02 de febrero, 2008 Un enfoque de teoría de juegos para explicar el origen de la crisis financiera Rodrigo Labarthe Álvarez Mucho se ha hablado de que una de las grandes deficiencias del sistema financiero, que hizo posible que se presentara una crisis de las dimensiones de la que estamos padeciendo en este momento, es el hecho de que muchas de las transacciones que realizan las instituciones financieras no tienen una regulación lo suficientemente rigurosa como para evitar comportamientos irresponsables como los que terminaron por detonar y multiplicar los efectos de la crisis. ¿Qué hubiera pasada si las instituciones no hubieran podido otorgar créditos hipotecarios de tan alto riesgo, si los diferentes actores financieros hubieran estado mejor vigilados a la hora de implementar todo tipo de transacciones con instrumentos respaldados en las hipotecas que les permitieron ocultar el mal estado de sus balances mientras reproducían el germen que terminó por afectar a gran parte del sistema financiero internacional? Lo que intenta este artículo es realizar un análisis desde los principios de la teoría de juegos para explicar de qué manera los actores financieros fueron tomando las decisiones que derivaron en la producción de una crisis económica de grandes dimensiones, cuáles son los factores que pueden haber influido para que se realizaran todas estas transacciones y cómo podría haberse evitado que se produjeran los irresponsables comportamientos que dieron origen a esta crisis. La Teoría de Juegos intenta explicarse el comportamiento de cada uno de los individuos que participa en un “juego”. La teoría denomina así a cualquier situación en la que interactúan las decisiones de al menos dos agentes produciendo efectos que repercuten en cada uno de ellos y, en muchas ocasiones, en muchos otros agentes. Así, podemos analizar el comportamiento de las instituciones y los ejecutivos financieros como parte de un “juego” en el que sus decisiones interactúan con las de otros actores financieros, así como con las de las autoridades regulatorias, que estarían encargadas de vigilar su comportamiento y castigarlo cuando sea necesario. De acuerdo con esta teoría, los jugadores, en el caso de nuestro juego: las instituciones financieras, toman sus decisiones racionalmente tratando de maximizar su utilidad tomando en cuenta lo que creen que va a hacer el otro jugador y la utilidad que asignan a cada una de sus posibles decisiones. De esta forma, es posible predecir el comportamiento de cada uno si consideramos lo que espera que haga el otro jugador. Cada uno tomará la decisión que más le convenga de acuerdo a la opción que cree que elegirá el Contorno, Centro de Prospectiva y Debate, S.A. de C.V. www.contorno.org.mx 02 de febrero, 2008 Un enfoque de teoría de juegos para explicar el origen de la crisis financiera Rodrigo Labarthe Álvarez otro jugador. La Teoría de Juegos cree que mediante este tipo de análisis es posible predecir los comportamientos y, por lo tanto, los escenarios futuros. Por ejemplo, se habría podido predecir la crisis financiera. La idea central del análisis que estamos llevando a cabo es que las instituciones financieras eligieron otorgar los créditos de alto riesgo y realizar todas las transacciones que hicieron respaldados en los mismos, debido a que consideraron que era la opción que maximizaría su utilidad de acuerdo a lo que esperaban que hicieran el resto de las instituciones y las autoridades regulatorias. Pero, ¿por qué es que las instituciones pensaron que el otorgar créditos de alto riesgo a deudores con muy poca capacidad de pago era la opción que maximizaba su utilidad?, ¿por qué podríamos considerar que ésta era la decisión racional de los jugadores? De acuerdo con la teoría de juegos, si las autoridades financieras tomaron su decisión racionalmente, eligieron otorgar los créditos porque era su mejor elección posible frente a lo que esperaban que hicieran los demás jugadores. ¿Cómo pudo ser esto así a pesar de que las instituciones tenían el enorme riesgo de asumir las pérdidas si los deudores dejaban de pagar, lo cual era muy probable? Para explicar esto plantearemos un juego en el que se incorpora un elemento que pensamos puede haber sido la razón para que las instituciones tomaran esa decisión, un elemento que si cambiara modificaría el resultado de la interacción de los actores. Los valores que utilizamos son meramente hipotéticos y tienen solamente