FARMACO URUGUAYO ENOXAPARINA LIBRE Síndrome del túnel carpiano Paraclínica y tratamiento (2ª parte)* • Desde su mejor definición en la década de 1940, el Síndrome del Túnel Carpiano (STC) ha recibido creciente atención, tanto en la práctica clínica como en la literatura científica. • A continuación, se presentarán los estudios complementarios y se realizará un abordaje exhaustivo del tratamiento del STC destacando la cirugía, cuyo objetivo es la descompresión del nervio mediano (NM) en el túnel carpiano. Estudios Complementarios Por lo expresado en la primer parte, podemos afirmar que si la semiología clínica es clara y en particular si incluye los hallazgos más específicos, puede establecerse un diagnóstico presuntivo altamente probable de STC. Tanto es así, que existen autores que deciden la indicación quirúrgica solo con el diagnóstico clínico.(22) Estudio electrofisiológico No obstante lo expresado, predominan las publicaciones que consideran que un estudio electrofisiológico (EE) debe incluirse en todo paciente con diagnóstico clínico de STC, y para muchos autores es considerado el estándar óptimo o “gold standard”, aunque no hay un consenso aceptado universalmente sobre el estándar definitivo para diagnosticar un STC.(10, 23) Por lo expresado, el diagnóstico positivo de STC estará mejor definido combinando la clínica y el EE.(23) ¿Qué alteraciones del nervio se registran y cuantifican con el EE? Por un lado, con los estudios de conducción nerviosa (ECN) se manifiestan las alteraciones de las fibras gruesas mielínicas, motoras y sensitivas (tacto leve y vibración). La latencia y la velocidad de conducción evalúan el tiempo requerido para transmitir un impulso en determinados trayectos con referencia a valores estándar considerados normales. La amplitud del potencial de acción evalúa la cantidad de fibras que están transmitiendo el impulso. También con el electromiograma (EMG) se exploran cambios en la actividad eléctrica de Dr. Carlos Carriquiry Profesor de Cirugía Plástica Profesor Adjunto de Anatomía Facultad de Medicina - Universidad de la República Grupo Interdisciplinario de Dolor Neuropático Montevideo - Uruguay las fibras musculares del territorio explorado afectadas por disminución o interrupción de las aferencias nerviosas. En un EE se pueden hacer múltiples registros; se recomienda incluir además del nervio mediano (NM) al nervio cubital a efectos comparativos. Dentro de los múltiples registros posibles hay parámetros que se consideran más sensibles:(11, 23, 24) a) Las velocidades de conducción sensitiva en el segmento de puño y palma para el nervio mediano (a través del carpo), y motora en el segmento ante-braquial para los nervios mediano y cubital. b) Las latencias motoras y sensitivas prolongadas y un aumento de las latencias motoras distales del mediano con respecto al cubital. c) En el electromiograma, la presencia de actividad espontánea y las características del trazado voluntario son importantes, pero sus alteraciones pueden ser más tardías en la evolución. Aún así, pueden aparecer antes de las expresiones clínicas de afectación muscular. El EE tiene una sensibilidad del 85% y una especificidad mayor al 95%.(24) Dicho de otro modo, hay un porcentaje minoritario pero significativo de STC clínicamente claros pero no confirmados por EE, que han remitido con el tratamiento quirúrgico. Recordemos que un EE no capta disfunciones de las fibras más finas, entre ellas las que conducen dolor.(3) Entonces, un EE positivo para STC no es una condición absoluta para proceder al tratamiento de un STC clínico bien definido que está generando síntomas persistentes. * En el volumen Nº 34 de Tendencias en Medicina (2009; 34:65-71) se desarrolló la primera parte del tema, se expuso la fisio e histopatología, la etiología y la semiología con sus clásicos signos que permiten realizar un diagnóstico clínico, también se plantearon los diagnósticos diferenciales más relevantes. Octubre 2009 • en Medicina 31 CARRIQUIRY C. Subrayamos que en la clara mayoría de los casos, los diagnósticos clínico y por EE son coincidentes en cuanto a identificar un STC. Sin embargo, no existe una correspondencia tan clara entre la severidad de las alteraciones electrofisiológicas y la intensidad clínica del STC. (23) El EE es también fundamental para investigar diagnósticos diferenciales y/o asociados y para topografiar los niveles de afectación del NM a lo largo de su recorrido.