HISTORIA DEL DISTRITO 7000 EGD José Rivera Barreras 1918-1978 Es mi propósito condensar lo más posible la obra del Distrito, sin entrar en detalles porque la haría interminable. Por eso, voy a tender a la atención de ustedes hacia aquellos latidos de la emoción rotaria que todos hemos vivido y que ha hecho grande pero bien grande a nuestro Distrito. Sabido es por todos, que el primer Club Rotario establecido en IberoAmérica fue el de La Habana, establecido el 29 de abril de 1916. El segundo club organizado en las antillas fue el de San Juan, en el año 1918. Como Puerto Rico no formaba parte de un Distrito Rotario pasó el Club de San Juan a formar parte del Distrito Núm. 8, que comprendía los Distritos de Georgia, Alabama, Florida, y Cuba, siendo para esa fecha Gobernador del Distrito Núm. 8 John H Gay, para el año siguiente Truman Mc. Gill y para el ano 1920-21, Wilbur R. Smith, gobernadores bajo cuyo Distrito estuvieron los Clubes de San Juan y Ponce hasta el día 30 de diciembre de 1920, fecha en que la Directiva de Rotary Internacional tomo el acuerdo de eliminar a los Clubes de Puerto Rico del Distrito Núm. 8 Debe señalarse que ninguno de los Gobernadores del Distrito 8 a que estuvieron asignados los dos primeros Clubes: San Juan y Ponce visitaron Puerto Rico y estos se comunicaban directamente con Rotary Internacional. Esto no fue óbice para que continuara el entusiasmo en la organización de nuevos Clubes en la Isla. Tiene el Distrito actualmente 48 Clubes Rotarios con una matricula de 2,020 rotarios, 39 gobernadores, empezando por el padre de nuestro Distrito, Nelson Ramírez y terminando con el benjamín de los gobernadores, Efraín Nazario y para 1978-79, Eduardo Bayouth, Gobernador Nominado. El desarrollo de los Clubes fue el siguiente: San Juan Ponce Mayagüez Arecibo Guayama Humacao Caguas Yauco Río Piedras Aguadilla 01 de junio de 1918 01 de junio de 1919 13 de diciembre de 1926 04 de marzo de1935 30 de junio de 1937 26 de abril de 1938 26 de mayo de 1938 16 de agosto de 1938 24 mayo de 1941 28 de julio de 1941 1 San Germán Cayey Juncos Villa Caparra Santurce Fajardo Coamo Añasco Aguada Utuado San Sebastián Hato Rey Camuy-Hatillo Vega Alta Manatí Isabela El Isla Verde Bayamón Monacillos Moca Jayuya Cidra Cabo Rojo Mayagüez Playa El Vigía Lares Adjuntas Ciales 19 de septiembre de 1946 01 de octubre de 1946 26 de diciembre de 1946 15 de marzo de 1947 12 de diciembre de 1947 12 de agosto de 1948 03 de febrero de 1951 06 de enero de 1953 14 de octubre de 1954 16 de julio de 1956 19 de septiembre de 1956 02 de noviembre de 1956 19 de julio de 1957 31 de julio de 1957 15 de noviembre de 1957 03 de diciembre de 1957 26 de mayo de 1958 04 de febrero de 1960 20 de septiembre de 1962 09 de abril de 1964 29 de septiembre de 1965 14 de abril de 1966 12 de enero de 1967 05 de mayo de 1967 02 de octubre de 1967 07 de marzo de 1968 08 de abril de 1968 04 de junio de 1969 Corozal Juana Díaz Guaynabo Quebradillas Naranjito El Señorial Carolina Peñuelas Cruce Dávila Dorado 14 de agosto de 1969 19 de noviembre de 1970 26 de abril de 1971 03 de mayo de 1971 21 de junio de 1972 22 de agosto de 1974 02 de mayo de 1975 05 de septiembre de 1975 20 de abril 1978 05 de mayo de 1978 Además de estos Clubes del Distrito, está organizado en la Isla el “Club de Rotarios Exiliados Cubanos”. Fueron organizados además los Clubes de St. Croix y Carlota Amalia, bajo la dirección del entonces Distrito 403 pero 2 actualmente no pertenecen a Distrito alguno, según aparecerá mas adelante. Conviene señalar que no fue hasta el 1 de julio de 1939 que se formo el Distrito numero 45, en ocasión de una reunión celebrada en Mayagüez para nominar un candidato a Gobernador, figurando como candidatos Francisco Parra Toro por Ponce y Nelson Ramírez por Mayagüez. Parra retiró su candidatura y resultó electo Nelson como primer Gobernador Rotario. Volviendo al origen histórico, precisa recordar, que a fines del año 1934 visitó a Puerto Rico en viaje hacia Chicago el distinguido abogado y notario publico el Dr. Donato Gaminara de Montevideo, Uruguay, para esa fecha, Primer Vice Presidente de Rotary Internacional. El Dr. Gaminara traía la encomienda de Rotary Internacional de revivir el Club de Ponce que estaba inactivo y de hecho lo revivió, habiéndosele concedido una nueva Carta Constitutita el 9 de septiembre de 1935. Además estaba interesado el Dr. Gaminara en extender el rotarismo a otras ciudades. De su visita surgió el nombramiento de Nelson para Representante Especial de Rotary para la organización de nuevos Clubes encomienda que éste aceptó. Por la limitación de espacio es difícil hacer un recuento de las distintas