La casa de los espíritus, de Isabel Allende La casa de los espíritus Preguntas-modelo PAU • Rasgos temáticos y formales de la nueva narrativa hispanoamericana y su reflejo en La casa de los espíritus • Análisis de los protagonistas de La casa de los espíritus • Aspectos políticos y sociales reflejados en La casa de los espíritus • El “realismo mágico” y La casa de los espíritus Nota: Al final se incluyen un resumen y un árbol genealógico de los personajes, que podéis utilizar para completar las respuestas con ejemplos. Introducción general (válida para cualquier pregunta): La casa de los espíritus, publicada en 1982, es la primera gran novela de Isabel Allende y una de las obras más representativas de la etapa del posboom literario hispanoamericano. Además, esta primera narración extensa de la autora chilena se convirtió de inmediato en un best-seller en numerosos países del subcontinente americano, en España y en otras naciones de Europa. En ella, la autora chilena retrata la evolución de la sociedad hispanoamericana durante el siglo XX a través del relato de los distintos acontecimientos que suceden alrededor de varias generaciones de la familia Trueba-Del Valle. 1 La casa de los espíritus, de Isabel Allende Rasgos temáticos y formales de la nueva narrativa hispanoamericana y su reflejo en La casa de los espíritus Los rasgos temáticos, narrativos y estilísticos de La casa de los espíritus podemos incluirlos en la corriente literaria denominada posboom (generación de 1980), que es posterior a la generación llamada del “Realismo mágico” (generación de 1960) de la que es continuadora en algunos temas y formas. La publicación en 1975 de la primera novela de Skármeta, Soñé que la nieve ardía, podría marcar el punto de partida del posboom que alcanzó su triunfo con La casa de los espíritus (1982) de Isabel Allende. En esta novela pueden apreciarse una serie de características que la han convertido en paradigma de esta narrativa hispanoamericana y que enumeraremos a continuación [Lo que sigue se puede completar con la pregunta sobre el Realismo mágico]. La trama gira en torno a cuatro generaciones de mujeres que influyen en un solo hombre, Esteban Trueba. La novela describe una sociedad patriarcal e inflexible, basada en los valores tradicionales, y que oprime a las clases sociales más desfavorecidas, a los más débiles y a las mujeres. Aunque en ningún momento se menciona la localización espacio-temporal exacta del argumento, es fácil reconocer la patria de la autora, Chile, en la época que abarca desde principios del siglo XX hasta los años 70, en torno a la llegada al poder de Salvador Allende (primer presidente socialista y primo hermano del padre de la escritora) y su derrocamiento con el golpe de Estado militar de Pinochet en 1973. De acuerdo con este periodo histórico, entre los temas principales de la obra estarán la oligarquía y la lucha de clases y la actuación de la mujer en dicha sociedad. Vemos así como la novela desarrolla las diferencias sociales, la lucha de las mujeres por obtener derechos políticos, el movimiento obrero, la llegada al poder de un gobierno izquierda y su caída a raíz de un golpe militar. Sin embargo, La casa de los espíritus abarca muchos otros temas. Los más universales, como el amor y la muerte, mezclados con lo sobrenatural (como es propio de la corriente literaria en la que se enmarca la obra), aparecerán a lo largo de la obra y servirán de eje a toda la trama. Dentro de estos temas, como subtemas, también encontramos temas como la infidelidad, la violencia de género, los fantasmas y la magia. Formalmente, la obra se presenta ligada al tópico literario del “manuscrito encontrado” o la “falsa autoría” (presente en nuestras letras ya en El Quijote de Cervantes). Casi toda la trama está narrada desde el punto de vista de Alba, quien se basa en los “cuadernos de anotar la vida” de su abuela Clara. En ocasiones, no obstante, esta perspectiva alterna en la obra con la omnisciencia narrativa o con la cesión de la palabra a Esteban Trueba, abuelo de Alba, quien cuenta a esta sus recuerdos. De este modo, se pueden apreciar 3 tipos de narradores: omnisciente en tercera persona; en primera persona, cuando Esteban Trueba habla sobre sí mismo y sus familiares, justificando sus acciones a lo largo de su relato; y alternando la primera y la tercera persona cuando Alba, la narradora principal y portavoz de la autora, es la encargada de rescatar la memoria familiar, incluyendo aquellos hechos de los que ella misma es protagonista. Isabel Allende se vale de esta técnica para dar a la historia la sensación de verosimilitud. Esta pretendida realidad podría chocar con uno de los ingredientes más peculiares y fascinantes de la novela, el realismo mágico, donde la 2 La casa de los espíritus, de Isabel Allende realidad narrativa se funde con elementos fantásticos que pasan a formar parte de la cotidianeidad. Sin embargo, el mismo recurso de la perspectiva narrativa podría justificar precisamente esta incorporación de lo sobrenatural como algo cotidiano (algo que ya ocurría, por ejemplo, en Otra vuelta de tuerca, de Henry James), ligado a la explicación de lo que no se entiende, a las creencias de los personajes y al velo deformante de los recuerdos. En cuanto a la estructura de la obra, está compuesta por catorce capítulos y es circular, puesto que la voz del personaje de Alba comenzará y concluirá (en el epílogo) con la misma frase, las primeras líneas del diario de la niña clara indicando un ciclo inexorable. Además, la obra comienza con la muerte de Rosa (tía abuela de Alba) y acaba con otra, masiva y sangrienta. La autoría de ambas muertes podría atribuirse a los mismos (como grupo), con distintos nombres. Así pues, la historia de la familia rescatada de los cuadernos de anotar la vida es el pretexto utilizado por Alba para dar comienzo a un viaje a través de la historia de la familia Trueba. La obra termina como un monólogo de la nieta dando cuenta de la muerte de su abuelo y del estado de la casa de los espíritus (una alegoría de Chile) después del golpe militar. En conclusión, La casa de los espíritus reúne rasgos de una novela romántica, con una serie de relaciones amorosas y el conflicto tradicional entre el amor y el orden social; pero al mismo tiempo se trata de una novela histórica, que analiza Chile a lo largo de un siglo. Todo ello envuelto en la mezcla de lo cotidiano con lo sobrenatural del realismo mágico y representando facetas universales del ser humano a través de sus variados personajes. 