la importancia de andar descalzo

Anuncio
LA IMPORTANCIA DE ANDAR DESCALZO
Uno de los errores más grandes que el ser humano hizo es calzarse. El ser humano
como ya he dicho en varias oportunidades en mis libros, ignora su constitución
energética y vive una vida alejado de la Madre tierra, de la Naturaleza, y de Dios, lo
deja todo a lo que los científicos estudian y divulgan. Pero el científico solamente
estudia lo que ve u observa a través del microscopio, dentro del cuerpo físico, en
realidad algunos científicos se basan en el estudio de cómo erradicar la
enfermedad, como matar al invasor al que ellos llaman el culpable del padecimiento
de las enfermedades del cuerpo humano, jamás el científico estudia LA VIDA, como
funciona la VIDA y mucho menos el conjunto Universo-Hombre.
-“La marcha siempre solemne, del hombre que lleva su planta en contacto con la
madre Tierra, ha sido sustituida, ora por la marcha ambigua y poco fundamental
del hombre que lleva sus pies embutidos en aparatosos borceguíes, ora por la
marcha frívola y presumida de la jovencita de altos tacones”. Nos dice el Dr.
Eduardo Alfonso en su libro la “RELIGIÖN DE LA NATURALEZA”. También con las
suelas de goma.
El cuerpo humano en su conjunto es una obra maestra de La Creación, y esta no ha
dejado nada al azar, ni fuera de contexto. El andar con los pies descalzos equivale
en gráfico símil a poner al organismo esa pieza de hierro que se pone a los
extremos de un imán para que no pierda su magnetismo. La tierra es la pieza que,
en contacto con las dos piernas, evita la despolarización orgánica. Sabemos que las
moléculas del imán, todas orientadas con el polo positivo o el negativo hacía el
mismo sitio, se desorientan con el tiempo si se prescinde de esa pieza de hierro
cuyo papel es mantener su orientación.
Las corrientes magnéticas de la tierra y su electricidad negativa, así como la
positiva de la atmósfera, al atravesar el organismo mediante el vehículo del fluido
neúrico, se resuelven en cada órgano en una modalidad positiva en estado de
salud, que al fin y al cabo, como fuerzas de vibración etérea, son las que
condicionan todo su quimismo biológico. Mientras esta circulación electromagnética se conserva normal por el andar descalzo y mientras la cabeza se
mantenga descubierta en contacto con el aire libre y la luz del sol, nada ocurre; por
supuesto si en los demás aspectos de la vida se vive también normalmente en
cumplimiento con la Leyes que La Naturaleza nos impone. Pero así, por medio del
calzado y el sombrero, se aíslan el polo negativo (que son los pies) y el positivo (la
cabeza) de sus respectivos medios, (la Tierra, el sol y el aire) esta función electromagnética se altera, también se desequilibra la regularidad de la corriente nerviosa,
(este es motivo por el cual siempre estamos estresados), y aparecen en los
órganos primeramente estados congestivos (porque también se pierde la
regularidad de la corriente sanguínea), después aparecen estados inflamatorios
(agudos y subagudos) por alteración de la transformación de energías externas.
Es importantísimo observar cómo por causas a las que no se les da importancia
llamadas pequeñas, por fatal encadenamiento expiatorio y seleccionador, se van
forjando cada vez más anormales estados, que acaban en síntomas de enfermedad.
En la planta de los pies tenemos el punto inicial de los meridianos”Rins”. Este
conducto se encuentra únicamente en los pies y es el conducto que abarca todo el
bajo vientre y la parte del sistema respiratorio.
Además en la planta de los pies, podemos enviar estímulos a casi todas las partes
del cuerpo, ya que existen 72.000.- (setenta y dos mil) terminaciones nerviosas en
ellas.
Estas zonas de reflejo funcionan como “hilos a tierra”, colocando los órganos
directamente en contacto con la energía, donde se hacen eliminar los residuos
tóxicos que bloquean la fuerza vital.
Además están representados todos nuestros órganos. Estas zonas de reflejo son
especialmente sensibles y responden espontáneamente cuando los respectivos
órganos están desequilibrados.
Estos son los órganos internos representados en nuestros pies
Nada de extraño tiene, pues que, con la práctica de caminar descalzo por tierra
húmeda y mejor sobre hierba (que así conduce mejor la corriente energética) se
curen dolores, congestiones, estados congestivos y atónicos de la vejiga, dolores
congestivos y nerviosos de cabeza, intestino, sistema nervioso etc. pues el frio del
agua, la hierba húmeda, el magnetismo de la tierra, llama a la sangre hacia las
extremidades inferiores, descongestionando partes superiores.
El paseo descalzo aumenta el vigor de la circulación sanguínea y nerviosa general,
porque la rápida red venosa de la planta del pie, al ser comprimida en la marcha,
hace las veces de un corazón periférico.
Son muchos los disturbios que el ser humano de hoy adquiere a consecuencia de
una insuficiente eliminación de excesos energéticos acumulados por falta de la
práctica de caminar descalzo.
El ejercicio para activar todo el organismo, sería caminar descalzo en el campo,
especialmente en terreno accidentado con piedritas redondeadas, esta práctica
sería ideal, por cuanto activaría todos los órganos internos. La experiencia ha
demostrado que, caminar descalzo de 15 a 30 minutos o más diarios en la mañana
temprano, sobre pasto o tierra húmeda, constituye un óptimo tratamiento para la
deficiencia del complejo vitamínico “B” y para la restauración de la flora intestinal.
PIE DERECHO
PIE IZQUIERDO
Andemos, pues. Descalzos sobre La Madre Tierra, y llevemos nuestros cabellos
flotantes en el mar de luz de Nuestro Padre Sol y curaremos muchas
enfermedades.
Esto es lo que nunca estudia la ciencia médica actual, por cuanto no da dividendos,
dedicando miles y miles de dólares al estudio de la destrucción de los microbios a
través de drogas que a veces son perjudiciales para la salud, pero llenan los
bolsillos de miles de personas inescrupulosas que solo les interesa el poder y la
riqueza.
Dijo una vez un gran médico, profesor Universitario de la Universidad de medicina
de Salamanca, al despedir a un grupo de recientes médicos diplomados: -“Señores
médicos que hoy terminan sus estudios, Recuerden que cuando un enfermo se
tiene que curar, se cura con medicamentos, sin medicamentos… y aún, a pesar de
los medicamentos”
Este mismo médico dijo también otra vez: “Si todos los medicamentos que
existen en el mundo, se tiraran al mar… se salvaría la humanidad… Pero
pobres de los peces”
José Marco Vallés
Dr. en Naturología Aplicada
Descargar