Mi viaje hacia la Kaaba Abdallah Yusuf de La Plata, Argentina (Dr. Néstor Daniel Pagano ) Dice el Sagrado Corán : “La Peregrinación a esta Casa es una obligación para todos los seres humanos, debiendo realizarla por la Causa de Dios quien esté en condiciones de hacerla. Y quien se niegue (dejándola de lado mientras puede hacerla, se perjudica a sí mismo). Porque Dios es Autosuficiente respecto de las criaturas.” . (3:97) Y dice también : ¡Llama a los hombres a la Peregrinación para que vengan a ti ya sea a pie o cabalgando sobre animales flacos, venidos (hacia la casa de Dios) de todos los caminos (y lugares) lejanos! (22:27) Presentación Me encuentro repasando las notas para la preparación final del libro y aún ronda en mi interior la pregunta : “¿Es conveniente que publiquemos un relato de mis experiencias personales en el Islam?” Es decir, ¿quién soy yo más que un simple musulmán con una corta y breve instrucción islámica como para publicar una descripción de mis experiencias personales? ¿Qué tengo para brindarle al lector occidental a partir de una experiencia tan escasa? La respuesta es clara y simple : no tengo para ofrecer más que unos breves relatos de algunos aspectos de mi viaje a la Kaaba, los cuales compartí con mis hermanos musulmanes a través de la revista “Luz de Sabiduría” que edita la Fundación Imam Alí. No obstante, fue el entusiasmo que despertaron tales simples relatos entre los hermanos con quienes los compartí lo que me animó a ampliar los mismos para una presentación a un formato más extenso. Así es que, manteniendo siempre presente aquella inquietud antes mencionada, con la conciencia plena de que mi experiencia personal no es un aporte suficiente como para la publicación de un libro, me aboqué a reunir junto a las anécdotas del viaje, el debate sobre determinados aspectos del Islam y la exposición de los mandatos, las plegarias, las aleyas del Generoso Corán y las tradiciones (“Hadices”) vinculados con el mismo. De esta manera, el relato que presentamos a continuación pretende ser más que un conjunto de experiencias personales, una investigación de uno de los pilares principales del Islam, la Peregrinación, y una presentación general del Islam para los lectores occidentales no musulmanes. Antes de comenzar con la introducción al relato, quisiera aclarar que después de la mención generalizada o particular de un Profeta o una personalidad santa, los musulmanes colocamos la letra “P” entre paréntesis, lo cual significa “Con él/ella/ellos sea la Paz”. Se trata de una salutación con la cual honramos a tales personalidades por su importancia en la vida de la Humanidad y su cercanía a Dios Altísimo. Para el caso especial del Profeta Muhammad (BPD), las letras “BPD” significan “Con él sean la Bendición y la Paz, y con su Descendencia purificada”, siendo esta una salutación particular para él por su dignísima jerarquía y posición. Por último, quiero agradecer a todas aquellas personas que de un modo u otro me han ayudado con este trabajo y han colaborado en su corrección, en especial a mi querido maestro el sheij Huyyatul Islam Muhammad Moallemi Zadeh, sin quien nunca habría llegado donde llegué, tanto física como espiritualmente. Al hamdu lil Lah, Rabbil alamín. Toda Alabanza pertenece exclusivamente a Dios, Señor de los Universos. Y no hay Fuerza ni Poder sino en Dios Altísimo, el Imponente, el Grandioso. Allahumma salli ala Saidina Muhammad ua ali Muhammad. Dios nuestro: Bendice a nuestro Profeta Muhammad y a la familia de Muhammad. Néstor Daniel Pagano. 2 Introducción. Figura en una conocida tradición del Profeta Muhammad (BPD) que en cierta ocasión, cuando le preguntaron al Mensajero de Dios (BPD) qué era el Islam, él respondió: “Es testimoniar que no hay divino sino Dios y que Muhammad es Su siervo y Su Mensajero, observar la oración, pagar el zakat, ayunar el mes de Ramadán y realizar la Peregrinación y la visita a la Casa ( de Dios, en La Meca, es decir Hayy y Umrah).” (Extraído de “Yamiul Ajbar”) La Peregrinación a la santa ciudad de La Meca es uno de los pilares obligatorios del Islam. Todo musulmán que tenga los medios necesarios y la posibilidad de realizar este viaje, debe hacerlo aunque sea una vez en la vida. Pero más allá de esta obligación establecida que pesa sobre cada adherente formal a la religión islámica, la Peregrinación también representa el sueño de todo musulmán creyente y sincero: poder visitar al menos una vez en la vida los Santuarios más sagrados del Islam, la Casa de Dios en la Meca y la mezquita del Profeta (BPD) en Medina. Todo musulmán anhela en su corazón poder realizar este viaje y cuando se le presenta la oportunidad, lo realiza con sumo placer y buena disposición. Con la ayuda de Dios, al hamdu lil Lah Rabbil alamín, pude realizar dicho sueño concretando un viaje a la Casa de Dios. Un viaje de neto corte espiritual, cargado de Mercedes y Bendiciones, colmado de emociones fuertes y sutiles, el cual abrió para mí una puerta a un estado muy difícil de describir, que involucra una nueva visión de la vida. Dice el sheij Kashful Ghita en su obra “Orígenes del Shiismo y sus Principios” lo siguiente sobre la Peregrinación o “Hayy” : “El Hayy es una especie de Yihad (esfuerzo, lucha, combate) financiero y físico. Ciertamente el Hayy debería ser llamado ‘el verdadero Yihad’, y el Yihad debería denominarse ‘el verdadero Hayy’. Si nosotros reflexionamos atentamente sobre la relación y la armonía entre ambos, este significado oculto se hará aparente, revelando que son uno”. Es imposible presentarse ante la Casa de Dios y no cambiar de estado interior. El Santuario le extrae a uno el corazón cuando ingresa en él, y al marcharse se lo retorna con una consigna marcada a fuego : “Al Kaabatul Qiblati”. Esta realidad late en el pecho de cualquier musulmán que haya tenido esta Bendición de poder asistir a la Meca : “La Kaaba es mi Qiblat”. La Casa de Dios es el punto hacia el cual mi corazón se encuentra permanentemente orientado, continuamente tornado hacia allí. Esta frase ahora echó raíces en mi corazón y extendió sus frondosas ramas de hojas perennes, las cuales brindarán jugosos frutos hasta el fin de mis días, si Dios Altísimo así lo quiere. Luego de meditarlo detenidamente, considero oportuno compartir con nuestros lectores, en especial con mis hermanos musulmanes, algunos aspectos de esta extraordinaria experiencia para que puedan tener una noción de lo que la misma significa y anhelen ellos mismos poder realizar algún día este viaje, tal como yo 3 deseo repetirlo. Si el creyente anhela fervientemente algo, Dios le facilita los medios para obtenerlo, en especial cuando se trata de algo tan beneficioso como una visita a Su Casa, visita a la cual El Mismo nos Ha invitado. Y no hay Fuerza ni Poder sino en Dios Altísimo, el Unico, el Imponente, el Grandioso. ¿ Por qué me islamicé ? Antes de comenzar a describir mi viaje, quisiera mencionar un punto que me fue varias veces preguntado por diferentes personas que fui conociendo en el camino: ¿Por qué me islamicé? En más de una ocasión traté de eludir la respuesta, pues la misma me resulta difícil de explicar incluso para mí mismo. Los hermanos que han tenido la suerte de nacer en una familia musulmana, se han librado de la inquietante necesidad de encontrar una respuesta satisfactoria a la cuestión de por qué una persona se separa de la cultura en la que fue criado, de la educación que recibió de sus padres, de su familia, de su ambiente, de su sociedad, etc., para adoptar una religión y una creencia totalmente ajena y extraña al medio en el cual vive y se desenvuelve, con todo lo que ello implica (separación y conflicto con los padres, hermanos, familiares, amigos y todo cuanto nos rodea). Toda una situación que suele intrigar a los musulmanes de origen, lo cual es posible que se deba (según sospecho) al inquietante interrogante que surge en ellos al conocer a alguien que ha recorrido este empinado camino: “¿Sería yo capaz de hacer lo mismo de estar en su lugar?” Voy a hacer un breve recuento de lo sucedido en mi caso particular : Provengo de una familia atea. Mi nombre es Néstor Daniel Pagano, y mi apellido está indicando que el ateísmo y rechazo de la religión ha sido algo muy arraigado en mi familia, una tradición ancestral, diría yo. Los apellidos no suelen ser una casualidad, y si figura en mi familia, seguramente mis ancestros han tenido enfrentamientos con la iglesia que los han llevado a cargar ese apelativo. Si bien esto es una suposición (y algún lingüista detallista podrá acotar que “Pagano” proviene de “campesino”), mi padre realmente era una persona muy atea y francamente enemiga de toda religión. Su enemistad provenía de sus ideas y tendencias políticas, ya que era socialista. Si bien el socialismo no es necesariamente ateo, los socialistas en general no supieron separar el mensaje propio de la religión de aquello que ellos veían que hacían las instituciones religiosas, sus conductores y líderes corruptos. Esto generó en ellos un rechazo a toda la religión, rechazo muy justificado por un lado, pero exageradamente generalizado. Mi padre (a pesar de lo que alguno pueda pensar al leer que era muy ateo) era una persona muy buena y me enseñó tres cosas en las cuales basó mi educación con insistencia: 4 Primero, amar a los pobres con todo lo que implica (ayudar al necesitado, respetar a la gente humilde y luchar políticamente para que la gente tuviera un salario digno que le permita llevar una vida agradable, con bienestar y dignidad). Segundo, ser siempre honrado (nunca mentir, cumplir las promesas y comportarse decentemente, para llevar siempre la frente en alto y nunca tener que esconderse de nadie ni avergonzarse ante nadie). Tercero, el rechazo de todo lo religioso. El consideraba que todos los males provenían de la religión, que era “el opio de los pueblos”. Consideraba que si la Iglesia y los sacerdotes eran los representantes oficiales de la religión, que la conocían y aplicaban mejor que nadie, y ellos se comportaban como él veía que lo hacían, entonces la religión estaba mal, que era en sí misma algo malo. El veía que a lo largo de la historia la religión siempre había funcionado como herramienta de opresión y no podía encontrar ninguna excepción a esto. Yo acepté sus dos primeras enseñanzas pero no la última, porque supe distinguir un punto que él no pudo captar: los males vienen de los HOMBRES que manipulan las religiones, no de las religiones en sí. La religión es una herramienta de opresión pero no en sí misma sino por ser manipulada por la gente opresora y tirana. Si se aplicaba como debía ser, la religión era una herramienta liberadora de los pueblos De ahí que a pesar de mi educación atea, siempre tuve una inclinación hacia una búsqueda religiosa. Siempre creí en Dios, aunque en mi casa me enseñaban lo contrario. A los 14 años de edad hice una peregrinación a Luján (una ciudad a unos 100 kilómetros de Buenos Aires que es centro de una peregrinación anual la cual convoca a miles de cristianos) y fue con el único anhelo de estar cerca de los creyentes. No estoy diciendo que esta peregrinación haya cambiado mi vida o me haya marcado de manera crucial, pues no fue así. Lo menciono como una manera de mostrar mi interés por la fe y los creyentes, interés que no tenía por la iglesia y las instituciones religiosas a las cuales nunca me acerqué (seguramente por la educación que me habían inculcado). Ya en la Universidad (soy veterinario) quedé fascinado con el estudio de las células, los microorganismos y demás maravillas de la creación. Me sentía asombrado y deslumbrado en especial con los pequeños detalles de la biología, las estructuras más pequeñas y el complejo funcionamiento de cada parte de cada ser vivo. Mi asombro fue en aumento hasta que llegué al estudio del sistema nervioso, con lo cual quedé desbordado. Me maravillaba ver que las neuronas de los animales son básicamente iguales a la de los hombres y que los impulsos nerviosos se basaban en ondas eléctricas, las que finalmente eran movimientos de átomos de diferentes cargas a través de una membrana... ¿Y dónde está la diferencia entre los 5 hombres y los animales? ¿Qué permite al hombre tener pensamientos tan complejos y elevados muy por encima del nivel de los animales? Quizás a algunos esto le parezca tonto, pero yo estuve meses con este interrogante en mi cabeza hasta que un día casi por inspiración obtuve una respuesta: el hombre tiene un alma, la cual no es perceptible por los elementos de la ciencia. Para otros esto puede ser algo elemental, pero para mí significó todo un descubrimiento. A partir de ahí comencé una búsqueda espiritual que permitiera desarrollar mi alma y cumplir con el objetivo de la vida (que no sabía cuál sería, pero que alguno debería ser). Comencé leyendo libros, desde la Biblia hasta Budismo Zen, pasando por Hinduismo y también algo de Islam. También de pensadores como Gurdieff y otros cuyos nombres ya no recuerdo. Finalmente decidí aprender algo de idioma para poder leer las fuentes originales de las enseñanzas religiosas y me acerqué a un Centro Islámico donde enseñaban árabe. ¿Por qué elegí el árabe para empezar, y el Islam, y no otro idioma, otra religión? No lo sé, no lo puedo explicar. Pero lo cierto es que decidí empezar mi búsqueda por el Islam precisamente. Este Centro Islámico al que me acerqué funcionaba en la ciudad de La Plata (en la calle 4 esquina 56), en un lugar alquilado y mantenido por un pequeño grupo de conversos platenses (con capital y esfuerzos propios) bajo la dirección desde Buenos Aires del imam Mahmud Husein (quien desde hace muchos años realiza una gran tarea de difusión del Islam entre no musulmanes en Argentina). En este Centro se dictaban clases de árabe y religión, y se ofrecían periódicamente conferencias sobre Islam. Yo no iba con la intención de aprender religión pues consideraba (con la soberbia y pedantería de quien lee algunos libros) que no iban a poder enseñarme nada. El hermano que me recibió (un platense convertido al Islam) fue muy amable y atento, lo cual remarco pues la primera impresión siempre es importante para quien se acerca al Islam. El me demostró con pocas palabras que estaba en el error, que tenían mucho para enseñarme y que yo realmente no sabía nada. Yo siempre digo el mismo ejemplo: me acerqué con un vaso buscando un poco de agua y me mostraron un océano plagado de riquezas ante el cual quedé atónito. Me regalaron unos folletos y empecé a asistir a las clases de árabe y de religión que se impartían, y pocas semanas después me islamicé. Una decisión ponderada que consideré muy seriamente y en la cual me comprometí de por vida. Pasaron ya más de 15 años de mi islamización. Realmente el Islam cambió toda mi vida de un modo profundo. El Islam era lo que toda mi vida estuve buscando y cubrió mis necesidades mucho más de lo que yo esperaba. Le dio sentido y orientación a mi existencia y llenó todos sus vacíos de manera completa. 6 Hoy, después de haber repasado miles de veces esta actitud mía, sigo sin poder explicarla del todo. ¿A cuánta gente se le habla del Islam por mucho más tiempo y no se islamiza? ¿Cuántos buscadores pasan por Centros Islámicos, asisten a conferencias y leen muchos más libros que los que yo leí, mucho más profundos y completos, y no se islamizan? ¿Qué es lo que hace que algunas personas acepten el Mensaje del Islam entre muchas a las que puede parecerle muy interesante, pero no se comprometen con él? Un sheij que conocí en este viaje me acercó a una respuesta: la esencia del ser humano, cuando está pura, libre de prejuicios y otros defectos similares que la velan impidiéndole ver la realidad, y es sincera, reconoce el Mensaje de Dios y lo acepta. En estos casos, el alma de la persona es musulmana antes de islamizarse, porque su corazón reconoce (ante de que lo haga su lengua) que no hay divino sino Dios ( “La ilaha illa Allah” ), siendo ésta la raíz del Islam. En tal estado, el hombre que sale a buscar un camino, está dando un paso hacia Dios. Y como dice el “hadiz”, entonces Dios da diez pasos hacia uno. En esencia, fue eso lo que me sucedió. Me acerqué al Centro Islámico pensando en tomar un poco del conocimiento del Islam para luego seguir mi camino. No tenía la intención de islamizarme. Me hallaba buscando acercarme a Dios con sinceridad y sin prejuicios. Y no cabe duda que Dios guía a quien lo busca de esta manera y se acerca hacia quien da un paso hacia El. Como dije, no tenía la intención de islamizarme. Pero me encontré con un profundo mar de conocimiento, con respuestas a todas mis inquietudes y con un Mensaje que mi corazón reconoció como auténtico y aceptó inmediatamente. Me islamicé y desde entonces Dios me ha dado las fuerzas necesarias para mantenerme firme en este camino, un camino que hoy me ha conducido hasta la misma Casa de Dios, la Kaaba. ¡ Al hamdu lil Lah, Rabbil alamín ! Por eso yo testimonio que no hay divinidad excepto Allah, Unico y sin asociados, y que Muhammad (BPD) es Su siervo y Su Mensajero. Ash hadu an la ilaha illa Allah uash hadu anna Muhammad rasulul Lah. Allahumma salli ala Muhammad ua ali Muhammad. ¿Qué tiene para ofrecer el Islam a la gente de occidente? El Islam tiene todo lo que el ser humano necesita en líneas generales para su vida, tanto para orientales como para occidentales. Tiene el remedio para los males de las sociedades y los padecimientos espirituales y materiales del hombre. Especialmente para los jóvenes, que son los que suelen sentirse más atraídos por esta religión. Si la gente se pudiera acercar al Islam sin los prejuicios impuestos por nuestros enemigos y con sinceridad, lo aceptaría inmediatamente. 