL PERIFERICO A. Martinez Fernandez Bioquimica. Cidade Sainidria 1.’ de O,aubro. Madrid 1. Bioquimica da co/esta sis La función biliar consiste en ia secrecion y excreción de bilis y otros elementos por las vias biliares ai intestino. Esta función es compleja y segón los casos ei higado debe realizar: — Sintetizar, con otros compuestos, un elemento ausente en ei higado, tal es ei caso de ias saies biliares. —. Transformar un elemento preformado en la ceiuia hepatica p.e. la conjugación de ia bilirrubina. — Excretar, sin transformar, algún elemento presente en sangre circuiante, p.e. ei colesterol. Por tanto, desde ei punto de vista bioquimico, la colestasis es la aiteración de estas funciones con su correspondiente retencione de productos en ei organismo, asi como las consecuencias que irrogan la no ilegada ai intestino de saies biliares con los deficit de absorcion. Brevemente se revisa los hailazgos bioquimicos actuales sobre ia función biliar. La bilirrubina procede en ei 8591 de ia lisis eritrocitaria y en un 159” de los anilios porfirinicos no hemogiobinicos. No entro en ei mecanismo de formación de bilirrubina desde ia hemogiobina por no ser de interés en ei proceso que nos ocupa. La biiirrubina inicial (Figura 1) no está conjugada, es decir es una sustancia apoiar y por tanto no solubie en medios acuosos, como es ei plasma. Es vehicuiizada1~asta ei higado, unida a la albumina. Liegada ai hepatocito, es captada (no se conoce su exacto mecanismo) y en su citoplasma se une a dos proteinas citosolicas: Y y Z. La proteina Y tiene especial afinidad por ia Bilirrubina y algunos colorantes como ia B.S.P. y aniones organicos en tanto ia ‘Z proteina liga preferentemente los acidos biliares. Hay aiguna patologia relacionada con un deficit cualitativo o cuantitativo de estas proteinas? Solo investigaciones posteriores nos permitiran esclarecer estos hechos. Ya dentro dei hepatocito se efectua la conocida conjugación (giucuronica y otras) a nivel microsomal, la bilirrubina no conjugada se hace polar y por tanto soluble en medios acuosos, siendo posible su excreción por ei canaliculo. Los mecanismos intimos de ia excreción no son aún bien conocidos, si bien sabemos que la excreción ai canaliculo biliar es un proceso activo, que precisa energia. Aquí ia excreción de bilirrubina compite con ia de varios medicamentos, colorantes, tiacidas etc. Es ei lugar de ciertas colestasis medicamentosas. En ia formación de ia bilis (Fig. 2), intervienen las saies biliares. Algo mas dei 70% dei residuo seco dei fiujo biliar canaiicular está representado por estas saies biliares, ias cuales son segregadas en forma de micelas, que son a su vez reguladoras, por osmosis, de ia excreción de pigmentos biliares, aniones y agua. No es este, sin embargo ei unico mecanismo de excreción biiiar. Si se bioquea la excreción de derivados de acido colánico, persiste cierta excreción biliar a través de otro mecanismo activo de transporte ‘o A. MARTINEZ FERNANDEZ de sodio, cuya energia es aportada por ia hidrolisis dei ATP, por una ATPasa. Otra accion coleretica se aprecia a nivel de los ductulos, hay una secreción-reabsorpción activa dei bicarbonato, cloro y sodio y secundariamente de agua, todo elio regulado por la secretina. Asi mismo ia presión de excreción es de 10-15cm de agua. Esta excreción es abolida cuando ha de sobrepasar los 30cm