3 La casa de los espíritus, de Isabel Allende Análisis de los protagonistas de La casa de los espíritus Los personajes de La casa de los espíritus cumplen la función de dar coherencia a la historia y relacionan los distintos acontecimientos de la trama. Su retrato nos permite contemplar la evolución social y política de Chile durante todo el siglo XX. Aunque el único personaje que está presente a lo largo de toda la novela sea masculino, Esteban Trueba, el verdadero protagonismo de la historia recae sobre los personajes femeninos de tres generaciones de la familia Trueba-del Valle. Clara, en primer lugar (su madre, Nívea, que representa la primera generación, apenas tiene protagonismo en la obra), su hija Blanca y su nieta Alba (cuyos nombres guardan además una relación semántica). La historia de La casa de los espíritus gira en torno a la relación de estas tres mujeres con el personaje de Esteban Trueba y a las relaciones que establecen con otros personajes. Se trata, por tanto, de un relato eminentemente feminocéntrico, que plasma el devenir de cuatro generaciones en las que las mujeres de la familia, junto al patriarca, Esteban Trueba, constituyen el eje del drama familiar y político del país andino. Esteban Trueba es el único varón de una familia de la oligarquía, empobrecida por el despilfarro de un padre alcohólico. Se ve obligado a trabajar desde la adolescencia y consigue recuperar su fortuna explotando una mina en el norte del país. Esa fortuna le permite recuperar la hacienda familiar, Las Tres Marías, donde se desarrolla gran parte de la historia. Posteriormente llegará a ocupar un escaño como senador de la República, con todas las características de un político conservador de la época. Representa el poder político y la clase adinerada. El senador Trueba siempre será el sustento económico de la familia, el hombre fuerte ante la adversidad, el único capaz de poner orden en el mundo material. Es de carácter fuerte y constantemente padece ataques de ira, ansiedad y violencia, que es tan incapaz de controlar como sus impulsos sexuales. No dudará en apaciguar sus deseos doblegando a quienes le rodean. De ideología conservadora, desprecia a todos los de clase inferior, y se considera con derechos sobre ellos, cometiendo los abusos más brutales, como la violación de las mujeres. Sin embargo, se enamorará apasionadamente, primero de Rosa del Valle y después, cuando esta fallece, de su hermana Clara con la que formará su familia. Sin embargo, incapaz de comprenderla, acabará por distanciarla de sí. Solo su nieta Alba logrará humanizar un poco su comportamiento. Por otro lado, como hemos comentado, el foco de atención está puesto en la galería de mujeres que cumplen un papel protagonista e ilustran la lucha por la liberación femenina. El proceso de toma de conciencia está subrayado en el relato con el valor simbólico de sus respectivos nombres: Nívea, Clara, Blanca, Alba, símbolos de la luz, la pureza, de lo celestial y también de lo paranormal. Estas mujeres se encuentran entre dos mundos enfrentados: las clases acomodadas y las asalariadas. Pero su rol más importante es el de socavar el régimen familiar machista y patriarcal. Las mujeres de la casa de los espíritus son depositarias de una cadena de cualidades especiales que están ausentes en los varones: son artistas y creadoras y utilizan la imaginación para configurar mundos privados que se alejan del contexto real. La protagonista esencial de la novela es Clara del Valle. Se trata de una mujer cargada de bondad y sensibilidad. Posee la habilidad de comunicarse 4 La casa de los espíritus, de Isabel Allende con los espíritus, de desplazar objetos y de levitar. A lo largo de su vida fue escribiendo cuadernos donde apuntaba lo que ocurría a su alrededor. Blanca, hija de Clara y de Esteban, lucha contra los prejuicios y rompe con las barreras entre la clase pobre y la adinerada: dos hechos imperdonables a los ojos de la burguesía. Su relación amorosa con Pedro Tercero la dejará embarazada de Alba y enfurecerá a su padre. Su sensibilidad no se desarrollará en la comunicación sobrenatural con los espíritus, sino en su faceta artística, creando figuras de barro. Alba, de acuerdo con el vaticinio de su abuela clara, nace con poderes innatos y no necesita ir a la escuela, por lo que se cría en la casa de la esquina con fuertes lazos afectivos con todos sus miembros. Es la figura femenina más trágica: violada, torturada y prisionera de la dictadura. Cuando el coronel García viola a Alba, ella representa a todas las personas que pierden su identidad o su vida bajo el terror del gobierno de un dictador. La figura de los hijos varones de Clara y Esteban es bastante peculiar. Jaime y Nicolás son más bien hijos de la madre que del padre, son educados en un colegio inglés, lejos de la hacienda y sus costumbres. Jaime, médico dedicado a los pobres, no comparte la idea de la violencia pero es víctima de ella. Mientras va creciendo se vuelve frío, sombrío y sentimental, cosa que oculta. Nicolás, a diferencia de su hermano, es extrovertido, gracioso y siente curiosidad por lo espiritual y sobrentural. Desaparece de la historia al ser expulsado por su padre, que nos soporta sus extravagancias. Por otra parte, en el lado de las clases sociales más desfavorecidas, la familia García tiene un papel fundamental en la obra. Residentes nativos de Las Tres Marías, son fieles inquilinos de Esteban Trueba desde el principio. Los García constituyen la población campesina y la clase urbana pobre. Pedro Tercero (tercera generación de esta familia), a pesar de criarse sometido a Esteban Trueba, pronto se educa en las ideas comunistas. Es un sindicalista y se convierte en un héroe para los trabajadores oprimidos. Mantiene una relación amorosa con Blanca y es el padre de Alba. Posteriormente se transformará en uno de los cantautores populares de la resistencia contra la dictadura (su personaje está basado en Víctor Jara). Su tía, Pancha García, hermana de Pedro Segundo, es la primera campesina violada por Trueba. Representa a todos los campesinos a quien Esteban considera poco más que esclavos. Fruto de esta violación nacerá el padre de Esteban García. Este, que será, por tanto, nieto de Pancha y nieto no reconocido de Trueba. Desarrolla un fuerte odio hacia los Trueba y buscará vengarse de la infamia cometida en el pasado con su abuela violando a Alba. Por último, podemos reconocer en algunos personajes de la obra (ya sean secundarios o episódicos) el trasunto literario de personajes reales como Víctor Jara, que podemos identificar en Pedro Tercero; Salvador Allende, que aparece como el Candidato; y la figura de Pablo Neruda, al que se denomina el Poeta. A partir de esta breve descripción de los personajes principales puede concluirse que, además de su participación en la acción, relacionando todos los acontecimientos y dándole unidad temática a la obra, tienen una función simbólica como arquetipos de distintos roles sociales. 