7 El Islam es lo que el ser humano busca y necesita en este mundo. Su Mensaje es reconocido de inmediato por la naturaleza innata del hombre ( “fitrat” ). La cuestión es que los prejuicios no le impidan aceptarlo y que la sinceridad le otorgue las fuerzas y el ánimo necesarios para ello. El Islam es la joya anhelada por todo buscador espiritual, sea que lo sepa o no. Y Dios le facilita el camino a quienes hacia El se dirigen con sinceridad. Los pueblos de Occidente que hoy se encuentran sumidos en tantas crisis materiales y morales tienen en el Islam la salida a todos sus problemas, si pudieran ponerlo en práctica en forma integral. El Islam contempla un sistema sociopolítico y económico apto para ser aplicado en cualquier sociedad del mundo actual y crear en ella los medios favorables para su pleno crecimiento, desarrollo y expansión en toda dimensión humana, material y espiritual. El Islam contempla un sistema de gobierno, un sistema jurídico y penal, una economía, un modelo de reparto de las riquezas, un esquema de distribución de tierras, un incentivo a la cultura y la ciencia, una asistencia concreta a los pobres, etc... En síntesis, todo lo que los pueblos buscan para concretar la justicia social y el bienestar. De ahí que para el sistema materialista que impera hoy en el mundo, el Islam representa un verdadero peligro y una amenaza real, pues es el único modelo alternativo integral que se presenta para los pueblos de la actualidad. Y por eso es que se lo ataca con tanta propaganda tramposa, a pesar de lo cual no han podido impedir el crecimiento del Islam y el acercamiento de la gente a este maravillosa sistema integral de creencias. Pero este lugar es muy limitado como para que podamos desarrollar este tema con el detalle que amerita. De ahí que invitamos a todos los lectores interesados en conocer algo más del verdadero Islam, no el de la propaganda, a que se acerquen a los lugares de difusión, centros islámicos y mezquitas, así como a los diversos sitios en internet donde se puedan informar mejor sobre esta religión. Los preparativos para el viaje. Todo se inició cuando el sheij Muallemi Zadeh con quien trabajo en la difusión del Islam traduciendo libros y material del árabe al castellano desde hace unos 10 años, me invitó a realizar una Umrah para el mes de Shaaban. Una comisión de la Fundación donde desarrollamos nuestro trabajo, encabezada por el saied Shahrestani, realizaba la Umrah en ese momento y nos invitaba a hospedarnos con ellos, lo cual solucionaba el tema del alojamiento y la comida. El sheij me facilitó el dinero para el pasaje y los trámites y yo pude arreglar sin problemas la licencia en mi trabajo. Por otra parte, mi esposa y varios hermanos musulmanes se movilizaron para ayudarme a conseguir la visa, trámite que si bien no es imposible, resulta algo tedioso para quien vive a cierta distancia de la embajada, como es mi caso. En este caso, debo agradecer especialmente al hayy Muhammad Hamzah, a su sobrino Adnan Hamzah y a otros hermanos de la comunidad de 8 Floresta quienes me facilitaron todas las cosas, al hamdu lil Lah, gracias a lo cual pude obtener sin mayores inconvenientes la visa para viajar a tiempo. Es importante para quien quiera realizar este provechoso viaje, consultar con un mes de anticipación en la embajada todos los detalles de los requisitos para tener tiempo suficiente como para completarlos sin demoras. Finalmente, debo agradecer muy especialmente a mi esposa Zahra sin cuyo apoyo no hubiese podido realizar este viaje. La partida. Finalmente llegó el día de la partida. Aquella noche casi no pude dormir de la emoción. Mi esposa estaba muy feliz por mi viaje y a la vez triste, pues en 10 años de casados era la primera vez que nos distanciábamos tanto y por tanto tiempo. Por mi parte, yo no tenía experiencia alguna en viajes tan largos, en moverme en los aeropuertos, en los trasbordos, etc. Todo era nuevo para mí. Me encomendé a Dios y confié todos los asuntos del viaje en Sus Manos. Si todo se estaba dando de una manera plena de bendiciones, no tenía que preocuparme pensando en que algo pudiera salir mal. Recitamos con mi esposa la sura Al Fatihat, Al Ijlas, las suras del conjuro y aiatul Kursii, y luego inicié aquel largo viaje con paz y tranquilidad en el corazón. Transcribimos lo que dicen en castellano estas suras a continuación, para los lectores no musulmanes : Sura “La Apertura”, Al Fatihat (Nº 1 del Corán) : “En el Nombre de Dios, El Compasivo, El Misericordioso La Alabanza es exclusivamente para Dios, Señor (Creador y Educador) de los Universos. En Compasivo, El Misericordioso. Soberano del Día de la Retribución (el Día del Juicio). Sólo a Ti adoramos y sólo de Ti imploramos auxilio. ¡Dirígenos por el Sendero Recto! Sendero de quienes Has agraciado y no el de quienes incurrieron en Tu Ira ni el de los desviados.” Sura La Sinceridad, Al Ijlas (Nº 112 del Corán) : En el Nombre de Dios, El Compasivo, El Misericordioso. "Di : El, Dios, es Singular. Dios es el Fin Ultimo (Aquel a Quien todos los seres se dirigen en sus necesidades). Jamás Ha engendrado ni Ha sido engendrado, y nunca nadie se Le asemeja." 9 Suras de los conjuros : Sura La Alborada, Al Falaq (Nº 113 del Corán) En el Nombre de Dios, el Clementísimo, el Misericordioso Di: "Me refugio en el Señor de la alborada. De la malicia de los seres que ha creado. De la malicia de la oscuridad nocturna cuando se extiende. De la malicia de las que soplan sobre los nudos. Y de la malicia del envidioso cuando envidia". Sura “Los hombres”, An Nass, (Nº 114 del Corán) En el Nombre de Dios, el Clementísimo, el Misericordioso. Di: "Me refugio en el Señor de los hombres. En el Rey de los hombres. En el Dios de los hombres. De la malicia del disimulante tentador que se escabulle. Que sugiere (malos pensamientos) en los pechos de los hombres. Sea genio, sea hombre". El largo camino a Medina. Sin duda que viajar desde Argentina hasta Arabia es un camino muy largo. Tuve que hacer un vuelo de unas 13 horas a Roma, luego un trasbordo a Milán, aguardar allí casi 12 horas para luego tomar el avión a Jeddah. Allí, una vez realizados los trámites de inmigración, tenía que tomar un taxi para pasar a otro aeropuerto donde abordaría un avión hacia Medina, donde me recibiría el sheij Muallemi Zadeh. Yo no tenía experiencias en viajes internacionales ni hablaba el idioma, ni el árabe ni el inglés. Desde que subí al avión en Ezeiza hasta que me encontré con el sheij en Medina no me crucé con ninguna persona que hablara el castellano, salvo una persona en Italia a quien le consulté una cuestión sin importancia para mi viaje. Tuve que hacerme entender con señas, mostrando el pasaje, o a través de algunas palabras sueltas del inglés. Sin embargo, no tuve ningún inconveniente en absoluto para encontrar el camino. En ningún momento me perdí ni me equivoqué de rumbo. El trasbordo en los aeropuertos es sumamente sencillo, pues todo se encuentra perfectamente señalizado. Y cuanto más grande es el aeropuerto, mejor señalizado está. Comento esto para las personas que puedan sentirse intimidadas ante la posibilidad de realizar semejante viaje: no hay que preocuparse por nada. En general, los lugares están preparados para las personas que viajan y la gente comprende que uno es extranjero y se prestan a ayudar. Sí es útil que uno trate de estudiar algo de inglés y de árabe 10 como preparación para el viaje, pues de esa manera puede comunicarse mejor con la gente que uno se cruza en este camino. Los musulmanes (en especial los árabes) acostumbran relacionarse con otros que se encuentran en su camino y buscan conversar con uno. Cuando fui a abordar el avión de Milán a Jeddah, comencé a ver musulmanes y a sentir que me acercaba a mi destino. Algunos se pusieron a rezar en el mismo lugar. Allí conocí al primero de muchos : un árabe que me contó que vivía en Jeddah desde hacía 17 años y que tenía un restaurante. Las comunicaciones en estos casos son bastante breves, por la limitación del idioma. La mayoría de las veces cuando decía que no era árabe, me preguntaban si era iraní, turco o ruso. Algunos no conocían la Argentina, y si la ubicaban someramente era por el fútbol. Para los árabes, Argentina es sinónimo de fútbol. Muchos se asombraban al saber que yo venía desde tan lejos para hacer una Umrah. Entonces me pedían que suplicara por ellos o me tocaban el brazo, como si pudiera transmitir algún tipo de bendición especial. En una ocasión, un joven que atendía un negocio en Meca, al saber que venía de tan lejos a visitar la Casa de Dios, me perfumó las manos y la cabeza, pidiéndome que suplique por él. En otra ocasión, un hombre egipcio en uno de los aeropuertos al regreso, insistió en llevarme él uno de mis bolsos cuando supo que venía de realizar la Umrah. Uno resulta honrado de esta manera por ser visitante de la Casa de Dios. Es parte de las Mercedes de este viaje. La llegada. En el aeropuerto de Jeddah nos dieron unos papeles para llenar tanto a mí como a otras personas que allí se encontraban, y me puse a hacer una cola para control de pasaporte. Una ventanilla de un costado se desocupó y el hombre que estaba delante de mí me llamó “¡Ia hayyi!”, señalándome el lugar libre. Aquello me produjo una emoción particular al ser respetado como visitante de la Casa de Dios. Toda la gente común sin excepción respeta al peregrino. Eso provoca por un lado una dicha especial que rebalsa el pecho, y por otro lado, una carga que implica la responsabilidad de ser un digno visitante de la Kaaba. Luego de pasar sin ningún contratiempo por la aduana, el cambio de aeropuerto me resultó tan fácil como las otras etapas del viaje. Salí de la aduana y varias personas comenzaron a ofrecerme el servicio de taxi. Todas vestían igual : túnica (“yilaba”) blanca y pañuelo rojo a cuadros en la cabeza, típica vestimenta de la península. Arreglé con uno de ellos y viajé sin problemas hasta el otro aeropuerto, donde abordé el avión a Medina. 11 Los aviones del mundo islámico. Varias cosas distinguen a los aviones de las compañías islámicas, sea la compañía de Arabia Saudita, de Irán o Gulf Air. Primero, las mujeres azafatas visten el correcto “hiyab” (vestimenta islámica para la mujer), aunque en Gulf Air es tal vez menos estricto. Segundo, las pantallas del avión nos señalan la posición de la Kaaba en todo momento, para que sepamos hacia donde se encuentra nuestra Qiblat. Tercero, cuando nos van a hablar comienzan por el “Bismillah” y antes de despegar, realizan una súplica pidiendo a Dios por el vuelo. Cuarto, la comida es “halal” y no se sirven bebidas alcohólicas como en las compañías occidentales (a propósito, uno debe recordar siempre solicitar dieta vegetariana antes de abordar, porque de lo contrario se va a encontrar con toda comida ilícita para musulmanes). Estos pequeños detalles hacen que uno viaje más cómodo y tranquilo que en los aviones de compañías occidentales. En tierras islámicas. De esta manera comencé a introducirme en el territorio islámico, un territorio donde el recuerdo de Dios es permanente, donde todo tiende a la devoción y la espiritualidad. Por todas partes uno se cruza con carteles de diversos tamaños con frases islámicas tales como “La ilaha illa Allah”, “Subhana Allah”, “Allahu Akbar”, “Astagfirul Lah” , “Muhammad Rasulul Lah (BPD)” , etc. Dice el Corán : “Aquellos que mencionan (o recuerdan) a Dios estando de pie, sentados o acostados y meditan en la creación de los cielos y la tierra (diciendo) : ¡Señor nuestro! No has creado esto en vano. ¡Glorificado seas! ¡Presérvanos, pues, del Castigo del Fuego!' ( 3 : 191 ) “Recordadme y os recordaré...” El recuerdo de Dios vibra en cada rincón del mundo islámico. Hay estos carteles a los costados de los caminos, en las puertas e interiores de los micros y autos, en los hoteles, en los ascensores, en la calle, etc. La religión late en el ambiente y lo hace de un modo absolutamente natural, no forzado en absoluto. Esa religiosidad que occidente ha perdido, se percibe en cada detalle en el mundo musulmán, y con mucha intensidad en Medina y Meca. Es la fuerza de la fe que el Islam mantiene vigente y que da vitalidad a todos los musulmanes. Una fuerza que Occidente ha perdido y no puede suplir a pesar de contar con toda la tecnología, los avances científicos y el desarrollo industrial. Recuerdo un “hadiz” (dicho o tradición) del Profeta Muhammad (BPD) que estaba pegado en el parabrisa de un colectivo que nos llevó a visitar el desierto de Arafat. Decía así : 12 “Quien abandona el salat del fayr, su rostro no tiene luz. Quien abandona el salat de zuhr, su riqueza no tiene bendición. Quien abandona el salat del asr, su cuerpo no tiene fuerza. Quien abandona el salat del magreb, sus hijos no dan frutos. Y quien abandona el salat del isha, su cuerpo no descansa (no concilia el sueño).” Este recuerdo de Dios que uno encuentra en cada rincón de aquellos lugares santos intensifica la espiritualidad del viaje. Madinatun Nabi : una cálida bienvenida. Finalmente arribé a Medina, la ciudad del Profeta (BPD). El sheij Muallemi Zadeh me esperaba en el aeropuerto, tal como habíamos acordado. Nos trasladamos al hotel donde me di un baño ritual (“gusl”) con intención de visitar la tumba del Santo Profeta (BPD). Durante el largo viaje hasta Medina, había aprovechado mi tiempo leyendo el texto de “La amplia salutación” (“Ziaratul Yamiatul Kabirat”) donde se transcribe un saludo especial para dirigirse a los Imames (P) cuando se visita sus tumbas. En ese relato, el Imam Al Hadi (P) comienza diciendo : "En primer lugar, antes de llegar al recinto del santuario, debes previamente llevar a cabo un baño completo (gusl). Al ingresar a los sagrados recintos del santuario , debes testimoniar la Unidad de Dios y la Profecía de Muhammad (BPD), y luego pronunciar 100 veces el takbir "Allahu Akbar" (Dios es el más grande). En tercer lugar, con debida reverencia y respeto, debes dirigirte al Imam...” Y a partir de aquí relata el saludo (“ziarat”) para aquel a quien se visita. Así que por tal motivo realicé un baño completo antes de visitar la mezquita del Profeta (BPD). Inmediatamente le pedí al sheij ir a la mezquita, la cual se encontraba a menos de dos cuadras de donde nos alojábamos, al hamdu lil Lah. Es muy difícil describir tanto la mezquita del Profeta (BPD) como el Santuario de la Meca. Son lugares soberbios, extraordinarios, con una arquitectura deslumbrante, impactante. El piso brilla como un espejo y a pesar de que siempre hay cientos de personas en el lugar, ni siquiera hay una mota de polvo que pueda ser notada. Todo se encuentra ordenado y lustroso, como aguardando nuestra visita. Por doquier hay gente rezando o leyendo el Corán. El piso se encuentra cubierto por alfombras de tonos rojizos mientras que las paredes y columnas llevan tonos dorados de mayor o menor intensidad. Así, el ambiente porta una coloración cálida, más allá de que la refrigeración hace que uno no padezca la temperatura ambiental (siempre elevada en esas ciudades). El clima de Medina era similar al que había dejado en Argentina, algo más cálido y sin lluvias. A veces soplaba un viento muy caliente que daba la sensación de traer tormenta, y se nublaba un poco, pero no llovía. A la noche el ambiente era mucho más agradable, sin embargo, el calor no fue insoportable en ningún momento. Debo mencionar que en ese momento allá era otoño. 13 Recé en la mezquita del Profeta (BPD) dos rakats meritorios para la mezquita, primero por mí y luego en nombre de todos los hermanos y hermanas creyentes que conocía, muchos de los cuales me habían encargado que suplicara por ellos en mi viaje. Luego recuperé las oraciones que no pude hacer durante mi viaje y volví a rezar en forma meritoria. Después leímos la salutación al Profeta (BPD) y nos dirigimos ante su bendita tumba. Ante la Tumba del Mensajero de Dios (BPD). Allí estaba el minbar del Profeta (BPD), rodeado de algunas gruesas columnas que llevaban una arquitectura diferente al resto y tenían denominaciones especiales, las cuales correspondían a las existentes en la mezquita original. A un costado, el cuarto que alberga la tumba del Santo Profeta (BPD), junto a la cual se encuentran las tumbas de Abu Bakr y Omar, los dos primeros califas del Islam. El espacio entre la tumba y el minbar se lo conoce como “Al Rawdah” y según una tradición, es uno de los jardines del Paraíso. Allí continuamente hay gente rezando y es difícil conseguir un lugar para hacer dos rakats, aunque en otra visita logramos hacernos de un pequeño espacio para rezar en ese punto. Frente a la tumba del Profeta (BPD) siempre hay gente realizando salutaciones. En ciertas horas del día es más fácil acercarse que en otras. Por ejemplo, después de las oraciones obligatorias cientos de personas van a saludar al amado Profeta (BPD) y uno puede tardar más de una hora en llegar hasta la tumba. De cualquier manera, las autoridades sauditas colocan guardias de seguridad delante de la reja que rodea la tumba, para que nadie se acerque a tocarla. Es muy difícil para mí describir ese momento. De pie frente a la mejor de las criaturas, el amado de Dios, Su Mensajero, quien nos trajo de Su Parte la sabiduría que guía nuestras vidas, la que hoy nos permite ser hombres dignos y felices. Cuando uno dirige su saludo al Profeta (BPD) y le dice “Aquí estoy, Profeta de la Misericordia. He venido de tan lejos a visitarte y saludarte. He recorrido un largo camino desde las tierra de la incredulidad hasta estar hoy aquí en esta tierra del Islam, en este lugar donde fundaste la primera comunidad musulmana, junto a miles y miles de musulmanes de todo el mundo, trayéndote el saludo de muchos musulmanes de mi tierra, quienes se esfuerzan por llevar adelante el Islam y padecen injusticias por ser musulmanes...” , entonces resulta muy difícil contener las lágrimas. Uno siente el deseo de permanecer horas allí de pie, saludando al Profeta (BPD) y contándole cada uno de los detalles de su vida, el bien que hizo, las dificultades que tuvo que afrontar, la ayuda que recibió de otros hermanos, etc. Pero la emoción es muy fuerte y la mayoría de las veces sólo se alcanza a decir : ¡ Allahumma salli ala Muhammad ua ali Muhammad ! 14 Salutación para el Profeta Muhammad (BPD) El siguiente es uno de los saludos que el peregrino puede ofrecer ante la tumba del Mensajero de Dios (BPD) : En el Nombre de Dios, El Compasivo, El Misericordioso. La Paz sea sobre el Mensajero de Dios, la Bendición sea sobre él y su familia. La Paz sea contigo, ¡ oh, el amado de Dios! La Paz sea contigo, ¡oh, el elegido de Dios ! La Paz sea contigo, ¡ oh, el fiel de Dios! Testifico que tú has dado el buen consejo a tu comunidad y has combatido en el camino de Dios, adorándolo hasta que te llegó la cierta (la muerte). Entonces, ¡ que Dios te recompense con la mejor recompensa que haya recibido Profeta alguno de parte de su comunidad! ¡Oh, Dios! Bendice a Muhammad y a la familia de Muhammad con la mejor Bendición que hayas otorgado a Abraham y a la familia de Abraham. Pues ciertamente Tú eres Loable, Glorioso. Sobre la excelencia de Bendecir al Profeta (BPD) : Vamos a transcribir algunos Hadices de “Yamiul Ajbar” sobre bendecir al Profeta (BPD) : 1.