Anfetaminas y drogas de síntesis 1 ANFETAMINAS Antecedentes Las anfetaminas son psicoestimulantes producidos sintéticamente en laboratorios químicos. Su origen data de finales del siglo XIX y se obtuvieron como resultado del estudio de derivados de efedrina y de los incipientes estudios sobre adrenalina y noradrenalina y sistema nervioso autónomo. En este sentido, fue L. Edelano quien sintetizó por primera vez las anfetaminas en 1887. Pero hasta 1920 Gordon Alles no descubrió que el compuesto original de Edelano, sulfato de anfetamina y su dextroisómero, aún más activo, el sulfato dextroanfetamínico, poseían la capacidad de estimular el sistema nervioso central. En 1931 comenzaron a estudiarla en laboratorios farmacéuticos de los Estados Unidos y cinco años después, durante la Ley Seca, se introdujo en la práctica médica. Al poco tiempo salió al mercado su isómero más activo, la dextroanfetamina. Se experimentó con ellas para vencer el cansancio físico de los soldados en los conflictos bélicos del siglo XX. Este empleo militar causó la aparición de los primeros adictos. Asimismo, se apreció un importante efecto anorexígeno, disminuyendo el apetito. El incremento en el abuso, sobre todo a partir de 1965, motivó la restricción de su empleo y su fiscalización internacional. Durante los años 70-80, en España, se toleró su consumo esporádico ligado a ambientes de estudio. Posteriormente pasó a consumirse para usos recreativos en combinación con otros psicoestimulantes y alcohol. En 1983 se reguló su venta en farmacias. Junto con la cocaína, es uno de los psicoestimulantes más usados. En la actualidad, las anfetaminas con destino al mercado negro se producen en laboratorios químicos clandestinos. Se presentan habitualmente en forma de pastilla, comprimidos o cápsulas y se utilizan para permanecer despiertos y activos durante un prolongado Anfetaminas y drogas de síntesis 2 espacio de tiempo. Es importante señalar que pueden estar adulteradas con efedrina, cafeína o fenilpropanolamina, talco, etc. Tipos de anfetaminas 1- Metanfetamina: (inhalando el polvo), Se consume intravenosa por vía oral, (inyectándosela) o intranasal pulmonar (fumándola). Inmediatamente después de fumarla o inyectársela, el usuario experimenta una sensación intensa llamada "rush" o "flash" en inglés, que dura apenas unos pocos minutos y que al parecer es sumamente placentera. El uso oral o intranasal produce euforia, es decir, un estímulo que no llega a la intensidad del "rush". Los usuarios se pueden convertir en adictos en poco tiempo, usándola cada vez con más frecuencia y en dosis mayores. 2- Sulfato de anfetamina: Es una de las anfetaminas más frecuentes en el mundo de las drogas. En lenguaje callejero es conocido como “speed”. Generalmente se presenta en forma de polvo y se consume por inhalación, como la cocaína, con la que comparte los riesgos asociados a esta vía de administración (daños en la mucosa nasal). 3- Clorhidrato de metanfetamina: Últimamente arrasa en las discotecas y lugares de fiesta españoles. Consiste en pedazos de cristales transparentes parecidos al hielo, que se pueden consumir por vía oral o fumados (solos en pipa o mezclados con tabaco). En esta forma se conoce como "hielo", "cristal" y "vidrio" en español (ice en inglés). Su rápida extensión se debe a que se oferta como algo moderno y más potente que sustituye a la clásica anfetamina e incluso a tener que esnifar cocaína, a que supuestamente es más seguro que la cocaína o la heroína y a ese aura de “producto artesanal”. Por supuesto, todo esto son falsas creencias. Anfetaminas y drogas de síntesis 3 Estructura química Las anfetaminas son un grupo de compuestos orgánicos del nitrógeno que pueden considerarse derivados del amoniaco. Imagen: Estructura química de la anfetamina. Mecanismo de acción La anfetamina es un simpaticomimético de acción indirecta sobre el sistema de noradrenalina y adrenalina. Por su similitud estructural, la anfetamina es captada en la terminación axónica de la sinapsis actuando en tres niveles: 1) Aumenta la liberación de noradrenalina y dopamina. 2) Inhibe la acción de la monoaminooxidasa (MAO) que es una enzima catabólica de monoaminas. 