5 La casa de los espíritus, de Isabel Allende Aspectos políticos y sociales de La casa de los espíritus La casa de los espíritus es una novela que abarca varias generaciones y comprende grandes cambios políticos. Es importante aclarar que aunque nunca llegue a decirse abiertamente, no hay duda de que el relato está ambientado en Chile. Se trata, por una lado, de una novela de testimonio y denuncia, una confesión sentimental e histórica; por el otro, la denuncia del terror que siembra la dictadura de Pinochet en su país, pero que bien podía representar cualquier dictadura en cualquier país de Hispanoamérica. El retrato de las visicitudes de la saga familiar de los Trueba nos permite contemplar la evolución social y política de Chile durante todo el siglo XX. El relato se inicia con los cuadernos de Clara, pero va a ser Esteban Trueba el único personaje que vivirá todas las épocas, y él, igual que su suegro antes, va a ser un hombre volcado en la política, como corresponde a la oligarquía de su época. Las etapas de su vida serán un fiel reflejo de la realidad chilena del siglo XX con la evolución de una estructura social arcaica a otra más moderna con sus desigualdades sociales, su inestabilidad política, la corrupción en las votaciones, la reforma agraria, el golpe de Estado y la involución política. La novela da comienzo en la primera década del siglo XX, y diversos acontecimientos históricos y sociales en la vida de los personajes van a marcar el paso del tiempo: los felices años veinte, la llegada de los primeros coches, el avance de las tropas en la II Guerra Mundial, la prosperidad de Chile como despensa de una Europa en crisis; la llegada de inmigrantes ilustres, como el conde Satigny; el miedo al comunismo por parte de la derecha conservadora, el gran terremoto de 1960... A medida que avanzan los acontecimientos y las relaciones entre los personajes se vuelven cíclicas, la sociedad chilena se articula como una gran mayoría analfabeta y pobre que trabaja en fundos, contrapuesta a la minoría oligarca, culta e investigadora. El gran contraste se crea aquí a través de las parejas entre miembros de las dos clases: Pedro Tercero y Blanca, Nicolás y Amanda, Alba y Miguel; en el momento que alguno de estos intenta dejar el camino que le ha sido trazado encuentra una gran zanja que lo separa de la otra clase social. Es curioso el tratamiento que da la autora al problema de la explotación de los pobres, pues nunca llega a caer en el maniqueísmo: ni Esteban Trueba es tan malo ni los campesinos tan buenos. Los últimos capítulos de la novela se despegan del realismo mágico para caer en la más amarga novela realista. En la victoria del Candidato y la posterior reforma agraria, en el boicot de los inversores extranjeros y las empresas nacionales, vemos claramente el gobierno de Salvador Allende, de 1970 a 1973. Esteban representa aquella gran mayoría de la sociedad chilena que duerme con miedo al comunismo y agita a las fuerzas armadas para que intervengan y, al igual que todos los demás, tendrá tiempo de arrepentirse de lo ocurrido. Esteban García representa el producto necesario del odio. Era inevitable que una sociedad tan injusta creara personajes así. A partir de aquí se relatan una serie de atrocidades que contrastan con la imagen de orden y pulcritud que intenta dar el país al exterior, y el personaje de Alba se mueve entre estas idas y venidas clandestinas, entre supermercados llenos de manjares que nadie puede comprar, calles sin mendigos y barrios de chabolas tapiados para que no los vean los turistas y campos de concentración. 6 La casa de los espíritus, de Isabel Allende La sociedad bajo la opresión se divide finalmente en dos bandos: los mayores que se exilian, como Blanca y Pedro Tercero; y los jóvenes que aún confían en que un cambio es posible, como Alba y Miguel que se quedan para luchar. [Este tema se debe completar con los demás, especialmente con los dos primeros (y con ejemplos del libro). Se pueden mencionar las relaciones entre los personajes de distinta clase social; el trato de Esteban Trueba hacia sus empleados (las violaciones, el desprecio...); cómo Pedro Tercero intenta introducir las ideas comunistas entre los campesinos, que le admiran, pero apenas le hacen caso..., etc. Hay que acabar con una conclusión en la que se mencione que la obra refleja las tensiones políticas y sociales que se producen en la historia chilena, y en general hispanoamericana, durante el siglo XX]. 7 La casa de los espíritus, de Isabel Allende El Realismo mágico y La casa de los espíritus En Literatura, recibe el nombre de “Realismo mágico” la corriente novelística del siglo XX en Hispanoamérica que se difunde con el llamado boom comercial de la narrativa en español desde 1950 a 1970. Se puede definir como la preocupación estilística y el interés en mostrar lo común y lo cotidiano como algo irreal y extraño. Es una forma de escribir en la que se funden la realidad con elementos fantásticos, mágicos y fabulosos; un movimiento literario hispanoamericano que nace como vía de experimentación de nuevas formas narrativas. Es un mecanismo narrativo que pasa por introducir hechos insólitos o fantásticos en una narración realista. Son novelas que procuran ser muy gráficas y no eludir la mirada realista sobre la tragedia, el dolor o lo escatológico, pero de vez en cuando introducen un hecho insólito que sorprende al lector. Lo verdaderamente sorprendente no es el hecho en sí, sino que los personajes, en su gran mayoría simples y prosaicos, lo asumen sin más como parte de su vida cotidiana y no se molestan en analizarlo. Se trata de un intento de renovación literaria, muy unido a las renovaciones estéticas de las vanguardias europeas y norteamericanas. El Realismo mágico nace con los cuentos de Horacio Quiroga a principios del siglo XX; pero no será hasta los años 60 y 70 que varios escritores del llamado boom latinoamericano lo utilicen como sello distintivo de sus novelas. El ganador del Nobel Gabriel García Márquez, con Cien años de soledad, y Alejo Carpentier, con Los pasos perdidos serán sus mayores exponentes. Este último, junto con Miguel Ángel Asturias, pueden considerarse los verdaderos iniciadores, quienes, durante los años 40 y 50, sentarían las bases y características del nuevo estilo. Posteriormente, el Realismo mágico ha dado otros escritores de la talla de Juan Rulfo y el citado García Márquez, en los años 50 y 60 respectivamente. Ya en los 80, dentro de la generación del poosbom podemos destacar a Isabel Allende, con la obra que estudiamos, y Laura Esquivel, con obras como Como agua para chocolate. Isabel Allende forma, por tanto, parte del fenómeno artístico y comercial que siguió al denominado boom del Realismo mágico, corriente que pasó a denominarse posboom, con novelas escritas en torno a 1980. Sin embargo, la crítica no se ha puesto de acuerdo a la hora de valorar La casa de los espíritus como representativa del Realismo mágico, puesto que las características heredadas de esta corriente que utiliza Isabel Allende en su novela responden a las expectativas de los lectores europeos, deslumbrados previamente por el boom hispanoamericano. Pero, como hemos comentado, pese a que lo real se presenta de forma más convencional en La casa de los espíritus, también se encuentran en esta novela elementos mágicos. La magia de los ambientes, la extravagancia de sus personajes y la ferviente imaginación con la que la autora desvela el lado oculto de la vida cotidiana y sobre todo la ambigüedad con que presenta las situaciones que se mueven entre el lado real y fantástico son parte del estilo particular de los autores latinoamericanos. Todo esto representa la parte mágica, mientras el realismo se encuentra en el modo de contar la narrativa: como si el hilo principal fuera realista y lo más importante, mientras que lo mágico no representa más que unos pocos detalles ordinarios sin poca importancia. El realismo mágico invita al lector a menospreciar lo real, a apreciar lo milagroso y a despreciar lo histórico. 