(14) El EE tiene algunas limitaciones para evaluar la evolución postoperatoria de un STC y frecuentemente está desfasado en el tiempo con la mejoría sintomática. Síndrome del túnel carpiano 2ª Parte Otros estudios paraclínicos Se piden otros estudios cuando los antecedentes o la evaluación del terreno general lo sugieren para investigar trastornos metabólicos, endócrinos o de otro tipo que puedan estar generando o agravando un STC (ej. diabetes). o mayor medida con el trabajo y/o actividades elementales de la vida diaria. Su uso es mejor tolerado durante el reposo nocturno. Idealmente deben ser confeccionadas de medida y con material termoplástico liviano; hay también prefabricadas con estructura metálica liviana que son adecuadas. Es frecuente que los pacientes abandonen el tratamiento antes del plazo indicado, aún cuando se indican solo por la noche. Tratamiento El STC puede tratarse con: Las 4 primeras modalidades están indicadas para Estudios imagenológicos casos clínicos leves e incipientes; aún así no dan De las diferentes modalidades disponibles, la un alivio sintomático mantenido en un alto porradiografía y la tomografía computada se piden centaje de casos.(28) cuando se necesita investigar la pared ósea del La cirugía es de elección inicial para los STC túnel carpiano; su empleo es poco frecuente. moderados o severos, en especial si el criterio La ecografía es el método imagenológico más son las alteraciones del EE o signos de debilidad empleado. Permite evaluar anatómicamente el motora. canal y sus paredes, el NM y los tendones flexores contiguos. La introducción de transductores de También es válida la indicación quirúrgica en STC alta frecuencia (5-12 y 5-15 MHz) y una mayor leves, como tratamiento inicial, más aún si no han experiencia han resultado en una mayor especi- sido efectivos los otros tratamientos. ficidad y sensibilidad. El indicador ecográfico En los Estados Unidos es frecuente intentar de STC más aceptado es un engrosamiento (au- tratamientos no quirúrgicos antes de considerar mento del área de sección transversal) del NM la cirugía. Este enfoque gradualista puede estar en el borde proximal del túnel.(25, 26, 27) Cuando influido por patrones culturales y de contexto de se sospecha patología sobreañadida en el canal la práctica médica, incluidas actitudes defensivas ante la eventualidad de carpiano (gangliones, una demanda judicial. lipomas, otras tumoraNo es este el encare más La cirugía es de elección inicial ciones) o alteraciones habitual en otros medios, para los STC moderados o estructurales del nervio incluido el nuestro. Salseveros, en especial si el criterio (neuromas, fibrosis, vo en casos de un trauma son las alteraciones del EE etc.), la ecografía es mayor local reciente y o signos de debilidad motora. un modo sensible y único, o síntomas muy de bajo costo para inleves, incipientes, con vestigarlas. Asimismo puede identificar un STC en casos clínicos en factores ergonómicos negativos identificables y que el EE ha sido normal. La ecografía ha ido corregibles, es muy probable que estos pacientes ganando lugar como un estudio complementa- requieran finalmente cirugía. rio, no sustitutivo del EE, aunque aún no hay Puede ser peligroso que una insistencia exagerada consenso sobre su indicación sistemática. Dado en tratamientos conservadores repetidos permita su carácter inocuo, puede ser muy práctica para el deterioro progresivo de la estructura y función estudios seriados de seguimiento evolutivo. del NM. Estos tratamientos tienen una oportunidad tiempo; no están indicados para el Se debe recordar que la calidad de sus resultados acotada en el (28) está considerablemente condicionada por las largo plazo. características del equipo y la experiencia del imagenólogo. La resonancia nuclear magnética ofrece aún mayor definición anatómica del NM que la ecografía, pero se compara desfavorablemente en términos de costos y practicidad operativa. Su indicación es excepcional. 