de agua, debido a obstaculos en su arbol biliar. Dentro de ias sustancias eliminables por la secreción biliar se ha considerado la Fosfatasa alcalina. Desde hace mas de cuarenta anos esta enzima ha sido de gran utilidad en ei diagnostico de los sindromes colestasicos. Hoy sabemos que ia elevación serica de este enzima de la «colestasis» no es debida, como se creyó, a una dificultad de su excreción si no a una inducción de su formación, al igual que otras enzimas de ia membrana dei conducto excretor biliar, tal como Ia nucleotido-pirofosfatasa. De gran interés es ei estudio de ias fracciones (Fig. 3) de ia fosfatasa alcalina, personaimente y con nuestra metodologia, hemos bailado siempre, en los procesos colestasicos, una banda catodica muy elevada, ia ilamada banda R, estacionaria o biliar. Ai parecer esta banda estacionaria es debida a la union con una lipoproteina de baja densidad la conocida como LPX. Con un criterio similar, de bandas biliares están ia citada pirofosfatasa, alfa-leucil beta-naftiiamidasa y Gamma-giutamiltranspeptidasa. ls~°~~°hs H_~_Her€670~e5t5 ~ + ~ j~ 1 Hi~ado sLq€.~5o~c(e I~ epa.to c’ to Ca’,aPtccA°o tfi/c51L’,o de/~,~zd0 COL’o,~ Fig. 1 Esquciia dcl ,,ictabo/i.rmo dc la b,lirrubma De los tres apartados que citabamos de la función biliar la sintesis biliar de saies biliares, no parece estar alterada en los processos colestasicos puros, sin afectación hepatocitaria. Tampoco ia conjugación de sustancias con la bilirrubina o con la B.S.P. Desearia en este punto, aclarar la utiiidad, en ei caso de ias coiestasis, la inutiiidad de la prueba de la B.S.P., siempre que haya una colemia elevada. Las razones son ias siguientes: Por un lado los lugares de iigazon de ia bilirrubina a ia albumina son comunes con los de la B.S.P., con lo que si estan saturados no es posibie vehicuiar ei colorante ai higado para su conjugación. En se~undo lugar la remoción de la B.S.P. porei higado comprende la conjugación dei colorante en forma de mercapturo con ei componente cisteina dei giutation. La reaccion de conjugaclón de ia B.S.P. con ei giutatión es limitante, regulando ia tasa de II ALTERACIONES BIOQUIMICAS DE LAS COLESTASIS remoción dei colorante por ei higado. Este mecanismo está alterado, no por deficit de glutatión, sino por ias modificaciones dei poder tensioactivo citosolico de las saies biliares. Todo elio podria dar lugar a un falso concepto de retención de la B.S.P., por deficit de conjugación hepatocitário, que no existe. Secrec.o,.—j ?Lct4va ~ Sd/.fl.&~tn,S ® ~ecree~o~ Depen~enIe de Ia de sdle~ b,I.~ares ®In~epd~ee(~ de Ia de saIe, ~,,LaIe~ Secrctin~ í~8dI~~. i~u) I~g. 2 es — ,i tÏ4 (4’ :~ ~ ~. ~ é... S~paracion dc~ las Iracciones de la fosfatasa alcalina 12 A. MARTINEZ FERNANDEZ Si parece alterada la excrecion de sustancias, asi es frecuente ia aiteración de excreción de bilirrubina conjugada, de la B.S.P. y de ia colesterina. Por tanto a nivei hepatico, esta ocurriendo, esquematicamente, un deficit de excreción con elevación secundaria de bilirrubina conjugada, saies biliares, colesterol y fosfatasa alcalina. En nuestros 103 casos de colestasis, independiente de ser intra-extrahepatica, ia bilirrubina estaba elevada en ei 98,7% de los casos, ei colesterol era superior a los 300 mg/dl. eu ei 56% de los casos y la fosfatasa aicahna en ei 77,3% de los casos. Hemos de advertir que las