Sociedad Giorgio Moroder: habla uno de los padres de la electrónica bailable [98] ESPECTACULOS Jodorowsky en busca de la juventud perdida El cineasta filma las últimas escenas de Poesía sin fin, película que recrea su despertar artístico junto a Enrique Lihn y Nicanor Parra. En la cinta, ambientada en Santiago en los 50, actúan el poeta sirio Adonis y la coreógrafa Carolyn Carlson. Rodrigo González M. A los 86 años y en pleno invierno santiaguino, Alejandro Jodorowsky se cuestiona por un momento las temerarias decisiones que ha adoptado en el último tiempo. Mirando fijamente a la cámara web del portal Indiegogo, donde busca recursos para la posproducción de La poesía sin fin, proclama: “¿Qué hace un viejo como yo, con 86 años y medio, haciendo una película y yendo a trabajar con un ejército de técnicos?”. Luego, enumerando todas las partes del cuerpo que le duelen, aclara que además se levantó a las seis de la mañana y que cualquier sufrimiento es mínimo en comparación con el “éxtasis” de hacer cine para que la gente sane. Es el Jodorowsky de los últimos 25 años, el mesiánico y con caba- rets místicos en grandes teatros. De alguna forma, el artista nacido en Tocopilla ya asumió aquella postura en su cinta La danza de la realidad, donde muchas veces se dirige al espectador y rompe el eje narrativo tradicional de la historia. Precisamente para la película que está haciendo ahora planea una compleja escena que, según su productor local Xavier Guerrero Yamamoto, será un momento culminante de la historia. “La filmaremos el martes 25 de agosto a las cinco de la tarde en el Teatro Caupolicán. La idea es contar con cinco mil extras y la entrada es gratis”, dice Guerrero, el hombre que ha estado en la producción de La danza de la realidad y de la inminente continuación, Poesía sin fin. Durante estos últimos tres meses el rodaje de Poesía sin fin ha en- FOTO: PASCALE MONTANDON-JODOROWSKY Tao Lin, la figura joven de las letras de EE.UU. [93] CULTURA frentado a Jodorowsky con un mundo que dejó enterrado hace más de medio siglo. Es el de Santiago entre fines de los 40 y mediados de los años 50, cuando se introdujo en los círculos artísticos de Enrique Lihn, Nicanor Parra y Stella Díaz Varín, entre otros. Es una bohemia al fin del mundo que para Jodorowsky significó el centro de todo y que al mismo tiempo despertó su interés por salir de Chile. La película Poesía sin fin introduce otra vez a los personajes de Jaime y Sara, padres del realizador interpretados por Brontis Jodorowsky y Pamela Flores, respectivamente. También repite Jeremías Herskovitz, el muchacho que con 10 años interpretó al pequeño Jodorowsky en Tocopilla. SIGUE EN PAG. 92 R