- Del Mensajero de Dios (BPD) quien dijo : "Para quien me bendice una vez, Dios le abre una puerta de la Paz." 2.- Del Mensajero de Dios (BPD) quien dijo "El más digno entre la gente ante mí el Día del Juicio será aquel que más me haya bendecido." 3.-Del Mensajero de Dios (BPD) quien dijo : "A quien me bendice una vez, los ángeles lo bendicen ; a quien los ángeles bendicen, Dios lo bendice ; y a quien Dios bendice, todo lo que está en los cielos y la tierra lo bendicen." 4.-Del Profeta (BPD) quien dijo : "Quien me bendice, no ingresará en el Fuego Infernal." 5.-Del Profeta (BPD) quien dijo : "La bendición a mí es una luz sobre el Sirat. Y quien posee una luz sobre el Sirat no es de la gente del Infierno". 6.- Del Imam Alí (P) quien dijo : "Bendecir al Profeta y a su familia (BPD) hace desaparecer los errores más que el agua al fuego. Decir 'La Paz sea sobre el Profeta y su familia' es mejor que liberar a los esclavos. Y el amor al Mensajero de Dios (BPD) es mejor que sacrificarse a uno mismo (o que aplicar la espada en el Camino de Dios)." 15 Allahumma salli ala Muhammad ua ali Muhammad. Dios nuestro : Bendice a Muhammad y a la familia de Muhammad. La oración comunitaria en Medina. Resulta difícil salir de la mezquita del Profeta (BPD). Uno desea quedarse allí durante todo el día. Uno pasa horas allí rezando, recitando el Corán, suplicando, pasando frente a la tumba del Profeta (BPD), etc. No se puede cansar con nada. Todo el ambiente es de devoción y espiritualidad sin límites. Hay cientos de personas y no se escucha ningún griterío, ningún bullicio. Sólo un suave murmullo de las voces de los creyentes en devoción. Siempre hay gente realizando actos de devoción, desde la mañana hasta la noche (por la noche la mezquita se cierra al público). Los rostros de aquellas personas son realmente hermosos, llenos de luz y piedad. Allí supe lo que eran “la frescura de los ojos” y “las huellas de la prosternación”. La mayoría de los ojos se encuentran bañados en lágrimas y las frentes de muchos musulmanes presentan marcas del tamaño de un puño o mayores, similares a una huella dejada por un casco de un caballo. Un momento muy especial es cuando se realizan las oraciones. Los horarios de los rezos están bien señalizados por todos lados, y todos los conocen perfectamente. Desde 15 o 20 minutos antes del “adhan” (llamado a la oración), la gente comienza a confluir en masa por todas las calles y callejones de aquella parte de la ciudad hacia la mezquita. Cuando se hace el llamado a la oración, los negocios cierran y la afluencia de la gente es aún mayor. Miles y miles de personas se apresuran en orden a asistir a la oración en la mezquita. Ahí se corporiza el dicho del Profeta (BPD) que dice : "Responder a la llamada del "muezín" (al que llama a la oración haciendo el “adhan”) es expiación para los pecados y caminar hacia la mezquita es la obediencia a Dios y la obediencia a Su Mensajero (BPD). Y quien obedece a Dios y a Su Mensajero (BPD), Dios hace que ingrese en el Paraíso junto con los veraces y los mártires, y en el Paraíso será compañero de David (P) y tendrá la recompensa de David (P)." (De “Yamiul Ajbar”) Resulta maravilloso ver como tanta gente se reúne cinco veces al día, rezan y luego se dispersan en un perfecto orden, sin incidentes ni altercados de ningún tipo. No puedo calcular con precisión la cantidad de gente que se congrega a rezar. Son entre 30 y 50 mil personas, quizás más. Rezar entre tal cantidad de musulmanes es algo maravilloso. Todos moviéndose al unísono, codo con codo, como un solo cuerpo, un sólido edificio de fe. Ahí se comprende cabalmente que la oración es el pilar del Islam. La mayoría de los reunidos, a pesar de encontrarse de viaje, no acortan sus oraciones ni allí ni en el Santuario de la Meca. Según la fatua de Ayatullah Sistani, 16 en ambos Santuarios el musulmán puede realizar sus oraciones completas si lo desea (“Leyes prácticas del Islam” en Reglas varias sobre la oración del viajero). Luego de la oración, una parte de los presentes comienza a irse. La mitad o más se quedan rezando y suplicando un rato más. La mayoría de las veces traen a un recién fallecido y se realiza allí la oración del difunto. Luego, un río humano se moviliza lentamente para saludar al Santo Profeta (BPD) antes de irse. Muchos se quedan en sus lugares y allí permanecerán hasta la próxima oración. Como ya dije, esto es algo muy fácil de hacer en ese ambiente de religiosidad. Lo más difícil es decidir cuando marcharse. El rezo en comunidad con miles y miles de hermanos musulmanes es una de las grandes bendiciones de este viaje. Disfruté mucho de estos momentos, en especial porque al vivir un tanto alejado de la comunidad musulmana en mi país, la mayoría de las veces rezo sólo. Y realmente la oración comunitaria es superior a la que uno realiza sólo en su casa. Los musulmanes que vivimos en países no islámicos debemos esforzarnos más por establecer las oraciones comunitarias. Debemos comprometernos más en este asunto, pues la oración comunitaria es una importante fuente de energía que vitaliza nuestra fe y fortalece los lazos de unidad y hermandad entre los musulmanes. La oración (especialmente la que se realiza en forma comunitaria) es el alimento de la religión y el pilar del Islam. Esta es una realidad que se comprende muy bien en Meca y Medina. ¡ Ojalá que todos los musulmanes puedan realizar este viaje y puedan rezar en comunidad con miles y miles de sus hermanos y hermanas en las mezquitas de Medina y La Meca , para disfrutar de esta Merced inolvidable y palpar así la fuerza de la oración colectiva ! Las virtudes de la oración. Dice un Hadiz del Profeta (BPD) : "Sabed que el ejemplo de esta religión (el Islam) es como un árbol firme : la fe es su raíz, el zakat es su rama, la oración es su agua (su alimento), el ayuno es su vena (el medio por donde se transporta el alimento), el buen carácter es su hoja, el trato (la relación o amistad) con los hermanos de la religión es su polen, el pudor es su fecundación (es decir, el medio que permite su propagación) y abstenerse de lo que Dios prohibió es su fruto...” (De “Yamiul Ajbar”) La oración es el alimento que nutre al Islam y sostiene la fe de los musulmanes. Dijo el Mensajero de Dios (BPD) en otra narración muy conocida : "La oración es el pilar de la religión." (De “Yamiul Ajbar”) Y dijo también (BPD): 17 "Para cada cosa hay un adorno, y el adorno del Islam es la oración.” (De “Yamiul Ajbar”) La oración islámica es distintiva de los musulmanes. Es uno de los rasgos que identifica al Islam mundialmente. Y es un orgullo y un honor para nosotros, los musulmanes, ser reconocidos por esta característica, lo cual resulta un testimonio de nuestra devoción y piedad. Dijo el Profeta Muhammad (BPD) : “Para cada cosa hay un pilar, y el pilar del creyente es la oración. Cada cosa tiene una luz, y la luz del corazón del creyente son las cinco oraciones... (De “Yamiul Ajbar”) Al hamdu lil Lah Rabbil alamin. El cementerio de Al Baqi. A la salida de la mezquita y en uno de sus laterales se encuentra el cementerio de Al Baqi, el cual alberga a innumerables personalidades de una altísima honra y jerarquía. Allí se encuentra enterrada Fátimah Zahra (P), la ilustre hija del Profeta (BPD), y cerca de su entrada, reposan los restos de cuatro Imames : Hasan Al Muytaba, Alí Zain Al Abidín, Muhammad Al Baquir y Ya’far As Sadiq (P). También se encuentran sepultadas las esposas del Profeta Muhammad (BPD), su hijo Ibrahim (quien falleciera en los primeros meses de vida) y otras ilustres figuras del Islam. El lugar lleva a meditar en la muerte y en cual es el destino final de las obras de este mundo. Sólo tierra alisada y algunas rocas desperdigadas, donde los pájaros comen las semillas que los visitantes les arrojan. La gente se pasea por las veredas que cruzan el terreno embargadas por esa profunda emoción que genera aquel ambiente sumamente triste. No hay lápidas, no existe nada que señale la identidad de los sepultados. Las autoridades sauditas establecieron estas normas para este lugar sagrado del Islam. Visitamos el cementerio por la mañana y recitamos allí una salutación para Fátimah (P) y para los Imames (P). Luego lo recorrimos con solemnidad. Por la tarde, después de visitar la tumba del Profeta (BPD), regresé a Al Baqi solo. Estuve allí un rato antes de la oración del ocaso. Por la noche, luego de cenar, salimos a caminar con el sheij y le pedí volver al cementerio. En esa hora las puertas se cierran y mucha gente (especialmente los visitantes shiitas) se sienta en la entrada, de cara a La Meca, a recitar súplicas y salutaciones, y a llorar en medio de las penumbras, pues el lugar no se encuentra iluminado. Se trata de una escena muy emotiva, con la fuerza del amor de los shiitas hacia la Gente de la Casa (P). Pude rezar allí dos rakats (como fue mi costumbre en este viaje : dos rakats por mí y dos rakats por mis hermanos de Latinoamérica, especialmente para aquellos que nunca 18 pudieron viajar allí) y sentarme un momento en la oscuridad a brindarle allí mi humilde homenaje a todas aquellas ilustres personalidades que allí se encontraban. Lo recuerdo como uno de los momentos más especiales de aquel viaje, el primero de varios momentos cumbres cuyo sabor nunca abandonará mi corazón. ¡La Paz de Dios sea sobre vosotros, nobles de la Casa del Profeta (BPD)! Salutación a Fatimah Az-Zahra (P) ¡La Paz sea contigo, oh hija del Mensajero de Dios! ¡La paz sea contigo, oh, hija del poseedor del mérito sobresaliente por sobre todos los Profetas Mensajeros y los ángeles! ¡La Paz sea sobre ti, oh Señora de la mujeres de los Mundos! ¡La Paz sea sobre ti, oh, esposa del Viceregente ( Uali ) de Dios! ¡La Paz sea sobre ti , oh, madre de Hasan y Husein, los Señores de los jóvenes del Paraíso! La Paz sea sobre ti, Veracísima y Mártir La Paz sea contigo, que estabas complacida con el Decreto de Dios (sobre ti) y Dios estaba complacido contigo La Paz sea sobre ti, poseedora del mérito sobresaliente por sobre los demás, y los purificados. ¡La Paz sea sobre ti, que eres santa y te has protegido contra los pecados! La Paz sea sobre ti, poseedora de conocimiento y autoridad sobre las Tradiciones (Sunnah) del Profeta. La Paz sea sobre ti, que fuiste sometida a la ira y la opresión La Paz, oh, Fátima, hija del Mensajero de Dios, y la Misericordia y la Bendición de Dios, sean sobre ti. Las reuniones con los sheijes. Tanto en Medina como el Meca, nos reuníamos en el hotel con el grupo de sheijes para las comidas. Aquellos eran momentos muy amenos y cordiales donde nos sentíamos entre amigos. Esta misma definición la dio en una oportunidad el Saied Shahrestani, diciendo “Siento que estoy entre amigos y por eso dejo la formalidad a un lado”. Saied Shahrestani es el yerno de Ayatullah Sistani y es quien dirige la Fundación en Qom. Es un sheij joven, muy amable, de una personalidad muy abierta y gentil. El sheij Moallemi me traducía algunos tramos de las conversaciones que llevaban, para que al menos pudiera tener una idea del tema sobre el cual estaban hablando. En algunas ocasiones se mencionaban cuestiones referidas al DIN o las prácticas, en otras de asuntos sociales. Todos estaban alegres de conocer a un musulmán que venía de tan lejos, por lo que siempre recibía de ellos un trato preferencial. Tengo un grato recuerdo de todos ellos, aunque no pude tener con ninguno una conversación debido al idioma, lo cual lamento mucho. 19 Un recorrido alrededor de Medina. La mañana del tercer día tomamos un auto y salimos a realizar un pequeño recorrido, habitual para todos los que viajan a Medina. Se visitan cuatro lugares históricos y allí se realizan rezos y súplicas. El primero de ellos es la mezquita de Quba, la primera en ser construida por el Profeta (BPD) a su arribo a Medina. Es una mezquita espaciosa al compararla con otras mezquitas locales, aunque pequeña en comparación con la monumental mezquita del Profeta (BPD). Se encuentra rodeada de árboles que le dan un bello aspecto natural. La segunda parada se realizó en la mezquita conocida como ‘de las dos qiblas’ (“Dhul Qiblatain”), donde en medio de la oración se realizó el cambio de orientación para el rezo de los musulmanes, de Jerusalem hacia La Meca. Fue ese un momento muy importante en la historia del Islam, pues los musulmanes adquiríamos una identidad propia y característica. El Corán distingue ese momento destacando también la prueba que significó para los musulmanes. El tercer lugar histórico visitado fue el valle de Uhud, donde se desarrolló la segunda gran batalla del Islam. Allí se encuentra un lote cercado donde se encuentran enterrados los mártires de Uhud, entre ellos Hamzah (RA), el tío del Profeta y el gran mártir de aquella primera época del Islam. Hamzah (RA) murió en aquella batalla asesinado con un tiro de lanza por la espalda ejecutado por un esclavo a quien Hind, esposa de Abu Sufián y una de las principales instigadoras de la guerra contra los musulmanes, le ofreciera la libertad y un pago por matar a aquella noble personalidad de la Familia del Profeta (BPD). En aquel sitio realizamos una salutación y luego subimos a la colina donde el Profeta (BPD) ubicó a sus arqueros, quienes cambiaron el curso de los acontecimientos de aquella batalla con su desobediencia a sus órdenes. Aquellos hombres debían impedir el ingreso de una columna enemiga que amenazaba con un ataque a los musulmanes por la retaguardia. Sin embargo, en un momento en que el triunfo parecía concretarse para los musulmanes, aquellos arqueros abandonaron su puesto y esto suscitó un duro revés para el Islam. En ese lugar nos comprometimos a no desobedecer nunca al Mensajero de Dios (BPD). ¡Dios nos facilite este camino! Finalmente, el cuarto paraje histórico fue el punto donde tuvo lugar la batalla de Jandaq, donde para enfrentar una coalición de los enemigos del Islam, los musulmanes cavaron un foso que impidió el acceso del ejército agresor a la ciudad. En ese sitio existen varias pequeñas mezquitas del tamaño de una habitación, a la intemperie, donde se reza. Una de esas mezquitas es por Salmán Al Farsi (RA), quien propuso la idea de cavar aquella fosa. Otra mezquita es de Alí ibn Abi Talib (P), quien desarrolló un papel muy importante en aquella batalla. También hay una mezquita de Fátimah Zahra (P), la cual se encontraba cerrada, y otras por otros compañeros del Profeta (BPD). 20 En todos estos lugares uno realiza oraciones y súplicas, y como sucede en la mezquita del Profeta (BPD), uno no se cansa nunca de esto, sino todo lo contrario: resulta difícil dejar estos lugares, a pesar de tratarse de ambientes más humildes y sencillos que la extraordinaria mezquita del Profeta (BPD). Sin embargo, cada uno de ellos está teñido de espiritualidad y religiosidad de un modo particular. Cada uno tiene una belleza propia que lo caracteriza. Cada uno preserva una parte de la bendita historia de los orígenes del Islam, una historia que los musulmanes Esta es otra de las múltiples Bendiciones que tiene este viaje. Al hamdu lil Lah, Rabbil alamín. La confianza en el creyente. Una cosa que suele comentarse en occidente sobre el mundo islámico es que llega la hora de la oración y la gente deja sus cosas en el lugar y va a rezar con total confianza, sin que a nadie se le ocurra robar o siquiera tocar nada. Es exactamente como lo describen. En primer lugar, la mercadería en los negocios está muy al alcance de la mano y nadie roba. En la hora del rezo, los negocios bajan las cortinas, pero dejan colgadas muchas cosas en sus exteriores. La gente que vende en la vereda, cubre sus mercaderías con un manto y se van a rezar a la mezquita. La gente que ha comprado cosas, deja sus bolsos con sus zapatos fuera de la mezquita y entra a rezar. Una mañana pasé por un negocio camino a la mezquita y pregunté por el precio de una masbajah. Pensaba pasar más tarde a comprarla, ya que no llevaba dinero conmigo en ese momento. El vendedor me preguntó de dónde era yo, y cuando le dije que era argentino que estaba haciendo la Umrah, me entregó fiada aquella masbajah diciéndome que después pasara a pagarla. Le comenté aquella actitud al sheij, quien me dijo “Ellos saben que usted no se va de Medina sin pagarle la deuda. Aquí los comerciantes confían en los peregrinos y muchas veces les entregan mercadería fiado.” Un gesto que marca una diferencia fundamental con occidente, pues es una señal de fe. La despedida de Medina. Luego de visitar en reiteradas ocasiones la tumba del Profeta (BPD) y Al Baqi, de rezar en comunidad varias veces, de realizar innumerables súplicas recordando a todos y cada uno de los musulmanes que conocía y de manera general a los que no conocía, era la hora de despedirme del Profeta (BPD) y de los mártires de Al Baqi. El sheij se había despedido a la mañana, pero yo quise dejar esto para último momento. Me costaba mucho despedirme, separarme de aquel lugar bendito del cual me había enamorado en esos pocos días. El sheij me ayudó en aquello con 21 estas palabras : “Vaya ante la tumba del Profeta (BPD) y dígale : ‘Inshaa Allah vuelvo el año que viene’.” Fui primero al cementerio de Al Baqi y me despedí de mis amados de Ahlul Bait (P). Luego fui ante la tumba del Profeta (BPD) y le hablé como no lo había hecho en otras ocasiones, como si estuviera en intimidad con él (BPD), sin prestarle atención a las decenas de creyentes que allí le hablaban. Le hablé de los musulmanes de la Argentina, de nuestros esfuerzos por llevar adelante el Islam, de nuestros problemas por vivir en medio de una sociedad hostil. Le mencioné a quienes me habían ayudado y quienes le mandaban sus saludos, y también a los que no conocía. También le mencioné algunos de los problemas que había tenido en la vida, en especial aquellos que surgieron por mi islamización y por trabajar en el camino de Dios. Le pedí mucho a Dios que lo bendijera a él y a su familia (BPD) y finalmente me despedí aunque no quería hacerlo. “Hasta pronto, Mensajero de Dios (BPD)”. ********** 22 Rumbo a la Casa de Dios. Un par de días antes ya habíamos comprado mi “ihram” para visitar la Casa de Dios. Y ya era la hora de vestirlo. Para viajar más cómodos, decidimos empacar todas nuestras ropas y colocarnos el “ihram” en el mismo hotel de Medina. De ahí nos trasladaríamos al “miqat” , la estación donde se realiza la consagración, donde nos bañaríamos y haríamos la intención de consagrarnos