transaminasas eran superiores ai valor normal, ai menos en aigún momento, en ei 27% de los casos. Repercusiones perifericas. L.a interrupción mantenida dei fiujo biliar, no importa por que causa, vá a dar lugar a manifestaciones sistemicas: a) Por persistencia en sangre de productos que debrian eliminar-se por las vias biliares. b) Por su ausencia eu ei intestino delgado, de bilis y saies biliares. c) Por ias alteraciones de estas sustancias sobre ei hepatocito independientemente de las causas patogenas sean proprias de ia enfermedad responsabie. a) La persistencia en sangre de bihrrubina conjugada dá lugar a una ictericia, que no sobrepasará a los 30 mg dl, ya que este es ei dintei renal, ilegado a este nivei ia presencia de bilirrubina, eu orina, es muy evidente. La retención de acidos biliares, especialmente ei acido quenodesoxicolico, actuam como tensioactivos intraceluiarmente disminuyendo la actividad dei reticulo endoplas mico, con la inhibición de la giucuronidoconjugación, y lesion dei citocromo-microsomal P-450. Esto es preciso tenerlo en cuenta a la hora de juzgar como hemoliticas ciertas bilirrubinas no conjugadas en ei curso de una ictericia obstructiva. Eu cuanto a ia hepatotoxicidad a otros acidos biliares como ei litocolico, hay dudas. La interpolacion de experiencias animales, con respecto a la patologia humana con ei citado acido biliar, es dudosa. Asi mismo la retención de acidos biliares, colesterol, algunos fosfolipidos (rela cion lecitina-lisolecirina), aumentan la resistencia osmotica de la membrana eritrocitaria dando lugar a ia aparición de dianocitosis. La retención de colesterol y fosfolipidos modifica ia normal discribución lipopro teica y dan lugar a la eievación de las betalipoproteinas y en ocasiones a la aparicióu de la lipoproteina X, distinta de la A y B normales, aunque la frecuencia de esta LPX es importante en los cuadros obstructivos, no lo es tanto, eu nuestra opinion, como se ha barajado en la literatura. La proporción de colesterol total esteres de colesterol, no suele alterarse hasta periodos avanzados. Ei enzima responsable de la esterificacion, la Lecitincolesterileste rasa, eu nuestras manos solo ha sido util, por su descenso eu casos de colestasis de ias cirrosis biliares primarias y de menor valor que las pruebas inmunoiogicas, tales como los anticuerpos antinucleares. b) Por su ausencia eu ei intestino. La falta de saies biliares y de bilirrubina dan lugar a las conocidas heces hipo acolicas por ausencia de estercobilinogeno. Ei failo dei cicio enterohepatico da lugar a la ausencia de urobilinogeno-urobilina eu orina a si mismo ia presencia de bilirrubina en orina. Todo elio muy variabie y dependiendo de ia intensidad de ia obstrucción. Si la colestasis se prolonga, hay un deficit de la emuision de ias grasas a uivei intestinal con una esteatorrea por falio absortivo de las mismas. Si hicieramos mas estudios de grasas fecales veriamos que este fenomeno es mas frecuente que ia que se iee eu ia literatura. Este deficit de absorción de grasa lo es tambien para las vitaminas liposolubles. Especialmente precóz es para la vitamina K, lo que condiciona la defectuosa producción ALTERACIONES B1~QU1M1CAS DE LAS COLESTASIS 13 de protrombina, factores VII, IX y X, que en ocasiones pueden ser causa de una impor tante hipocoaguiabilidad. De menos interes practico, pero