WWW. LAPALABRAISRAELITA. CL CULTURA VIERNES 11 DE ENERO DE 2013 13 El incalculable valor de lo no-dicho POR JOYCE VENTURA El 2004 el sociólogo y doctor en filosofía Max Colodro viajó a París a invitar a varios pensadores franceses para el día mundial de la filosofía que se celebraría en Chile. Entre ellos a Jacques Derrida quien sufría de un cáncer avanzado. Su negativa fue sin embargo el comienzo de una intensa amistad vía mail a partir de la cual Colodro comenzó a escribir Ontología de la ausencia. La metáfora en el horizonte de la desconstrucción (Editorial Cuarto Propio, 2012). «Escribir es volver a leer», escribe Max Colodro para luego engancharse en la desconstrucción derridiana según la cual no hay una sola verdad sino múltiples verdades que se superponen. Más que lo dicho, lo que brilla con fuerza es lo no-dicho. Es en la ausencia donde pueden hallarse otras verdades a las que vale atender. De ahí la importancia de la desconstrucción como método del conocimiento en nuestros días en que se han desestimado las certezas. Por eso no sirven las lecturas ingenuas o neutras sino aquellas que anteponen una actitud de desconfianza y sospecha. La interpretación es infinita: «El acto de la creación es en realidad un proceso de lectura, reescritura a la deriva en un ir y venir interminable de nuevas fundaciones», escribe Colodro. Un autor se disputa el poder sobre sus palabras no sólo con quien lo lee y sino con las distintas versiones que pueden obtenerse de un mismo texto según el momento y el contexto que rodee su lectura. Cuando Philip Roth pidió a Wikipedia borrar una entrada que según él malinterpretaba su novela La mancha humana, la administración del sitio le respondió que entendía que él era la máxima autoridad en su trabajo pero que necesitaban más fuentes. Lo que hizo Wikipedia fue una declaración de principios basada en un gesto descontructivo que determinó absurdo pensar que después de años de haber publicado un libro el autor pretendiese decir la última palabra acerca de éste. En este sentido Colodro sentencia: «El autor está irremediablemente perdido detrás de las palabras, nuevamente fuera de los márgenes». La realidad es infinita, cada cosa es ella misma pero parte de ella misma es también su relación con lo otro y entre ambos una huella que no tiene origen. Con esta ausencia y la multiplicación de los sentidos no hay metáfora posible: «no claudicar frente a las trampas de lo explícito, es también un auto de fe», explica el filósofo. Fundamental es el concepto de la gramatología, que consiste en que el fonocentrismo, es decir entregar toda la autoridad a la palabra hablada por implicar la presencia del autor, no es posible ya que éste siempre fue dependiente de la memoria, como ilustra Colodro recogiendo la hermosa figura borgeana de Funes el memorioso, personaje utópico «que ha superado las secuelas humanas del olvido y que retiene en su vertiginosa actualidad, todo lo vivido, todo lo dicho, oído y soñado que ha sido dado a la experiencia de una vida». Lo que revela Funes, señala Max Colodro en un gesto descontructivo de encontrar huellas en la ausencia, es justo lo contrario de lo que alude «es la precariedad de la memoria, su debilidad inherente y su necesidad de registro para permanecer y superar las inclemencias del tiempo. No hay entonces memoria sin archivo, sin ese fármakon que la alivia de su principal amenaza de muerte». El fármakon, notable concepto ya que contiene en sí mismo tanto remedio como veneno, es la escritura. Es remedio porque asegura la perpetuidad y también su opuesto porque permite el alejamiento del sentido. Según la gramatología, la palabra hablada, la presencia misma, siempre estuvo antecedida por la escritura, origen de todo, si es que hay un origen, ya que éste no puede ser otro que la multiplicidad o el infinito. (En la Torá el infinito es el origen del mundo y es por eso que cuando se habla de la creación se usa la palabra h e b r e a Elohim, que es el plural mayestático de D´s, pero éste es sólo un paréntesis que tal vez viene al caso ya que tanto Derrida como Colodro son de origen judío). Ontología de la ausencia es un texto filosófico complejo que va en la línea de otros trabajos del autor como El silencio de la palabra (ganador del premio al mejor ensayo del año 2000 del Consejo Nacional del Libro y la Lectura, reeditado por Editorial siglo XXI e incluido en una colección de grandes ensayos de América), Reflexiones sobre el caos y Formas de la eternidad.