32 Anatomía de la palma de la mano El NM (1) abandona el antebrazo distal y pasa por debajo del retináculo flexor, (ligamento carpiano anterior en su sector central y más espeso), (8), que cierra superficialmente el túnel del carpo. El nervio cubital (2) está próximo pero pasa superficial al ligamento carpiano anterior. El palmar mayor (3) acompaña desde el lado radial al NM hasta quedar incluido en su propio túnel fibroso. Las ramas sensitivas terminales del cubital (4 y 5) inervan el meñique y el lado cubital del anular. Las ramas correspondientes del mediano (6) inervan la mitad radial del anular y toda la cara palmar del dedo medio e índice, así como la del pulgar (7). La rama tenar motora del NM atraviesa el borde distal del retináculo (8) y en un trayecto casi recurrente inerva al oponente, al abductor corto y al vientre superficial del flexor corto del pulgar. Existen variaciones en cuanto a la inervación sensitiva del anular, la inervación motora del flexor corto del pulgar y el origen y trayecto de la rama tenas. Todas ellas con importancia semiológica y/o quirúrgica. Se ha coloreado el territorio sensitivo más habitual del NM. Ligeramente modificado de Dujarier C. Anatomie des membres. París. Masson; 1924 Figura 1 posición de protección funcional de la muñeca es en 30º de extensión, esto puede generar un moderado aumento de presión tunelar. Se prefiere entonces mantener la muñeca neutral. (3) Las férulas, especialmente con muñeca neutral y más aún si incluyen los dedos, interfieren en menor Inyecciones de corticoides Las inyecciones de corticoides se basan en su capacidad de reducir el flujo sanguíneo aumentado y el edema sinovial que se considera presente en el STC.(5) Su eficacia varía según los diferentes estudios, pero en general es mayor al 50%; en alguna serie bien controlada fue similar a la cirugía inicialmente (6 semanas).(29) Sin embargo, hay consenso en que en plazos superiores a 6 meses su eficacia es muy limitada.(30) La inyección intratunelar de corticoides (dexametasona, acetato de metilprednisolona) aunque ambulatoria y realizada en el consultorio, no es un procedimiento banal y debe realizarse con cuidados técnicos.(29) La inyección no debe hacerse ni intraneural ni intratendinosa; por lo tanto, no deberá inyectarse generando parestesias simultáneas en el territorio mediano (aguja intraneural), ni dolor intenso en la muñeca con irradiaciones y venciendo resistencia considerable (aguja probablemente intratendinosa). Se han publicado complicaciones como roturas tendinosas, agravamiento del STC y lesiones del NM. (29) No está indicada la repetición de varias inyecciones como tratamiento en el largo plazo dado que los riesgos de complicaciones aumentan y puede disimularse un agravamiento de la compresión. La inyección de corticoides exitosa es un buen predictor del éxito de la cirugía y un recurso útil para lograr alivio temporario cuando la cirugía Férulas Las férulas se colocan con el objetivo de evitar los extremos de flexión y extensión de la muñeca que generan aumento de presión tunelar. Con menos frecuencia también limitan el rango de movimiento de los dedos para hacer reposar a los flexores si hubiera una tenosinovitis muy activa. Aunque la Octubre 2009 • en Medicina Octubre 2009 • en Medicina 33 Síndrome del túnel carpiano 2ª Parte BAYER XARELTO Vista intraoperatoria. La pinza sostiene el epineuro del NM; este es la estructura más profunda que vemos. Se percibe que proximal a este punto el NM aparece con diámetro disminuido. Se ve un paquete vascular epineural. Progresando hacia la superficie, vemos el retináculo seccionado, la inserción de músculos tenares sobre este, la grasa subcutánea dispuesta en característicos lobulillos compactos y finalmente la incisión cutánea que se detiene en el pliegue de flexión de la muñeca. Figura 2 debe posponerse, o en casos incipientes en