8 La casa de los espíritus, de Isabel Allende El realismo mágico en Isabel Allende es una influencia directa de otros escritores, principalmente García Márquez. En este texto los rasgos de lo mágico tienden a acumularse alrededor de ciertos personajes y en cierto tiempo, a diferencia de otros textos, como Cien años de soledad, donde son propios de toda la comunidad de principio a fin. En La casa de los espíritus lo mágico parece ser cosa genética en la familia, aunque sólo en la rama femenina. Tenemos personajes que vienen marcados por características insólitas y sus parientes viven esto como algo natural, como Rosa, poseedora de una "extraña belleza" que atrae a todos, como de sirena, y nacida con el pelo verde; o Clara, que vive en un espacio propio acompañada de espíritus. De Nívea, la madre de las dos hermanas, se llega a decir que consideraba el pelo verde de una, y la telequinesia de la otra, al mismo nivel que la cojera de Luis: un rasgo distintivo más. Mientras a Barrabás, el perro adoptado por Clara se le atribuían rasgos "mitológicos". Durante la primera parte de la obra, lo sobrenatural invade la vida de los personajes, especialmente de Clara; pero, cuando esta muere, lo insólito se va relajando y así nos lo hace notar el narrador. La novela pasa entonces a convertirse casi en novela histórica realista. En este texto se presenta lo extraordinario como una hipérbole de la realidad cotidiana, y cualquier tipo de superstición deja de serlo, porque las premoniciones se cumplen, los objetos se mueven y los muertos vuelven para cuidar de los vivos y despedirse. Las barreras entre lo real y lo extraordinario se vuelven tan porosas que poco a poco vemos colarse rasgos inverosímiles en situaciones dramáticas y no nos asombramos de ello. En un momento dado, Clara advierte que "tiene que haber una relación entre los acontecimientos" y en esta afirmación hallamos la clave para entender la novela: los sufrimientos, las muertes, la pérdida... son asumidos como parte de una gran armonía cósmica, un plan que asume la existencia como un todo. No es por tanto extraño que la obra se abra y cierre con las mismas palabras, dando así la impresión de ciclo cumplido, pues todo lo que se cuenta parte del mismo lugar en el que desemboca. 9 La casa de los espíritus, de Isabel Allende Resumen por capítulos de La casa de los espíritus Extraído de [http://www.monografias.com/trabajos28/casa-de-espiritus/casa-deespiritus.shtml#ixzz3ykfD7lmr] Capítulo I "Rosa la Bella" El Padre Restrepo, sacerdote de la parroquia de San Sebastián, acusaba en la Misa a quienes cometían barbaridades -no ciertas- (por ejemplo, a Ester Trueba, de prostituta). Severo Del Valle (candidato político, ateo y masón), iba a Misa dominical con su esposa Nívea, para que la gente lo vea. Nívea tuvo 15 hijos; de ellos, quedaban 11; Rosa (18 años), hija mayor; la más hermosa mujer del mundo: blanca como una muñeca, cabello verdoso, bronce viejo, y ojos color miel; su enamorado -Esteban Trueba-, era minero; llevaban 2 años sin verse, pero eran fieles. Clara (10 años), hija menor de los esposos Del Valle, tenía poder mental: movía objetos y anticipaba catástrofes. Un día llegó a casa el cadáver del tío Marcos -gran aventurero-; quieren comprobar que sea su cadáver de verdad, pues años antes había construido un artefacto en forma de ave; la gente fue a verlo despegar; el aparato voló por los cielos y desapareció. Durante días, Nívea -hermana del piloto-, rezó para que este regrese sano y salvo. Los rescatistas buscaron y "encontraron" el cuerpo en los Andes. Semanas después llamaron a la puerta: ¡era el tío Marcos!. Al abrir el ataúd, hallaron sólo bolsas de arena. Pero ahora era distinto: el tío Marcos había muerto de fiebre amarilla; el ataúd llegó a casa con Barrabás (perro de raza muy rara que no dejaba de crecer, hasta alcanzar dimensiones monstruosas). Esteban (novio de Rosa), ganó la concesión de una mina, debido a su apellido materno; así obtendría mucho oro para regresar donde Rosa y casarse. Rosa enfermó; el Dr. Cuevas -médico de la familia-, recetó té de limón con licor para calmar la fiebre; su padre autorizó que le dieran aguardiente de una botella que le habían regalado al ser elegido candidato político. Días antes, Clara predijo una muerte por error en la familia. Cuando la Nana llevó a Rosa el medicamento, ella lo tomó y al poco tiempo murió. El Dr. Cuevas realizó la autopsia, descubriendo que el aguardiente estaba envenenado (era una trampa para Severo). El padre, maldiciendo, dijo que nunca debió estar en política, pues ello mató a su hija. Férula dio la mala noticia a su hermano Esteban, que salió de la mina y viajó hasta el sepulcro de Rosa, acompañándola hasta el amanecer. Clara se despertó y buscó a su hermana Rosa; al no hallarla, se preocupó y fue a la cocina, viendo cómo abrían a su hermana; quedó muy asustada. Desde entonces dejó de hablar, pues pensaba que todo lo que decía se cumpliría; después de 9 años volvió a hablar, para anunciar su boda con Esteban Trueba. Capitulo II "Las Tres Marías" Esteban dejó de trabajar en la mina, dedicándose a otra labor menos sacrificada. Fue al campo, a "Las Tres Marías", después de 15 años, su antigua hacienda familiar, que estaba en ruinas; 10 La casa de los espíritus, de Isabel Allende pero donde aún estaban los campesinos (tímidos y sucios). Él les dijo que desde ese día comenzarían a trabajar y que no les faltaría nada. Incapaz de contener sus impulsos sexuales, se aprovechó de Pancha García -campesina de 15 años-, llevándola a vivir en su rancho; pero, al quedar Pancha embarazada, Esteban perdió interés en ella, por lo que la muchacha regresó donde sus padres. Esteban se convirtió en violador de toda joven campesina de la que se encaprichaba -a la que embarazaba-. En el Farolito Rojo (un prostíbulo), conoció a Tránsito Soto -prostituta de 12 años-, a quien dio 50 pesos para irse a la capital y convertirse en famosa. Esteban recibió una carta de su hermana Férula, anunciando la próxima muerte de su madre Ester, quien pedía que fuera a verla. Dejó la hacienda a cargo de Pedro Segundo García (hermano de Pancha), amenazándolo si es que no la cuidaba bien. La II Guerra Mundial terminó (1919); la economía cayó; los ricos se divertían sin darse cuenta de la cólera de los pobres. Capítulo III "Clara, Clarividente" Clara ya no hablaba; la familia se empezó a preocupar y llamaron al Dr. Cuevas, quien al ver que sus medicinas y curaciones no hacían efecto, recomendó a Rostipov -mago ilusionista, quien podría curarla-; al examinarla, se dio cuenta que su mudez era sólo por capricho y no podría hacer nada. Severo la sacó del colegio de monjas y contrató una institutriz inglesa: Miss Ágatha; pero la telekinesis de Clara, hizo que la maestra renunciara. Llegó otra de Suiza, que tuvo el mismo final. Por último, fue una francesa, que quedó embarazada por Luis (hermano mayor de Clara). Honorio, el jardinero, le contó a Clara un extraño sueño: pateaba culebras a sus pies, aplastando a 19; Clara explicó que tendría mucho dinero ganándolo sin esfuerzo; que le duraría poco y que apueste al número 19. Nívea le contaba historias de la familia, a ver si Clara abría la boca haciendo alguna pregunta; pero sólo sonreía. Todos los cuidados que la Nana había tenido con Clara desde su niñez hasta su juventud, hicieron que se convierta en un ser con belleza angelical. En el cumpleaños 19 de Clara, al apagar las velas, habló (después de 9 años), diciendo que pronto se casaría con Esteban. La familia se sorprendió pero no tomaron en cuenta lo que dijo. Dos meses después, Esteban llegó a casa de los Del Valle, a pedir la mano de Clara. Esteban llegó a su antigua casa (toda destruida); al entrar, halló a Férula y a su madre muriendo, siendo comida por los gusanos aún en vida. Ella le dijo que no se había dejado vencer por la muerte hasta verlo. Dos días después, cuando Férula rezaba en un convento y Esteban estaba en casa de los Del Valle, Ester murió tranquila y feliz en su vieja cama. Esteban fue bien recibido por los Del Valle; preguntó a Severo si quedaba alguna hija soltera; el padre habló de Clara y contó las cosas extrañas que le ocurrieron los últimos 9 años. Clara entró a la sala y después de mucho conversar, aceptó a Esteban. En una ceremonia para presentar a los novios en sociedad, Barrabás entró cojeando con un cuchillo clavado en el lomo; 11 La casa de los espíritus, de Isabel Allende finalmente murió. La familia de Clara preparaba la boda y Esteban construía su nuevo hogar: sería una casa estilo europeo y americano; los vecinos la apodaron "la gran casa de la esquina". Férula estaba muy preocupada, pues al casarse su hermano, ella no tendría dónde ir; pero al enterarse que Clara era inútil en las labores domésticas, se lo dijo a Esteban, quien no le hizo caso; desesperada, fue con Clara al Hotel Francés. Clara leyó en su mente la preocupación de Férula y le dijo que no se preocupara, pues viviría con ellos y ambas serían como hermanas. Férula le confesaba al Padre Antonio su envidia por el matrimonio, pues ella era vieja para casarse ya que pasó su vida cuidando a su madre moribunda; el Sacerdote le dijo que todo eso estaba registrado en el Cielo y que por ello se salvaría. Clara quedó embarazada y predijo que tendría una niña que se llamaría Blanca. Así fue; pero el Dr. Cuevas calculó que el parto no sería natural. Blanca era un bebé feo y peludo; Esteban pensó que era un mal presagio; pero el cuidado de su madre hizo que a las pocas semanas se convirtiera en una niña hermosa. Capítulo IV "El Tiempo de los Espíritus" Esteban decidió ir con su nueva familia a pasar unos días a "Las Tres Marías". Los campesinos los recibieron; entre ellos, el pequeño Pedro Tercero García (hijo de Pedro Segundo García), que estaba desnudo y con la barriga hinchada por parásitos; Blanca, al verlo, se desnudó y corrió hacia él para jugar; en la noche los encontraron echados bajo la mesa (Blanca con su cabeza sobre la barriga del niño); así serían sorprendidos años después. La plaga de hormigas mataba cosechas y animales. Esteban mandó llamar a Mr. Brown (exterminador); luego de estudiarlas una semana, dijo que usaría sus propios insecticidas, que harían efecto luego de un mes. Pedro García usó su método: tomó un puñado de hormigas, las guardó en un pañuelo y las llevó lejos; al día siguiente, no había más hormigas: todas habían seguido a las otras. Clara quedó nuevamente embarazada. El Dr. Cuevas la examinó y dijo que sería un bebé muy grande; pero Clara dijo que serían mellizos y que se llamarían Jaime y Nicolás. Debido al embarazo, se comportaba inútilmente: distraída y haciendo enojar a Esteban; éste no soportó y fue al burdel Cristóbal Colón, donde encontró a Tránsito Soto: distinta y más sensual. Faltaba poco para que Clara diera a luz, cuando tuvo un sueño: veía a su padre -Severomuerto y a su madre -Nívea- decapitada en un huerto de cebollas; al contarle a Férula, esta le dijo que sólo era un mal sueño y que no se preocupara. Poco despuués, Esteban contó a su hermana Férula, que sus suegros habían muerto en un accidente automovilístico. Trataron de que Clara no se enterase de que la cabeza de su madre estaba perdida, pero ella en sueños la encontró. Fue con Férula a buscarla, hallándola donde su sueño lo señalaba; en el taxi Clara dio a luz y los mellizos nacieron con la cabeza de su abuela al costado. Clara empezó a juntarse con las hermanas Mora (3 solteronas hechiceras y espiritistas); 12 La casa de los espíritus, de Isabel Allende dichas reuniones cansaban a Clara, quien ya no reaccionaba ante nada. Una noche, mientras "Esteban estaba en el campo", Férula -quien no se había acostado y no deseaba estar sola-, entró a la habitación de Clara que dormía y se acostó al lado. Esteban llegó y a empujones la sacó; Clara no comprendía lo que sucedía. Férula fue echada de la casa; Clara al no saber el motivo, la buscó sin éxito. Mientras Esteban Trueba se volvía rico, la crisis económica llegaba al país: los campesinos al invadir la ciudad en busca de trabajo, trajeron enfermedades. Para evitar el contagio, Esteban llevó a su familia a "Las Tres Marías" -menos a los mellizos que estaban en un internado-. Pedro Tercero se había vuelto un niño revolucionario y fue castigado por el patrón, por meter ideas subversivas a los campesinos. El reencuentro con Blanca -después de mucho tiempo-, fue muy emotivo. Pancha murió de una terrible fiebre y fue enterrada en el cementerio de la hacienda, pues había sido "como la mujer de Esteban"; dejó un hijo: Esteban García y un nieto con el mismo nombre. Capítulo V "Los Amantes" Terminaba el colegio y la familia se iba al campo a pasar el verano; allí, Pedro Tercero esperaba a Blanca. Luego de las vacaciones, ambos se despidieron con besos, abrazos y tiernas caricias; a la corta edad (14), se habían convertido en amantes secretos. Eran las 8 pm cuando se abrió la puerta del comedor y entró Férula muy vieja y pálida; se acercó a Clara, la agarró de los hombros y la besó en la frente. Luego salió y Clara, asustada, dijo a Esteban que su hermana había muerto; éste salió con su esposa a buscar al