Respuesta a preguntas equívocas e piden que responda a preguntas que, por el momento, ahora y aquí, no tienen respuesta univoca. ¡No somos autoridad de nadal Me abstengo de responderlas preguntas en su orden. Creo que la confusión Intelectual de los letrados hoy, mayor tal vez en Chile que en otras partes -con un diez por ciento más de exageración criolla frente a países más antiguos, respetables o afortunados, como dijo Joaquín Edwards Bello hace un poco menos de mil años, sobre el retardo y la deformación con que estas cosas llegan a Chile (él incluso hablaba de las modas vesttmentarlas) es tal, que no se puede racionalizar honestamente sobre «El libro y ta irrupción de los medios audiovisuales». Ejemplos de esla Imposibilidad o dificultad al cubo. En los últimos días de este año 1992, una pscudo-polémlca pública, ensordecida por las exigencias del estilo mercurial. se ha desarrollado an te nuestros ojos atónitos y perplejos (palabras respectivamente del senador Otero y la diputada Matthei], sobre la calidad de la cultura en Chile. Encontrarán en estas páginas en recuadro la opinión en carta a El Mercurio, de Don Pierre Jacomet, a quien no conozco ni de nombre, pero al cual le encuentro casi toda la razón. Digo «casi», porque soy chileno, y me guardo las espaldas de los curcos morales. M MENSAJE N"416, ENERO-FEBRERO 1993 Se trata de si las letras, y la alta cultura letrada, están muy mal o esplendorosas en el Chile de 1992. Digo «alta cultura de las letras» y el lector creeráque estoy hablando desde o para una «élite», como dicen en este país donde las palabras claves en nuestro tiempo se pronuncian en otros idiomas: inglés, francés o alemán (y a veces, no sin erratas, en latín o griego). No me refiero a eso, que me parece vulgar. La literatura popular (digamos, algunas canciones y versos de la Violeta Parra, y bastante más de la tradición y aun, apenas, del presente) es naturalmente alta cultura, como lo fueron y son gran número de romances en castellano -en sí o en versión criolla- y todo lo que en letras levanta el espíritu hacia la belleza, que hace resplandecer la verdad, la sinceridad, la realidad y el espíritu. Pero aquí entre nosotros en estos tiempos, lo vulgar, grosero y en mi opinión tonto, es llamado «popular» y «cultura]». No hacen pagar IVA (lo digo aunque no me interesa lo comercial del asunto) a supuestos «eventos» vulgares porque -lo señaló una autoridad- si les gusta tanto a los Jóvenes tiene que ser cultural. Vulgar: cultural. Por lo tanto, hablo de alta cultura en letras Incluyendo lo verdaderamente popular. El marqueteo, hijo legítimo si bien monstruoso de los neo-liberales que en Chile agregan un diez o más por ciento a lo similar extranjero, incluso norteamericano salvo tal vez Florida y una parte de California, ha producido la Impresión en algunos cerebros débiles por naturaleza o por edad mucha y demasiado poca- que en Chile la cultura letrada 35 florece como floripondio - como, agregan, la economía, las modernizaciones y los posmos (en su mayoría 'posmas»). ¡Qué provincialismo, qué necedad! Puesto que uno conoce la propia estupidez, puede referirse a la de otros. Las pretensiones chilenas en cuestiones culturales, y podría agregar económicas, y -sigamos-, el «Ilderazgo», hacen reír a gritos, no digo a europeos y otros occidentales cultos (se rien para callado cuando hablan con chilenos o viven aquí), sino también, lo sé por experiencia directa, a sudamericanos de Argentina, Brasil, México y hasta Venezuela y otros. Con razón. Porque aparecen unas pocas novelas, contrastando en número y quizá en calidad, con las del tiempo del -señor Plnochet", creen que hay un resurgimiento de la creación Intelectual y literaria en Chile que supera nuestro propio pasado. No