traducciones oficiosas

Anuncio
PENITENCIARÍA APOSTÓLICA
Prot. N. 1006/14/I
DECRETO
LA PENITENCIARÍA APOSTÓLICA, para animar la piedad de los
fieles y la salvación de los almas, en vigor de las facultades concedidas por
el Santísimo en Cristo Padre Francisco, Papa por la divina Providencia, y
atendiendo a las peticiones presentadas por el Excelentísimo Monseñor
José Ignacio Munilla, Obispo de San Sebastián el día 13 de Junio de 2014,
concede e imparte en el Señor misericordiosamente Indulgencia plenaria
de los tesoros celestiales de la Iglesia con las condiciones acostumbradas
(confesión sacramental, comunión eucarística y la oración por las
intenciones del Sumo Pontífice) a los fieles que se arrepientan
verdaderamente y movidos por la caridad, desde el próximo día 31 de Julio
hasta el 31 de Julio de 2016, indulgencia que se obtiene como corresponde
a un Jubileo. Esta Indulgencia se podrá aplicar a modo de sufragio a las
almas de los fieles que están en el Purgatorio si unen su corazón a los fines
del Año de la Vida Consagrada y al Año Santo de la Misericordia, y asisten
a la Peregrinación a la Basílica Santuario de San Ignacio de Loyola,
próximo al pueblo de Azpeitia, donde nació el Santo Fundador de la
Compañía de Jesús, para preparar el sagrado quinientos aniversario desde
que S. Ignacio de Loyola, que había servido en la corte y milicia del Rey
Católico y después de recibir una grave herida pasó de ser soldado a
piadoso peregrino, se fue de Loyola hasta Monserrat y después, dejando a
los monjes del convento de Monserrat su cabalgadura, llegó con gran
trabajo, con los pies envueltos en vendas y cojeando de una pierna, de
Monserrat a la ciudad de alrededores de Barcelona llamada Manresa, a
finales del mes de mayo de 1522.
Además los peregrinos deberán asistir a alguna función religiosa en
la Basílica Santuario de San Ignacio o al menos rogar durante un tiempo
conveniente a Dios por la fidelidad de España a la fe cristiana, por las
vocaciones sacerdotales y religiosas, y por la defensa de la institución de la
familia humana, terminando con la oración del Padrenuestro, el Credo y las
invocaciones a la B. Virgen María y a San Ignacio.
De este modo, los peregrinos serán estimulados a practicar cada vez
más las virtudes sobrenaturales, sobre todo de la Fe, Esperanza y Caridad, y
reforzarán su comunión con el Romano Pontífice, fundamento visible de la
unidad de toda la Iglesia Católica.
Para facilitar, con caridad pastoral, el acceso al perdón divino por
medio de las llaves de la Iglesia, esta Penitenciaría pide fervientemente a
los sacerdotes miembros de la Compañía de Jesús, a quienes se ha confiado
el cuidado pastoral del Santuario, se muestren generosos en la celebración
de la Penitencia y en la frecuente Comunión a los enfermos.
Este decreto es válido durante todo el año jubilar sin que nada
contrario se oponga.
Dado en Roma, en la Sede de la Penitenciaría Apostólica el día 12 de
Junio del año de la Encarnación del Señor 2015.
MAURO S. R. C. Card. PIACENZA
Penitenciario Mayor
CRISTÓBAL NYKIEL
Secretario
PENITENCIARÍA APOSTÓLICA
Prot. N. 683/14/I
DECRETO
LA PENITENCIARÍA APOSTÓLICA, para animar la piedad de los
fieles y la salvación de los almas, en vigor de las facultades concedidas por
el Santísimo en Cristo Padre Francisco, Papa por la divina Providencia, y
atendiendo a las peticiones presentadas por el Excelentísimo Monseñor
Romà Casanova Casanova, Obispo de Vic, el día 1 de Julio de 2014,
concede e imparte en el Señor misericordiosamente Indulgencia plenaria
de los tesoros celestiales de la Iglesia con las condiciones acostumbradas
(confesión sacramental, comunión eucarística y la oración por las
intenciones del Sumo Pontífice) a los fieles que se arrepientan
verdaderamente y movidos por la caridad, desde el próximo día 31 de Julio
hasta el 31 de Julio de 2016, indulgencia que se obtiene como corresponde
a un Jubileo. Esta Indulgencia se podrá aplicar a modo de sufragio a las
almas de los fieles que están en el Purgatorio si unen su corazón a los fines
del Año de la Vida Consagrada y al Año Santo de la Misericordia, y asisten
a la peregrinación al Santuario Cueva de San Ignacio (Manresa), para
preparar el sagrado quinientos aniversario desde que S. Ignacio de Loyola,
que había servido en la corte y milicia del Rey Católico y después de
recibir una grave herida pasó de ser soldado a piadoso peregrino, se fue de
Loyola hasta Monserrat y después, dejando a los monjes del convento de
Monserrat su cabalgadura, llegó con gran trabajo con los pies envueltos en
vendas y cojeando de una pierna de Monserrat a la ciudad de alrededores
de Barcelona llamada Manresa, a finales del mes de mayo de 1522.
Además los peregrinos deberán asistir a alguna función religiosa en
la Cueva de San Ignacio o al menos rogar durante un tiempo conveniente a
Dios por la fidelidad de España a la fe cristiana, por las vocaciones
sacerdotales y religiosas, y por la defensa de la institución de la familia
humana, terminando con la oración del Padrenuestro, el Credo y las
invocaciones a la B. Virgen María y a San Ignacio.
De este modo, los peregrinos serán estimulados a practicar cada vez
más las virtudes sobrenaturales, sobre todo de la Fe, Esperanza y Caridad, y
reforzarán su comunión con el Romano Pontífice, fundamento visible de la
unidad de toda la Iglesia Católica.
Para facilitar, con caridad pastoral, el acceso al perdón divino por
medio de las llaves de la Iglesia, esta Penitenciaría pide fervientemente a
los sacerdotes miembros de la Compañía de Jesús, a quienes se ha confiado
el cuidado pastoral del Santuario, se muestren generosos en la celebración
de la Penitencia y en la frecuente Comunión a los enfermos.
Este decreto es válido durante todo el año jubilar sin que nada
contrario se oponga.
Dado en Roma, en la Sede de la Penitenciaría Apostólica el día 8 de
junio del año de la Encarnación del Señor 2015.
MAURO S. R. C. Card. PIACENZA
Penitenciario Mayor
CRISTÓBAL NYKIEL
Secretario
Descargar