Padre Antonio y hallar a su hermana. Al llegar a casa de ella, encontraron a Férula en su cama muerta y vestida con viejas ropas elegantes; Clara la arregló y la dejó a cargo del Padre Antonio, para la sepultura. Blanca y Pedro Tercero ya tenían 15 años y el verano llegaba; cada noche en "Las Tres Marías", tenían un encuentro apasionado. Clara estaba impaciente, pues en sueños veía un gran terremoto; nadie le hizo caso; a las 4 am el movimiento empezó; todos corrieron. Cuando Esteban salía de la casa, la pared lo sepultó. Las réplicas continuaron muchas horas; al final el volcán (causante del seísmo) erupcionó, quemando todo y dejando cenizas. Esteban fue rescatado por sus sirvientes. Pedro García (el viejo), a pesar de estar ciego, arregló los huesos salidos de su patrón. La Nana murió de susto por el terremoto; al no haber mano dura en "La Casa de la Esquina", los empleados haraganeaban: cuando Clara llegó a recoger a su "enfermiza" hija del internado, vio descuidada su casa, por lo que la cerró y despidió a los empleados, yendo a vivir a "Las Tres Marías". Pedro Tercero fue echado por Esteban, pues llegó al pueblo con ideas revolucionarias; Blanca decidió esperarlo todos los días en el río: Pedro le contó lo sucedido y ella le dijo que se pasara por enferma para que la lleven a vivir al campo y poder así verlo. Pedro García (el viejo), enseñó a Blanca a trabajar el barro (ello sería su sostén al crecer): 13 La casa de los espíritus, de Isabel Allende prefería hacer animales o personas, que jarras, vasos o platos; luego se dio cuenta que hacer Nacimientos sería novedoso y único. Capítulo VI "La Venganza" Clara y su hija Blanca empezaron a distanciarse de Esteban; este, con sus impedimentos, se convirtió en un fastidio, pues era muy violento. Esteban conoció al conde francés Jean de Satigny con quien se asoció en el negocio de abrigos de piel de chinchilla. Jean se quedó largo tiempo en la hacienda, como invitado de honor de los Trueba; una noche, estando fuera de la casa fumando, vio a Blanca salir por la ventana; la siguió, pero se regresó pues tenía miedo de los perros guardianes. A la mañana siguiente dijo a Esteban que deseaba casarse con su hija; al enterarse, ella empezó a detestarlo. Jaime (hermano de Blanca), se alió al conde para convencerla de que se case con él; ella tenía 24 años y Jaime le decía que si no aprovechaba la ocasión, se quedaría monja; pero ella no hizo caso. Jaime empezó a admirar a Pedro Tercero, pues empezó a interesarse en política y siempre discutían sobre el tema. Nicolás decidió a seguir los pasos de su madre respecto a lo sobrenatural, frecuentaba la casa de las hermanas Mora; allí conoció a una chica, Amanda, de quien se enamoró. Pedro García (el viejo), murió sentado en su silla; a su lado estaba su bisnieto Esteban García, hijo de Esteban García (éste, hijo de Pancha García y Esteban Trueba). Siempre odió a los Trueba, pues su abuela le contó que si lo hubieran reconocido, tendría lo que poseían Blanca y sus hermanos; en las noches se desvelaba imaginando cosas terribles que pudieran sucederles a los Trueba, para que él heredara. Después de un momento, notó que su bisabuelo estaba distinto; al tocarlo, éste cayó. Trató de pinchar sus ojos y ver qué era esa película que le cubría el iris (catarata). El entierro fue importante, pues el muerto había salvado la vida a Esteban y ayudó a mejorar la hacienda. El conde sospechaba que su prometida tenía un amante. La virginidad de Blanca no le importaba mucho; más le importaba la herencia. Una noche se escondió fuera de la casa para seguirla; al presenciar el encuentro entre los amantes, notó que ese chico podría quitarle "su herencia" y decidió ir a contárselo a su padre; Esteban salió furioso a caballo; encontró a su hija y la azotó. La llevó a casa, hizo que la atiendan y se encerró en su despacho a descargar con ira; Clara entró a la habitación y Esteban la insultó, diciéndole que sería distinto si lo hubiera hecho con alguien de su clase. Clara le dijo que ella había hecho lo mismo que su padre (pues este violaba a las mujeres de clase inferior, pero con la diferencia que ella lo hizo por amor. Esteban le lanzó un puñetazo, dejándola sin dientes. Al día siguiente, Clara y su hija Blanca tomaron el primer tren a la ciudad y para no volver a ver a Esteban. Esteban ofreció una recompensa para encontrar al muchacho; su nieto Esteban García lo llevó adonde se ocultaba. Cuando Trueba iba a dispararle, Pedro Tercero dio un salto y la bala cayó al suelo. Trueba cogió un hacha y le cortó 3 dedos. Pedro Tercero huyó en su caballo; Esteban se alegró por no haberlo matado. 14 La casa de los espíritus, de Isabel Allende Capítulo VII "Los Hermanos" En "la casa de la esquina", los hermanos notaron que Blanca estaba embarazada; avisaron al padre, quien buscó y llevó a la capital a Jean de Satigny para que se casen. Durante la fiesta de bodas, Blanca lloraba por "la muerte" de Pedro Tercero. Al partir los nuevos esposos, Clara le dijo en secreto que soñó que Pedro Tercero vivía; Blanca se tranquilizó y nunca más lloró, hasta la muerte de su madre 7 años más tarde. Nicolás se convirtió en un hombre despreocupado; junto a su novia hacía varias cosas, como drogarse. Jaime estudiaba medicina y ayudaba a los pobres; la casa de ellos la convirtió en una especie de albergue para pobres. Amanda (novia de Nicolás) y su hermanito Miguel eran huérfanos; por eso, ella lo llevaba a todo lado; un día aceptó el consejo de Clara y con mucha pena lo matriculó en un colegio. Esteban fue elegido Senador del Partido Conservador. Pedro Tercero se volvió famoso, pues lo invitaban a todo programa radial que existía a que cantase. Sus amigos molestaban a Jaime por ser hijo de político; pensó quitarse el apellido. Esteban discutió con él, pues no quería tener hijos bastardos -que sólo llevaran el apellido materno-; pero al enterarse de que Jaime se había sacado los pantalones en la calle para ayudar a un pobre, regresando en calzoncillos a casa, aceptó que se ponga cualquier apellido, menos el suyo. Nicolás, igual que su tío Marcos, quería volar por los cielos con su zeppelín: no pudo; para recuperar lo invertido, hizo sandwiches de pollo, envasados con la tela del aparato. Al notar que su novia Amanda no iba a su casa, fue a visitarla, enterándose que estaba embarazada de él y que deseaba abortar al niño. Jaime, que hacía prácticas de medicina, le realizó el aborto. La llevaron a casa de los Trueba para su recuperación. Capítulo VIII "El Conde" A Jean de Satigny no le interesaba la vida matrimonial: dijo a su esposa Blanca que si no deseaba amarlo, no le importaba. Jean exportaba antigüedades incas; Blanca tenía miedo de las momias guardadas en casa, pues de noche sentía ruido de pasos y risas. Pensando que eran ellas, curiosa, rompió la chapa de la puerta del cuarto de revelado de su esposo, al que le había prohibido este que entrara. Vio que las paredes estaban cubiertas