UNIVERSITAT AUTÒNOMA DE BARCELONA Bellaterra, Cerdanyola del Vallès, 6 de noviembre de 2006 Los europeos demandan un equilibrio entre los avances científicos y los valores éticos Reconocen la contribución de la ciencia y la tecnología a la mejora de la calidad de vida y consideran clave el papel de las autoridades públicas en la regulación y aplicación de los avances conseguidos El primer eurobarómetro realizado por la Unión Europea (UE) sobre “Valores sociales, Ciencia y Tecnología” concluye que la sociedad europea está claramente influenciada por consideraciones éticas cuando se trata de aplicar los nuevos descubrimientos científicos y tecnológicos, aunque reconocen que la ciencia y la tecnología han mejorado su calidad de vida y lo seguirán haciendo en el futuro. Ante un conflicto entre la aplicación científica y los valores éticos, considera esencial la regulación y el control de las autoridades públicas. Entre las conclusiones del eurobarómetro “Valores sociales, Ciencia y Tecnología” realizado el año pasado por la Comisión Europea, destaca un reconocimiento evidente por parte de los ciudadanos europeos sobre lo que la ciencia y la tecnología han hecho hasta ahora por la sociedad, mejorando su forma de vida, y prevén que continúe siendo así en el futuro. Es el caso de ámbitos de investigación como la biotecnología o la ingeniería genética, sobre los que una mayoría de ciudadanos considera que tendrán un efecto positivo en nuestra forma de vida. Sin embargo, los europeos demuestran estar aún claramente influenciados por consideraciones éticas cuando se trata de aplicaciones científicas y tecnológicas concretas. Mientras parecen aceptar con cierta prevención la clonación de animales (un 3% sólo si está muy regulada y controlada y un 22% sólo en circunstancias excepcionales) y la clonación de células madres procedentes de embriones humanos (un 41% si está muy regulada y controlada y un 20% sólo en circunstancias excepcionales) por el bien de la salud humana, la mayoría marca claramente el límite cuando se trata de la clonación humana (un 59% responde nunca). Así, ante un potencial conflicto entre la aplicación científica y los valores éticos, los europeos encuestados consideran esenciales la regulación y el control por parte de las autoridades públicas y creen que la Comisión Europea puede jugar un papel muy importante: tres de cada cuatro ciudadanos creen que su función en la regulación de la ciencia y la tecnología para todos los países miembros de la UE tienen un efecto positivo en la sociedad. El sistema de valores sociales que predomina en Europa continuará teniendo mucha importancia en el futuro, por lo que el reto de los responsables de tomar decisiones, en el ámbito de la ciencia y la tecnología, será conseguir una relación armoniosa entre los desarrollos conseguidos y los valores éticos a los que los europeos se sienten estrechamente vinculados. Profundizando en este sentido, un segundo eurobarómetro sobre “Europeos, Ciencia y Tecnología”, hecho público el año pasado como continuación a dos encuestas realizadas los años 1992 y 2001, indica que a los europeos les gustaría que existiera un equilibrio entre la ética y el progreso científico. Visión de los científicos Este segundo estudio también ofrece la visión de que los ciudadanos europeos tienen de los científicos. Reconocen el papel positivo que juegan en la sociedad y desean que los políticos los tengan en cuenta a la hora de tomar decisiones, pero se muestran críticos sobre cómo informan sobre los objetivos y los avances de sus investigaciones. Muestran también una cierta prevención sobre el excesivo poder que en su opinión tienen los científicos debido a sus conocimientos y sobre la posibilidad que excedan los límites éticos y morales en sus investigaciones. Los expertos creen que en la sociedad europea existe un interés latente por la ciencia y la tecnología y una demanda implícita de más información. Los europeos consideran insuficiente la información que reciben sobre temas científicos y tecnológicos, lo cual no es obstáculo para que tengan una percepción positiva y optimista sobre lo que la ciencia y la tecnología pueden hacer por la humanidad en términos de investigación médica, de mejora de la calidad de vida y de oportunidades para generaciones futuras. Los encuestados también son mayoritariamente partidarios de que haya más mujeres dedicadas a ciencia y tecnología y estén más integradas en la comunidad científica, defendiendo una igualdad de oportunidades entre géneros. Finalmente, se muestran críticos sobre la pérdida de competitividad de Europa respecto a Estados Unidos y mencionan como causa principal la deficiencia en la educación de los científicos europeos. Para reducir la distancia que separa Europa de Estados Unidos, se ha de actuar en dos sentidos: aumentar la financiación dedicada a la investigación científica, tanto a nivel nacional como de la UE, y establecer una colaboración más intensa entre los diferentes países miembros, en que la UE juegue un papel clave. Más información: Eurobarómetro “Valores sociales, Ciencia y Tecnología” http://ec.europa.eu/public_opinion/archives/ebs/ebs_225_report_en.pdf Eurobarómetro “Europeos, Ciencia y Tecnología” http://ec.europa.eu/public_opinion/archives/ebs/ebs_224_report_en.pdf