PROPUESTA DE TRABAJO COLECTIVO PARA LA REPRESENTACIÓN ESTUDIANTIL AL CSU UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA Contra la Degradación de la UN: Financiación, Autonomía, Democracia y Organización. JAIRO ANDRÉS RIVERA H. – Bogotá (Principal) VISNU POSADA MOLINA – Palmira (Suplente) Una introducción necesaria… Dada la constante y enérgica introducción del modelo neoliberal en la Universidad, los estudiantes hemos perdido algunas condiciones materiales mínimas para el estudio anteriormente ganados en luchas históricas (cafeterías, servicios de salud, residencias estudiantiles, subsidios), precarizando las condiciones para realizar la labor académica al interior de los claustros, al paso que la educación va degenerando en simple valor de cambio mercantil que se ofrece por agentes públicos o privados bajo el estimulo de la mayor acumulación de ganancia posible. Sumado a esto, el uso de la violencia política y el terrorismo de Estado como herramientas para contener la inconformidad y el descontento social generado por éstas medidas privatizadoras se configura en una grave crisis humanitaria expresada en estudiantes asesinados, desplazados y amenazados. Lógicas ajenas al devenir propio de la Universidad se imponen para construir ese modelo antidemocrático en la UN; una lógica eficientista, guiada con criterios de empresa que intenta ajustar la inestabilidad financiera de la Universidad, se expresa en el Estatuto General y su programa bandera, el SIMEGE; una lógica antidemocrática, que parte de vulnerar la autonomía universitaria en materia financiera y académica, basada en el manejo excluyente de la comunidad universitaria en la toma de decisiones por parte de las directivas de la UN; lógicas de autofinanciación, que entregan el patrimonio nacional y los impuestos de la población al servicio del capital privado e intereses transnacionales, escenario que se agudiza de cara a la propuesta de modificación de la Ley 30; lógicas antiacadémicas guían los contenidos de los programas curriculares y agendas de investigación de la Universidad, condenando la libertad de cátedra, el pensamiento crítico y la posibilidad de construir conocimiento acorde con las necesidades de la población colombiana que durante 200 años ha soportado la explotación y degradación de sus condiciones de vida, la UN pública como la imaginamos y reivindicamos se desdibuja en este momento. La representación estudiantil debe ser un medio que permita el avance de las múltiples expresiones estudiantiles, pero esto, solo será posible si los propios estudiantes mantienen puesta la consigna de la defensa irrestricta de la Universidad Pública que hoy más que nunca, es la salvaguardia y principio de construcción de una verdadera sociedad democrática en Colombia. Debe, entonces, articularse y contribuir en el desarrollo de escenarios de movilización, construcción y organización que surjan de la iniciativa de los estudiantes en este proceso de lucha, necesario e impostergable, por la defensa de la UN. Los invitamos a todos y a todas, a representar con nosotros esos intereses diversos, juntos podemos construir la UN del tamaño que requiere la sociedad colombiana. Proponemos como ejes de trabajo, discusión y construcción los siguientes: Autonomía y Democracia Universitaria: 1. Construcción incluyente, deliberante y amplia de las reformas al interior de la UN; derogatoria de las reformas impuestas en la UN por su probada inefectividad y lesividad a la academia, la democracia y la autonomía universitaria. 2. Hacia el Cogobierno Universitario: Propugnaremos que la dirección de la Universidad este conformada por los estamentos que la definen: estudiantes, profesores y trabajadores. Por ello rechazamos la actual composición del Consejo Superior Universitario y la manera que este impone la política oficial. 3. Instaurar la democracia universitaria como forma orgánica del Estatuto general de la universidad. 4. Definición de las Autoridades Académico-Administrativas: 2. Por la Construcción de la Organización Gremial Nacional de los Estudiantes de la UN Esta es la mejor herramienta que los estudiantes podemos construir para garantizar una participación permanente en la elaboración de las políticas académicas, la definición del rumbo administrativo y la defensa de nuestros intereses, de tal forma que será compromiso esencial en nuestro periodo el impulsarla, no solo como una trinchera para la oposición y la movilización, sino como elemento cualificador de la participación. Por tal motivo, nuestra representación se compromete a la defensa de los espacios democráticos y de participación del estudiantado como la asamblea, los consejos estudiantiles y demás formas organizativas, al fortalecimiento del Comité Nacional de Representantes y principalmente a la construcción de la Organización Nacional de Estudiantes de la Universidad Nacional, elegida democráticamente, representativa de los intereses del estudiantado, que tenga la capacidad de tomar la iniciativa en los mas duros momentos de la coyuntura política, con una estructura autónoma e independiente de la administración y de los gobiernos, y que posea finanzas propias para llevar a cabo las tareas trazadas en sus órganos de dirección. 