como peregrinos. Pues la consagración no puede realizarse si no es en el punto indicado. El “ihram” es una vestimenta sumamente sencilla y cómoda, con la cual uno se siente muy a gusto. Nos trasladamos al “miqat” cercano a Medina en micro. El lugar se llama “Dhul Halifa” y la mezquita que allí se encuentra se denomina “Masyidush Shayarat”. Decenas de micros habían parado allí a la hora del ocaso. La mayoría se consagra después del ocaso y viaja de noche, pues en caso de hacerlo de día hay que usar un vehículo sin techo. Allí me hice el baño ritual (“gusl”) y me puse las telas del “ihram” que sirvieron para secarme. Era justo la hora del salat del “magreb”, por lo cual rezamos en comunidad con más de cien personas que allí había. Luego hice dos rakats meritorios e hicimos la intención de colocarnos el “ihram” y consagrarnos. Si bien habíamos ido hasta allí con el “ihram” puesto, la intención de consagrarse hay que realizarla en el “Miqat”, por lo que hasta ese momento no estábamos consagrados. “Tenga cuidado, sheij”, le dije al sheij Muallemi Zadeh inmediatamente después de consagrarnos, señalándole un pequeño insecto que caminaba junto a su pie para que no lo pisara. “Debemos estar atentos”, me dijo. “Ahora estamos consagrados.” El “ihram” resultó más pesado desde ese momento y el recuerdo de Dios fue más intenso. El “ihram” : la vestimenta consagratoria. Cuando el musulmán peregrino se acerca a visitar la Casa de Dios en la Meca, en ritual de “Hayy” ( Peregrinación mayor ) o “Umrah” (Peregrinación menor), respondiendo a la orden de Dios y a la convocatoria de Abraham (P), debe consagrarse como peregrino y vestir lo que se llama “ihram”. El “ihram” es una vestimenta sumamente sencilla y cómoda. Consta de dos pedazos grandes de tela de toalla sin costuras, de color blanco, que se colocan uno alrededor de la cintura (sujetándola con alfileres de gancho o con un cinturón especial) y el otro sobre los hombros. El peregrino consagrado viste únicamente esas dos telas durante sus rituales, las cuales son sumamente cómodas, confortables y agradables. Ellas inducen en el hombre un estado especial de humildad y sencillez. Al colocarse el “ihram”, uno se siente verdaderamente pequeño, insignificante, sinceramente humilde. Se está cargando con un estado de consagración a Dios, estado que resulta sumamente pesado por la grandeza y responsabilidad que implica, e induce a esta humildad mencionada. Para dar un ejemplo, cuando una persona común se viste y arregla para visitar a una 23 personalidad muy importante (supongamos, el presidente de una nación), toma conciencia de que se trata de un evento muy especial y esto le produce un nerviosismo natural. ¡Cuánto más cuando uno va a presentarse ante la Casa de Dios, el lugar de mayor gloria y honor de todo el planeta, ante la Presencia Majestuosa del Señor del Universo! La visita a cualquier gran personalidad del mundo es mucho más fácil de sobrellevar que esta visita a la Casa de Dios, la cual Dios facilita al creyente con el “ihram”. Gracias a esta vestimenta, todos los hombres se acercan como iguales a la Casa de Dios. Ya no hay “sheij” ni “saied”, ya no hay árabe, ni iraní, ni paquistaní ni nada más. No hay más distinción entre orientales y occidentales. Todos se acercan atraídos por la luz que emana de ese árbol bendito, “ni oriental ni occidental”. Tampoco hay ricos ni pobres. Todos visten el mismo ropaje y son iguales ante Dios, sin distinción de raza o nacionalidad, cargos o jerarquías sociales, culturales o económicas. Todos son peregrinos que buscan acercarse a El y son recibidos como iguales. La fe y las intenciones que cada corazón guarda sólo las percibe y distingue Dios. Esta vestimenta simple y humilde facilita al hombre común acercarse a la Casa de Dios, la Casa cuyas puertas está abiertas de par en par para recibir con amabilidad y agrado a sus huéspedes. Si cada ser humano debiera vestirse acorde a esta ocasión tan especial y majestuosa, la inmensa mayoría de creyentes no podría ir debido a sus estados de pobreza y bajos recursos. Dios unifica la vestimenta de sus huéspedes en estas dos telas del “ihram”. Ante Él, no hay grados sociales ni estatus económicos. Él recibe a todos por igual y como iguales. Luego, a cada uno recompensará acorde a su sinceridad y grado de fe, que sólo Él conoce. El “ihram” coloca a todos los peregrinos en pie de igualdad. Esto facilita las cosas para el hombre (sobre todo para el hombre común, aquel que Dios más ama y aprecia). Por otro lado, el “ihram” despierta en el hombre la conciencia de la consagración y le hace palpar muy de cerca la realidad de dicho estado. Toda soberbia y vanidad se aleja del corazón del “muhrim” (el consagrado, aquel que viste el “ihram” y se consagra a tal estado), a la vez que todo pensamiento mundano. El se encuentra listo para presentarse ante la Casa de Dios tal como es en realidad, sólo cubierto por dos simples pedazos de tela blanca. No lleva cargos ni distintivos que ostentar. Sólo su corazón y su interior al descubierto ante su Señor Poderoso y Majestuoso. Tal es la conducta que Dios Altísimo establece para los visitantes a Su Casa. Una conducta que cualquier corazón reconoce como auténtica, sagrada, de origen Divino, y acepta de buena gana, sobre todo los corazones de los humildes, de los sinceros. Dice el Sagrado Corán : “¿Quién sino el necio de espíritu puede sentir aversión a la religión de Abraham? Le elegimos en la vida de acá y en la otra vida es, ciertamente, de los justos.” (2:130) 24 Y ciertamente los rituales de Peregrinación son parte de la religión de Abraham (P). Dice el Corán : “Luego, te hemos revelado: ‘Sigue la religión de Abraham, que fue monoteísta y no asociador’» (16:123) Por otra parte, uno medita en el hecho de que posiblemente, si Dios quiere, aquellas telas le servirán de mortaja, como vestimenta para ingresar a la tumba, y se siente despojado y desapegado de todo lo mundanal. Así vive el “muhrim” este estado : como quien acaba de morir, abandona el mundo y se dirige marchando a la Presencia de Dios para ser juzgado. Sin duda alguna que se trata de un estado que conlleva al arrepentimiento, al pedido de Indulgencia, a percibir con temor la Grandeza del Soberano Majestuoso del Día del Juicio, de Quien es Señor de los Universos. Y sin dudas que es un estado que purifica el alma del creyente, borrando todo lo anterior para otorgarle una vida nueva, una hoja en blanco sobre la cual va a garabatear su futuro, trazando groseras líneas que seguramente señalarán nuevos errores en su conducta. Uno deja el “ihram” para nacer de nuevo, llorando como lo hace un recién nacido, abriendo sus ojos a un mundo nuevo. Y si bien cometerá nuevos errores, su estado después del “ihram” es diferente. El recuerdo de Dios. “¡ Labbaik, Allahumma, labbaik ! La sharika laka, labbaik. Innal hamdu ual ni’mata laka ual mulk. La sharika laka, labbaik.” Aquel “dhikr” era repetidos por todos durante gran parte del camino a la Meca. Es el estandarte de los peregrinos, la voz que los distingue y caracteriza. “¡Aquí estoy, Dios mío, aquí estoy! No hay asociados a Ti, aquí estoy. Ciertamente la alabanza y las Mercedes Te pertenecen, al igual que el Reino. No hay asociados a Ti.¡Aquí estoy!” Es la respuesta al llamado de Dios a los creyentes para que visiten Su Casa, una respuesta que revela la naturaleza de la fe de los musulmanes, una fe monoteísta pura y sincera. El tiempo ha pasado, los siglos han transcurrido, las circunstancias han cambiado, el rumbo del pensamiento de los pueblos ha sufrido modificaciones, pero sin embargo no se ha alterado la respuesta de los musulmanes al llamado de Dios. “¡Aquí estoy, Dios mío, aquí estoy!” La sumisión y la entrega a Dios Unico es la característica del corazón creyente del musulmán y se resumen en estas palabras simples pero muy profundas. Ellas son la clave del Islam. El camino hacia la Meca le permite al creyente sumergirse en muchos pensamientos para los cuales el “dhikr” resulta un vehículo efectivo. Y sumido en 25 estas reflexiones, fuimos atravesando el desierto en medio de la noche hacia el punto culminante de nuestro viaje : la Casa de Dios. Ante la Kaaba. Finalmente llegamos a la Meca. Dejamos nuestras cosas en el hotel, nos hicimos la ablución y nos dirigimos sin más demoras hacia la Kaaba, anhelando alcanzar el objetivo de nuestro viaje. El hotel se hallaba un poco retirado de la mezquita, a unas 12 cuadras, y tenía un servicio de micros que llevaba a sus inquilinos hasta la Kaaba. Como no estábamos orientados, usamos ese servicio, aunque en los siguientes días yo prefería ir caminando. El micro nos dejó en un estacionamiento subterráneo. Lo primero que divisé fue la luz brillando en el cielo nocturno. Luego vi bandadas de animales alados que circundaban el cielo como si fuesen aves. Mi primer pensamiento fue que efectivamente se trataban de aves, pero luego el sheij me corrigió recordándome que estaba muy avanzada la noche como para haber aves en el cielo. Debían ser murciélagos o grandes langostas. Después se empezaron a distinguir los enormes y gruesos minaretes y finalmente la edificación que rodea a la Kaaba. La arquitectura, como en la mezquita del Profeta (BPD) en Medina, es espléndida, magnífica, extraordinaria, deslumbrante. Con paredes muy gruesas y altas, la mezquita parece descansar en una especie de valle urbano, rodeada en parte por una montaña de cemento. Al ingresar, a través de las columnas se comenzó a divisar la Kaaba rodeada permanentemente de devotos que la circundan. En el mismo lugar donde me encontraba, me prosterné y agradecí a Dios por aquel momento extraordinario. El patio central de la mezquita se encuentra a la intemperie. Por la noche se encuentra tan iluminado que la luz es mucho más brillante que durante el día. Con los pisos de mármol blanco o color crema, el manto de la Kaaba negro brillante y los peregrinos dando vueltas, casi todos con ropas blancas o negras, el escenario es una impactante imagen en blanco y negro, casi sin color, radiante de frescura. Un lugar sumamente agradable en medio de un ambiente muy cálido, como un oasis en medio del desierto. Eran las 2 de la mañana y había más de doscientas personas realizando el “tauaf”, la circunvalación a la Kaaba, además de los cientos que se encontraban en el resto de la mezquita en diversas actividades de devoción. Eran pocas, bastante pocas personas en comparación con lo que pude ver en otros momentos. Y no alcanzo a imaginarme cómo debe ser en el tiempo del “Hayy”, cuando se reúnen más de dos millones de personas allí. Hicimos las siete vueltas con súplicas e invocaciones. Uno tiene bastante tiempo para realizar súplicas de distintas clases entre las vueltas. “El tauaf es como el salat”, me dijo el sheij. “Cuando uno está haciendo tauaf es como si estuviera haciendo salat”. 26 Luego rezamos detrás del “maqam Ibrahim” y fuimos a ver las huellas de Abraham (P) conservadas en la roca. Son dos huellas profundas y grandes de distintos tamaños (una es un poco mayor que la otra), conservadas allí desde hace miles de años. Después realizamos la corrida entre Safa y Marua en conmemoración de Agar. El número de gente iba en aumento, pues en los pasillos donde se realizaba la corrida había más de mil personas. Aquel es el lugar más fresco de toda la mezquita. Finalmente, en el montículo de Marua nos cortamos las uñas y algunos cabellos de la barba. Luego fuimos a beber agua del pozo de Zam zam y fuimos a realizar el tauaf de las mujeres y el salat detrás del maqam Ibrahim correspondiente. Así finalizamos los rituales de Umrah Mufradat. Nos acercamos a la Kaaba para rezar cerca de su puerta y en el lecho de Ismael (“Yire Ismail”), donde hay una pequeña pared que separa a los que allí rezan de los que circunvalan la Kaaba. Allí rezamos muy cerca de la Casa de Dios, a escasos centímetros de la misma. Luego pude acercarme a tocar y besar el manto que cubre la Kaaba, y agradecer a Dios por permitirme estar allí. Uno tiene miles, millones de cosas para decir en un momento como ese. Pero se queda mudo, embargado por la emoción y sólo atina a agradecer a Dios y suplicar Su Perdón. Allí concluyó mi primera visita a la Casa de Dios. En los siguientes días volvería a ir por lo menos dos veces al día a repetir el “tauaf”, a rezar junto a la Kaaba, a recitar el Corán de cara a la Casa de Dios. Los actos de devoción, al igual que en Medina, aquí resultan muy livianos y fáciles de realizar, al hamdu lil Lah, Rabbil alamín. Una visión personal de los ritos. Vamos a brindar a continuación una descripción de los distintos ritos desde nuestra óptica personal, basados en la experiencia de este viaje, comenzando por el “Tauaf”. El “Tauaf” es el movimiento de circunvalación alrededor de la Kaaba, el Sagrado Templo ubicado en la Meca, que los musulmanes que visitan la Casa de Dios realizan. Este ritual es obligatorio para quienes realizan el “Hayy” (Peregrinación mayor, la cual tiene lugar en el mes de Dhul Hiyyat, en determinados días específicos) o la “Umrah” (Peregrinación menor, realizada en otros días del año), quienes lo deben realizar determinadas veces según cada caso (lo cual se detalla en los textos de Leyes prácticas). Aparte de esto, ya fuera del estado de consagración de cada peregrino, todo aquel que visita la Kaaba puede (y en general lo hace con gusto) realizar uno o varios “tauaf” meritorios, tal como cualquiera puede realizar una o varias oraciones meritorias fuera del “salat” obligatorio. 27 Como consecuencia de esto, en forma permanente de día y de noche hay gente realizando el “tauaf” desde hace unos 1.400 años. Es la muestra más cabal de fe y piedad que los musulmanes exhibimos a la vista del mundo entero., una muestra inigualable y majestuosa. Miles y miles de creyentes cada día recorren este trayecto alrededor de la Casa de Dios, el Templo más sagrado de todo el planeta sin duda alguna, movidos únicamente por el amor a Dios. Ningún otro Templo en todo el mundo puede presentar semejante muestra de devoción de parte de sus fieles. Sólo en la Kaaba se da este fenómeno. Sólo los musulmanes pueden exhibir semejante grado de fe y amor, siendo el escenario de la Kaaba una representación de lo que sucede a nivel mundial : no existe ninguna hora en la cual no haya en algún sitio del mundo musulmanes rezando, adorando a Dios de cara a la Meca, orientados hacia la Casa de Dios en devoción. Hay cinco horarios de oraciones que se alternan durante el día. Cuando culmina uno de los horarios en un lugar, empieza en otro, y así se van sucediendo los horarios en los distintos puntos del planeta. El “Tauaf”: es igual : cuando un musulmán lo concluye, otro lo empieza y así hay en forma permanente creyentes dando esta muestra de amor a Dios, devoción y piedad. Según las palabras de Alí ibn Abi Talib (P) : “Y os obligó... la Peregrinación a Su Casa Sagrada y la estableció, Glorificado y Exaltado sea, como un signo para el Islam y como un refugio para quienes Lo buscan...” (Nahyul Balagha, pag. 40) Y el “Tauaf” es el signo de dicha Peregrinación. Y según las palabras de nuestra señora Fátima Zahra (P), la hija del Mensajero de Dios (BPD): “...Dios estableció la Peregrinación como una construcción para la religión...” (Al Bahar, tomo VIII, pag. 110) Y el “Tauaf” es el eje de la Peregrinación y su base. Y el Imam Ya’far As Sadiq (P), tataranieto del Profeta (BPD) y fundador de la Escuela Shiita, declaró : “Mientras se mantenga en pie la Kaaba, se mantendrá en pie la religión.” ( Al Uasail, tomo VIII, pag. 14) La permanencia y continuidad de la religión está asegurada gracias al “Tauaf”. El “Tauaf” es el objetivo de los peregrinos de todas partes del mundo quienes se acercan a la Casa de Dios cargando sus faltas con arrepentimiento, humildad, sinceridad, y giran entorno a ella suplicando, alabando, agradeciendo, para volver a sus hogares purificados, renovados, revitalizados, con una fe más fuerte y firme. Ellos transmiten a sus hermanos sus experiencias para alentarlos en el camino de la fe, reforzando los cimientos de la religión. El Templo de la Kaaba en la Meca es una ventaja de los musulmanes con la cual superan a otras religiones. La santidad de dicho lugar es indescriptible. Cualquier intento por detallarla en palabras fracasa. Sólo podemos ofrecer un panorama mínimo que permita tener cierta noción de esta maravilla de la religión islámica y que incremente en el corazón de los musulmanes sus anhelos por viajar a la Casa de Dios. Como detallamos antes, el peregrino ingresa a la santa ciudad de la Meca consagrado para visitar la Casa de Dios, vistiendo su “ihram” (vestimenta 28 consagratoria que consta de dos pedazos de tela blanca de toalla sin costuras, las que se colocan una alrededor de la cintura y otra sobre los hombros). Viene realizando el “dhikr” (evocación) de quien se acerca a la Kaaba. “¡ Labbaik, Allahumma, labbaik ! La sharika laka, labbaik. Innal hamdu ual ni’mata laka ual mulk. La sharika laka, labbaik.” Este “dhikr” es el estandarte de los peregrinos, la voz que los distingue y caracteriza. “Aquí estoy, Dios mío, aquí estoy ! No hay asociados a Ti, aquí estoy. Ciertamente la alabanza y las Mercedes Te pertenecen, al igual que el Reino. No hay asociados a Ti.