que una corrección ergonómica o la regresión del complejo secundario de un trauma puntual aún pueden resultar en la reversión de los síntomas. Los corticoides por vía oral son menos eficaces (aunque sí tienen cierto efecto) que la inyección tunelar; no están indicados para tratamientos de largo plazo. Fisioterapia y correcciones ergonómicas Hay muy poca evidencia sobre la eficacia de la fisioterapia y las correcciones ergonómicas para un STC. Algunos protocolos de ejercicios de deslizamiento pueden ser eficaces, (31) así como ejercicios y dieta para disminuir el índice de masa corporal. (28) Las correcciones ergonómicas también pueden lograr mejoría en casos muy incipientes. No deben olvidarse cuando se ha tratado quirúrgicamente a un paciente cuyo STC se interpreta como relacionado con su trabajo. Cirugía(3) El objetivo de la cirugía es la descompresión del nervio mediano en el túnel carpiano (ver Figura 1). La maniobra fundamental para lograrlo es la sección completa del retináculo flexor, una estructura ligamentosa que se extiende, atenuándose, hasta la parte proximal de la palma. En su sector medio es denominada por muchos autores ligamento carpiano transverso. Se inserta entre el trapecio y el escafoides en el lado radial y entre el ganchoso y el piramidal en el lado cubital. En Octubre 2009 • en Medicina esta zona es denso y muy resistente. Se atenúa y pierde definición proximalmente, donde aparece la fascia o aponeurosis antebraquial. Se aconseja seccionar esta fascia varios milímetros en su sector más distal. Seccionado el retináculo, se inspecciona el NM (ver Figuras 1 y 2). No es raro ver un estrechamiento limitado en el NM que también se palpa como un cambio de diámetro y a veces de consistencia. Se inspecciona la sinovial de los tendones flexores, habitualmente de apariencia normal en los STC idiopáticos, y se palpa el contorno óseo del túnel, verificando ausencia de irregularidades o tumoraciones como gangliones que no hubieran sido sospechados previamente. Habitualmente no es necesaria una sinovectomía. Con respecto al NM, tampoco es la regla realizar una epineurotomía, salvo en casos evaluados previamente como muy severos o con una constricción muy clara. La neurolisis, disecando fascículos o grupos fasciculares, ha sido abandonada como indicación primaria. Se reserva para casos primarios excepcionales, o secundarios en que hay fibrosis cicatrizal interfascicular y epineural comprometiendo el deslizamiento del nervio y generando constricción e isquemia fascicular.(32) Este procedimiento se realiza a través de una incisión cutánea (ver Figura 2) aproximadamente paralela al pliegue tenar palmar, ligeramente desplazada hacia el lado cubital. En principio no se extiende al antebrazo a través del pliegue distal de la muñeca. Así se obtiene una exposición cómoda y se minimiza el riesgo de dañar la rama cutánea palmar del mediano. La cicatriz es casi siempre de muy buena calidad mecánica y estética. Desde hace más de 10 años se realiza también el procedimiento por abordajes cutáneos mínimos y técnica endoscópica o videoscópica. A favor de esta opción está la mínima cicatriz cutánea, con menos molestias postoperatorias y posible recuperación más rápida de parámetros funcionales. En contra, que exige instrumental más costoso y expondría a mayores complicaciones por lesiones del NM o sus ramas. No hay evidencia firme para aconsejar sustituir el abordaje abierto por el endoscópico. (33) Aunque las técnicas endoscópicas se han difundido en forma extensa, no han sustituido como primera elección al abordaje abierto, aún en manos de cirujanos de mano extremadamente calificados y centros de excelencia. (3) En nuestro medio predomina ampliamente el abordaje abierto. Puede emplearse desde anestesia general hasta anestesia local y/o troncular en la muñeca. Habitualmente se opera en campo isquémico por manguito neumático braquial. Puede emplearse también manguito o banda elástica antebraquial, y aún prescindir de estas y conseguir un campo 35 CARRIQUIRY C. adecuado con muy poco sangrado agregando epinefrina (en pacientes sin