3. Hacia un adecuado bienestar estudiantil. Frente a las constantes dificultades que deben enfrentar los jóvenes estudiantes en el contexto de la UN el presupuesto para bienestar parecerá siempre insuficiente. En este sentido la lucha desde la representación estudiantil, de la mano con los estudiantes, debe ser la búsqueda de mayores recursos. Pero eso no es suficiente ni garantía en si mismo de un adecuado bienestar, en la medida en que los recursos de bienestar deben tener como función central atacar las principales necesidades de los estudiantes, no solo proporcionando ciertas comodidades, además de reposicionar a la UN como institución generadora de cultura y deporte en el país. 3.1. Nuestro compromiso es un adecuado bienestar, que es un bienestar adecuado principalmente a las necesidades alimenticias, habitacionales, de transporte, de salud y de ayudas para el buen funcionamiento de la academia, no destinado principalmente a comodidades o ajustes paisajísticos de la Universidad Nacional. 4. La representación estudiantil, mecanismo de control político y para garantizar la transparencia en la UN Bajo la premisa acomodada de “abrir la UN a la ciudadanía” se esconde el ingreso del capital privado a la universidad. Hoy se realizan jugosos contratos que comprometen el patrimonio público, definidos a puerta cerrada y en los cuales la comunidad universitaria no interviene, así como crecen los rumores sobre malos manejos y compadrazgos, por tal motivo debe hoy la representación comprometerse en hacer control público de esta situación. 4.1. Manejo público y abierto de los convenios: los universitarios deben conocerlos previamente y debatir sobre ellos bajo los principios de defensa del campus y el patrimonio público. 4.2. Reorientación de estos convenios: no se trata de simple venta de servicios, toda actividad de la UN debe estar en función de la academia. 4.3. Control político permanente: de manera pública se realizará este ejercicio por la defensa de la transparencia en la contratación y convenios que haga la UN. 5. La Academia Lo central en este aspecto es velar por mantener la UN como primera institución de educación superior del país, por lo que frente a las actuales reformas y el estado actual de la academia proponemos: 5.1. La investigación ligada a la docencia: este es un punto alto en la calidad de la UN que no debe perderse o dejarse en manos de expertos para que sean profesores contratados a destajo, sin mayores compromisos con la UN y su comunidad los que ejerzan la docencia. 5.2. Descongelamiento de la planta docente: solo profesores dedicados de tiempo completo al crecimiento intelectual de los estudiantes de la UN, a su propio desarrollo académico y al avance de la ciencia en la Un pueden ser garantía de calidad en nuestra universidad. 5.3. Créditos: los principios que orienten la asignación de créditos para las distintas carreras no pueden ser los de aminorar el tiempo del estudiante, flexibilizar los contenidos o reducir costos, debe estar la calidad por encima de los intereses mezquinos de comercialización de la educación. 5.4. Monitorias: el aspirante a estas monitorias lo hace por intereses académicos en determinadas áreas y necesidades específicas, de tal suerte que debe eliminarse la barrera de pertenecer al 30% de mejor promedio para aspirar a ellas, conservándose en el peor de los casos un nivel de promedio en las materias de la misma área, privilegiando siempre los mecanismos cualitativos (ensayos y entrevistas). 6. Postgrados también es UN pública Las actuales reformas de la Universidad apuntan a incrementar los recursos propios fortaleciendo el postgrado en detrimento del pregrado. Este es uno de los aspectos más sensibles y que involucra no solo a los actuales estudiantes de la UN, sino también a aquellos que aspiran ingresar desde otras universidades para realizar sus estudios, de tal forma que debe contarse con: 6.1. Buscaremos la congelación de las matrículas en el postgrado. Esta es la principal herramienta que tiene la administración para privatizar paulatinamente la Universidad Nacional. 