¡ Aquí estoy !” Con estas palabras en su boca y en su corazón, declarando la Unidad de Dios y respondiendo dirigentemente a Su convocatoria, el peregrino traspasa los umbrales de la extraordinaria edificación que rodea el patio donde se encuentra la majestuosa Kaaba. Desde lo lejos, entre las columnas internas de aquella espléndida construcción, visualiza el negro brillante del manto que la cubre y el vigoroso movimiento del “Tauaf”. La reacción espontánea de quien se acerca por primera vez cargando el peso del “ihram” con humildad es la de prosternarse glorificando a Dios y agradeciéndole el indescriptible honor de permitirle a su siervo visitar Su Casa. Ya en el patio que alberga la Kaaba, a la intemperie, se aprecia mejor su magnificencia que opaca y empequeñece toda la palaciega arquitectura que la rodea. Los ojos que se posan en la Casa de Dios ya no se obnubilan con ninguna otra edificación que puedan realizar los hombres, al punto que la gente simple, muchas veces provenientes de lugares humildes (como mi caso), se sientan bajo aquellas lujosas estructuras con naturalidad, como si estuvieran en sus propias casas. Rodeando el Templo Santo, cientos de creyentes se encuentran rezando, suplicando, leyendo el Corán, recordando a Dios. En el centro del patio, la esplendorosa Kaaba y los creyentes en el “Tauaf”. En una de las esquinas de la Kaaba se encuentra la famosa Piedra Negra, aquella con la cual nuestro padre Adán (P) levantara el primer lugar de adoración a Dios en el mundo. Una línea en el piso cruza el patio en diagonal hasta aquella esquina, señalando el lugar donde se debe iniciar el “Tauaf”. Los peregrinos se paran allí y expresan sus intenciones de realizar el “Tauaf” de Umrah o Hayy (según el caso) para agradar, complacer o acercarse a Dios con sinceridad, puramente entregados a Él, sin otras intenciones que esas. Realizan el “Takbir” diciendo “Allahu Akbar” (Dios es el más Grande) y comienzan el “Tauaf”, incorporándose a aquel movimiento revitalizador de la fe. Se camina en el sentido contrario a las agujas del reloj, con la Kaaba siempre a la izquierda. El primer tramo del recorrido es algo lento. La gente se ha agolpado sobre la línea de inicio para expresar su intención y está comenzando a marchar. Lo primero que se visualiza después de la esquina con la Piedra Negra es la Puerta 29 de la Kaaba sobre la cual el manto se encuentra descorrido permitiendo que se vea parte de su belleza. El umbral de la Puerta está ubicado muy alto, a unos dos metros de altura. Los creyentes que pueden acercarse a él, se aferran al mismo y suplican llorando con sus rostros contra la Kaaba. Sobre el siguiente tramo de la pared siempre hay algunos creyentes rezando, pocos pues el lugar es muy reducido. Allí se reza entre la pared de la Kaaba y la gente haciendo el “Tauaf”, lo cual no siempre es posible por falta de espacio. Frente a ese lugar, a la derecha de quienes marchan en el “Tauaf”, el “maqam Ibrahim” : la estructura que guarda la roca donde se encuentran las huellas del Profeta Abraham (P), huellas que quedaron allí marcadas mientras él edificaba el Templo de la Kaaba junto con su hijo Ismael (P). Detrás de dicha estructura aquellos que concluyen las siete vueltas del “Tauaf” van a realizar dos ciclos de oración en forma obligatoria. La siguiente pared de la Kaaba, ubicada entre la segunda y tercera esquina, se encuentra abrazada por una construcción semicircular que deja un espacio entre ella y la pared donde los peregrinos realizan oraciones meritorias junto a la Kaaba sin preocuparse por quienes realizan el “Tauaf”, los que marchan por afuera de dicha construcción. Ese lugar especial para rezar se denomina “Lecho de Ismael (P)”. Allí siempre hay creyentes rezando o abrazados al manto de la Kaaba llorando. La marcha del “Tauaf” se acelera en aquel tramo y en el siguiente. Sobre la tercera pared de la Kaaba los creyentes se apoyan contra el manto, pero en dicho lugar no se detienen a rezar, lo cual deja el camino más abierto para el “Tauaf”. En la cuarta esquina, el manto deja al descubierto una parte del muro al cual muchos de los que ya realizaron el “Tauaf” se acercan a tocar. Sobre una de esas paredes se encuentra la grieta por la cual ingresó la madre de Alí ibn Abi Talib (P) para darlo a luz en el interior del Templo, pues los dolores y contracciones del parto le sobrevinieron cuando ella se hallaba circunvalando la Casa de Dios. Algunos de quienes realizan el “Tauaf” en dicho punto hacen un “Takbir” adicional (meritorio). Al acercarse al último tramo de la vuelta, la marcha aminora y se enlentece. Muchos se detienen sobre la línea que marca el inicio del recorrido y prolongan su “Takbir” con súplicas y alabanzas. Contra la Kaaba, otros que no se encuentran en el “Tauaf” se amontonan para besar la Piedra Negra. Me preguntaron si los que marchan en el “Tauaf” tocan al pasar la Piedra Negra contando las vueltas. No : esto es imposible. Para tocar o besar la Piedra Negra hay que realizar varios minutos de cola e introducirse en una marea humana entre fuertes empujones. El “Tauaf” son siete vueltas alrededor de la Kaaba. Hay que contarlas con mucho cuidado y atención, pues es muy fácil equivocarse o perder la cuenta en medio de la emoción que a uno lo embarga al realizar aquel recorrido sagrado. En el trayecto uno realiza interminables súplicas con las que repasa toda su vida, sus acciones, sus parientes y amigos, sus hermanos en la fe, sus maestros, etc. Del corazón del peregrino que realiza el “Tauaf” emanan los mejores deseos hacia los demás musulmanes : hacia el Profeta (BPD) y su familia, hacia los maestros de la religión, 30 hacia los que los antecedieron en este camino, hacia quienes lo acompañan en el Islam, hacia aquellos que vendrán en el futuro, hacia los millones de musulmanes que él no conoce pero que siente como cercanos, compartiendo con ellos el amor a Dios, el amor al Profeta (BPD), el amor a la Kaaba. El remolino del “Tauaf” sumerge al corazón del creyente en la realidad de la unión de la “ummah” y lo convierte en un cuerpo único con todos sus demás hermanos. Si llegó ahí con sinceridad, el creyente durante el “Tauaf” se encuentra en el círculo perfecto del amor, el cual crece con cada vuelta. Y sale de ahí a transmitir ese amor al resto de sus hermanos. Al concluir la séptima vuelta, se debe realizar dos ciclos de oración (dos “rakats”) detrás del “maqam Ibrahim”. Luego, si se están realizando los rituales de Hayy o Umrah, se deberá realizar la corrida entre Safa y Marua. Pero si uno estaba haciendo un “Tauaf” meritorio, uno es libre para realizar otro “Tauaf” o acercarse más a la Kaaba para hacer una vuelta más íntima, entre el Templo y la gente que realiza el “Tauaf” (lo cual es factible cuando se realiza la Umrah y sumamente difícil durante el Hayy por la gran cantidad de peregrinos que colman por completo las instalaciones). Se va a besar la Piedra Negra (lo cual es como besar la Misma Mano de Dios, según las palabras del Imam Zain al Abidin, bisnieto del Profeta –BPD). Luego se reza frente a la Puerta de la Kaaba, donde cuando uno se prosterna queda a escasos centímetros de la Casa de Dios. Después se reza en el “Lecho de Ismael (P)”. Finalmente se puede abrazar y besar el glorioso manto que cubre la Kaaba, manto de una tela muy gruesa, color negro brillante, con caligrafías bordadas en oro y un dulce aroma a almizcle que no empalaga ni pasa desapercibido. ¿Qué se siente en esa circunstancia? Es muy especial y muy intenso, tanto como para librar al alma de todas las faltas anteriores y llevarla a un nuevo estado de existencia con un grado de pureza no experimentado antes. Es como pisar uno de los Jardines de Paraíso. ¡Muy duro ha de ser el corazón de quien pisa uno de los Jardines del Paraíso y permanece igual que antes! Esto es realmente imposible para quien se encaminó hacia la Meca con sinceridad y buena intención, con el único deseo de acercarse a Dios y buscar Su Complacencia. A tal persona, la Kaaba le marca a fuego el corazón al instante en que la visualiza con una marca indeleble. Y ya no es posible abandonar tal estado para quien ingresa en él. Y no hay Fuerza ni Poder sino en Dios Altísimo. Que las Bendiciones y la Paz de Dios sean con nuestro querido Profeta Muhammad (BPD) y con su familia purificada. Las reuniones en la Meca. Al igual que en Medina, las reuniones para las comidas en el hotel de la Meca eran amenas y muy agradables. Yo estoy con todos muy agradecido por el trato cordial que me dispensaron. 31 En Meca se sumaron al grupo algunas personas que no estuvieron con nosotros en Medina. Uno de ellos, de nombre Muhammad Muntazar, era un poeta y en más de una ocasión recitó algunas de sus poesías. Lo hacía de un modo particular, muy bello, atrapando la atención de toda la audiencia. Yo le pedí que nos diera una copia de uno de sus poemas cuya recitación me había parecido hermosa, para traducirlo al castellano, a lo cual él accedió gentilmente. He aquí el poema : La Casa del Amigo ¡ Oh, Dios ! De ninguna manera me voy de Tu Casa. ¿ Qué puedes hacer con alguien que está enamorado de Ti? No tengo ningún hogar excepto Tu Casa. No tengo ninguna relación con la gente del mundo. El día que me separé de todo, vine aquí y quedé prendado de esta Casa. ¡ Por favor, no me eches de Tu Casa! ¡ No me humilles ante este y aquel! Una vez uno me preguntó : “¿ Dónde está tu casa?” Le respondí : “¿ Acaso ésta no es la mejor Casa?” Ahora quiero pasar a describirla A fin de debilitar el espíritu de los idólatras. Esta Casa besa al Corán. Esta Casa habla con el lenguaje de un niño. Esta Casa ha sido construida con el amor de Zahra. Esta Casa ha sido establecida como Qiblat para los musulmanes. Si vienes a esta Casa, no cometas errores. No des vueltas excepto alrededor de Dios. Si vienes a esta Casa, debes obtener las cualidades humanas. Debes ingresar a esta Casa “muhrim” para convertirte en “mahram”. La diferencia de esta Casa con otras Es que ella ve a todos sus huéspedes como iguales. ¡ Qué amable es esta Casa y Su Dueño! Hasta el Día del Juicio Final la puerta de esta Casa permanecerá abierta. Esta Casa tiene un secreto oculto. Esta Casa tiene una palabra no pronunciada. Esta Casa nos ha dado a Alí (P). De aquí viene el Mahdi (P). En esta Casa la luz de Dios es manifiesta. Su llave sólo está en la mano de Alí (P). Tú no conoces la filosofía de esta Casa. 32 En vez de Agar, fue Zahra (P) quien otorgó el sacrificio. Si Zahra (P) no lo señalaba, Agar no hubiera encontrado a Zam-zam. Esta Casa alberga a los visitantes de Karbala. Ha otorgado un niño de 6 meses en Mina. Esta Casa tiene un alumno que es Abbas, El mejor estudiante de su clase. Esta Casa se encuentra esperando La llegada del Mahdi (P), El Dueño de la bandera de Ashura. Muhammad Muntazar, desde Mecca Muqarram. Un paseo por los alrededores. Saliendo de la mezquita por el costado del pasillo donde se hace la corrida entre Safa y Marua, donde hay varias puertas, cada una con un nombre especial (una de ellas es la puerta de Bani Shaiba, por donde el Profeta –BPD- ingresó cuando fue elegido para resolver el conflicto entre las tribus de Quraish durante la reconstrucción de la Kaaba en el momento de colocar la piedra negra en su lugar). En las afueras, tras una amplia explanada, existe una pequeña casa donde hoy funciona una biblioteca, y se trata del lugar donde nació el Santo Profeta (BPD). Frente a la misma se encuentra el lugar donde antes estaba la casa de Jadiyah (P). A algunas cuadras de ese lugar, se encuentra el cementerio de Abu Talib donde se encuentran los restos de Jadiyah , Abu Talib y Abdul Muttalib (P). Fuimos allí a realizar una salutación. Al igual que el cementerio de Al Baqi en Medina, el lugar es muy triste, desolado, menos concurrido que el anterior. No existen marcas para señalar e identificar a las tumbas. Las autoridades sauditas establecen estas normas para los cementerios. Al regreso, cruzando el mercado, se encuentra una pequeña mezquita donde se reveló la sura de los genios (número 72 del Corán). Rezamos allí dos rakats y luego nos dirigimos hacia la mezquita para el salat del magreb, el cual rezamos ubicados en sus afueras, por la gran cantidad de gente que había. El número de musulmanes que se congrega al rezo en La Meca lo calculo mayor que en Medina, y estimo que pueden llegar a unas 100.000 personas. Otro día por la mañana salimos con un micro a recorrer Arafat, Muzdalifa y Mina. Vimos de lejos el lugar donde el Profeta (BPD) se ocultó durante la emigración, aquella cueva en la cual tan sólo una delgada telaraña lo separaba de sus enemigos. Luego visitamos el monte de la Misericordia (Yamalul Ramat) donde el Profeta (BPD) dio el sermón de la despedida poco antes de morir. Allí 33 arriba pude realizar dos rakats sobre la roca, al aire libre, ante una vista muy hermosa. Cruzamos luego el terreno de Arafat y Muzdalifa, donde los peregrinos se reúnen en el Hayy. Hay una mezquita muy grande y hermosa llamada la mezquita de Ibrahim Jalil que se abre en la temporada del Hayy y en ese momento estaba cerrada. Visitamos en Mina la mezquita de Jif donde los Imames de Ahlul Bait (P) solían rezar. También realizamos dos rakats en ese lugar. Luego fuimos a Mina y vimos las columnas de piedra donde se realiza la lapidación del demonio en el Hayy. Y en todos estos lugares le rogamos a Dios que nos permita en otra ocasión poder realizar los rituales de Hayy junto con los dos millones de musulmanes que allí se reúnen todos los años. ¡Ojalá que Dios nos permita vivir esta experiencia al menos una vez a todos los musulmanes! Aquel paseo culminó a los pies de la montaña donde se encuentra la cueva de Hirá, donde descendió la primera revelación. Un paisaje montañoso rústico, simple, muy bello, rodea aquel lugar apartado de la ciudad donde el Santo Profeta (BPD) realizaba sus retiros espirituales para adorar a Dios en la soledad. Allí empezó todo. En aquel lugar la Historia misma de la Humanidad tendría un punto de inflexión decisivo. Luego en los demás sitios visitados, el rumbo de la Historia adoptaría su cauce firme hacia el cual hoy sigue su marcha, hasta el prometido triunfo final del Islam. Y no hay Fuerza ni Poder sino en Dios Altísimo, el Unico, el Imponente, el Grandioso. 34 Una lluvia sobre la Kaaba. El día que visitamos Arafat hizo un calor muy agobiante. El clima de la Meca es siempre muy pesado, pero ese día fue peor que otros. Por los cambios de temperatura sufridos por el aire acondicionado del hotel, el sheij se encontraba con una gripe muy fuerte y tuvo que quedarse en cama después del paseo. Yo tenía un serio resfrío y algo de faringitis, pero no me impedía concurrir a la mezquita a realizar un “tauaf”. Hice eso y luego subí al primer piso para contemplar el patio con la Kaaba y su gente desde arriba. A pesar del fuerte calor, el número de personas realizando el “tauaf” era muy elevado, de unos cinco mil según pude calcular contemplando la vista desde el primer piso. Permanecí allí hasta el tiempo del salat del magreb. Justo antes de la oración el cielo se cubrió con oscuras nubes cargadas de relámpagos y fuertes rayos. Rezamos e inmediatamente comenzó a llover en forma torrencial. En ese momento, el número de personas en el “tauaf” se duplicó. Todos querían circunvalar la Casa de Dios bajo la lluvia. Era una escena conmovedora, una intensa manifestación de fe de parte de los musulmanes. Las voces invocando a Dios se elevaban y multiplicaban bajo la tormenta. Permanecí allí recitando Corán, rezando y suplicando hasta la hora del salat del isha, cuando paró de llover. No quise arriesgarme a que mi estado gripal empeorara por caminar bajo la lluvia, pensando en lo que aún restaba de mi viaje. Por eso no hice un “tauaf” en aquel momento, aunque mi corazón lo deseaba. La lluvia era recibida como un signo de la Misericordia de Dios y entusiasmaba a todos los presentes. De regreso al hotel, me detuve a telefonear a mi esposa y le di aquella noticia: acaba de llover en La Meca. Una reunión especial. Uno de los últimos días que estuvimos en la Meca se realizó con el grupo de sheijes una reunión especial para celebrar por adelantado el cumpleaños del Imam Mahdi (P). Uno de los concurrentes recitaba unas odas a la familia del Profeta (BPD) con una dulzura tan bella y un sentimiento tan profundo que provocaba el llanto, aún sin que yo pudiera entender el significado de sus palabras. El había hecho antes una recitación en otra reunión y también cuando estuvimos en el cementerio de Abu Talib (P). Otro de los sheijes narró la historia del nacimiento del Imam Mahdi (P), lo cual me resultó muy emotivo. Una reunión especial que guardaré siempre en el recuerdo, si Dios quiere. 35 La despedida. Finalmente llegó el momento de despedirnos de la Casa de Dios. El sheij me dijo : “Pídale a Dios que Le permita realizar una Umrah y un Hayy cada año. Debemos tener la intención de visitar Su Casa dos veces por año.” Y con esa intención realicé mi último “tauaf”, pidiéndole a Dios que me permita volver a realizar una Umrah con mi familia y un Hayy. Bebí agua de Zam zam una vez más por mí y por todos los hermanos musulmanes conocidos, en especial por aquellos que sufren enfermedades y le eché una última mirada a esa hermosa Casa engalanada de negro brillante. Contemplar aquella vista le da a uno la sensación clara y precisa de que aquel lugar es el motor que emana la fe que mueve al mundo. No es de extrañar que las Tradiciones afirmen que la religión subsistirá en tanto se mantenga el “tauaf”. No es posible visitar la Casa de Dios y no cambiar internamente la visión del mundo y de la religión misma. Sin duda que mi corazón tiene ahora un nuevo hogar en aquella Casa y su recuerdo se mantendrá por siempre allí. Sin duda que haré todo lo posible por volver. Las piernas me tiemblan y los ojos lagrimean, por lo que me vuelvo una vez más para saludarla. ¡Hasta pronto! ********** 36 Una visita a la tierra de Ahlul Bait (P). Un arribo con sorpresas y reflexiones. Al hamdu lil Lah , mi viaje no concluyó en La Meca, sino que fuimos con el sheij Muallemi Zadeh hacia Irán donde asistiríamos a una conferencia sobre el Imam Alí (P) organizada por la fundación, donde se expondrían las publicaciones de la Fundación. En esa exposición estarían los libros y revistas publicados en castellano en los cuales habíamos trabajado. Llegamos a Teherán el 14 de Shaban por la noche. La primera sorpresa fue en el mismo aeropuerto, ya que no revisaron nuestro equipaje. Tomamos nuestros bolsos y salimos sin que hubiera ningún agente en ninguna puerta de salida ni nadie que nos detuviera. Luego el chofer que nos llevó a Qom nos explicó que ese sector del aeropuerto recibe a los que vienen de Jeddah, que han realizado el Hayy o la Umrah, y a ellos no se los revisa. Un gesto silencioso de cortesía y amabilidad muy importante. La segunda sorpresa fueron las luces que engalanaban las ciudades, tanto Teherán como Qom. Largas tiras de luces de colores formando arcos, a veces como una caligrafía, una flor o una planta. El país entero se estaba preparando para festejar el nacimiento del Imam Mahdi (P) al día siguiente. Tal fecha es una fiesta nacional en Irán, una expresión del amor que se siente por Ahlul Bait en ese lugar. Además, al caer la noche los chicos acostumbran a reunirse en las veredas y repartir caramelos a la gente que ocasionalmente pasa por las cercanías. No es como en Occidente que en ciertas fiestas los chicos piden cosas a la gente, sino que aquí ellos regalan caramelos. Los ofrecen con insistencia y hay que tomarlos porque de lo contrario se ofenden. Desde el aeropuerto de Teherán nos