10.6. La España del siglo XVIII: La política borbónica en América. Los borbones impusieron cambios administrativos en América, con el fin de controlar con más eficacia a las colonias para obtener de ellas un mayor rendimiento económico. El Consejo de Indias fue perdiendo competencias a favor de las correspondientes secretarias, igual que la Casa de contratación que se disolvió en 1790. A los dos virreinatos existentes, Nueva España y Perú se añadieron otros dos, segregados del de Perú: Nueva Granada y el Río de la Plata. Se creó un ejército regular americano y se establecieron intendencias, con las mismas atribuciones que las peninsulares. También se adoptaron medidas económicas a lo largo del siglo: En un primer momento se crearon compañías comerciales al estilo de las británicas y holandesas, como la Compañía Guipuzcoana de Caracas, pero este sistema se mostró ineficaz debido a la piratería y a la competencia extranjera En 1735 se suprimió el tradicional sistema de flotas y galeones (las mercancías con destino a América se embarcaban todas juntas una vez al año en flotas escoltadas por galeones de guerra) por el sistema de registros, en el que los particulares podían cargar sus mercancías en barcos autorizados (registros) que partían cuando querían desde Cádiz. Con Carlos III se autorizó el libre comercio directo, suprimiendo el monopolio de Cádiz, esto fue un gran estímulo para la industria y el comercio, en especial para Cataluña. Aunque el comercio con América aumentó como resultado de estas medidas, el mercado era excesivo para la industria peninsular, por lo que la mayoría de las manufacturas enviadas a América eran extranjeras y el volumen de contrabando era superior al comercio legal.