30 de Diciembre La Razón Correcta (continuación

30 de Diciembre
La Razón Correcta (continuación.)
Lee: 1 Timoteo 6:6-11
Confórmate con la provisión de Dios
Versículo Clave
Teniendo comida y vestido, Con eso debemos conformarnos. 1 Timoteo 6:8
Niño: Parece que va a nevar. Así no podremos ir al retiro de la iglesia. Quiero unos
esquíes y una chaqueta nueva. Pero mis padres no me los quieren comprar.
CHARLIE: ¿Estás agradecido por lo que tienes? Hola, soy el tío Charlie y estás
escuchando tesoros para niños. Hoy continuamos la historia titulada La razón
correcta. Leamos la Biblia en primera a Timoteo capítulo 6 versículos 6 y 8 “Pero
gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento. Así que, teniendo
sustento y abrigo, estemos contentos con esto.” La historia, La razón correcta.
“¡Aún no puedo creer que Roy y su padre ni siquiera agradecieran por las cosas
que les llevamos!,” exclamó Seth mientras él y su padre se dirigían a casa luego
de llevarle algunas cosas a la familia Smith. Un minuto después, él añadió, “¡Oh,
no! ¡La nieve se está derritiendo! ¿Por qué tiene que pasar esto? Necesitamos
nieve para nuestro retiro.”
“Bueno, tal vez cambie,” dijo Papá, “pero el hombre del tiempo dijo que se
esperaban temperaturas normales toda la semana.” Seth gimió.
“Sin embargo, muchas veces están errados,” dijo Papá. “Tal vez nieve un poco.”
Cuando llegaron a casa, Mamá tenía chocolate caliente, galletas y queso
esperando por ellos. Seth frunció el ceño. “Yo quería palomitas de maíz y refresco
para esta noche,” se quejó, “pero supongo que tendré que comerme esto.”
“¡A mí me cae como anillo al dedo!” dijo Papá.
Seth se tomó su chocolate caliente y comió varias galletas. “¿Puedo tener nuevos
esquís?” preguntó él mientras remojaba una galleta. “Chuck tiene unos nuevo, y
seguro serán mejores que los que tengo ahora. Y también quiero una chaqueta
nueva...”
Papá negó con su cabeza. “No habrán nuevos esquíes este año,” dijo él. “Con
respecto a la chaqueta, verifícalo con tu mamá.”
“Tu chaqueta vieja te servirá para todo el invierno,” dijo Mamá, “o por lo menos
hasta que las pongan en oferta. Por el paso al que vas creciendo, si compramos
una chaqueta ahora, no te quedará para el próximo año.”
Seth frunció el ceño. “Mi Papá y tú nunca me compran tantas cosas como los
padres de mis amigos lo hacen,” murmuró él.
“¿Tu apellido es Smith?” preguntó Papá. Seth se sobresaltó y negó con su
cabeza. “Te quejaste cuando Roy y su padre no nos agradecieron por ayudarlos,”
dijo Papá. “Pero ahora estás actuando de la misma manera. En lugar de ser
agradecido por lo que tienes, te quejas por el tiempo, la comida, los skis, la ropa, e
incluso por los padres que tienes.” Él miró a Seth con ternura.
“Yo… Yo lo siento,” dijo Seth. “Me comportaré de una mejor manera.” Él le echó
un vistazo a su madre. “Este chocolate caliente está muy bueno… las galletas
también.”
Mamá sonrió. “Y...” ella asintió.
Seth sonrió. “Y… adoro mi chaqueta y mis skis.” Papá puso sus manos en sus
caderas y continuó mirando a Seth. “Y… ¡Ah si!” dijo Seth. “¡El tiempo! ¡Me agrada
el tiempo húmedo en invierno, y me agradan mis padres!” Y todos se rieron.
¿Eres agradecido por todo lo que recibes, aún cuando no es exactamente lo que
querías? ¿Realmente aprecias cada regalo que recibes en Navidad? ¿Eres
agradecido por la comida, la ropa, tus padres, y todas las cosas buenas que Dios
te ha dado? Aprende a ser feliz con lo que Él te da y sé agradecido.
1 Timoteo 6:8 dice “Teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto.” La
clave es Confórmate con la provisión de Dios. Escuchaste Tesoros para niños, no
te pierdas nuestra próxima historia. Tú escuchas esto porque Dios ama a los
niños.