3) Inhibe la recaptación de noradrenalina al competir con su sistema de transporte. Imagen: Mecanismo de acción de las anfetaminas. Anfetaminas y drogas de síntesis Asimismo, presenta una ligera 4 actividad intrínseca de estimulación propia de receptores dopaminérgicos y noradrenérgicos postsinápticos. Todo lo anterior se traduce en un incremento en los niveles de monoaminas en el espacio sináptico, las cuales son a su vez catabolizadas más lentamente merced a la inhibición de la MAO. Aspectos farmacocinéticos Las anfetaminas administradas por vía oral se absorben rápidamente en el tracto gastrointestinal, principalmente en el área duodenal merced a su carácter básico. Por lo señalado, sus efectos suelen percibirse rápidamente y desaparecen más o menos rápidamente (entre 4-8 horas), sufriendo un metabolismo parcial por hidrólisis en el hígado. Su excreción es principalmente urinaria, en parte sin metabolizar, incrementándose esta excreción al acidificarse la orina (al ser compuestos básicos). Algunos de sus metabolitos son activos y coadyuvan los efectos estimulantes. En el caso del speed, la vía de administración es la nasal con lo que los efectos son prácticamente inmediatos aunque duran menos. Efectos Los efectos producidos por el consumo de anfetaminas son muy similares a los que provoca la cocaína y se ven muy influenciados por el estado basal del consumidor. A corto plazo: a) Efectos sobre el organismo: ● Falta de apetito: Inhiben el centro de control de apetito hipotalámico y estimulan el centro de la saciedad, aunque existe tolerancia a este efecto que desaparece rápidamente. Anfetaminas y drogas de síntesis 5 ● Taquicardia e hipertensión arterial con peligro de accidentes cardiovasculares (hipertensión, infarto, arritmias, etc.): Estimulan receptores α y β cardiacos y también por estimulación de la liberación de noradrenalina. ● Insomnio. ● Sequedad de boca. ● Sudoración. ● Contracción de la mandíbula. Intoxicación aguda: Similar a la cocaína: Fiebre, irritabilidad, temblores, espasmos, delirio, convulsiones. b) Efectos sobre el comportamiento: ● Euforia. ● Sensación de autoestima aumentada. ● Verborrea. ● Alerta y vigilancia constantes. ● Agresividad. A largo plazo: a) Efectos sobre el organismo: ● Adelgazamiento, desnutrición. ● Agotamiento físico. ● Trastornos digestivos. b) Efectos sobre el comportamiento: ● Psicosis de tipo persecutorio con alucinaciones. ● Depresión reactiva, con importante riesgo de suicidio. Dependencia física: Moderada. Dependencia psicológica: Intensa. Anfetaminas y drogas de síntesis Síndrome de abstinencia: El síndrome 6 de abstinencia a las anfetaminas, a diferencia de otras sustancias como el alcohol, sedantes u opiáceos, resulta difícil de definir debido a la ausencia de manifestaciones clínicas floridas y a la escasez de estudios realizados. No obstante, el abandono brusco de anfetaminas en consumidores crónicos puede irritabilidad, hiperfagia, ocasionar alteraciones apatía, una en depresión necesidad por ingerir el patrón del sueño, y coma. Estudios la droga, somnolencia, neurobiológicos relacionan la deprivación anfetamínica con una depleción presináptica, en determinadas áreas del sistema nervioso central, de dopamina, noradrenalina y otras catecolaminas. Estos hallazgos podrían justificar la eficacia de los antidepresivos tricíclicos (amitriptilina) en combatir la sintomatología, al replecionar las reservas de dichas monoaminas. Aplicaciones clínicas La utilización de la anfetamina propiamente dicha ha disminuido mucho en España. Se utiliza en situaciones de tratamiento muy específicas, en las que el beneficio terapéutico compensa con creces el riesgo de su aplicación. En la actualidad está autorizado su empleo en el tratamiento de la narcolepsia (forma severa de somnolencia hiperactividad infantil (efecto paradójico). diurna) y en la Anfetaminas y drogas de síntesis 7 DROGAS DE SÍNTESIS ¿Qué son? Las drogas de síntesis son una serie de sustancias que se popularizaron a finales del siglo XX bajo la equívoca denominación de “drogas de diseño”. Se trata de sustancias producidas por síntesis química (sin componentes naturales) en laboratorios clandestinos. Generalmente se trata de compuestos anfetamínicos a los que se añade algún componente de efectos más o menos alucinógenos del tipo de la mescalina. Se comercializan en forma de pastillas o comprimidos. De ahí que hayan sido bautizadas en el argot callejero como “pastis” o “pirulas”, entre otros nombres. Sobre su superficie se graban diversos dibujos que sirven como elemento de identificación (un superman, un rolls, un delfín, etc.). Imagen: “Pastis” o “pirulas”. Antecedentes Entre las drogas de síntesis más conocidas en nuestro país se encuentra el éxtasis, que en 1914 fue patentado en Alemania por los laboratorios MERCK como supresor del apetito, pero nunca se comercializó, por comprobarse su toxicidad en animales. En los años 50 el éxtasis fue investigado por el ejército norteamericano a la búsqueda de un fármaco que facilitara la desinhibición, con fines bélicos. Anfetaminas y drogas de síntesis 8 En los años 60 en Norteamérica, los hippies la usaron vinculada a la psicodelia, iniciándose el tráfico de drogas de síntesis. En los años 70 algunos psiquiatras experimentaron con ellas en EEUU, como complemento a sus tratamientos por su capacidad para facilitar el acercamiento y la apertura a los demás y provocar cambios emocionales positivos en sus pacientes, hasta que fueron prohibidas por la legislación. En la década de los 80 existe un cierto auge de estas sustancias de la mano de la música house, que aviva el negocio de su venta apoyada en un nuevo marketing de lanzamiento: la inocuidad y su sintonía con los estilos de vida juveniles. Nuestra legislación incluye las drogas de síntesis en la lista de “Sustancias psicoactivas peligrosas para la salud”, por lo que producirlas, comprarlas o venderlas, es un delito contra la Salud Pública. Principales derivados anfetamínicos Los derivados anfetamínicos más habitualmente utilizados en España son: 1) Éxtasis: 3-4 metilenodioximetanfetamina o MDMA. Es el más usado. Sus efectos son rápidos (0.5 horas) y relativamente duraderos (4-6 horas). Imagen: Estructura química del éxtasis o MDMA. En cuanto a su estructura química, es una base sintética derivada de la feniletilamina y relacionada estructuralmente con la sustancia estimulante psicomotora anfetamina y la sustancia Anfetaminas y drogas de síntesis alucinógena mescalina, compartiendo propiedades 9 de ambos compuestos. El isómero dextro es la forma farmacológicamente más activa. 2) Píldora del amor: Metilenodioxianfetamina o MDA. Combina los efectos de la anfetamina y la mescalina. Es más alucinógena y tóxica que el éxtasis. 3) EVA: Metilenodioxietilanfetamina o MDE. Similar al éxtasis, pero de efectos más rápidos y breves. Farmacocinética Las drogas de síntesis se toman por la boca, ya que, como las anfetaminas, se absorben bien. También se pueden usar las vías oral, inhalatoria, vaginal y venosa. La concentración plasmática máxima se alcanza hacia 1-2 h después de la administración. MDMA, MDA y MDE se metabolizan de forma similar en el hígado a través del citocromo P-450. La excreción tiene lugar a través de la saliva, sudor y orina. Mecanismo de acción Por lo que respecta a sus efectos psicoestimulantes la mayoría de drogas de diseño presentan un mecanismo de acción similar al de la anfetamina. Se ha demostrado que la anfetamina induce la liberación de dopamina a partir de depósitos citoplasmáticos. Por su parte, las propiedades alucinógenas de las drogas de diseño han sido relacionadas con sus efectos sobre el sistema serotoninérgico. Efectos A corto plazo: a) Efectos sobre el organismo ● Taquicardia, hipertensión, arritmia. ● Sudoración Anfetaminas y drogas de síntesis 10 ● Sequedad de boca. ● Contracción de la mandíbula. ● Temblor. ● Deshidratación. ● Hipertermia. Riesgo: La hipertermia constituye una adversidad en los ambientes en los que habitualmente se consumen actualmente este tipo de drogas: el ambiente caldeado, la hiperactividad y la inadecuada reposición de líquidos y electrolitos pueden dar lugar a un síndrome del tipo “golpe de calor” que, a veces, requiere la asistencia médica urgente del afectado. En casos graves el cuadro clínico puede complicarse por la aparición de hipertermia maligna, convulsiones y un cuadro evolutivo de rabdomielosis, coagulopatía e insuficiencia renal que puede tener un desenlace mortal. De hecho, en casi todas las muertes atribuidas a estas sustancias se ha observado hiperpirexia, colapso cardiocirculatorio y convulsiones, lo que concuerda con una sobredosis anfetamínica. b) Efectos sobre el comportamiento Cuando comenzó a derivarse al mercado negro, se