el objetivo de ilustrar la idea que presentamos. Vayamos, pues, al juego: Juego 1 Tenemos dos instituciones financieras cuyas dos decisiones posibles son otorgar o no otorgar créditos hipotecarios de alto riesgo. Ambas van a decidir en función de la utilidad que esperan les reporte cada posible escenario, considerando lo que haría el otro jugador. Asignaremos valores arbitrariamente a los factores involucrados en la decisión, a partir de los cuales cada uno de los jugadores calcula su utilidad esperada para cada posible decisión o escenario. Contorno, Centro de Prospectiva y Debate, S.A. de C.V. www.contorno.org.mx 02 de febrero, 2008 Un enfoque de teoría de juegos para explicar el origen de la crisis financiera Rodrigo Labarthe Álvarez Valores asignados a los factores involucrados Ganancias totales por el cobro de los créditos otorgados: 2,000 Valor asignado por las instituciones a continuar operando en el mercado: 100 Costo de las pérdidas por los créditos mal otorgados en el caso de que algo salga mal y la institución no sea ayudada por la autoridad gubernamental: 3,000 Probabilidad de que la institución tenga que asumir esas pérdidas en el caso de que no sea apoyada por el gobierno: 10% Costo de ser sacado del mercado debido a la “incompetitividad” frente a la otra institución financiera: 500 Probabilidad de que la institución sea sacada del mercado por su incompetitividad: 50% Institución financiera 2 Institución financiera 1 No otorga créditos Otorga créditos No otorga créditos 100, 100 -150, 1800 Otorga créditos 1800, -150 950, 950 ¿Cómo se lee la tabla? El valor de la izquierda corresponde a la utilidad esperada en ese escenario de la institución financiera 1, mientras que el valor de la derecha corresponde a la utilidad esperada de la institución financiera 2 en ese escenario. Por ejemplo, en el escenario de que la institución financiera 2 no otorgue créditos, la institución 1 espera una utilidad de 100 si no otorga créditos, y una utilidad de 1800 si decide que sí va a otorgar créditos. En el escenario de que la institución financiera 1 otorgue créditos, la institución 2 espera una utilidad de -150 si no otorga créditos, y una utilidad de 950 si decide que sí va a otorgarlos. Análisis de los escenarios En el primer escenario, en el que ninguno otorga créditos, la utilidad esperada de 100 corresponde al valor asignado por las instituciones a continuar operando en el mercado. Contorno, Centro de Prospectiva y Debate, S.A. de C.V. www.contorno.org.mx 02 de febrero, 2008 Un enfoque de teoría de juegos para explicar el origen de la crisis financiera Rodrigo Labarthe Álvarez En el segundo escenario, en el que la institución 1 no otorga créditos y la 2 sí los otorga, la utilidad esperada de -150 de la primera resulta del valor que asigna a continuar en el mercado (100) menos el costo de ser sacado del mercado por la institución 2 debido a su falta de competitividad (500) multiplicado por la probabilidad de que esto ocurra (.50). La utilidad esperada de 1800 de la institución 2 resulta del valor de continuar operando en el mercado (100) más la ganancia por el cobro de los créditos otorgados (2000) menos el costo de asumir las pérdidas por la suspensión de pagos de los préstamos mal otorgados (asumirlos completamente sin la ayuda de autoridades o del gobierno) (3000) por la probabilidad de que esto ocurra (.10). El tercer escenario, en el que la institución 1 sí otorga créditos y la 2 no los otorga, es el mismo que el segundo pero a la inversa. La ganancia se la queda la primera institución y la pérdida la segunda. El cuarto escenario, en el que las dos otorgan créditos, la utilidad esperada de 950 de cada una resulta de la división igualitaria de las ganancias por el cobro de los créditos otorgados (1000) más el valor de continuar operando en el mercado (100) menos la mitad del costo de asumir las pérdidas por la suspensión de pagos de los préstamos mal otorgados (1500) por la probabilidad de que esto ocurra (.10). Equilibrio del juego Considerando que los dos jugadores van a elegir su estrategia en función de lo que esperan que haga el otro jugador, podemos afirmar que el equilibrio de este juego está en el escenario 4, en el que los dos deciden otorgar créditos. Supongamos que yo soy indistintamente cualquiera de las dos instituciones: analizo que si el otro jugador decide no otorgar créditos yo obtendría 100 de utilidad si tampoco los otorgo y obtendría 1800 si