A Ñ O I V . — V O L . IV.—NÚM. 4 0 . Madrid, abril 1926. Instalaciones industriales modernas para la fabricación de ácido clorhídrico, bisulfato y sulfato sódicos P o r C. L A N A Por haber intervenido^ oomo delegado técnico' de la Casa Zahn & Co., de Berlín, en el desarrollo de un proyecto de instalaciones que la Sociedad Anónima Crois aidiquirió y está acabando de montar en sus fábricas de Badalona, para producir ácido clorhídrico, bisulfatos y sulfato sódicos, puedo escribir este artíoulo comparando los sistemas antiguos, arcaioos^—que todavía se utilizan en España—, con los procedimientos más modiemos que hoy se conocen para fabricar dichos importantes productos de la gran industria química. La mayor parte del bisulfato y sulfato^ sódicos y del ácido clorhídrico dei comercio se obtiene industrialmente descomponiendo la sail común por el ácido sulfúricoi. Esta reacción tiene lugar en dos fases, a saber: L^ C l N a + SO4H2 = C I H + S G i N a H 2.^ S O í N a H -I- C l N a = C I H + S O i N a ^ La primera fase tiene lugar entre 300° y 350°. A esta temperatura, la acción del ácido sulfúrico sobre la sal común da ácido clorhídrico y bisulfato sódico. La siegunda fase se verifica de 700° a 800° C, temperatura a la que actúa Ja sal común sobre el bisulfato sódico obtenido en la primera fase de la reacción y da más ácido clorhídrico y sulfato sódico neutro. Dichas dos fases de la reacción suelen llevarse a cabo industrialmente por separado; pero en los hornos mecánicos modernos de sulfato se sigue a veces el método directo, es decir: se verifican las dos fases de la reacción en un solo h o m o y sin interrupción. De los libros de texto de Química industrial podrá recordar el lector el clásico h o m o para fabricar ácido clorhídrico y sulfato sódico. En la parte llamada cubeta, hecha de fundición de hierro o de plomo, se efectúa la primera parte de la reacción. E n la llamada calcina^ se lleva a cabo la segunda parte, a saber: la obtención del sulfato neutro. Esta manera de operar ha. sido abolida por completo en la industria moderna. En España, por desgracia, sigue trabajándose como hace muchos años se trabajaba. La instalación que en la actualidad monta la Casa Cros estará integrada por cuantos adelantos se conocen en esta rama de la industria química. Aparte de las ventajas de orden económico'—ventajas que no puedo detallar aquí por razones de discreción profesioinal, ya que los cálculos en mi poder se refieren a un estudio hecho para una entidad particular—, los productos obtenidos con las modernas instalaciones son técnicamente puros, es decir, trabajando con ellas no se obtiene el clásico ácido clorhídrico esipañol de (1) Profesor en la Escuela Industrial de Barcelona. S A R R A T E W. color amarillo casi rojo, cargado de hierro y de ácido sulfúrico, ni el sulfato sódico impuro, heterogéneo, "magro" unas veces y "graso" otras. Durante casi todo el siglo XIX se practicó la reacción industrial entré el cloruro sódico y el ácido sulfúrico, principalmente para aprovechar el sulfato sódico que se obtenía. Este producto era de un gran consumo, pues se empleaba para fabricar la sosa (carbonato sódico) por et método de Leblanc, el vidrio, el sulfuro sódico y el azul de Ultramar. Tanto es así, que a mediados del pasado siglo todavía se dejaba escapar a la atmósfera el gas ácido clorhídrico resultante. En Inglaterra se prohibió en 1863 la libre salida al aire de los humos de ácido clorhídrico, pues ocasionaban grandes perjuicios a plantas y animales. Más tarde, en 1885, cuando Solvay fabricó el carbonato sódico en condiciones que superaban a las del método Leblanc, la demanda de sulfato sódico bajó mucho. Por otra parte, la solución acuosa de ácido clorhídrico', producto secundario en un principio, fué hallando cada día aplicaciones más importantes, cuales son las de las industrias metalúrgicas, de colorantes, en las fábricas de colas y gelatinas, en el servicio doméstico (salfumán), etc., y el gas ácido clorhídrico fué requerido por las industrias del alcanfor, ácido clorosulfónico, sacarina, clorhidrina, etc., etc. Además, el bisulfato sódico, que era un producto intermedio, halló también aiplicación importante en la industria de la seda artificial. En resumen: que los productos de la primera parte de la reacción entre la sal común y el ácido sulfúrico tienen aplicación directa, y que, por consiguiente, se practica a veces tan sólo dicha' primera fase de la reacción entre la sal común y el ácido clorhídrico. Los métodos anticuados trabajan en operaciones discontinuas, tanto en la primera como en la segunda fase de la reacción. Los métodos modernos permiten, en cambio, practicar ambas fases cíe un modo continuo; ésta es una de las más importantes ventajas. Las patentes que protegen estas operaciones continuas son las alemanas DRP 186.398 (1), 238.570 (2), 261.411 (3) y 265.045 (4), y las extranjeras correspondientes. Una instalación moderna para fabricar ácido clorhídrico, bisulfato y sulfato sódicos consta de cinco grupos de aparatos, a saber: «-) Retorta o caldera de bisulfato (1." fase de la reacción). b) Homo, a ma'no o mecánico, de sulfato (2." fase de la reacción). (1) Véase Chem. Ztg. Repert., 1907, pág. 338,—(2) ídem id., 1911, pág. 507.— (3) ídem id., 1913, Pág. 383.—(4) ídem Id., 1913, pág. 570. 145 © Biblioteca Nacional de España