por retratos desnudos de los sirvientes. Huyó en tren hacia la casa paterna, temerosa que Jean la encontrara o que su bebé de 9 meses naciera. Capítulo IX "La Niña Alba" En casa de los padres de Blanca, nació Alba, con una mancha en estrella; Clara dijo que era un ser capacitado para hallar la felicidad. Dijeron que no debían preocuparse por ella, pues estaba protegida por los astros. La familia ayudó a desaparecer todo rastro de Jean: se le contó a la niña que su padre había sido un noble que había muerto a causa de fiebre en el desierto. Años después, 15 La casa de los espíritus, de Isabel Allende Alba fue a la morgue a reconocer el cuerpo de su padre, rompiendo el mito de la muerte en el desierto. Aún seguía siendo niña: pasaba el tiempo jugando con su tío Jaime; era la única que podía entrar al cuarto de él para tomar libros de medicina y leerlos. Alba no iba a la escuela, pues su abuela decía que al estar protegida por los astros, sólo necesitaba saber leer y escribir y que ello se podía aprender en casa. Blanca y Alba hicieron una escuela para que las mujeres ociosas y los niños retrasados aprendan artesanía con cerámica. Alba notaba que su abuela era el alma de la casa y que en ella podía encontrar refugio y diversión; cuando Clara murió, "la casa de la esquina" ya no era la misma, pues la magia que la envolvía, desapareció. Blanca empezó a salir con distintos novios; mas al notar que querían algo serio, terminaba; un día, Blanca llevó al parque a su hija, para presentarle a una persona muy especial: al famoso cantante Pedro Tercero García; Alba se sentía algo familiarizada con él, pero no sabía el porqué. Esteban García (nieto de Pancha García y Esteban Trueba), fue a casa de éste, para pedirle una recomendación a fin de ser Carabinero; al llegar, Alba lo entretuvo; deseaba matarla y al mismo tiempo violarla, por rencor a los Trueba, por no haber nacido legítimo. Clara murió el mismo día del 7º cumpleaños de Alba. Clara presentía su fin y días antes empezó a preparar todo, para que todo estuviese listo. Lo último fue entregarle a su nieta una caja con tarjetas de despedidas para todos. CAPÍTULO X "La Época del Estropicio" Esteban se encerró en su cuarto, con el cadáver de su esposa; la arregló, pidió perdón y dijo que la amaba. "La casa de la esquina" quedó descuidada; Jaime seguía de doctor y Nicolás alquiló un local (IDUN = Instituto de Unión con la Nada), para enseñar La Verdad. Esteban, al enterarse, fue con 2 matones y destrozaron el local; al día siguiente, Nicolás y sus seguidores, se desnudaron frente al Congreso. Esteban salió a atraparlo, sufriendo un ataque cardíaco que lo internó en el hospital; se recuperó y envió a su hijo al extranjero para no verlo más. Tiempo después se enteró que en Estados Unidos se volvió famoso y rico. Alba fue matriculada en un colegio inglés; pero la directora, al notar que era muy alejada de sus compañeros, le dio la idea a Blanca de matricularla en un colegio español; mas "el peso" de Esteban, impidió que su nieta fuera expulsada. Blanca explicaba a su hija que debía estudiar para ser alguien en la vida y no depender de nadie como ella lo hacía; le contaba cuentos infantiles; pero al no saberlos bien, cambiaba la historia; cuando su hija le pedía que contara el mismo cuento, Blanca no lo recordaba; por ello, Alba empezó a escribir sus vivencias, al igual que su abuela Clara. A poco de morir Clara, Esteban construyó un mausoleo para los dos y Rosa. Cuando quiso sacar del cementerio el cuerpo de Rosa para llevarlo al mausoleo, los Del Valle se opusieron, por lo que Esteban dijo a su hijo Jaime de robar el cadáver. Sobornaron al guardián y desenterraron el ataúd; al abrir la tapa, vieron a Rosa intacta, tal cual como había muerto; mas cuando se acercó a besarla a través de la ventanilla, el ataúd -que había permanecido herméticamente cerrado-, dejó entrar una brisa de viento y el cuerpo de Rosa se desintegró, volviéndose polvo y huesos. 16 La casa de los espíritus, de Isabel Allende Esteban estaba preocupado en sus campañas electorales; no le interesaba el dinero ni el prestigio, pues su meta era sacar a todos los comunistas del país; decía que debajo de cada piedra había uno; su compañero el Coronel Hurtado, lo calmaba, explicándole que Rusia estaba tan lejos que ni conocían Latino América, por lo que el comunismo jamás llegaría a Chile. Sus amigos lo llevaron al "Cristóbal Colón" para que olvide la muerte de Clara; allí se encontró con Tránsito Soto. Capítulo XI "El Despertar" Alba se enamoró a los 18 años; en su pared pintó un corazón rosa; Estudió filosofía y música; su enamorado Miguel -estudiante izquierdista-, quien una tarde tomó la Universidad con los estudiantes y el profesor Sebastián Gómez. Se quedaron varios días; una lluviosa noche, Alba tuvo una extraña menstruación; al sacarla hacia el hospital, un carabinero la apuntó con su arma; era Esteban García; Alba recordó que cuando cumplió 14 años, estaba sentada en la glorieta de su jardín, esperando a que su tío Jaime llegara a llevársela a comprar su regalo de cumpleaños, cuando del despacho de su abuelo salió este carabinero, quien se sentó a su lado y le dio el más asqueroso beso. Alba -que soñaba su futuro-, soñó que Esteban García era una bestia que la torturaba. Miguel y Alba se amaban más, así que decidieron ir al cuarto más apartado de "la casa de la esquina" para estar en privado; Miguel recordaba tal lugar, pero no sabía por qué. La campaña política empezó; un día, Jaime notó que en las calles habían carteles alusivos a su padre, en los que una madre suplicaba a un soldado de Moscú que le devuelva a su hijo; al no compartir las ideas de su padre y al pensar que los comunistas ganarían las elecciones, Jaime abandonó "la casa de la esquina" y fue a vivir al hospital. Miguel le contó a Jaime que su hermana estaba muy enferma y le rogó que la examine; al ir a verla, Jaime descubrió que la hermana del chico era Amanda. Capítulo XII "La Conspiración" La izquierda ganó; Esteban Trueba se sentía indefenso, pues gobernarían sus enemigos. A las pocas horas, el país estaba en crisis: las fronteras cerradas con púas, los pasajes aéreos agotados y las casas valían la mitad de su precio. Trueba y sus amigos derechistas, lucharían hasta el fin para sacar a la izquierda. A Pedro Tercero, los izquierdistas lo contrataron para trabajar en el gobierno; él temía, pues era una persona de campo; pero el presidente le dijo que no importaba; que si en algo se equivocaba, el pueblo lo perdonaría pues era famoso. Todos se armaban en el país: unos con armas y otros con víveres: Blanca almacenaba alimentos en la casa. Alba robaba víveres que su madre compraba de contrabando, para dárselos a Miguel; Esteban guardaba armamento. Alba se dio cuenta y le contó a su tío Jaime; ambos le preguntaron sobre lo que escondía, pero Esteban rabió y el asunto terminó ahí. 17 La casa de los espíritus, de Isabel Allende Con su tío, Alba