planteó comercializarla con el nombre empathy, finalmente desechado por cuestiones de mercadotecnia. Este nombre inicial es muestra de cuáles son sus principales efectos. ● Sociabilidad. ● Empatía. ● Locuacidad. ● Euforia. ● Sensación de autoestima aumentada. ● Desinhibición ● Deseo sexual aumentado. Anfetaminas y drogas de síntesis 11 ● Confusión, inquietud, agobio. ● Ilusiones visuales y auditivas. ● Insomnio. Riesgos: Crisis de ansiedad. Reacciones de pánico. Pueden desencadenar episodios de psicosis en sujetos predispuestos. A largo plazo: a) Efectos sobre el organismo: No se producen cambios apreciables. ● Adelgazamiento, desnutrición. ● Agotamiento físico. ● Convulsiones. ● Insuficiencia renal. b) Efectos sobre el comportamiento ● Flash-back: Destellos evocadores o repetición de la experiencia alucinatoria, semanas después del consumo de la droga, sin que medie otro consumo. ● Psicosis persecutorias. ● Alucinaciones. ● Ansiedad, depresión. Dependencia física: Moderada. Dependencia psicológica: Intensa. Síndrome de abstinencia: Similar a las anfetaminas. La mayor preocupación que existe en la actualidad sobre su toxicidad es que en el cerebro, tanto en roedores como primates, producen degeneración de las neuronas serotoninérgicas. Puesto que la serotonina participa en multitud de funciones cerebrales como el estado de ánimo, la ansiedad, el sueño, el apetito y el control de impulsos, se Anfetaminas y drogas de síntesis 12 sospecha que la afectación crónica del sistema serotoninérgico podría ser responsable de una sintomatología inespecífica en estas esferas. Otras drogas de síntesis Los derivados anfetamínicos son las drogas de síntesis más utilizadas en España. Sin embargo, también se ha descrito la utilización ocasional de otros productos, muchos de los cuales proceden de Estados Unidos. 1- Fenciclidina Se trata de un antiguo agente anestésico que fue abandonado en 1960 debido a los problemas de agitación, delirio y comportamiento psicóticos observados en muchos pacientes. La fenciclidina es conocida en el argot callejero como “polvo de ángel”, “PCP” o “polvo”. Imagen: Fenciclidina o “polvo de ángel”. Puede administrarse por vía oral o intravenosa, aunque generalmente se inhala o se fuma espolvoreada en cigarros de tabaco o marihuana (“killer joint”). La fenciclidina produce intensos efectos sobre la percepción y la estructura del pensamiento, dando lugar a cuadros similares a los observados en pacientes con esquizofrenia. Esta droga actúa inhibiendo la recaptación de dopamina y noradrenalina y produce lo que se conoce como anestesia disociativa: bloquea los centros nerviosos responsables de la interpretación de las señales nerviosas del dolor, desconectando la percepción corporal de las funciones cerebrales. Por todo esto, una Anfetaminas y drogas de síntesis 13 persona puede llegar a observar su propia mano como si fuera un elemento ajeno. Otro efecto de la fenciclidina es una marcada relajación muscular. Un derivado de fenciclidina, utilizado en terapéutica, es la ketamina con acciones farmacológicas parecidas aunque menos intensas. 2- Gamma Hidroxibutirato (GHB) El GHB es conocido también como “éxtasis líquido”, a pesar de que no tiene nada que ver, ni desde el punto de vista químico ni toxicológico con el éxtasis o MDMA. Se trata de un líquido incoloro, inodoro y con sabor salado. Normalmente se vende en botecitos de aproximadamente tres a seis dosis o en chorros de una dosis (supuestamente) que se sirven desde inhaladores en una copa o vaso. Ocasionalmente también se puede adquirir en polvo. Imagen: Formas de presentación del GHB. Se trata de un precursor fisiológico del GABA, neurotransmisor de carácter inhibitorio. El GHB fue usado anteriormente como anestésico pero este uso fue abandonado debido a los estados de confusión que presentaban muchos pacientes tras la intervención quirúrgica. Los efectos del GHB varían en función del sujeto y de la dosis utilizada. Algunos de sus efectos más importantes son: Anfetaminas y drogas de síntesis 14 - <30 mg/kg: Incrementa el estado de alerta, mejora el estado de ánimo. En algunos sujetos provoca relajación y somnolencia, acompañados de delirio, confusión, alucinaciones e hipotonía muscular. - 30-50 mg/kg: Estado hipnótico, con bradicardia y bradipnea. - > 50 mg/kg: Depresión cardiopulmonar, mioclonia, convulsiones. 