contraindicaciones vasculares locales o generales) al anestésico local, de modo que su concentración sea 1 en 200.000. La gran mayoría de los procedimientos pueden hacerse en forma ambulatoria o como cirugía del día. El autor prefiere combinar anestesia local y troncular, inyectando primero en la vecindad inmediata del NM justo proximal al túnel carpiano, potenciada por vía intravenosa por anestesiólogo, coincidiendo con autores como Mackinnon. (3) Postoperatorio y complicaciones El postoperatorio es habitualmente sin incidentes. La mejoría de las acroparestesias, el adormecimiento y el dolor es habitualmente rápida, en las primeras 24 a 78 horas. La recuperación del déficit sensitivo o motor que pudiera haber es mucho más lenta, en plazos de varios meses. En casos muy severos puede no completarse. Es aconsejable una movilización progresiva y precoz de los dedos. Aunque en los Estados Unidos es habitual una férula nocturna por 2 semanas o más, en nuestro medio casi no se emplea y no hay evidencia de que esto empeore los resultados. Aunque el retorno a la mayoría de actividades de la vida diaria puede ser en 2 ó 3 semanas, el reintegro laboral irrestricto puede tomar 2 meses. Esto depende de múltiples factores cuyo análisis escapa a esta puesta al día. Se ha notado una mayor demora en pacientes cubiertos por seguro/compensación laboral. No es habitual que se requiera fisioterapia postoperatoria, pero debe tenerse presente en casos singulares y no escatimar la consulta con fisiatra en pacientes muy aprensivos y/o con dificultad para recuperar rangos de movimiento activo. Las complicaciones precoces como infección y hematoma son improbables. Las complicaciones más severas, infrecuentes pero de alto impacto funcional, provienen de lesiones del NM o sus ramas: neuroma doloroso de la rama palmar cutánea, adherencia dolorosa del NM a la cicatriz cutánea, compresión troncular del NM por fibrosis intratunelar y/o intraneural, sección de la rama motora tenar. Pueden ocurrir cicatrices dolorosas sin neuroma identificable o dolores mal definidos en la base de la eminencia tenar y/o hipotenar. Se han registrado casos de síndrome doloroso regional complejo en pacientes sin otras complicaciones aparentes. RELLENO FARMANUARIO Conclusiones La descompresión quirúrgica es porcentualmente muy efectiva en cuanto a alivio sintomático mantenido por lo menos al año. No es frecuente la necesidad de reoperar un STC. Sí es frecuente la indicación de cirugía en pacientes bajo otras modalidades de tratamiento. (34) La cirugía primaria del STC es entonces efectiva, comparativamente breve y generalmente ambulatoria. Sin embargo requiere de condiciones excelentes de visión del campo operatorio, técnica minuciosa, conocimientos sólidos para evitar complicaciones, especialmente a partir de variantes anatómicas y capacidad técnica e instrumental para reparar una complicación reconocida intraoperatoriamente. Por lo tanto, su indicación y ejecución no deben ser subestimadas. Bibliografía Las referencias bibliográficas 1-23 se encuentran publicadas en Tendencias en Medicina Nº 35 de mayo 2009. Se detallan a continuación las referencias citadas en las segunda parte del artículo. 24. AMERICAN ACADEMY OF NEUROLOGY, AMERICAN ASSOCIATION OF ELECTRODIAGNOSTIC MEDICINE, AMERICAN ACADEMY OF PHYSICAL MEDICINE AND REHABILITATION. Practice Parameter for Electrodiagnostic Studies in Carpal Tunnel Syndrome (Summary Statement). Arch Phys Med Rehabil 1994; 75:124-5. 25. BUCHBERGER W, SCHON G, STRASSER K, JUNGWIRTH W. Highresolution ultrasonography of the carpal tunnel. J Ultrasound Med 1991;10:531–537. 26. DE PABLOS C, VELASCO-ZARZOSA M, LANDERAS-ÁLVARO R, RUBIO-LORENZO M, MARTÍNEZ-ZUBIETA P. Aportación de los estudios neurofisiológico y ecográfico al diagnóstico del síndrome del túnel carpiano. Correlación quirúrgica. Rev Neurol 2007; 45: 210-215. 27. KOTEVOGLU N, GÜLBAHCE-SAGLAM S. 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Sylvia Rodríguez, bibliotecóloga del CENAQUE, por su imprescindible y eficaz ayuda con las fuentes bibliográficas. Octubre 2009 • en Medicina