dirigimos a Qom en auto. Inmediatamente nos cruzamos con el antiguo palacio de justicia de la época del Shah, todo un monumento de aquella época nefasta hoy transformado en museo. Luego, a la salida de la ciudad, el Santuario del Imam Jomeini (RA). Aquello me llenó de reflexiones acerca del triunfo de la revolución y la lucha del Imam Jomeini derrocando a la tirana dinastía del Shah. Dice el Corán : “Ciertamente ha llegado la verdad y se ha desvanecido la falsedad. Sin duda que la falsedad tiende a desaparecer” La época del Shah en Irán fue algo muy similar a las dictaduras militares que padecimos en Latinoamérica : un régimen con mucha represión, con desaparición de personas, con entrega del patrimonio a los intereses extranjeros, con el poder y las riquezas concentradas en manos de una clase dominante en tanto que el pueblo se sumía en la miseria, la desocupación, la falta de atención médica y de educación, etc. La Revolución cambió para el pueblo esta situación en la medida de lo que pudo hacer. Resultó un duro golpe para los Estados Unidos y los intereses 37 opresores mundiales, tan duro que hoy aún no alcanzan a reponerse. Y provocó un resurgimiento de todo el Islam en el mundo, alentando a la aparición de numerosos grupos y partidos islámicos que hoy siguen trabajando para cambiar la situación de muchos países musulmanes, además del amplio crecimiento del Islam que ha habido en los últimos 20 años. Todo un ejemplo de lo que un líder sabio, justo y bien guiado puede generar en la Historia. Qom : el corazón de la revolución. El amor hacia la Gente de la Casa (P) se palpa en todo el pueblo. Todos adornan sus casas con luces, banderas, flores o cualquier cosa que tengan disponible a fin de manifestar la dicha de festejar el nacimiento del Imam Mahdi (P). Muchísima gente se moviliza hacia Qom, donde se encuentra en santuario de Fátimah Masuma (P) o cerca de allí a una localidad llamada Yamkará, donde está la mezquita del Imam Mahdi (P), o a Mashhad, donde está el santuario del Imam Rida (P). Este último es el punto de mayor peregrinaje de Irán, y hacia allí nos dirigíamos al día siguiente. Estuvimos un día en Qom, por lo que nuestra primera visita al Santuario de Fátimah Masuma (P) y a la ciudad en general fue breve. Me atrajo mucho el movimiento de la ciudad, en especial en las cercanías del Santuario, donde se encuentran los centros teológicos y las sedes de algunas importantes fundaciones. Hay sheijes y talabés (estudiantes) por todos lados yendo y viniendo, con una actividad que recuerda a las grandes facultades de Humanidades o Derecho. Hay decenas de librerías una al lado de la otra. Incluso se venden libros usados en las calles. Esa fue mi primera impresión de aquella ciudad singular : que era el alma de la revolución, el centro de la búsqueda del conocimiento. Una búsqueda que vitaliza a la misma revolución islámica. Y en tanto continúe en marcha el motor de Qom, la revolución islámica vivirá. Pues es una revolución que se alimenta de la ciencia islámica, capacitada para guiar el mejor proceso revolucionario, cuyos frutos ya los podemos considerar como permanentes, más allá de que haya o no un éxito económico acompañando el proceso. Porque el verdadero triunfo de la revolución es crear una sociedad sana, un ambiente donde el hombre pueda desarrollarse en sus facetas morales y espirituales, en la plenitud de su dimensión humana. Y tal ambiente se respira en Irán. Uno lo percibe en la gente, especialmente en los más jóvenes. Y el valor social de una juventud sana, moralmente fuerte, no tiene medida. Tal es el mayor triunfo de la Revolución Islámica. 38 Mashhad : la morada del Imam. Al día siguiente, volvimos a Teherán desde donde tomamos un avión hacia Mashhad con el fin de visitar el Santuario del Imam Rida (P), el punto más importante de nuestra visita a Irán. Había mucha gente trasladándose tanto a Qom como a Mashhad, pues era el cumpleaños del Imam Mahdi (P). Todas las ciudades se encontraban engalanadas con luces de una manera muy bella. Todo el país estaba de festejo por el nacimiento de nuestro Imam Az Zaman (P). Las mezquitas de Irán tienen un encanto particular. No son tan grandes y espectaculares como las de Medina o Meca, pero se encuentran embellecidas con millares de pequeños detalles, en su mayor parte en tonos azulados. El techo sobre las tumbas de Fátimah Masuma (P) y del Imam Rida (P) se halla formado por cientos de pequeños espejos con formas y posiciones diversas, que reflejan un brillo especial, como si se trataran de diamantes. La belleza de ambos lugares impacta, deslumbra, atrae la atención de cualquier observador. Pero aún impacta más el amor que la gente expresa y manifiesta por Ahlul Bait (P), por la Gente de la Casa del Profeta. Un amor que es amor al Profeta mismo (BPD) y amor a Dios. Tocar la tumba del Imam Rida (P) resulta más difícil que tocar la piedra negra en la Kaaba. Para hacerlo, uno debe sumergirse en una marea humana en la cual avanza de a centímetros y se va moviendo para un costado y el otro, hasta que estirando los brazos, luego de varios minutos, con suerte puede alcanzar a tocar la reja que rodea la tumba. Yo estiraba mis manos y las personas que estaban delante de mí tocaban la reja y luego acariciaban mi mano como un gesto de ayuda. Algunos padres alzaban a sus hijos y los mandaban por encima de la gente, como nadando sobre una oleada de manos que los trasladaban para que pudieran besar el enrejado y saludar al Imam (P). Un chico pasó encima mío y lo ayudé en su viaje hacia la reja que rodea la tumba. Finalmente, luego de varios minutos de esfuerzos y de insistir sin rendirme, pude tocar y aferrarme a la reja de la tumba del Imam (P), donde lo saludé con expresiones propias. “¡Aquí estoy, Imam! ¡Aquí estoy desde Argentina con saludos de los musulmanes...!” Tenía la intención de realizar las salutaciones correspondientes, pero en aquel momento me olvidé de todo. Entonces me dejé llevar por la emoción. Pues al tocar la reja, mi corazón se abrió de manera similar a cuando toqué el manto de la Sagrada Kaaba. Y sólo pude llorar... “Dicen que si uno no toca la tumba del Imam Rida (P), no ha estado en Mashhad”, me comentó el sheij más tarde. Bien : puedo afirmar que estuve en Mashhad. Torbat Al Haidariiah : un lecho de espiritualidad. Al día siguiente nos dirigimos hacia Torbat, una pequeña ciudad ubicada a más de 100 Km de Mashhad, en medio de un impactante paisaje montañoso donde 39 hasta vimos nieve y bastante cerca del camino. Ibamos a visitar al padre y al hermano mayor del sheij Muallemi Zadeh, y de paso conocer ese lugar próximo al territorio que es la cuna del sufismo de la región. Allí se encuentra la tumba de Haidar, uno de los maestros de Attar, tumba que le da el nombre a la ciudad. Fuimos a visitar esta tumba a la cual rodea una construcción vieja, prácticamente abandonada, que se encontraba en remodelación. Haidar no es conocido por la gente del lugar. No existen obras suyas que hayan sobrevivido para mantener su figura en la memoria. Pero a pesar de no conocer a este sufi a quien conocemos por su discípulo Attar (escritor sufi cuya obra “El lenguaje de los pájaros” ha sido traducida a varios idiomas occidentales entre ellos el castellano, y ha tenido amplia difusión en todo occidente), la gente no ignora qué es el sufismo. Y lo que es más importante aún más allá de los nombres, no desconoce qué es la vida simple, el desapego, la vida espiritual. La gente viste y vive en general de un modo sencillo, humilde, conformándose con lo poco. Tampoco ignora el sentido de la devoción. Debido a la latitud donde se encuentra la ciudad, el horario del salat del mediodía era alrededor de las 11.30 horas, un horario que resulta muy temprano para el ritmo de vida de cualquier localidad. Sin embargo, más de 200 personas se reunieron a rezar en aquella mezquita humilde, que exteriormente era sólo un salón de rezo. Aún colgaban los adornos de la festividad del día anterior y sobre una pared, los nombres de los catorce Infalibles de Ahlul Bait (P). “Todo el Sufismo surgió de la Escuela Shiíta” , sentenció el sheij Muallemi. Todo lo que se conoce como “Irfan” y “Hikmat” proviene de Ahlul Bait (P). Dijo el Profeta (BPD) : “Yo soy la ciudad de la Sabiduría y Alí es su puerta”. Tal puerta a la ciudad del conocimiento se encuentra en las enseñanzas de los Imames de Ahlul Bait (P) preservadas en las obras de Tradiciones de la Escuela Shiita. Tuvimos varias conversaciones sobre Sufismo tanto en Torbat como en Mashhad. En una de ellas, un joven emprendedor cuestionó la validez de los sufis, debido a que muchas veces expresaban ideas repudiadas por las enseñanzas de Ahlul Bait (P). Los sheijes le dijeron que no había que rechazar a los sufis, que los grandes maestros de nuestra Escuela como Allamah Tabatabai, Mutahari y el mismo Imam Jomeini (RA), u otros del pasado como Mulla Sadra, no los habían repudiado, sino que tomaban de sus enseñanzas lo bueno y pasaban por alto lo erróneo. ¿Cómo reconocer lo correcto de lo equivocado? Ahí es donde tenemos que valernos de las palabras de los Imames de Ahlul Bait (P). No debemos olvidar que ellos son nuestros verdaderos maestros y son la verdadera puerta a la ciudad de la Sabiduría. Pero las palabras de los sufis muchas veces resultan instrumentos útiles y válidos para acercarnos al Conocimiento, por lo cual no se los debe rechazar sólo por pertenecer a otra Escuela. Debemos tomar la Sabiduría ahí donde se encuentre y prestar atención a los errores para no caer en ellos. “Los grandes hombres cometen grandes errores”, dijo el sheij Muallemi. Infalibles sólo son los Catorce de Ahlul Bait, así como los Profetas (P) anteriores a Muhammad (BPD), quien es la cumbre de la 40 sabiduría, la antorcha resplandeciente. Ellos son los poseedores de la Ciencia libre de todo error, la verdadera Gnosis profunda. Los demás sólo pueden reflejar dicha Sabiduría. La grandeza de un maestro está principalmente en reflejar con la mayor exactitud y precisión las enseñanzas de esta fuente primordial, que son enseñanzas emanadas de Dios Mismo. La validez de los grandes sufis al transmitirnos sus experiencias es la de darnos una visión desde la cual podamos visualizar el camino desde diferentes ángulos. El camino y la guía verdadera están en la puerta que conduce a la ciudad de la Sabiduría, tal como menciona el hadiz del Profeta (BPD). De regreso en Qom. Al día siguiente volvimos a hacer una visita a la tumba del Imam Rida (P) para despedirnos de él. La gente es muy expresiva delante del Santuario del Imam (P) al igual que en el Santuario de Fátimah Masuma (P) y pone de manifiesto su amor con una intensidad contagiosa. Eso hace que el ambiente se impregne de una santidad particular. Luego, regresamos por avión a Teherán y de allí a Qom para asistir a la conferencia sobre el Imam Alí (P) y visitar mejor la ciudad. El santuario de Fátimah Masuma (P) en Qom es un poco más chico que el del Imam Rida (P), con un ambiente más calmo. En una sala contigua se encuentran las tumbas de varios sabios y líderes religiosos, entre ellos Mutahari y Allamah Tabatabai (RA). Pasamos junto a ellas y recitamos un Fatihat y luego los saludamos. El lugar es propicio para sentarse a leer algún libro, a estudiar y reflexionar un poco. Y muchas personas hacen esto. También nos trasladamos a un pequeño poblado en las afueras de Qom , llamado Yamkará, donde hay una mezquita muy concurrida la cual según se dice, fue hecha construir por el propio Imam Mahdi (P) y la gente la visita muchísimo. Es una mezquita simple, con una lámparas muy bellas, todas de formas diferentes, ubicada en un predio que en estos momentos se encuentra en remodelación. Allí realizamos primero el salat del magreb e isha en comunidad, y luego una oración particular que se acostumbra a realizar allí. Después hicimos una salutación para los Imames (P). Visitamos a muchas personas en Irán, entre ellas la familia Golzar que nos recibieron muy amablemente y con quienes pudimos conversar un poco en castellano. También el hermano Husein Abdul Haqq que es un hermano de nacionalidad peruana convertido al Islam que se encuentra estudiando teología, al hamdu lil Lah, Rabbil alamín. Esperamos que tenga éxito en su tarea por la gran necesidad de sheijes latinoamericanos que tenemos en nuestros países. Finalmente, pudimos asistir a la conferencia sobre el Imam Alí (P) donde conocimos a muchas personas y vimos la exposición de los libros que la Fundación publica en diversos idiomas. Fue interesante tener una vista de la enorme cantidad de libros que se editan en diferentes idiomas, principalmente en árabe y persa. Lo 41 que existe en idiomas occidentales es realmente una gota del océano de ciencia que hay editado en estos dos idiomas de Oriente Medio. Los musulmanes occidentales tenemos realmente un gran trabajo por delante en materia de difusión, que implica fundamentalmente la tarea de traducción y de presentación del material de una manera acorde a la mentalidad y cultura de nuestros países. Una visita a Isfahán. Si bien no teníamos tiempo disponible, no podíamos dejar de ir a visitar a las familias Samandari y Mayid en Isfahán, con quienes teníamos una amistad desde cuando ellos estuvieron estudiando medicina en Argentina. Fue muy grato poder conversar con ellos y conocer a sus padres. También pudimos visitar brevemente esa hermosa ciudad, famosa por sus artesanías y su arquitectura. Isfahán es la fuente que produce la arquitectura que engalana las mezquitas de Irán y es un importante centro turístico. Fue la antigua capital de la dinastía Safávida, y su esplendor duró hasta la invasión afgana en el siglo XVIII. Pudimos visitar allí una mezquita de más de 400 años de antigüedad. Y la antigua plaza de Maidan-e Naghsh-i- jahan (significa Plaza de la vista o visión del Mundo), hoy conocida como Plaza del Imam, el primer lugar del mundo donde se jugó polo. Aún se conservan los postes originales con los que Shah Abbas jugaba allí. Shah Abbas fue el que dotó a la ciudad de algunos de sus más famosos monumentos. La plaza es una de las mayores del mundo (500 m x 160m), y en sus orillas se hallan excelentes ejemplos del esplendor arquitectónico de la ciudad, como la Mezquita del Sheij Loftollah, la Mezquita del Imam, el Palacio Ali Qapu, o en su lado norte el Bazaar Qaisarrieh, el cual visitamos con el Sheij y donde compre algunas artesanías para familiares y amigos. Para ilustrar el esplendor de esta ciudad en su época dorada (S. XVI) sus habitantes solían decir: Isfahan nesf-i-jahan (Literalmente: “Isfahán es la mitad del mundo”). También es llamada la ciudad de los puentes, porque es atravesada por el río Zayandeh sobre el cual hay incontables puentes, joyas arquitectónicas en sí mismas. El regreso. Finalmente, antes de emprender el largo viaje de regreso a la Argentina, camino al aeropuerto de Teherán nos detuvimos unos instantes en la tumba del Imam Jomeini (RA) para saludar al gran líder revolucionario promotor del actual despertar del Islam en todo el mundo, al hamdu lil Lah, Rabbil alamín. Mi visita a Irán tuvo la dinámica propia de esta nación, la dinámica que manifiesta la gente en sus autos y caminando en la calle. Fue todo muy rápido, 42 pero me permitió conocer la realidad de este pueblo y el estado actual de la revolución. El espíritu revolucionario se encuentra vivo y vigente en los corazones de esta gente, alimentado por el amor a Ahlul Bait (P). Este espíritu que sorprendió al mundo en 1979, continúa ardiendo con fervor y seguramente nos seguirá deparando sorpresas en el futuro, si Dios Altísimo así lo quiere. Irán presenta a su favor una cultura independiente de la cultura occidental, lo cual permite mantener viva la Revolución. No hay una dependencia ideológica al sistema capitalista, por lo cual puede tener autonomía. Esto le permite mantener una juventud sana y moralmente fuerte, que es el principal sostén de la Revolución. Los logros que ha obtenido Irán son logros propios del Islam. Son los frutos de la aplicación de las enseñanzas de Ahlul Bait (P). Es posible que se encuentren algunos asuntos criticables en Irán, pero no son defectos de las enseñanzas islámicas ni fallas en la Revolución en sí, sino productos de la colosal acción opositora de los enemigos de tal Revolución, especialmente los intereses dominantes de Occidente (con Estados Unidos a la cabeza). Ellos son quienes colocan toda clase de obstáculos para que un modelo revolucionario fracase. Para los musulmanes es muy importante contar con un país que lleve adelante un proceso islámico como Irán que nos sirva de ejemplo para contrarrestar parte de la tremenda propaganda que día tras día se lanza en nuestra contra. Cuando se equipara al Islam con el atraso, la ignorancia, la violencia, la opresión hacia la mujer, etc., podemos siempre apelar al ejemplo de Irán para revertir las mentiras expuestas contra los musulmanes por parte de los medios de comunicación en Occidente. De ahí que los musulmanes todos, sunnitas y shiitas, debemos aprender a valorar mejor la gran Merced que representa para nosotros la existencia de la Revolución Islámica en Irán. Rogamos a Dios para que procesos similares se extiendan por todos los países musulmanes y el modelo islámico pueda brillar en todo el mundo. Conclusión. Así concluyó este maravilloso viaje de profundo tono espiritual que me permitió conocer el mundo islámico en distintas facetas, tanto en Arabia como en Irán. Un viaje que abrió las puertas a un nuevo estado que hoy disfruto, gracias a Dios. He tratado de transmitir aunque sea brevemente una parte de las experiencias vividas, las cuales son muchas y muy profundas. A partir de este momento ya me encuentro realizando los preparativos para mi próximo viaje, aunque es posible que el mismo demore algún tiempo. Es importante que todos los musulmanes se esfuercen por visitar la Casa de Dios, pues tal visita sin duda que cambiará sus vidas afirmando sus corazones en la certeza de la fe. ¡Inshaa Allah que todos los musulmanes podamos concurrir a la Casa de Dios en rituales de Hayy y Umrah una vez en la vida o más! Sin duda que quien asista una vez, deseará volver. 43 Entre las Mercedes de este maravilloso viaje deseo rescatar las siguientes : 1.- Poder estar en los lugares de mayor Santidad de todo el mundo. 2.- Asistir a las manifestaciones de fe más intensas de la actualidad (Sin duda que el Hayy en su época debe ser la manifestación más grande de todo el mundo actual). 