jornadas de fecundos servicios que se encuentran realizando nuestros Clubes; la realidad de ejecutorias de provecho social incuestionable desfile ante nosotros, haciéndonos sentir dignos intérpretes de la grandeza humana que entraña el rotarismo. Es por eso, que la ayuda tan necesitada por la niñez en orfandad esta llegando a través del Club de Río Piedras; que el de Arecibo y Santurce mantienen un magnifico sistema de becas para estudiantes carentes de recursos económicos, que la ancianidad menesterosa en su estrechez encuentra alivio por intervención cristiana del Club de Utuado; que el Club de Hato Rey se empeña en hacer el dolor de los lisiados menos doloroso; que la rehabilitación de los reclusos en presidio es problema vital que ocupa la atención del Club de San Juan; y que aún el estimulo al estudio se encuentra alentado en virtud del otorgamiento de premios por el Club de Manatí, Ponce y otros. Esa y no otra, es la labor social de extraordinarias proyecciones que se encuentran desarrollando nuestros clubes. La calidad de las mismas, nos hace inconfundibles llevando paz a nuestras almas. Y al hablar de la historia de nuestro Distrito Rotario viene a mi memoria la figura del ilustre jurista español, Dr. Luis Jiménez Arnau, quien en un realismo incuestionable nos dice: “La vida del ser consciente es un arco tendido entre el pasado y él futuro. El presente no existe: apenas hablamos de él ya quedó atrás”. 3 Con esa clara visión de lo fugaz de nuestra propia existencia como mortales, los rotarios deben darse prisa por convertir en realidad dentro del rotarismo, aquellas metas que inspiraron a Paul Harris, metas que constituyen el hueso y la carne de nuestra personalidad como rotarios tanto estatal como internacionalmente. Que el pasado, jamás constituya para nosotros en su contemplación un oasis para restarle actividad a nuestros músculos y para adormecer nuestras metas. El ayer, con sus logros incuestionables, no debe ser alto en el camino, y si estímulo para más valiosa conquista, ya que como dijera nuestro gran rotario, Herb Taylor, “EL PASADO ES UN PROLOGO”. Permítaseme citar siguiendo el anterior pensamiento del distinguido ex presidente de Rotary Internacional, lo dicho por un rotario al efecto que: “El rotarismo, si bien tiene “prólogo”, que es su pasado glorioso, está huérfano de epilogo”, por razón a que nuestra institución estando incorporada al progreso humano, ella, como está en constante agitación y superación, vinculando su existencia misma a la existencia del Universo entero, ya que el rotarismo no desaparecerá de la faz de la tierra, mientras los hombres lleven en sus almas, al igual que nosotros, la fe inquebrantable en el amor al prójimo. Al conjuro de esa fe, piedra angular de la perduración del cristianismo, permítaseme hacer un ferviente llamamiento a todos mis hermanos los rotarios, para que aunando voluntades, propósitos y faenas, redoblemos nuestras actividades todas en el decurso del tiempo, movidos todos por el sublime ideal del rotarismo, de sentir la grandeza de ser útil a los demás, de fortalecer nuestro espíritu sirviéndolos al prójimo y de elevar nuestra conciencia a través de la cotidiana práctica de la confraternidad entre los hombres y entre los pueblos. Esa y no otra debe ser nuestra firme determinación como rotarios, sin pensar en que el trigo producido por las espigas y cultivadas por nosotros no pueda llegar a nuestros graneros, ya que nuestro ideal debe ser el servir, pedir para dar, sin pensar en recibir nada, aunque recibamos humillación al pedir, ya que como dijera en ocasión memorable nuestro ilustre coterráneo, el Ex Procurador General de Puerto Rico y Ex Presidente del Colegio de Abogados, Don Benigno Fernández García: “AQUEL QUE PUDIENDO DAR, NO DA, DEBIERA MERECER EL CASTIGO DE TENER QUE PEDIR” Setenta y tres años en la Historia de Rotary y 60 en la historia de nuestro Distrito tal vez os parezcan muchos, pero son pocos, muy pocos para una organización que tienen por lema el gran ideal de servicio. En los 73 años nuestro Distrito ha sembrado la semilla de la tolerancia, del amor, de la 4 justicia, de la hermandad y la seguirá sembrando en las paredes interiores de nuestro espíritu y de nuestra conciencia, de donde germinó y creció el gran árbol de la confraternidad y la hermandad entre los hombres y entre los pueblos, a cuya sombra se reúnen los hombres y mujeres de buena voluntad para hacer obra común es bien de nuestros semejantes. El Distrito le hace el mayor reconocimiento a estos dignos dirigentes a los que les une la mistad y confraternidad que sin límite predica Rotary. Adelante, compañeros, con nuestro ideal. 5