es cierto. Claro esta que hay mecanismos de venta y exhibicionismo (con frecuencia en Santiago caracterizados por una suerte de "voodoo' a la chilena) que hacen circular y prestan ruido a ciertas obras, de calidad, de seml-calldad o detestables: circulan, pero no tanto después de todo. Anuncié que me referiría a la polémica mercurial, [ocalísima, sobre estos asuntos. No tengo espacio ni paciencia. Pero le doy al lector curioso (¿los hay? ... dlria que no) dos datos. En el mismo cuerpo D del famoso El Mercurio del 20 de diciembre del 92, encontrarán, encontrarían, do:-, opiniones divergentes respecto a nuestro «esplendor» o nuestra decadencia en cultura y letras. Ademas, doy nombres. Una de las opiniones es de José Donoso, desde el «castillo Srnithsonlan.ublcadoenelmallwashlngtonlano-; la otra es de un periodista norteamericano Ilustrado -no digo Ilustre; lo conocí-, el hijo del español ilustre Don Federico de Onis, que publicó de su bolsillo el primer libro de (aseñora Mistral... no en Chile, aun cuando era su primer libro. Desolación, ¡sino en Nueva York en castellano! Este Juan de Onis, que tiene desde hace tiempo tierras en Doñlhue (lo cual no impide leer y saber) habla en ese cuerpo de El Mercurio el domingo 20 de fines de este «annus mlrabllls» para unos o •annus horribllis» para otros, de: «las más bien modestas expresiones de desarrollo cultural» en Chile. Créanle a uno o a otro. Más bien, fórmense su propia Impresión. Leyendo. No. Viviendo. • Santiago y la cultura tas de San Juan de la Cruz en un volumen: Señor Director: Hemos leido con cierta sorpresa que un grupo precio Igual a nueve botellas de whisky Importade arquitectos sostiene que Santiago se va a do. (...) convertir en la capital cultural de Iberoamérica La capital cultural de Ibeoramérica es desde porque están habilitando la Estación Mapocho. hace tiempo Buenos Aires, más aún que Madrid. La Idea de preparar un espacio para las manifes- Desde luego. Buenos Aires tiene muchos más taciones artísticas es espléndida, pero la cultura cinematógrafos, teatros y librerías que Madrid, y no viene pegada a los galpones y el espacio muchísima más vida cultural. Culturalmente cultural no tiene mucho que ver con ellos. Santiago está a años luz detrás de nuestros Marshall Me Luhan dice que los medios de vecinos. (...) información acarician la autoestima de sus lectoLas librerías y la cultura son reemplazadas res u oyentes, lo que nos hace pensar que esta por los ceñiros de compra y los supermercados observación no va a ser publicada por Impopular, y nosotros, los aborigénes, nos quedamos muy pero Igual la decimos: Santiago es un peladero impresionados con el nuevo Jumbo y el Parque cultural atroz. Ello no se debe a la falta de Arauco. ¡Hay tanta coso que no necesitamos! espacios sino a la sorprendente Ignorancia de Una abundancia extraordinaria. nuestra población y a la penosa medianía de Ojalá sea cierto lo que piensan los arquitecnuestra burguesía. tos de la Estación Mapocho y que su presencia Las librerías son desiertos en los cuales sólo nos transporte rápidamente a otro nivel menos hay best sellers extranjeros traducidos al caste- chato que el nuestro, pero lo dudamos. Y tiene llano por catalanes que no lo hablan. El otro dia bastante lógica. en la Feria Chilena del Libro de Santiago pedimos En nuestro país sólo se acepta la mediocriuna «Historia de la Literatura Española»: el ven- dad. dedor, boquiabierto. Después solicitamos Las Nubes, de Aristófanes, y nos derivaron a la sec Fierre Jacomet clon de astronomía. Viña del Mar Para qué hablar del precio de los libios. Comle carta publicada en El Mercurio, sección Carlas, jueves 10 0e pramos en la Librerin Paulina las obras compledhCiembie 1092. 36 MENSAJE N°416, ENERO-FEBRERO 1993