no teorico, son los deficit de vitaminas A y D, su evidencia en cuadros obstructivos ya que los depositos de estas vitaminas duran meses. Los deficits de vitamina A originan lesiones mucocutaneas, oseas y hemeralopsia, en tanto que para ei bioquimico tiene mayor atractivo las deficiencias de vitamina D que pueden originar una defectuosa cálcificación, traducida por un Fosforo sanguineo bajo, un Calcio sérico normal o bajo y una elevación de la fosfatasa alcalina. Insistimos una vez más en la utilidad de fraccionar las isoenzimas de la fosfatasa alcalina, especialmente para descartar ei componente oseo en casos de obstrucciones biliares, de tiempo de evolución. c) A!teraciones de las sustancias sobre ei hepatocito, independientemente de las que le sean propias de la enfermedad responsable. La accion lesiva de acidos biliares, algunos fosfolipidos, etc. pueden actuar sobre la permeabilidad de membranas celulares y actuar sobre ei interior celular. As veces esta accion es precoz y transitoria, un ejempio de este es la transaminasemia elevada y transitoria que se dá en ei inicio de algunos cuadros obstructivos, con evidente afectación extrahepatica. Aportaciones dei J..aboratorio de Bioquimica ai diagnostico de ias coiestasis. La incidencia de ictericias colestasicas, en nuestros hospitales han sido de: 8983 ingresos en ei Servicio de Medicina Interna, 103 casos fueron ictericias colestasica, lo que corresponde a 1 ,l4~ de toda ia patologia. Sobre estes dates está basada nuestra cornunicación. El redimniento diagnostico clinico de las colestasis en estes casos fueron: Diagnostico etiologico correcto Diagnostico correcto extra/intra Errores diagnosticos 48,8~ 72,7~ 27,3~ Estes clatos están referidos a un diagnostico, aplicando todos los datos comple mentarios, analíticos o otros. Como vemos, ai menos, una cuarta parte dei diagnostico no ha sido correcto. De los parametros bioquimicos que implican colestasis son dos los de mayor importancia: La bilirrubina y ei aumento de ia actividad de la fosfatasa alcalina. Dentro de esta, y en nuestas manos, ia fraccion catodica de los isoenzima de la misma. Cierta mente ambos parametros son precoces y fidedignos de ia iniciacién de una colestasis, generalmente preceden a la siritomatologia clínica. Por ei contrario, si noso~ros intentamos liegar ai diagnostico de colestasis y dife renciar extra o intra, aplicando los valores de fosfatasa alcalina, en las diversas ictericias colestasicas los valores son similares y no nos permiten la diferenciación (Fig. 4). Otros de los enzimas, considerados como indice de coiestasis, la gammaglutamii transpeptidasa, ha sido aplicada a estes casos, sin que nos permitan ilegar a una diferen ciación entre ambos procesos (Fig. 5). Se intentó ver si ei cociente G.O.T.-G.P.T. Fosfatasa alcalina podría ter utilidad, dado que en ei numerador estaria la afeccion parenquimatosa y en ei denominador ia coiestasis, sin embargo (Fig. 6) no resultó discriminatorio. Asi mismo se intentó un sistema de dobie entrada (Fig. 7). En una de las caras se inciuye ei cociente Bilirrub/GGT en otro Bilirrub Fosfatasa alcalina y en ei tercer lado Biiirrubina/GOTGPT. Como puede verse no hay una distribución preferencial entre colestasis extra-intrahepaticas. No es pues valido para los fines que habiamos propuesto. A. MARTINEZ FERNANDEZ 300 300 253 12’ ~icc 75 11 T • Ca.PanCrtSZ V Ca. Vesfatia • ‘a. 3120 I0p0’1~00 •Oas,creatitio Cr. • • ti000.