Superficies elevadas de bajo relieve en Chile central entre los 32

XII Congreso Geológico Chileno
Santiago, 22-26 Noviembre, 2009
S9_062
Superficies elevadas de bajo relieve en Chile central entre los
32°30’S y los 34°30’S, y su relación con el alzamiento andino
Muñoz, M.1, Escribano, J.1, Charrier, R.1, Farías, M.1, Rodríguez, M.P.1
(1) Departamento de Geología, Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, Universidad
de Chile, Plaza Ercilla 803, Santiago, Chile.
[email protected]
Introducción
Algunos de los aspectos más complejos en la comprensión de la evolución de las cadenas
de montañas es determinar la edad del alzamiento y conocer los mecanismos que
intervinieron en ese proceso. En particular, en los Andes de Chile central se han
reconocido, en ambas vertientes de la Cordillera de la Costa (CC) y en la vertiente
occidental de la Cordillera Principal (CPW), superficies de bajo relieve, las cuales han
sido interpretadas como remanentes de extensas peneplanicies elevadas a diferentes
alturas durante el alzamiento andino (Brüggen, 1950; Borde, 1966; Farías, 2007). En el
presente trabajo (1) se caracterizan estos relictos y se presenta su distribución, entre
32º30’ y 34º30’ de latitud sur, (2), se establece una correlación entre ellos y se define su
pertenencia a superficies más extensas de carácter regional, (3) se propone una
cronología relativa para su formación, y (4) se analizan los procesos que habrían
permitido su alzamiento.
Metodología utilizada en la identificación de las superficies
El estudio realizado se basó en el análisis topográfico de perfiles este-oeste utilizando un
Modelo de Elevación Digital SRTM de 90 m de resolución. Los perfiles se encuentran
espaciados cada 10 km. Para cada perfil se graficó la elevación mínima, media y máxima
de la franja, permitiendo esta última detectar la ubicación y altitud de los relictos de
superficies de bajo relieve. Además se analizaron imágenes satelitales con los programas
ENVI, River Tools y Google Earth, con el fin de identificar de mejor manera las
superficies.
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Resultados
Este análisis permitió reconocer en ambas vertientes de la Cordillera de la Costa (CC) y
la vertiente occidental de la Cordillera Principal (CPW) 14 niveles topográficos en los
cuales se encuentran superficies de bajo relieve. Estas superficies de bajo relieve
permiten reconstruir superficies elevadas que presentan extensiones variables y están
desarrolladas sobre diferentes unidades litológicas. La altura a la cual se encuentran estas
superficies varía entre 750-850 m s.n.m., en la CC, y 5500-5700 m s.n.m., en la CPW
(Tabla 1). Separando a estas superficies se reconocen escarpes erosivos y estructurales;
estos últimos se presentan, en ocasiones, obliterados por la erosión.
Integración
Un análisis más fino, considerando, además, la distribución espacial de las superficies, su
continuidad, su morfología (relieve), el tipo de roca en que se desarrollaron y su relación
con las fallas que los separan, permitió reconstruir la existencia de 6 superficies
principales regionales, algunas de las cuales se extienden desde la Cordillera Principal
hasta la Cordillera de la Costa (Tabla 1). Estos elementos morfológicos corresponden a 3
terrazas de abrasión fluvial y 3 peneplanicies.
Tabla 1. Identificación de las superficies
Rango de
Superficie alturas
sp1
4.100-5.500
sp2
sp3
st1
st2
st3
3.500-4.700
2.000-3.200
1.400-1.900
1.000-1.400
750-850
Unidades morfológicas
que afecta
Estructuras que las afectan
CP
Dislocada por fallas N-S
Dislocada por fallas N-S,
CP
basculada hacia el W
CP, DC, CC
Dislocada por fallas N-S al sur
CP, DC, CC
CP, DC, CC
DC, CC
-
Discusión
- Puede existir alguna influencia glaciar en las morfologías observadas en la zona desde
los 33°30’S hacia el sur, desde la confluencia de los ríos Maipo y Colorado hacia el este.
Sin embargo, más al norte la influencia no es clara y no existen estudios que indiquen los
límites de acción glaciar.
- Las superficies se encuentran desarrolladas sobre rocas de distintas edades. Tomando
edades de la literatura, es posible asignar una edad de Mioceno Medio/Inferior a Plioceno
Superior para el desarrollo de estas superficies, ya que es la edad más joven de las rocas
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donde estas superficies fueron labradas. Sin embargo no es posible asignar con más
detalle su edad, siendo necesario aplicar otras metodologías para determinar la edad de
estas superficies.
- Los procesos y el tiempo en que actuaron estos procesos en el desarrollo de las
superficies probablemente no sean los mismos que actuaron en una cuenca y en otra (y
en la divisoria de aguas de éstas), ya que cada cuenca de drenaje tiene características
propias, y como la correlación de superficies se basó en la altura que poseen éstas, sería
posible que dos superficies que posean una misma altura fueron formadas en tiempos
distintos.
- Las seis superficies de bajo relieve corresponderían a diferentes pulsos mediante el cual
se alzó el antearco en Chile central, sin embargo no es posible cuantificar los pulsos de
alzamiento, debido a que no se tienen edades precisas para determinar la edad de cada
pulso de alzamiento.
Conclusión
Se han reconstruido seis superficies de erosión formadas cerca del nivel base que se
desarrollan sobre todo tipo de litologías y fueron dislocadas por fallas inversas asociadas
a la faja corrida y plegada de Aconcagua y al fallamiento fuera de secuencia reconocido
en el Mioceno medio; algunas de ellas fueron basculadas hacia el oeste. La altura a la
cual se encuentran las 6 superficies pone en evidencia que fueron elevadas con el
alzamiento andino y posiblemente representan pulsos de alzamiento. Las edades de las
superficies son: entre 16 y 5 Ma, para CP1 y CP2, y entre 5 y 2,7 Ma, para las superficies
CP3, CC1, CC2, y CC3.
Agradecimientos
Agradecemos al proyecto Anillo ACT-18 por el financiamiento otorgado para la
realización de este trabajo y a todos aquellos que ayudaron a realizarlo.
Referencias
[1] Farías, M. (2007). Tectónica y erosión en la evolución del relieve de los Andes de
Chile Central durante el Neógeno. Tesis para optar al grado de Doctor en Ciencias,
mención Geología.
[2] Phillips, J.D. (2002). Erosion, isostasy, and the missing peneplains. Geomorphology,
vol. 45, 225–241.
[3] Borde, J. (1966). Les Andes de Santiago et leur avant-pays: étude de géomorphologie.
Union française d'impression.
[4] Brüggen, J. (1950). Fundamentos de la Geología de Chile, 374 pp., Instituto
Geográfico Militar, Santiago, Chile.
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Fig. 1. i) Superficie de bajo relieve reconocida con el DEM, a ~2200 m s.n.m. en el Cerro Cantillana de la CC (sp3). ii)
Perfiles que ilustran la metodología empleada y la continuidad de la superficie sp2 a lo largo de la CPW, cercana al río
Aconcagua. iii) Superficie de bajo relieve en la CC a ~2300 m s.n.m. al oeste de Til-Til, correspondiente a sp3.
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