3- Poppers Son líquidos volátiles, generalmente nitrito de amilo y otros análogos, con potentes y rápidos efectos vasodilatadores, entre los que destacan: rubefacción, cefalea, náuseas, hipotensión ortostática, etc. Producen estados de euforia y desinhibición sexual. Provocan rápidamente tolerancia y dependencia física. Imagen: Poppers. 4- Análogos sintéticos de opiáceos Se trata de análogos de la petidina (meperidina) y del fentanilo. Aparte de su potencial adictógeno, algunos de ellos tienen el inconveniente de presentar impurezas como el MPTP (1-metil-1,4-fenil 1,2,3,6 tetrahidropiridina) que puede provocar pérdida neuronal (parkinsonismo tóxico). Tratamiento del uso y abuso de anfetaminas y drogas de síntesis A pesar de la escasez de publicaciones parece existir un cierto grado de acuerdo en el abordaje de los problemas con MDMA y GHB. Para las complicaciones psiquiátricas agudas, subagudas y residuales Anfetaminas y drogas de síntesis por éxtasis se recomienda la utilización 15 de benzodiazepinas, antidepresivos y/o antipsicóticos atípicos. Para la intoxicación y síndrome de abstinencia producido por el GHB y similares, se recomienda la utilización de benzodiazepinas, y la utilización conjunta de estabilizadores del humor y antipsicóticos atípicos. Prevalencia y pautas de consumo de anfetaminas y éxtasis Tradicionalmente, las encuestas de población han demostrado que, después del cannabis, las anfetaminas y el éxtasis son las sustancias ilegales de mayor consumo, aunque la prevalencia general del consumo de anfetaminas y éxtasis es claramente inferior a la del cannabis. El consumo de éxtasis se hizo popular en los años noventa, mientras que la anfetamina tiene una historia más dilatada. Según datos del informe 2007 del OEDT (Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías), entre los Estados miembros de la UE, el consumo de anfetaminas y de éxtasis parece ser relativamente alto en sólo unos pocos países, concretamente en la República Checa, Estonia y el Reino Unido y en menor medida en Letonia y los Países Bajos. Las encuestas recientes realizadas entre la población adulta (1564 años) revelan que la prevalencia del consumo de anfetamina a lo largo de la vida en Europa oscila entre el 0.1% y el 3.6%, excepto en Dinamarca y el Reino Unido, donde la prevalencia es mayor. Por término medio, aproximadamente el 3.5% de todos los europeos adultos ha consumido anfetaminas al menos una vez. Tomando como base las encuestas de población general, se ha estimado que casi 11 millones de europeos han probado esta sustancia, y más de 2 millones han consumido anfetamina en los últimos 12 meses. En cuanto a los adultos jóvenes (15-34 años), entre el 0.2% y el 16.8% declaran haber consumido anfetamina. Letonia, Noruega y Alemania son los países donde se registran las mayores tasas de Anfetaminas y drogas de síntesis 16 prevalencia después del Reino Unido y Dinamarca. Por término medio, el 5.1% de los europeos jóvenes han probado la anfetamina. Se estima que, de media, un 1.5% de jóvenes europeos ha consumido anfetamina en el último año. En España, en 2003 la prevalencia de consumo de anfetaminas alguna vez en la vida fue de un 3.2%, de un 0.8% en los últimos 12 meses y de un 0.2% en los últimos 30 días. Como en el caso del éxtasis, el consumo tiene un carácter muy esporádico, siendo el consumo semanal en los últimos 30 días menor del 0.1%. La prevalencia de consumo en los últimos 12 meses fue bastante más elevada en los hombres que en las mujeres. Por otra parte, al igual que sucede con el éxtasis, el consumo casi se restringe a la población de 15-34 años. En cuanto al éxtasis, entre el 0.3% y el 7.2 % de los adultos reconoce haberlo probado. La República Checa, el Reino Unido, los Países Bajos y España son los países donde se registran las mayores tasas de prevalencia. Se estima que casi 9.5 millones de europeos han probado el éxtasis, y casi 3 millones lo han consumido en el último año. Entre los adultos jóvenes de toda Europa, la prevalencia de consumo de éxtasis a lo largo de la vida es del 5.2%. La República Checa, el Reino Unido y los Países Bajos exhiben las mayores tasas de prevalencia. El consumo de éxtasis es un fenómeno que se da predominantemente entre los jóvenes. En el grupo de 15 a 24 