~i~ ~ 1’~oa • CO. • C~.2ilior Pri000ia ‘1i1i0re~ 0,~o.i0 .;~:. ~ 50 2~ EXTRA Fig. 4 — Valores de fosfatasa alcalina co co/estasi.r extra V intrabepáticas INTRA 500 • Lit. 300 I~ CO 250 ~ Lit. Lit. 175 • Aalp. 125 Paa.C~. CO • cPS • rotoa. 1550 733 710 CO Lot. C.IIi. .Ag. t $ • 2.A100hl. 100 75 •• . . e 50 — ‘Valores de Gammaglutamil transpeptidase co colestasis extra .v intrahepáticar 19.5 11.4 ‘1.5 5.4 4.5 5.2 4.6 •;~~• 25 Fig. 5 gx’rRA IN’IRA EXTRA 5.°R i) 4097. Aia. s,,’r • . ~T1Â 11110919 ~LtITIS TU10~ ~A10A519 XOLRIRITII Fig. 6— Valor G.O.T..G.P.T./Fbsfatara alcalina no diagnóstico diferencial de coles tasis extra p intrabepática ALTERACIONES BIOQUIMICAS DE LAS COLESTASIS COIPO~ÂIImI’rO D~ LOS P~K~OS ~ÁTICOS ~ Li COLOS?ÃSIS • D~TRAH~ATICAS • ~TR~À~ICÂS mi., ~P~f.Aio. 2 Fig. 7 mi. / ~T — Coinpor:ainiento de los cocientes bilir./EGT, bilir./Fosf. alc. j’ bilir./GOT GPT co ei diagnostico de cole.rtasis + Prot. Alb. 8 ~0 3.5—4 60—80 3—3.5 4 3 40—60 5.5—3 2 2.5 1 40 Fig. 8 — Función hepatocelular co la cole stasis O~o F~moi. EX’rRA ~CI~ ~L?!CÂ ~T LÁ COLO3TÁSIS Por último, y estimando que la alteración real del hepatocito, debtía ser, mas importante en la colestasis intrahepatica que en la extrahepatica hicimos una clasifica ción (Fig. 8) de la función hepatocelular, bajo los parametros de: Actividad de protrombina. Albumina. Con estos dos parametros hemos dividido nuestros pacientes en cuatro grados, estimando como la mejor función ei grado 4. Una vez mas, nuestro intento ha sido fallido, no nos es posible llegar a diferenciar lo tan deseado por todos, clínicos, quirurgi gos y bioquimicos, la diferenciación entre ambos tipos de lesión. Conun criterio diferente y por supuesto de mayor efectividad es ei trabajo presen tado por Plonteaux, en ei cual partiendo de un numero elevado de parametros de los cuales posteriormente y mediante un metodo matematico solo precisa diez, (Fig. 9A) liega a diferenciar los procesos intra-extra hepaticos con un error de tan solo 7 casos de los 95 estudiados (Fig. 9B). A. MARTINEZ FERNANDEZ 6 De poderse realizar este estudio matematico, este es nuestro proposito, la diferen ciación podría mejorarse, ya que la problematica no es en utilizar test dificultosos o sofisticados, si no en aplicar un criterio matematico. Si consiguiermos reducir nuestro error de algo más dei 25% ai un poco más de 7%, seria de gran ayuda en ei diagnostico, siempre complejo de ias ictericias colestasicas extra-intrahepaticas. Tabla 1 Tcsts d cxp/ora!lofl fonclione/le hépatique (30 pala mèt res /tiid,és) 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. Bilirubine corale Phosphatases alcalinas 5-Nucléotidase LAP 1 1. 12. 13. 14. 15. 6. 7. 8. 9. 20. y-GT Estérases A Estérase C Thyrnol Burstein lO. Cétavlon LDH Iso-LDH 1 II III IV V ICD GIDH Alburnines a ~globulines a,-globulines $-globulines 27. y-globulines 28. IgA 29. IgG 1,0. IgM TGO TGP OCT SDH OIAGNOSTIC BIOCHIMIQUE DES o 21. 22. 23. 24. 25. 26. k,k~ p0 ,hOI,,Ifl. ial,a.hpalrraa . 321 ICrÊRES CHOLOSTATIQIJES Tai,. par alada aal,..blp.TIqa* .1,11,.,., r~la, da rala Q Ma, Fig. 9— Diferenciacion de co/esta.ns extra 1’ intra/epdtzca, por /a.i 10 iar,ab/es. Pedido de separatas: A. Martinez Fernande.r Bioquinuca. Cidade Sanadria 1.’ de Outubro Madrid. l~rpanba