3.- Contemplar el efecto del Islam sobre los creyentes, tanto individual como socialmente (especialmente el efecto beneficioso y sano en la infancia y la juventud). 4.- Visitar comunidades islámicas para comprobar el beneficio social del Islam y su efecto revolucionario. 5.- Corroborar en persona la falsedad de las muchas mentiras que se dicen sobre el Islam y los musulmanes (como por ejemplo, las mentiras que se dicen sobre la mujer musulmana). Mi más sincero, abierto y amplio agradecimiento es para con Dios Altísimo, Quien me condujo hasta la fuente de la fe y la luz de la sabiduría, haciéndome musulmán. El es Quien me agració con este viaje y esta experiencia sin igual. Al hamdu lil Lah Rabbil alamín. Que Dios Bendiga y Agracie al Sello de la Profecía, Su amado y nuestro amado Profeta Muhammad (BPD) y a su familia purificada, el más frondoso árbol de la ciencia y la religión, los Infalibles de Ahlul Bait (P). Allahumma salli ala Muhammad ua ali Muhammad. Que Dios Bendiga a todos los musulmanes, facilite nuestros asuntos y adelante la llegada del Imam Mahdi prometido (P) para que restaure la justicia y la equidad sobre la tierra. Y no hay Fuerza ni Poder sino en Dios Altísimo, El Imponente, El Grandioso. *** FIN *** 44 Apéndice 1 La peregrinación y su rol en el perfeccionamiento social (Extraído del libro “Al Haiat” de los señores Hakimi, traducido al castellano por el sheij Moallemi Zadeh). Del Libro (el noble Corán): 1.- "Dios convirtió a la Ka'ba, la Casa Sagrada, en congreso para la Humanidad, así como el mes sagrado y la oblación, específica o no, para que sepáis que Dios conoce lo que está en los cielos y en la tierra, y que Dios es Omnisciente." (5:97) 2.- "En ella (la Ka'ba) hay señales evidentes. Es el lugar de Abraham. Quien ingrese en él, estará seguro. Dios Ha prescripto la peregrinación a la Casa, si disponéis de medios. Quien reniegue, sepa que Dios puede prescindir de las criaturas." (3:97) 3.- "Y cuando establecimos la Casa como lugar de retorno para los hombres y seguridad, (les dijimos): '¡Haced del lugar de Abraham un oratorio!' Concertamos una alianza con Abraham e Ismael, a fin de que purificaran Mi Casa para aquellos que la circunvalan, los que acudieran a hacer un retiro, a inclinarse y prosternarse. Y cuando Abraham dijo: '¡Señor! ¡Haz que esta ciudad sea segura y provee de frutos a sus habitantes, a quienes crean en Dios y en el Ultimo Día.' Dijo (Dios): 'Y a quienes no crean, les dejaré gozar por breve tiempo. Luego, les arrastraré al Castigo del Fuego. ¡Qué funesto fin!"' (2:125 y 126) De la Tradición (hadiz): 1.- Del Imam 'Alí(P): "Y os obligó...la Peregrinación a Su Casa Sagrada. La estableció, Glorificado Sea, como un signo para el Islam y como un refugio para quienes lo buscan...” (De Nahyul Balagha', pag.40) 2.- De Fátima(P): "... Entonces Dios Ha establecido para ustedes la fe como un purificador de la idolatría y la Peregrinación como construcción de la religión." (De "Al Bahar", tomo VIII, pag. 110) 3.- Del Imam Sadiq (P): Transmitió Aban ibn Taglib: "Le pregunté a Abi Abdallah (P) (sobre la aleya :) 'Dios convirtió la Ka'ba, la Casa Sagrada, en congreso para la Humanidad.' (5:97). Me explicó(P): 'Dios la estableció para (mantener) su religión y sus subsistencias’.” (De "Al Uasail", torno VIII. Pag.41) 4.- Del Imam Sadiq(P): "La religión se mantendrá en pie mientras se mantenga en pie la Ka'ba." (De 'Al Uasail", tomo VIII, Pag.14) 45 5.- Del Imam Sadiq(P): Narró Hisham ibn Al Hakam: "Le pregunté a Abi Abdallah (P) : “¿Cuál es el motivo por el cual Dios impuso a los siervos la peregrinación y la circunvalación de la Casa?' Respondió (P) : 'Debido a que Dios creó las criaturas.., y les ordenó lo que pertenece a la religión (es decir, los rituales de adoración) y aquello que concierne a sus asuntos mundanos. E hizo de ella el lugar de reunión del Oriente y el Occidente, para que se conozcan entre sí... Si cada pueblo se preocupara exclusivamente por sus ciudades y lo que ellas contienen, las ciudades se exterminarían y derrumbarían... y las noticias no se difundirían, por lo que nadie se enteraría de eso. Entonces, éste es el motivo de la Peregrinación." (De "Al Uasail", tomo VIII, pag.9) 6.- Del Imam Rida(P): "La Peregrinación sólo ha sido ordenada a fin de llegar a Dios, Poderoso y Majestuoso, pedir el aumento (de Sus Mercedes) y salir de todos los pecados con el arrepentimiento de lo pasado, comenzando de nuevo. Además, como gasto de la hacienda y fatiga de los cuerpos, despreocupándose de la familia y los hijos, y absteniéndose del gozo. Impávido ante el calor y el frío, firme ante ellos, permanentemente con humildad, tranquilidad y humillación. Además de todo esto, existen beneficios para todos los que habitan el Oriente y Occidente, para quien está en la tierra o el mar, para quien peregrina o no lo hace, para quienes son comerciantes, mercaderes, vendedores, clientes, lucradores, indigentes, arrendadores y pobres, cubriendo las necesidades de toda persona que se halle en un lugar habitable. Por otro lado, de ella parten instrucciones e informaciones de los Imames(P) hacia todo lugar y zona. Como Dios, Poderoso y Majestuoso, señala: '¿Por qué no acude de cada grupo de ellos una parte para instruirse en la religión y así advertir a sus pueblos cuando regresen a ellos? Quizás así tengan cuidado.' (9:122)... Y también: 'Para atestiguar los beneficios...' (22:28)" (De 'Al Uasail', tomo VIII, pag.7) 7.- Del Imam Sadiq(P): "Si los shiitas acordaran abandonar la oración, o la caridad obligatoria, o la peregrinación, se aniquilarían." (De 'Al Uasail", tomo I, pag.12) 8.- Del Imam Sadiq(P): '... ¡Oh, Fulano! Reduce el gasto en la Peregrinación, para tener más ánimo de hacerla, y no gastes en exceso en ella, para que no te resulte pesada." (De 'Al Uasail', tomo VIII, pag. 105) 9.- Del Imam Sadiq (P) : De Sama'at, quien transmitió sobre Abi Abdallah (P): "Le pregunté sobre un hombre que me debe, el cual se ausentó por un tiempo y luego lo vi dando vueltas alrededor de la Ka'ba. ¿Puedo entonces exigirle mi dinero? Me contestó (P): 'No. Ni siquiera lo saludes, a fin de que no se asuste, hasta que salga del recinto sagrado (Haram).'" (De 'Al Uafi', tomo II, pag.17) 46 Comentario : La Peregrinación y su efecto en el desarrollo social: El tema de la Peregrinación es muy importante, por lo que resulta apropiado que la observemos desde diferentes ángulos. Es preciso que realicemos un análisis exhaustivo de la misma, aunque realmente nuestro espacio no es lo suficientemente amplio como para que podamos explayamos tranquilamente al respecto. Por consiguiente, sólo nos conformaremos con una breve discusión sobre la misma. La Peregrinación es un congreso islámico mundial. Se manifiestan en ella dos grandes beneficios para sus participantes: la fusión del alma con los ideales ejemplares y la congregación con el valioso género humano, el cual se beneficia al encontrar la hermandad con cada grupo de la tierra. He aquí el beneficio de la Peregrinación que fue enseñado en Su Dicho, Exaltado Sea: "Para atestiguar los beneficios obtenidos." (22 28) El peregrino se encuentra con numerosas personas de diversos lugares, lo cual le hace adquirir una educación mundial. Así observa los problemas y situaciones (del género humano) con una visión universal, y reflexiona de igual modo, viéndose a sí mismo y al resto de la gente como iguales y no dando importancia a las falsas ventajas, ya sea de raza, color o nacionalidad. Esto hace que se acerque a los hijos de su misma especie y se vincule con ellos en forma concreta. De esta manera percibe su propia alma junto a las demás como a los miembros de una familia. Luego, desde aquí es impulsado a asumir responsabilidades frente a las dificultades del género humano, reflexionando sobre los intereses de todo el mundo y tratando a su vez de solucionar todos los problemas de la gente y ayudarla en todos los lugares de la tierra. Uno de los claros rasgos de este congreso es la ausencia de un nivel oficial para reunir a los representantes de los gobiernos, jefes y reyes, quienes en realidad están apartados de la gente. Por el contrario, es un congreso basado en la igualdad de los pueblos. "Convoca a los hombres a la Peregrinación, Para que vengan a ti de toda apartada comarca, ya sea a pie o en famélicas cabalgaduras." (22:27) Ellos vienen y forman con sus concentraciones, un mar numeroso donde cada uno es como una gota en este desbordante océano. (Una acción digna de ser meditada en profundidad). (Extraído del libro “Al Haiat” de los señores Hakimi, traducido al castellano por el sheij Moallemi Zadeh). 47 Apéndice 2 Las reglas para la mezquita. Vamos a transcribir las reglas que se deben tener en cuenta para una mezquita (para cualquier mezquita) según la fatua de Ayatullah Sistani : Reglas acerca de la mezquita. 1.- Impurificar el piso, el techo, la terraza o la cara interna de las paredes de una mezquita es ilícito. Quien se da cuenta de que algunas de las partes ha sido impurificada, debe purificarla de inmediato. 2.- Si alguien no puede purificarla personalmente ni puede encontrar a alguien que lo ayude, deberá avisarle a otra persona en caso de saber que ella podrá purificarla. 3.- Impurificar los santuarios de los Imames infalibles (P) es ilícito. Si estuviesen impuros (por alguna causa), en caso de producir deshonra, será obligatoria su purificación. 4.- Llevar a una mezquita algo que es propia-mente impuro y lo que se haya impurificado es ilícito si resultase una deshonra para ella. Y según precaución meritoria, aunque no produzca una deshonra será preferible no llevarlo de todos modos. 5.- Según precaución obligatoria, es ilícito adornar una mezquita con oro. 6.- Si se destruye una mezquita, no podrá venderse o agregarse a una casa o un terreno (es decir, no se pueden usar sus restos). Tampoco pueden usarse en una calle, un camino, una ruta, un parque, etc. 7.- Vender las puertas, ventanas y demás elementos semejantes de una mezquita es ilícito. En caso de destruirse una mezquita, sus partes se deberán guardar para refaccionar o restaurar dicha mezquita y en caso de no servir para esa misma mezquita, se deberán reservar para utilizarse en otras mezquitas. Si por último no pueden usarse para esto, se podrán vender y el dinero se deberá usar para esa mezquita y en el última instancia, para otras mezquitas. 8.- Se puede destruir una mezquita para agrandarla, si la gente lo necesita (por cuestiones de capacidad). 48 9.- Es recomendable mantener la mezquita bien iluminada y es meritorio que la persona que va a la mezquita se ponga perfume, usa ropas limpias y preciosas y vivifica que su zapato no esté impuro. 10.- Es desaconsejable ensuciar el área o escupir o sonarse la nariz o dormir o hablar sobre los asuntos mundanales (tonterías y acciones irrespetuosas) en la mezquita, en caso de producir deshonra será ilícito. (Extraído de “Leyes prácticas del Islam” de Ayatullah Sistani, traducido al castellano por el sheij Muhammad Moallemi Zadeh) La conducta del creyente en la mezquita. Vamos a ver a continuación algunos Hadices extraídos de “Yamiul Ajbar” sobre la conducta que debe llevar el creyente al visitar una mezquita, que se aplica para todas las mezquitas en general : 1.- Del Profeta (BPD) : Cuando el Mensajero de Dios (BPD) entraba en las mezquitas, ponía su pie derecho y decía ¡ "En el Nombre de Dios. En El confío, y no hay Fuerza ni Poder sino en Dios.' Y cuando salía, colocaba su pie izquierdo y decía : "En el Nombre de Dios. Me refugio en Dios del maldito demonio rechazado.' Luego él dijo (BPD): '¡Oh, Alí! A quien ingresa a la mezquita diciendo esto que yo digo, Dios acepta cada ciclo que él observa y anota por cada uno cien ciclos. Y si al salir dice lo que yo digo, Dios perdona sus pecados y por cada paso que da lo eleva un grado y le anota 100 recompensas." 2.-Del Profeta (BPD) : "Cuando el siervo ingresa en la mezquita diciendo : 'Me refugio en Dios del demonio maldito y rechazado' , el demonio rechazado dice : '¡Han quebrado mi espalda!' Y Dios le inscribe (al siervo que dijo esto) la recompensa de 100 años de devoción. Y si al salir de la mezquita dice lo mismo, Dios le inscribe por cada pelo que tiene en su cuerpo 100 recompensas y lo eleva 100 grados." 3.-Del Profeta (BPD) quien dijo : "Cuando el creyente ingresa a la mezquita y pone su pie derecho, los ángeles exclaman : 'Dios te ha perdonado'. Y cuando al salir pone su pie izquierdo, los ángeles dicen : 'Dios te ha protegido y ha cubierto tus necesidades, haciendo al Paraíso tu recompensa.'" 4.-Del Profeta (BPD) quien dijo "Hablar sobre cosas vanas en la mezquita consume las obras buenas como las bestias comen el pasto." 5.-Del Profeta (BPD) quien dijo : "No ingresen en la mezquita con estado de impureza. La mezquita es enemiga de quien hace esto." 49 6.-Del Profeta (BPD) quien dijo : "A quien duerme en la mezquita sin una excusa, Dios lo prueba con una dolencia que no desaparece." 7.-Del Profeta (BPD) quien dijo : "En el fin del tiempo vendrá un grupo de mi comunidad que irán a las mezquitas a sentarse en circulo sólo para hablar del mundo y el amor a las cosas mundanas. ¡No os sentéis con ellos! Pues Dios no tiene relación con ellos." 8.-Del Profeta (BPD) quien dijo "A quien barre una mezquita Dios le inscribe la recompensa de liberar mil esclavos. Y a quien quita de ella lo que la opaca. (limpiándola), Dios le inscribe dos partes de Su Misericordia." 9.-Del Profeta (BPD) quien dijo "Si alguien enciende una luz en una mezquita iluminándola, los ángeles y los portadores del Trono piden el perdón para él." Estas Tradiciones (Hadices) y muchas otras son muy conocidas en el mundo musulmán, por lo cual los creyentes respetan y observan con atención una conducta decorosa dentro de la mezquita en todo momento, lo cual acrecienta la santidad del ambiente de tal recinto sagrado. 50 Apéndice 3 Reglas sobre la consagración : Figura en “Leyes prácticas del Islam” de Ayatullah Sistani lo siguiente : La forma de hacer el Ihram : Las obligaciones del Ihram son las siguientes : 1.- La intención de realizar el Hayy y Umra sinceramente, con el único anhelo de acercarse a Dios. 2.- Talbiah , que es repetir la siguiente frase : Labbaik, Allahumma, labbaik. La sharika laka, labbaik. Heme aquí, ¡ Oh, Dios mío ! Heme aquí. No hay asociados a Ti. Heme aquí. Y es preferible agregar la frase : Por cierto que la Alabanza y la Merced pertenecen exclusivamente a Ti, así como el Reino. ¡ No hay asociados a Ti ! Y luego se puede agregar : Heme aquí. El peregrino debe aprender bien las palabras del Talbiah y pronunciarlas correctamente, aunque otra persona se las dicte y él las repita. Si no puede pronunciarlas correctamente ni aún con un dictado, podrá pronunciarlas de un modo más coloquial siempre que se entienda que está pronunciando el Talbiah. De lo contrario, podrá traducirlas a su idioma o podrá usar algunos sinónimos para esto mientras toma un representante que las pronuncie por él del modo correcto ( siendo ambas cosas necesarias en este caso ). Para el Ihram no hacen falta tener la ablución ni el baño completo, aunque venga de un estado de impureza por eyaculación, menstruación o posparto, y otros. Ellos hacen el Ihram y el mismo es válido. 3.- La vestimenta consiste en dos ropas especiales que se coloca luego de apartarse de todo lo que le resulta ilícito al muhrim, que luego detallaremos. Una de ellas se llama Isar y cubre desde el ombligo hasta las rodillas completamente. La otra se llama Rida’ y cubre el hombro, el brazo y la mayor parte de la espalda. Estas dos ropas son obligatorias para los hombres, no para las mujeres. Ellas pueden usar sus vestimentas habituales ( el Hiyab ) y con ellas hacer el Ihram. Las vestimentas del Ihram tiene las mismas condiciones que la ropa del orante. En el Ihram las mujeres no pueden vestir la seda, excepto para protegerse del frío o del calor. Las ropas se colocan luego de la intención y el Talbiah. Si se las puso antes, deberá sacárselas para hacer estas dos obligaciones y luego volver a vestirse. 51 Lo que está prohibido para el muhrim : 1.- Cazar animales salvajes o dañarlos de cualquier forma, ya sea que estén permitido comerlos o no. Tampoco puede ayudar a cazar ni comer de la caza o guardar lo cazado. No hay problemas con los animales de mar ( es decir, se puede pescar ). Tampoco es lícito matar animales aunque no sea cazando, excepto en los siguientes casos : A.- Animales domésticos como las vacas, camellos, gallinas, etc. B.- Animales de los que se teme algún peligro, como las víboras o fieras salvajes. C.- Las aves rapaces que puedan agredir a las aves del Haram D.- Todas las especies que representen algún peligro como las víboras, escorpiones, ratas, etc 2.- Tener relaciones con las mujeres antes del Tauaf de las mujeres. 3.- Besar a la esposa. Tocar a la esposa. Mirarla o jugar con ella. 4.- La masturbación tiene el mismo mandato que las relaciones sexuales. 5.- Pronunciar la fórmula de matrimonio para sí mismo o para otros. 6.- Usar perfumes, ya sea para oler, comer, teñirse, etc., así como vestir algo perfumado. 7.- Usar vestimentas cosidas para los hombres. 8.- Usar kohol. Si es negro, debe abandonarlo; si no es negro y no lo usa como adorno ( sino como protección ), no hay problemas. 9.- Mirarse al espejo para adornarse. 10.- Usar medias o zapatos que cubran la cara superior del pie en los hombres. 11.- Toda forma de corrupción como la mentira, el insulto y la ostentación. 12.- Jurar por Dios ( Yidal ), ya sea diciendo la verdad o mintiendo, excepto en el caso de que si no jura resulta perjudicado y pierde su derecho. 13.- Matar cualquier insecto que se pose sobre el cuerpo. 14.- Adornarse con cualquier cosa que se considere adorno, ya sea que la use con intenciones de adornarse o no. Pero si lo usa por una enfermedad, como parte de un tratamiento, no hay problemas. Tampoco puede usar anillo, excepto que lo haga como un mérito religioso. 52 15.- Usar cremas, aunque no tengan olor agradable. Si lo necesita para un tratamiento, puede usarla si no tiene olor agradable. 18.- Depilarse o cortarse aunque sea una parte del cabello. 19.- Cubrirse la cabeza para los hombres. Los peregrinos no pueden sumergir la cabeza en agua o algo semejante, y en esto no hay diferencias entre el hombre y la mujer. 20.- Cubrir la cara para las mujeres o parte de la cara. 21.