años, las tasas de consumo a lo largo de la vida oscilan entre el 0.4% y el 18.7%, siendo la República Checa, Hungría y el Reino Unido los países con las cifras más elevadas. En cuanto a las diferencias entre sexos, los hombres registran mayores tasas de consumo que las mujeres. Las tasas de prevalencia suelen ser más altas en áreas urbanas, y en particular entre los asiduos a las discotecas, clubes o eventos de baile. Anfetaminas y drogas de síntesis 17 En 2003 un 4.6% de la población española de 15 y 64 años había consumido éxtasis alguna vez en la vida, un 1.4% en los últimos 12 meses y un 0.4% en los últimos 30 días. El consumo tiene un carácter aún más esporádico que en el caso de la cocaína. De hecho, sólo un 0.1% la había consumido semanalmente en los últimos 30 días, y no aparecieron consumidores diarios. Los datos indican que se trata de drogas cuyo consumo se restringe casi exclusivamente a la población joven. Por otra parte, al igual que sucede con otras drogas de comercio ilegal, la prevalencia de consumo entre los hombres es bastante más elevada que en las mujeres. Según una encuesta realizada en 2006, un 3.3% de los estudiantes españoles ha tomado éxtasis alguna vez en la vida y un 1.4% reconoce haberlo tomado en los últimos 30 días. Parece que la tendencia en los adolescentes sigue un curso descendente. Tendencias de consumo En general, en Europa sigue habiendo indicios que apuntan a una estabilización o incluso una disminución del consumo de anfetamina y éxtasis. El consumo de anfetamina entre la población adulta joven (entre 15 y 34 años) ha descendido sustancialmente en el Reino Unido desde 1996, y en menor medida en Dinamarca y la República Checa, mientras que en otros países los índices de prevalencia parecen ampliamente estables, a pesar de que en algunos de ellos se haya informado de pequeños incrementos. Legislación El examen efectuado de la regulación en el derecho penal español y de la producción jurisprudencial sobre las anfetaminas y drogas de síntesis nos conduce a las siguientes conclusiones: a) El derecho español considera como drogas ilegales la fenciclidina, anfetamina, metanfetamina, MDMA, MDA, MDEA, GHB, y otras sustancias similares. Anfetaminas y drogas de síntesis 18 b) En la actualidad, la ketamina aparece en la Lista II de la Ley 19.303 de Sustancias Psicotrópicas, por lo que no se encuentra catalogada como droga ilícita en el derecho español, y el tráfico legal de esta sustancia no constituye delito. c) Las anfetaminas y drogas de síntesis se encuadran en la categoría penal de sustancias que causan grave daño a la salud, y su tráfico se sanciona con penas de prisión de duración comprendida, en principio, entre tres y nueve años, además de multa y otras posibles penas accesorias de menor entidad. d) Los delitos de tráfico de drogas se sancionan más gravemente cuando la cantidad de droga objeto del tráfico excede de ciertos límites establecidos por la jurisprudencia del Tribunal Supremo. Esos topes están situados actualmente en 240 gramos de MDMA, MDA o MDEA, 90 gramos de anfetamina y 30 gramos de metanfetamina. A partir de esas cantidades, la pena correspondiente oscila entre nueve años y trece años y seis meses de prisión. Bibliografía - Drogas de diseño. Colección Avances en Ciencias Farmacéuticas (2004). Colegio Oficial de Farmacéuticos de la Provincia de Pontevedra. - El-Mallakh RS, Abraham HD (2007) MDMA (Ecstasy) Ann Clin Psychiatry 19: 45-52. - Flórez J. Farmacología Humana. 4ª Edición. Masson Elsevier. - Guía de Prevención de Drogodependencias. Cuaderno 3: Información básica sobre drogas. Programa de Prevención de Drogodependencias de la Región de Murcia. Plan de Educación para la Salud en la Escuela de la Región de Murcia. - Monografía drogas recreativas. Adicciones. Vol.15, suplemento 2. 2003. - Observatorio Español sobre Drogas: Informe 2004. Anfetaminas y drogas de síntesis 19 - Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías. Informe anual 2007. - Tu guía: Drogas: + información - riesgos. Edición 2003. - Zakzanis KK, Campbell Z, Jovanovski D (2007) The neuropsychology of ecstasy (MDMA) use: a quantitative review. Hum Psychopharmacol 22: 427-35. Páginas web de interés - www.drugabuse.gov/Infofacts/Lista-sp.html: Instituto Nacional sobre la drogadicción de Estados Unidos (NIDA).