Hace mucho tiempo, en un bosque remoto, mágico, misterioso y oscuro habían unas criaturas llamadas Los Elfos que habitaban ese bosque. Los Elfos reinaban y vivían felizmente. Eran criaturas mágicas e inmortales, no tenían enemigos salvo un rey de las tierras del éste llamado Elyrin que quería saber el secreto de la inmortalidad de los elfos. Ellos no querían mostrarle ese secreto. Por eso el malvado rey intentaba destruirles para saber su secreto. Los Elfos también eran capaces de dar vida a otras criaturas, y ellos dieron vida a los árboles de su bosque y a un río que cruzaba sus tierras para protegerse de los ejércitos del rey Elyrin. Cuando intentasen los ejércitos del rey Elyrin conquistar y destruir el bosque, el agua del río formaba un enorme dragón que luchaba junto con los soldados Elfos para defender su tierra. Hubo una gran batalla en la que los Elfos convocaron un gran ejército para hacer frente a los soldados del rey, los Elfos lucharon con valentía pero los adversarios eran demasiados y estaban pereciendo muchos Elfos, pero cuando se perdía ya toda esperanza apareció el dragón y ayudó a los Elfos y ellos pudieron ganar la batalla. Al final ganaron al rey Elyrin y a sus esbirros y los castigaron con la muerte. Ander, 12 años