efectivamente los otorgo. Así que en este caso mi mejor estrategia si el otro no otorga créditos es otorgarlos. Ahora, si el otro jugador decide otorgar créditos, yo obtendría una utilidad de -150 si no los otorgo y de 950 si efectivamente los otorgo. Así que en este caso también mi mejor estrategia es otorgar créditos. De esta forma cualquiera que sea la decisión del otro jugador yo voy a optar por otorgar los créditos. El razonamiento del otro jugador respecto a mi comportamiento será el mismo, por lo que él también llegará a la conclusión de que su mejor decisión es otorgar créditos. Así, el equilibrio del juego es que ambos vamos a otorgar créditos. Contorno, Centro de Prospectiva y Debate, S.A. de C.V. www.contorno.org.mx 02 de febrero, 2008 Un enfoque de teoría de juegos para explicar el origen de la crisis financiera Rodrigo Labarthe Álvarez Una lógica parecida puede haber operado en la realidad cuando las instituciones financieras decidieron otorgar dichos créditos aun a pesar de ser muy riesgosos. ¿Por qué tomaron esa decisión? Porque las ganancias de cobrar los créditos son mayores que los costos que enfrentarían por asumir las pérdidas, además de que corren el riesgo de que su competidor obtenga una mayor ganancia que no les permita seguir compitiendo contra él. ¿Cómo podría cambiar el equilibrio del juego? Haciendo que las ganancias que podrían obtener las instituciones de otorgar los créditos no parezcan tan atractivas frente a las posibles pérdidas que asumirían si los créditos se dejan de pagar. Esto ocurriría si las instituciones creyeran que ellas son efectivamente quienes van a asumir los altos riesgos del impago de créditos. Es decir, evitando el riesgo moral que implica el que las instituciones crean que si se equivocan va a venir el Gobierno o la autoridad competente a resolver y a asumir las pérdidas del desastre. Con esto se desincentivaría el comportamiento irresponsable de las instituciones que fue el que dio origen a esta crisis. ¿Qué pasaría si la probabilidad que asignan las instituciones a efectivamente asumir ellas mismas las pérdidas (sin ayuda de ninguna autoridad) que se darían en caso de que algo saliera mal y los créditos dejaran de pagarse, aumentara considerablemente? Juego 2 Asignemos nuevamente los valores del juego con los cambios ya esbozados. Lo primero que varía es la “probabilidad de que la institución tenga que asumir esas pérdidas en el caso de que no sea apoyada por el gobierno”. Ahora la institución que otorga los créditos tiene que afrontar un riesgo de pérdidas mucho mayor. Esto provoca también la variación en la “probabilidad de que la institución sea sacada del mercado por su falta de competitividad”. Debido a que el riesgo de decidir otorgar los créditos es mayor, es menos probable que una institución que decide no otorgarlos pierda mucha competitividad frente a una que sí los otorgó, en el caso de que esta última obtenga grandes ganancias. Valores asignados a los factores involucrados Ganancias totales por el cobro de los créditos otorgados: 2,000 Contorno, Centro de Prospectiva y Debate, S.A. de C.V. www.contorno.org.mx 02 de febrero, 2008 Un enfoque de teoría de juegos para explicar el origen de la crisis financiera Rodrigo Labarthe Álvarez Valor asignado por las instituciones a continuar operando en el mercado: 100 Costo de las pérdidas por los créditos mal otorgados en el caso de que algo salga mal y la institución no sea ayudada por la autoridad gubernamental: 3,000 Probabilidad de que la institución tenga que asumir esas pérdidas en el caso de que no sea apoyada por el gobierno: 75% Costo de ser sacado del mercado debido a la “incompetitividad” frente a la otra institución financiera: 500 Probabilidad de que la institución sea sacada del mercado por su incompetitividad: 10% Institución financiera 2 Institución financiera 1 No otorga créditos Otorga créditos No otorga créditos 100, 100 50, -150 Otorga créditos -150, 50 -25, -25 Análisis El análisis se hace de la misma forma que en el Juego 1, solamente que aquí variaron algunas de las utilidades esperadas debido al cambio en el valor de algunos de los factores involucrados. En los escenarios 2 y 3, la institución que decidió no otorgar los créditos tiene una utilidad esperada mayor que la que tenía en el Juego 1 debido a que bajó su probabilidad de salir del mercado debido a su pérdida de competitividad frente a la institución que otorgó los créditos. Así, la