El Cinturón de Hierro de Bilbao en Larrabetzu

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EL CINTURÓN DE HIERRO EN LARRABETZU
Nido 1
Se trata de un asentamiento de ametralladora
de hormigón que consta de dos entradas laterales y presenta en su parte frontal una amplia
tronera con un alero ligeramente inclinado,
donde hay un boquete producido por un impacto de artillería el día de la rotura del Cinturón de
Hierro (12 de junio de 1937). Las dos entradas,
que comunicaban con un sistema de trincheras,
están cegadas por desprendimientos. Todos estos
nidos están pensados para el tiro por “depresión”, es decir, de arriba a abajo. La ametralladora iba apoyada sobre una superficie que recibe el
nombre de meseta, que en este caso es de planta
trapezoidal.
Nido 2
Este asentamiento de ametralladora nunca llegó
a terminarse. Presenta dos entradas laterales y
una salida posterior que en su día daba acceso a
un abrigo en galería de mina: un tipo de refugio a modo de cueva en el que los ocupantes se
protegían en caso de necesidad.
Nido 3
Se trata del asentamiento de ametralladora más
conocido y fotografiado de todo el Cinturón
de Hierro. Se encuentra en la cumbre del Gaztelumendi y es muy visitado por montañeros y
excursionistas, pues conserva todos sus elementos constructivos y se encuentra en muy buen
estado. Construido en mampostería de piedras
y hormigón, presenta una amplia tronera y un
abrigo que hace las veces de refugio y polvorín,
todo ello en una única planta a la que se accede
por una entrada trasera. En la cubierta de hormigón puede apreciarse un impacto, que no llegó
a perforar el blindaje, recibido durante la batalla
del 12 de junio de 1937.
Nido 1
Nido 2
Nido 3
Nido 4
Nido 4
Se encuentra destruido como consecuencia de
una voladura efectuada para extraer la ferralla
de las armaduras, operación que se repitió por
todo el Cinturón de Hierro en los años 50 del
pasado siglo, pero aún puede verse el perímetro del nido y conserva, en un plano inferior a
modo de sótano, el abrigo que hacía las veces
de refugio y polvorín, aunque su entrada está
parcialmente cegada por los escombros.
Nido 5
Se encuentra destruido como consecuencia de
una voladura efectuada para extraer la ferralla
de las armaduras, operación que se efectuó por
todo el Cinturón de Hierro en los años 50 del
pasado siglo, pero aún puede verse el perímetro del nido y conserva, en un plano inferior a
modo de sótano, el abrigo que hacía las veces
de refugio y polvorín, aunque su entrada está
parcialmente cegada por los escombros.
Muro con aspilleras de la serrería
Se trata de un muro de hormigón con aspilleras
para fusiles y una longitud de 25 metros que ha
sido aprovechado como pared de una serrería.
Estas aspilleras están abocinadas hacia el interior
del muro y, aunque han sido cegadas con cemento en la parte exterior, pueden apreciarse perfectamente desde dentro de la serrería. Este muro
presenta la peculiaridad de haber sido recrecido
con ladrillos en su parte interior, evitando así
tener que dar más grosor con hormigón, lo cual
es considerablemente más caro. La serrería está
abierta constantemente.
Puerta de mampostería
Esta puerta, situada entre dos casas, daba acceso
al interior de un conjunto fortificado formado
por gruesos muros de hormigón que protegían
esta parte del pueblo. Los pilares son de mampostería de piedras, mientras que el dintel, sobre
el que se han añadido piedras hasta dotarle de
una considerable altura, es de hormigón.
Nido 5
Muro con aspilleras de la serrería
Puerta de mampostería
Muro de hormigón aspillerado
Es el único de su tipo que se conserva en la
actualidad, con características similares a otros
que cerraban importantes pasos de carreteras en
lugares como Otxandio, Aramaio o Erletxes. Se
trata de un muro con aspilleras a diferentes alturas que permitía a los soldados hacer fuego con
los fusiles desde el interior a diferentes niveles,
respetando la debida separación entre unos y
otros. Se encuentra en una propiedad privada,
por lo que es necesario el permiso de los dueños
de la finca para poder verlo.
Muro de mampostería aspillerado
Este muro recorre parte de la finca donde se
asienta el único caserío fortificado que se conserva en la actualidad y protegía un conjunto
fortificado de grandes dimensiones que incluía
a este caserío y a otros dos situados más atrás.
Está construido con mampostería de piedras y
presenta en su parte superior unas aspilleras para
hacer fuego con los fusiles.
Caserío fortificado
Se trata del único caserío fortificado que ha llegado hasta nuestros días. En el interior de la cuadra se ha construido un asentamiento para fusil
ametrallador de hormigón cuya tronera es perfectamente visible en uno de sus muros, conformando, junto al muro con aspilleras, una bonita
estampa. La entrada al nido se realiza desde el
mismo caserío, pero es necesario pedir permiso a
sus dueños, gracias a los cuales se ha mantenido
en óptimas condiciones de conservación, respetando íntegras sus características constructivas en
la última reforma que han llevado a cabo.
Monumento a la Batalla del Cinturón de Hierro
Monumento realizado por las autoridades franquistas para conmemorar su victoria en la batalla
por el Cinturón de Hierro. Se trata de una cruz
de grandes dimensiones en cuyo frente se colocó
una placa de cemento con una inscripción que
rezaba lo siguiente: “El día 12 de junio de 1937
los invictos soldados de Franco rompieron en
estos montes el Cinturón de Hierro de Bilbao. La
Diputación de Vizcaya registra en piedra aquel
suceso que devolvió nuestra tierra a su tradición
y destino imperiales”. Desgraciadamente, los actos vandálicos han ocasionado que este texto sea
ilegible en la actualidad y que incluso la propia
estructura de la cruz peligre al haber sido rota
parte de su base.
Muro de hormigón aspillerado
Muro de mampostería aspillerado
Caserío fortificado
Monumento a la Batalla del Cinturón de Hierro
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