6.2. Política de continuidad en la formación de los estudiantes de la UN: para garantizar esto debe haber un criterio diferenciado en el cobro de matrícula, teniendo en cuanta la situación socioeconómica, el tiempo en el mercado laboral y otros criterios sensibles para los egresados de la UN. 6.3. Reconocimiento académico en las investigaciones: como política de la UN debe reconocerse, en todos los escenarios donde haya lugar, la participación de los estudiantes en las investigaciones, buscando incluso estímulos financieros en los costos de su formación. 6.4. Flexibilidad en requisitos de matricula: actualmente se exige certificado de EPS y con la nueva reforma legal se obligaría a pagar a los estudiantes de postgrado riesgos profesionales y pensiones, por tal motivo proponemos la eliminación de estos requisitos. Defender la UN es velar por el respeto de su campus, su infraestructura y la transparencia de las inversiones La política de fracturación de la Universidad Pública no se detiene en los aspectos financieros y académicos, ahora avanza hacia la desarticulación física y material de nuestro campus. Actualmente avanzan proyectos que entregan parte del campus a entidades privadas y en el marco del POT se proyectan otras iniciativas que lo deterioran y alejan de su servicio a la academia. De la misma manera al interior de la UN crecen las voces sobre las irregularidades en la contratación y el beneficio a particulares con dineros públicos de inversión. Por estos motivos hoy la representación estudiantil debe hacer un compromiso en la búsqueda de la transparencia y la denuncia de las irregularidades en estos temas como el triste ejemplo del convenio con cafam, se debe realizar un ejercicio de control permanente desde la comunidad universitaria hacia la administración de los recursos de la Universidad Nacional, rechazando la concesión de sus bienes y recursos a la administración privada. 7. Por una UN pública, financiada por el Estado y con compromiso social: La educación es una responsabilidad ineludible del Estado por lo que desde la representación estudiantil nos seguiremos oponiendo a cualquier reforma que busque la privatización y la mayor descarga del Estado de su obligación en los jóvenes colombianos. En ese sentido rechazamos la reforma al esquema de financiación de la ley 30, que pone contra la pared a la universidad y la lleva, bajo todo punto de vista, al detrimento en la calidad, la violación de la autonomía y el esquema de autofinanciación. 7.1. Contra la concurrencia para el pago del pasivo pensional: Esta lucha es vigente, sus disposiciones están siendo hoy reglamentadas por el parlamento y el presidente, así que los universitarios debemos disponernos a continuar la batalla a través de la movilización y nuevas formas de manifestación. 7.2. Reforma a las transferencias: es un complemento de la lucha anterior, que también debemos librar los universitarios buscando una financiación estatal de la educación, la salud y el saneamiento básico. 7.3. El Hospital Universitario de Bogotá: El Hospital de la Universidad no se debe regir por la lógica de la Ley 100 de 1993, sino que debe estar orientada por una lógica democrática. Propugnaremos por mantener la lucha a favor del San Juan de Todos y buscar caminos que permitan realizar verdaderamente el proyecto del bienestar universitario. 7.4. Propugnaremos por el congelamiento de las matrículas de la universidad, su paulatina disminución hasta la completa gratuidad. 8. Defensa de las libertades y derechos democráticos, respeto por los Derechos Humanos y rechazo a la estigmatización de la protesta Entendemos que a un mayor nivel de privatización y neoliberalismo le sobreviene por naturaleza un mayor y mas profundo recorte de libertades y derechos democráticos, así como a una restricción de los mismos le sobreviene peores niveles de privatización, por lo tanto pugnamos por el pleno goce y ejercicio de todos los Derechos Humanos prescritos en la Carta Política y en los Tratados Internacionales sobre la materia. En un escenario de rechazo contundente a las políticas del gobierno uno de nuestro compromisos desde la representación estudiantil es la defensa de las garantías y condiciones democráticas para el ejercicio pleno de los derechos a la organización, a la movilización y a la protesta. Seguiremos denunciando los casos de violación de los derechos humanos, exigiendo de manera permanente del gobierno nacional y a la administración universitaria una actitud que respete estas condiciones alejándose de la estigmatización al movimiento universitario y sus justas reivindicaciones, y la represión de toda manifestación democrática de los diferentes estamentos.