utilidad esperada de 50 resulta de el valor asignado a continuar operando en el mercado (100) menos el costo de ser sacado del mercado debido a la falta de competitividad (500) por la probabilidad de que esto ocurra (.10). Por su parte, la utilidad esperada de -150 de la institución que sí otorgó los créditos cuando la otra no los otorgó resulta de la suma del valor asignado a continuar operando en Contorno, Centro de Prospectiva y Debate, S.A. de C.V. www.contorno.org.mx 02 de febrero, 2008 Un enfoque de teoría de juegos para explicar el origen de la crisis financiera Rodrigo Labarthe Álvarez el mercado (100) más las ganancias por el cobro de los créditos otorgados (2000) menos el costo de asumir el total de las pérdidas de la falta de pago de los créditos mal otorgados (3000) por la probabilidad de que esto ocurra (.75). Por último, en el escenario 4, donde ambas instituciones otorgan los créditos, la utilidad esperada de -25 resulta de la división igualitaria de las ganancias por el cobro de los créditos otorgados (1000) más el valor de continuar operando en el mercado (100) menos la mitad del costo de asumir las pérdidas por la suspensión de pagos de los préstamos mal otorgados (1500) por la probabilidad de que esto ocurra (.75). Equilibrio del juego El equilibrio de este juego es el escenario 1, en el que los dos deciden no otorgar créditos. Supongamos que yo soy indistintamente cualquiera de las dos instituciones: analizo que si el otro jugador decide no otorgar créditos yo obtendría 100 de utilidad si tampoco los otorgo, y obtendría -150 si efectivamente los otorgo. Así que en este caso mi mejor estrategia si el otro no otorga créditos es no otorgarlos. Ahora, si el otro jugador decide otorgar créditos, yo obtendría una utilidad de 50 si no los otorgo y de -25 si efectivamente los otorgo. Así que en este caso también mi mejor estrategia es no otorgar créditos. De esta forma cualquiera que sea la decisión del otro jugador yo voy a optar por no otorgar los créditos. El razonamiento del otro jugador respecto a mi comportamiento será el mismo, por lo que él también llegará a la conclusión de que su mejor decisión es no otorgar créditos. Así, el equilibrio del juego es que ninguno de los dos va a otorgar créditos. ¿Qué ocurrió? Que, dado el alto costo que tendríamos que pagar por asumir las pérdidas, a ninguno de los dos nos conviene correr el riesgo de otorgar los créditos. Según la Teoría de Juegos para los dos la decisión racional es no otorgarlos. De esta forma, bajo este análisis, podríamos concluir que una manera de haber evitado el comportamiento irresponsable de las instituciones financieras y las transacciones con instrumentos tan arriesgados que dieron pie a la crisis actual, era tener una regulación mucho más estricta, sobre todo en lo que se refiere a la vigilancia de las acciones de las instituciones y en cuanto a los castigos con que se sancionan los malos comportamientos de los actores. En adelante habrá que tratar de diseñar incentivos que promuevan un comportamiento responsable de las instituciones y no uno tan peligroso como el que se dio en esta ocasión. Contorno, Centro de Prospectiva y Debate, S.A. de C.V. www.contorno.org.mx 02 de febrero, 2008 Un enfoque de teoría de juegos para explicar el origen de la crisis financiera Rodrigo Labarthe Álvarez Algunas aclaraciones Conviene aclarar que los juegos planteados son simplificaciones de la realidad que dejan de lado muchos factores que pueden haber sido también relevantes en la toma de decisiones de los actores involucrados. Lo que aquí intentamos es, sobre todo, resaltar el cambio que puede provocar un sistema de regulación más efectivo, a la vez que destacamos el tipo de análisis que puede ser llevado a cabo a través de la teoría de Juegos. A través de este tipo de análisis, la Teoría de Juegos busca predecir escenarios posteriores a una toma de decisiones, considerando que todos los jugadores eligen racionalmente. Para llegar a ese resultado habría que aceptar que los jugadores tienen preferencias perfectamente consistentes y que gozan de información perfecta, lo cual difícilmente ocurre en la realidad. En la crisis financiera, como en muchos otros casos, es muy factible que la información incompleta haya contribuido a que los actores involucrados tomaran las decisiones que llevaron a la gran crisis que hoy enfrentamos. Contorno, Centro de Prospectiva y Debate, S.A. de C.V. www.contorno.org.mx