VISITAS DE FAMILIARES EN UNIDADES DE CUIDADOS

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Clinic@s de Medicina Critica - Vol.2 N°2- Julio 2004
* Editoriales
VISITAS DE FAMILIARES EN UNIDADES
DE CUIDADOS INTENSIVOS
E
ntre muchos otros aspectos, relacionados con la percepción de
la calidad de atención en cuidados intensivos, esta el régimen
de visitas de los familiares a personas que se encuentran en
riesgo inminente de morir, dicho régimen debería ser diametralmente distinto
de aquel que se usa con pacientes hospitalizados en salas convencionales de
servicios médicos y quirúrgicos que tienen un bajo riesgo de muerte. Ello
porque tiene implicancias muy distintas la visita a un familiar que agoniza de
otro que se somete a un proceso por ejemplo quirúrgico electivo, en el primer
caso puede ser el último momento posible para una reconciliación o para
manifestar el cariño o amistad, en tanto que en el otro es parte de nuestra
socialización apoyar a alguien que tiene un problema de salud, que sin
desmerecer su importancia tiene sin duda menor trascendencia.
Existe una percepción distinta del grado de participación que los
familiares deberían tener, según sea quien lo dice. Para los familiares es
evidente que cualquier momento para acompañar a sus seres queridos parece
poco. Para el personal sanitario en cambio la presencia de la familia genera
conflictos en
el ordenamiento del trabajo, pone nerviosos a quienes deben
hacer procedimientos invasivos por estar sujetos a una supervisión directa y
en mi experiencia es un hecho de que el personal prefiere mantener alejados a
los familiares para que no se produzcan demandas de atención que no guardan
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relación con las estrictas necesidades de los pacientes. De allí que han surgido
distintas formas de manejar este problema y no existe consenso actual en este
tema, que afecta directamente la percepción de la calidad y/o humanidad con
que la atención es prestada.
No tenemos suficientes datos de lo que sucede en Latinoamérica respecto al
grado de apertura que tienen las unidades de cuidados intensivos a la
presencia de la familia, pero en Chile existe mayoritariamente un régimen de
visitas bastante restringido o régimen cerrado de visitas, entendiendo por
tal aquel que se establece de acuerdo a un horario fijo predeterminado por una
proporción de la jornada que no excede las 2 Horas, ( en algunos centros sólo 30
minutos), en contraste con otros centros en Latinoamerica en que se práctica lo
que se ha llamado
régimen abierto de visitas en que las familias
permanecen la mayor parte del tiempo junto a sus familiares. Ambas formas
tienen aspectos positivos como negativos desde en punto de vista
médico,
porque si bien es cierto el régimen cerrado permite al personal sanitario un
trabajo más libre y con menos interferencias, deja a los pacientes muy aislados
y desprovistos de relaciones de afecto en cambio el régimen abierto permite que
el paciente se sienta mas seguro y protegido, pero genera gran cantidad de
interferencias que pueden o no estar justificadas y que podrían mermar la
concentración del equipo médico en la solución prioritaria de los problemas
médicos actuando como distractores.
Es importante por otra parte
distinguir lo que podemos denominar
legítimamente una “ Visita”,definida como un familiar o amigo que desea
manifestar su apoyo pero no participar del proceso de cuidado, de lo que
podríamos llamar un “ Acompañante”, que sería aquella persona que además
de dar su apoyo moral está dispuesto a participar en el proceso de cuidado.
Establecer esta distinción puede ser importante, porque el “ acompañante”
podría y debería permanecerá una buena parte del día, ayudando en el proceso
de atención y trasmitir la garantía de seguridad objetiva reconfortando al
paciente en sus momentos más difíciles.
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Al hacer esta definición se produce también una selección de los
pacientes que cuentan con apoyo serio y profundo de la familia, de aquellos que
sólo cuentan con un apoyo superficial, esto también es un elemento importante
en la toma de decisiones en particular a la hora de evaluar la limitación
terapéutica. Fonseca M. y colaboradores
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en este número de la revista
electrónica se sumergen en el tema del régimen de visitas, que consideramos
muy relevante porque evalúa las opiniones de familiares y personal sanitario
ilustrándonos respecto a la diversidad de visiones del problema. Cualquier
avance en esta materia nos parece importante y nos abre una línea de
investigación que puede modificar mucho nuestras conductas actuales. Tal vez
no haya una sola respuesta a la pregunta de cual formula es mejor, pero nos
parece claro que nuestra actitud actual probablemente deba cambiar a la luz de
investigaciones en esta área.
Dr. Sergio Gálvez
Editor
Ref:
Fonseca M, Iraola M, Rodríguez B, Vital M.E
Visitas en al Unidad de cuidados Intensivos.
¿Qué piensan los pacientes, los familiares y los profesionales?
Clinic@s de Medicina Crítica, 2 (2) ;2004.
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