fue sacando las diferentes armas, guardándolas en bolsas; tiempo después, Jaime y Alba anunciaron que irían de excursión a la montaña -allí enterrarían las bolsas-. Ya en el campo, después de realizar su labor, caminaron y pescaron; Alba dijo a Jaime que si no fuera su tío, se hubiera casado con él; Jaime, asombrado, preguntó qué pasaría con Miguel; ella dijo que sería su amante; Jaime quedó asombrado y molesto y empezó a recordar su amor con Amanda. La ausencia de un patrón en "Las Tres Marías", durante 3 ½ años, hizo que los campesinos se volvieran sus propios amos y toda la hacienda se vino al suelo; al enterarse Esteban, fue con su chofer y un arma a poner orden; pero fue capturado, convirtiéndose en rehén de los campesinos. El presidente izquierdista no estuvo de acuerdo con ello, pues su gobierno podría caer; mandó muchos carabineros para sacar a Trueba, sin lograrlo; Blanca, desesperada, buscó a Pedro Tercero para que ayude a sacar a su padre. En ese momento, Alba se enteró que Pedro era su padre. Finalmente, lograron sacar a Esteban. Una tarde, Luisa (la menor de las Mora), llegó a casa de los Trueba, con presagios: había estudiado la carta astral de los gobernantes del país; la de Esteban, traía muerte y destrucción; llamó a Alba y le dijo que se cuidara, pues la muerte estaba cerca de ella (mejor sería que se vaya a otro país). Esteban no hizo caso a Luisa. 10 meses y 11 días más tarde recordaría aquello, cuando se llevaron a Alba en la noche, durante el toque de queda. Capítulo XIII "El Terror" Jaime fue llamado por el Presidente; le entregaron un arma, diciéndole que la Marina se había sublevado y empezado una guerra. Llamó a Alba y le dijo que no saliera de casa, pues habría toque de queda. Esa sería la última vez que hablaría con ella. Los pocos sobrevivientes fueron bajados por los soldados; llevados a la calle los pusieron en el suelo: un tanque pasaría sobre ellos. Pero antes de que pase por Jaime, lo levantaron y lo condujeron a otro lado; allí, el jefe de los soldados le dijo que lo dejarían libre, si declaraba a la prensa que el presidente de izquierda estaba borracho y se suicidó. Al negarse Jaime, lo llevaron junto a otros a un descampado, los fusilaron y dinamitaron sus cuerpos, mientras tanto, Esteban celebraba con champagne la caída del Presidente. Pasaron semanas sin notar la ausencia de Jaime. Llegó un soldado, diciendo que había muerto al inicio del Golpe de Estado; Esteban no lo creía, mas cuando se le apareció el fantasma, supo cómo murió su hijo. El país empezó a ordenarse, muchos izquierditas fueron asesinados y Sebastián Gómez fue delatado por sus alumnos, capturado y eliminado. Esteban recuperó su hacienda, junto con otros capataces; mató a los animales e incendió la casa de los campesinos, desalojándolos. Poco después se propuso volver a "levantar" la hacienda y que sea la mejor -como antes-; llamó a los campesinos desalojados, pero no aparecieron. El Ministerio de Defensa publicó listas con los nombres de dichas personas, solicitando su presencia; mataron a los que fueron. Pedro Tercero no se presentó, pues tenía un mal presentimiento; se escondió ayudado por Blanca en la casa de los Trueba; los soldados nunca 18 La casa de los espíritus, de Isabel Allende imaginarían que el prófugo estaría en la casa de un Senador. Blanca le contó a su padre que escondía a Pedro Tercero en casa y le pidió que la ayude a sacarlo; Esteban -quien ya no tenía odio por Pedro Tercero-, lo hizo: lo escondió en el auto de un embajador nórdico y transportado hasta la sede del Vaticano, donde le ofrecían irse del país; Blanca pidió irse con él y Alba quedó con su abuelo. Esteban se despidió amorosamente de su hija y le pidió perdón por todos los años que la había tratado mal; ella lo abrazó con amor; Esteban sabía que no volverían a verse. Alba escondía en casa a los prófugos; un día apareció Miguel, convertido en guerrillero; Alba le contó de las armas que había escondido en la montaña; organizaron un paseo al lugar con los niños pobres; mientras entretenían a los niños, Miguel hacía un mapa del sitio, pues de noche, él con sus cómplices sacarían las bolsas enterradas. Alba empezó a vender los muebles de la casa. Esteban se daba cuenta, pero sabía que pronto moriría y que nada se llevaría al más allá; mas cuando desapareció el retrato de Clara, se molestó y Alba dejó de vender las cosas. Los buenos tiempos llegaron y Esteban reconstruyó "Las Tres Marías"; rehízo su fortuna y cada mes le mandaba al Canadá giros a Blanca y Pedro Tercero. Una madrugada, personas armadas entraron a "la casa de la esquina" en busca de guerrilleros -Alba sabía que ello-; destrozaron la casa sin hallar nada y ordenaron a Trueba firmar un papel que manifestaba que el registro fue hecho civilizadamente; el viejo se molestó y dijo que no lo haría; el jefe del grupo abofeteó a Alba y le dijo a Trueba que ella era la puta de un guerrillero; se la llevaron a la fuerza. Al llegar a su destino, Alba reconoció la voz de Esteban García, quien había estado obsesionado por ella desde el primer día que la vio, cuando era una niñita. Capítulo XIV "La Hora de la Verdad" Alba fue torturada varios días, pues García quería que le dijera el paradero de Miguel; además tenía odio por no haber sido hijo legítimo de Esteban Trueba. En los calabozos, Alba halló a Ana Díaz, su compañera de universidad. En su encierro, el espíritu de Clara visitó a su nieta y le dijo que para pasar el tiempo, escribiera mentalmente lo que estaba viviendo y así poder hacer algo útil. Esteban Trueba fue al "Cristóbal Colón", preguntando por Tránsito Soto; ella se había vuelto la dueña del lugar que ya no funcionaba como burdel, sino como hotel de citas, donde acudían muchas personas del gobierno. Esteban le contó lo ocurrido con su nieta, suplicándole ayuda para buscarla; Tránsito aceptó y días después lo llamó, diciéndole que había cumplido el encargo. Epílogo Alba quedó libre después de varias semanas de estar presa; su abuelo la recibió contento; le contó que ya sabía sobre Miguel y que él pidió ayuda a Tránsito Soto para sacarla. Alba narró su experiencia y que antes de salir, la llevaron al hospital secreto de los policías 19 La casa de los espíritus, de Isabel Allende políticos, pues su mano tenía una herida infectada; allí la atendía un doctor y su ayudante (el Dr. Rojas), quien le dijo que Amanda también fue capturada, pero que murió al ser torturada para que revele el paradero de su hermano Miguel. Alba había sido trasladada a un campo de concentración para mujeres, donde compartió muchas cosas con las reclusas, siendo feliz en esos momentos. Esteban pidió a su nieta escribir todo; empezó a ayudarla mientras esperaban a Miguel; al poco rato, pensando que era Clara o algunas veces Rosa, murió en sus brazos. Alba espera un hijo, tal vez de Miguel o de las violaciones durante su encierro. Su historia empezaría con: "Barrabás llegó a la familia por vía marítima…". 20