- Caminar bajo la sombra de objetos que no son firmes, como un paraguas, el techo de un auto, etc. Pero bajo la sombra de una pared, un árbol o una montaña no hay problemas. 22.- Sacar la sangre del cuerpo sin necesidad. 23.- Cortarse las uñas, excepto que una se rompa y le moleste. 24.- Cargar o usar armas de fuego (de guerra). Si se teme por un enemigo o un ladrón, no hay problemas. Las cosas prohibidas dentro del Haram ( Santuario ) : 1.- Cazar animales salvajes como hemos dicho antes. 2.- Dañar plantas o arrancarlas. 3.- Aplicar sanciones coránicas como “hadd”, “qisas” ( Talión ) y “ta’dir” contra quien ha cometido un delito y se refugia en el Haram. Pero hay que dejarlo sin comida ni bebida, no hay que hablarle ni realizar tratos con ellos de ningún tipo hasta que salga de allí, y al salir pueda ser apresado y castigado. 4.- En cuanto a algo que se encuentra tirado en el piso, es desaconsejable levantarlo y si lo hace, ya hemos explicado sus mandatos en las Leyes prácticas. Nota : Hemos omitido la mención de los actos reparatorios, los cuales pueden consultarse en detalle en los textos de Leyes prácticas. La intención aquí es dar una noción de las normas que debe tener en cuenta quien porta el “ihram”. Las normas de los distintos ritos. Dice el Sagrado Corán : “Y cuando hicimos de la Casa lugar de reunión y de refugio para los hombres. Y: «¡Haced del lugar de Abraham un oratorio!» Y concertamos una alianza con Abraham e 53 Ismael: que purificaran Mi Casa para los que dieran las vueltas, para los que acudieran a hacer un retiro, a inclinarse y a prosternarse.” (2 : 125) Vamos a transcribir a continuación un resumen de las Leyes prácticas según el Ayatullah Sistani referido a las normas de los distintos ritos que se realizan en la Umrah. Las condiciones del Tauaf : 1.- La intención de realizarlo por Dios. 2.- Tener la purificación ritual ( ablución o baño completo ). Si no está purificado, su Tauaf es inválido, ya sea que lo supiera o que lo hiciera por descuido o ignorancia. 3.- Tener el cuerpo y la ropa puros. 4.- El hombre debe estar circuncidado. 5.- Debe cubrirse las partes pudendas. Las obligaciones del Tauaf : 1 y 2.- Se debe comenzar y terminar en la piedra negra en cada vuelta, y según precaución todo el cuerpo debe pasar por el punto de la piedra negra en cada vuelta, al empezar y al terminar. 3.- Establecer a la Kaaba del lado izquierdo en todos los estados del Tauaf. 4.- Dar la vuelta por afuera del Hiyre Ismail , no por adentro de él ni por su pared. 5.- El que da las vueltas debe estar afuera de la Kaaba y del Shadrauan. 6.- Deben darse 7 vueltas. No es suficiente menos, y si intencionalmente da más vueltas es inválido. 7.- Las 7 vueltas deben ser sucesivas. 8.- Debe dar las vueltas voluntariamente. Si es empujado por la masa de peregrinos sin que sea por su voluntad, no sirve como vuelta y debe hacerla de nuevo. La oración del Tauaf : Es la tercera de las obligaciones de la Umra Tamattu y tiene dos ciclos como la oración del alba. Se puede hacer en voz baja o alta, y debe hacerse cerca o detrás del Maqam Ibrahim ; 54 si no puede, debe hacer una en uno de sus lados y otra detrás aunque alejado de él, y si no puede es suficiente con hacerla en cualquier lugar de la mezquita. Si abandona la oración del Tauaf a sabiendas e intencionalmente, su Hayy es inválido. Debe rezar esta oración inmediatamente después del Tauaf. La corrida entre Safa y Marua : Es la cuarta de las obligaciones de la Umra Tamattu y presenta las siguientes obligaciones : 1.- La intención de realizarla para agradar a Dios. Debe definirla, indicando que es para Umra o para Hayy. 2.- Comenzar en el montículo de Safa y terminar en el de Marua, donde cuenta como una corrida ; regresa al de Safa donde cuenta como segunda corrida, y así 7 veces, terminando el Marua. 3.- Debe realizar 7 corridas o trotes. 4.- A la ida debe orientarse hacia Marua y a la vuelta hacia Safa. Si intencionalmente les da la espalda, la corrida es inválida. 5.- Debe hacer las corridas sucesivamente, como el Tauaf. 6.- No es necesario realizarlas a pie, sino que puede hacerlas sobre un animal o un vehículo ; pero a pie es mejor. Los mandatos de la corrida ( “Sa’i” ) : Es uno de los pilares del Hayy y si se abandona intencionalmente, el Hayy es inválido. Debe hacerse inmediatamente después del Tauaf y de su oración. Puede postergarlos hasta la noche si necesita descansar o hace demasiado calor y quiere esperar a que baje la temperatura. Si el peregrino realiza a sabiendas e intencionalmente más de 7 trotes, la corrida es inválida. Pero si lo hace por error, no hay problemas. Si hace menos corridas intencionalmente, es inválida ; y si hace menos por descuido, debe hacer las que falten. Si alguien duda del número después de terminar la corrida y apartarse del lugar, no debe darle importancia a su duda. Taqsir ( Corte de pelo ) : Es la quinta obligación de la Umra Tamattu. El peregrino debe tener la intención de hacerlo para Dios pura y sinceramente, y con esto es suficiente cortar un pelo del cabello, la barba o el bigote. Y debe cortarlo, no sirve arrancarlo. Tampoco es lícito afeitarse la cabeza. Si lo hace a sabiendas e intencionalmente, debe pagar una oveja en reparación. No es obligatorio realizar el Taqsir inmediatamente después de la corrida y puede hacerlo en cualquier lugar que lo desee. Si abandona el Taqsir por olvido y hace el Ihram, en este caso su Umra y su Ihram son válidos. 55 Luego del Taqsir en Umra Tamattu, las cosas prohibidas para el muhrim se tornan lícitas. (Luego se realiza el “Tauaf de las mujeres” con su oración y concluyen los rituales). 56 Apéndice 4 Sobre la visita a los cementerios. Figura en el libro “Las creencias de los Imamitas” de Allamah Mudaffar lo siguiente : En cuanto a visitar las tumbas (por ejemplo, del Profeta -BPD- y los Imames -P), hacer reuniones para los muertos y participar en diversas reuniones nuestras, no implican acercarse a otros en vez de Dios Altísimo en la devoción -como imaginan algunos que pretenden injuriar el método de los Imamitas (shiítas), desatendiendo a la realidad respecto al estado de estas cuestiones-; por el contrario, este es un tipo de acercamiento a Dios Altísimo a través de las obras justas, tal como la aproximación a Dios visitando a un enfermo, siguiendo al cortejo fúnebre, visitando a los hermanos de la religión y ayudando a los pobres. Porque visitar a un enfermo, por ejemplo, es una obra buena y justa por medio de la cual el siervo se acerca a Dios Altísimo, y esto no implica el acercamiento al enfermo de tal modo que conlleve la adoración de otro que Dios Altísimo o la asociación en Su devoción. Y así también pasa con otros ejemplos de estas obras buenas y justas, como visitar las tumbas, hacer reuniones para los muertos, acompañar al cadáver y visitar a los hermanos. En cuanto a visitar a las tumbas y hacer reuniones para los muertos, son de las obras justas y según la legislación islámica, ellas se fundamentan en la esencia del "Fiqh" (Jurisprudencia islámica). Pero aquí no es el sitio para demostrar esto (argumentándolo exhaustivamente). Nuestro objetivo aquí es remarcar que la observación de estas obras no implica ninguna especie de asociación en la devoción -como algunos imaginan-, porque la intención y el sentido de estas obras no es adorar a los Imames (P). El objetivo únicamente es vivificar sus asuntos, recordarlos continuamente y engrandecer las consignas de Dios. Como dice Dios Altísimo: "...Y respetar las cosas sagradas de Dios es el resultado de la purificación de los corazones ( y es un signo de la piedad de los corazones)." Por lo tanto, todas estas obras son buenas y la religión ha confirmado sus méritos. Entonces, cuando el hombre las realiza con la intención de acercarse a Dios buscando Su complacencia, es merecedor de la recompensa de parte Suya y alcanza su remuneración. Sobre la visita a las tumbas Allamah Mudaffar en su obra “Las creencias de los Imamitas” dice lo siguiente : 57 Una de las ventajas y particularidades de la Escuela shiíta es la especial atención y consideración que le presta a la visitar de las tumbas -la tumba del Profeta y de los Imames-, respetándolas, construyendo edificios hermosos, lujosos y grandes sobre ellas para lo cual se sacrifican gastando el dinero que pueden, sea poco o mucho, con mucha fe y agrado. Esto se debe el legado de los Imames quienes animaron a sus seguidores a visitar las tumbas, diciéndoles que en esto hay una gran recompensa ante Dios, que es la mejor obediencia y es de los factores que acerca a Dios después de las devociones obligatorias. Además, que en las tumbas está el mejor lugar para que las súplicas sean respondida, para vincular con Dios y concentrarse hacia Él. También que visitar las tumbas de ellos es completar la promesa del pacto a ellos por parte de sus seguidores. Porque: "Para cada Imam hay un pacto colgado de los cuellos de sus amigos y seguidores, y una de las cosas que perfecciona la promesa de dicho pacto y lo cumple completamente es la visita de sus tumbas. Luego, quien las visita anhelando esto y confirmando atentamente lo que ellos deseaban, tenderá a sus Imames como intercesores el Día de Juicio Final." Nuestros Imames le daban importancia y le prestaban una especial atención a esto, porque en ello existen grandes beneficios religiosos y sociales. Por ejemplo esto motiva y produce una relación amistosa y un vínculo de amor entre los Imames y sus seguidores y amigos, renovando continuamente en sus corazones el recuerdo de sus virtudes, sus características, sus combates en el camino de la verdad, etc. Además, los momentos de la visita son una causa para que los musulmanes de distintos lugares y diferentes regiones se reúnan en una misma fila, en un mismo lugar, conociéndose e intimando entre ellos. Además, así se marca en sus corazones el espíritu de acatamiento a Dios Altísimo, concentrándose en Él y obedeciendo Sus ordenes. En el contenido de las palabras del saludo que se debe expresar ante las tumbas, que nos ha llegado de parte de la Gente de la Casa, rezan las enseñanzas de la realidad del Monoteísmo y el reconocimiento de que el Islam y la Misión de Muhammad son santos. También se lee lo que es obligatorio para un musulmán, como tener una característica excelente, elevada y firme, ser humilde ante el Amonestador de los seres y agradecer por Sus mercedes y otorgamientos. En consecuencia, leer el saludo en las visitas tiene el mismo efecto que las súplicas transmitidas por los Imames. Además algunos de estos saludos contienen las súplicas más elocuentes, elevadas y expresivas, como el "Ziiárat Aminullah (saludo al fiel de Dios) que el Imam Zain Al 'Abidin (P) recitó ante la tumba de su abuelo, Amirul Mu'minin 'Alí (P). Por otro lado, a través de estas visitas que nos fueron encomendadas por parte de los Imames (P), podemos entender sus situaciones y estados, así como sus sacrificios en el camino de ayuda a la verdad y la elevación de la palabra de la religión, y sus sinceridad obediencias para con Dios. 58 El legado de estas visitas ha sido transmitido con un idioma árabe muy claro, con elevada elocuencia y frases simples y sencillas, para que todos puedan entenderlo, tanto la gente común como los notables. Ellas contienen el más elevado y preciso sentido del Monoteísmo (Tauhid) y la súplica y ruego a Dios Altísimo. En realidad, estas visitas contienen las más elevadas enseñanzas religiosas después del Corán, el Nahyul Balagha y las súplicas transmitidas por ellos (P). Porque en estas visitas existe el resumen de las enseñanzas de los Imames (P) sobre los asuntos de la religión y los temas éticos para purificar el corazón. La forma de realizar la visita En las lecciones y conductas a seguir para leer los saludos en las visitas se evidencia la existencia de un tipo especial de enseñanza y guía donde se afirman la concreción de los objetivos elevados de la religión, como elevar el grado espiritual del musulmán, hacer crecer el espíritu de inclinación hacia los pobres, animar a tener una buena conducta y un excelente comportamiento, hacerle amar la convivencia con la gente (que sea un musulmán sociable). Para eso, es necesario realizar algunas de las conductas de la visita antes de ingresar al santuario purificado, antes de leer el saludo, durante la visita y luego de su conclusión. A continuación describiremos algunas de estas conductas para destacar los elevados objetivo mencionados de las visitas. PRIMERO El visitante antes de visita debe realizar la ablución o el baño completo y purificarse totalmente. El beneficio de que el hombre limpie su cuerpo de toda impureza y suciedad es muy claro, ya que preserva al cuerpo de las dolencias y enfermedades, no incomoda a los demás por el olor desagradable y purifica el alma de los vicios. En las narraciones reza que el visitante después del baño, a fin de advertir y entender estos elevados propósitos, debe recitar lo siguiente: "¡Oh, Dios! Haz que esto sea para mí como una luz, una purificación, un refugio suficiente contra todos los dolores y enfermedades y contra todas las desgracias y calamidades. A través de esto purifica, purifica mi corazón, mis miembros, mis huesos, mi carne, mi sangre, mi pelo, mi piel, mi mente, mis nervios y lo que la tierra transporta de mí (y todo mi cuerpo). Hazlo como un testigo para el día de mi necesidad, mi pobreza y miseria (es decir el Día del Juicio Final).” 59 SEGUNDO Debe vestir la mejor y la más limpia de sus ropas. Porque vestir la ropa más linda en las festividades y reuniones en general produce la amistad entre la gente, acerca unos a otros y aumenta la gloria del alma. Así uno le da importancia a la reunión de la cual ha participado. Es conveniente aclarar que el visitante no está obligado a vestir la mejor ropa entre toda la gente, porque no todos pueden hacer eso. Cada uno debe vestir la mejor ropa que tenga. De lo contrario, habría un obstáculo para los pobres, y esto va contra la amabilidad y la benevolencia. Por eso, en este punto es necesario considerar la situación de los pobres y los que están en la miseria. TERCERO Debe usar perfumes dentro de su posibilidad. En este caso la beneficencia (o el efecto) es igual que para el caso de la ropa. CUARTO Debe dar limosna a los pobres, según su capacidad y posibilidad. El efecto y beneficio de hacer esto en las reuniones es evidente, pues por medio de esto se ayuda a los indigentes y crece el espíritu de inclinación hacia ellos y de prestarles atención. QUINTO Debe marchar hacia el santuario caminando con paciencia y tranquilidad, con la vista baja (de todo lo ilícito). El beneficio de esto es evidente por el respeto al santuario y a la visita. Además es una forma de respeto y ennoblecimiento hacia aquel a quien va a visitar. En esto también hay una atención y concentración centrada en Dios. Además, así se evita molestar a la gente y obstaculizarles el paso, así como la falta de respeto y consideración hacia ellos. SEXTO Debe decir: "Dios es más Grande" y repetirlo tanto como quiera. En algunas visitas está definido que hay que repetirlo 100 veces. El beneficio de esto es que el alma del hombre le presta atención a la Grandeza de Dios y al hecho de que no hay nada más grande que Él, y que la visita no es sino para adorar a Dios, engrandecerlo y santificarlo a través de vivificar los lemas de Dios y confirmar Su religión. 60 SÉPTIMO Al concluir la visita al Profeta o al Imam al menos debe rezar dos ciclos exclusivamente para Dios, como agradecimiento por haberle otorgado éxito en esta visita y ofrecer como regalo la recompensa por esa oración a quien se visita. En la súplica que nos fue transmitido y que el visitante debe recitar después de esta oración, el visitante da cuenta que su oración y su obra son exclusivamente para Dios y que él no adora a otro que Dios, aclarando que la visita sólo es una forma de acercarse a Él al decir: "¡Oh, Dios! Sólo para Ti he rezado, para Ti me he inclinado y para Tí me he prosternado. Tú eres Único, sin ningún asociado. Pues la oración, la inclinación y la prosternación son exclusivamente para Ti. Porque Tú eres Dios, ¡no hay divino sino Tú! ¡Oh, Dios! Bendice a Muhammad y a la familia de Muhammad. Acepta mi visita y otórgame mi necesidad. Por el derecho de Muhammad y su familia purificada." Este tipo de conducta contiene lo que explica la verdad del objetivo de los Imames y sus seguidores respecto a visitar las tumbas. Y ésta es una respuesta muy fuerte (literalmente: que rompe los dientes) para los que pretenden la ignorancia al conjeturar que la visita a las tumbas es un tipo de adoración hacia ellas y es como tomar un socio para Dios por parte de los shiítas. Es muy probable que al decir estas cosas, ellos tengan la intención de desanimar a la gente a participar de esas reuniones tan beneficiosas y excelentes, pues eso es como espina en los ojos de los enemigos de la Gente de la Casa de Muhammad. De otra forma, no puedo creer que ellos no conozcan el objetivo real de estas cuestiones. Es imposible que aquellos que han sincerado en sus corazones sus intenciones para con Dios, que sólo a Él adoran, que se sacrificaron y esforzaron tanto en el camino de ayudar a la religión de Él, luego convoquen a la gente a tomar un socio en la adoración a Dios. OCTAVO Otra de las conductas que debe tener el visitante es el buen trato y comportamiento con sus compañeros, el hablar poco excepto de las cosas buenas y el recordar mucho a Dios (de palabra y de hecho, en sus acciones ). Debe ser humilde, rezar mucho, bendecir a Muhammad y a su familia (BPD), bajar la vista. Ayudar y sacrificarse por sus hermanos necesitados, abstenerse de lo que ha sido vedado y de la enemistad, evitar jurar demasiado y evitar la disputa en aquello sobre lo que necesita jurar (para probarlo). Además de todo esto, no hay verdadera visita sino saludar al Profeta o al Imam considerándolos: "...vivos, sustentados ente su Señor." 61 Porque ellos escuchan las palabras y responden (aunque nosotros no nos percatemos de esto) Es suficiente por ejemplo, decir: "La paz sea contigo, ¡oh, Mensajero de Dios!" ante la tumba. Pero es mejor leer en el santuario los saludos transmitidos de la Gente de la Casa, porque, como ya hemos mencionado, en ellos hay elevados objetivos y beneficios religiosos, además de su gran elocuencia y expresividad. Además, en los saludos existen súplicas elevadas a través de las cuales el hombre se dirige hacia Dios Altísimo y Único. 62